Ouma desabrochó la camisa de Saihara mientras besaba el cuello de este, Saihara solamente se limitaba a gemir, admitía que no era el mejor momento pero tampoco podría decir nada u Ouma se enojaría y seguro iría asesinar a Kaito.

Ouma se separó y con la navaja que traía se cortó un poco el dedo y acercó a la boca de Saihara.

Ouma: Lame.

Saihara: ¡¿E-eh?! P-per–

Ouma: Lame.

Saihara solamente cerró los ojos y lamió el dedo sangrante de Ouma, este sonrió y le susurró en el oído.

Ouma: Iré a dormir.

Ouma besó la mejilla de Saihara y se retiró, este suspiró para levantarse, tenía algo que hacer.

En unos minutos llegó a casa de Kaito, tocó la puerta y Kaito abrió, su cara en verdad era de furia, Saihara entró con miedo, lo primero que Kaito hizo fue darle un gran golpe en la cara.

Kaito: ¿Por qué? ¡¿Por qué?! Hemos sido mejores amigos por un año... Fuimos juntos a la graduación con Harumaki, ¡y tu pedazo de mierda dejaste que... —Kaito cayó al suelo, en verdad estaba mal, su novia había muerto, su mejor amigo lo había traicionado de la peor manera, era simplemente insoportable. —

Saihara se levantó por el golpe sobando su mejilla mientras lloraba, notó que en la pequeña mesa de la sala había una caja, Saihara la abrió viendo que era un anillo.

Saihara: Oh... No... No... ¡¿Qué hice?! No, no...

Kaito: Planeaba proponérselo en unos días, iba a ser el mejor día de nuestra vida. No diré nada porque alguna vez fuimos mejores amigos, pero no quiero volver a ver tu cara o la destrozaré a golpes.

Saihara: K-kaito... Y-yo...

Kaito: Largo.

Saihara: P-pero...

Kaito: ¡¡QUE TE LARGUES!!

Kaito tomó del brazo a Saihara y le echó fuera, Saihara miró por última vez la casa de su mejor amigo y le dijo adiós.