( POV ___ )

Después de un buen rato de conducir llegamos al campamento.

Había unos muros altos, encima de ellos había soldados, un portón se abrió y pasamos al campamento.

Nos tomo algunos días días acostumbrarnos a vivir el el campamento, pero vivir aquí, sin duda era mejor que estar hay fuera.

El ejército luchaba día y noche contra los zombies aún que también los llamamos, los zeds, ellos son las personas infectadas por la fiebre negra.

La fiebre negra se transmite a través de mordidas, ya que el virus de la fiebre negra parece proliferar en la saliva del infectado, los síntomas de la fiebre negra son fiebre, tos y vómito.

Una vez que el infectado muere ahogado en su propio vomito, poco después el infectado se volverá a levantar convertido en un zed, con el único propósito de encontrar a un humano eh infectarlo, aunque también se a visto a zeds comiendo carne humana, aunque el propósito de eso sigue siendo desconocido ya que los zed ya están muertos, sus cuerpos no necesitan comer, rápidamente descubrimos varias cosas de los zed, el ruido los atrae y la única forma de matarlos el destruyendo la cabeza.

Algo curioso sobre los zed es que al perseguir a sus presas algunos zed correrán, mientras otros simplemente caminara hacia su presa

Pero dejando eso de lado, si eres mordió te puedes salvar, ya que la fiebre negra es tratable, solo necesitas un buen doctor y buenas instalaciones médicas.

El ejército daba todo por mantener a los zeds a raya, pero teniendo en cuenta que las únicas zonas seguras eran los pocos asentamientos aún en construcción hechos por los sobrevivientes o campamentos militares que sobrevivieron al colapso, la tarea de defender una posición cuando estás completamente rodeado es bastante difícil, y poco a poco las defensas del ejército comenzaron a caer.

Pero los que en verdad vencieron al ejército fueron los monstruos.

Los aulladores, son zeds que pueden gritar con la suficiente fuerza como para hacer estallar cristal, sin mencionar que el grito atrae a los zeds, también a los aulladores les faltan los brazos y la mandíbula inferior.

Los hinchados, son lentos y torpes, pero cuando te acercas demasiado o si les disparas en el estómago hará que el hinchado explote liberando un gas tóxico el cual te contagiara con la fiebre negra, también se a visto a hinchados acostados en medio de carreteras, actuando como un tipo de mina.

Los salvajes, probablemente sean el nuevo depredador apex, corren a cuatro patas, siendo más rápidos que cualquier humano, son lo suficientemente ágiles para esquivar un auto si es que intentas atropellarlo, si le prendes fuego rodarán en el suelo para apagar las llamas, tiene la fuerza para partir a un hombre a la mitad, su oído es sumamente agudo y hasta se a visto que cuando se les apunta con un arma de fuego el salvaje saltara a un lado, en un intento de esquivar el disparo, se a reportado que aveces forman manadas de asta tres individuos, hasta ahora solo se les conoce una debilidad, son ciegos.

Los juggernaut, lo que parece ser grasa en realidad es músculo y hueso endurecido, son tan pesados que si te acercas lo suficiente a uno podrás sentir como el suelo tiembla cuando caminan, son bastantes altos, llegando a medir 1.82 m, y son lo suficientemente resistentes como para aguantar cuatro disparos de un rifle calibre cincuenta usando munición AP ( Armor Piercing ) la quinta bala por fin matara al juggernaut, al igual que el salvaje tiene la suficiente fuerza como para partir a una persona por la mitad.

Con el tiempo las líneas defensivas que un tenía el ejército cayeron en cuestión de semanas y los pocos campamentos militares que quedaban cayeron aún más rápido.

Yo estaba en la cafetería, junto con Gabriel y Diana, cuando las alarmas comenzaron a sonar.

Altavoz: ¡¡Todos a sus posiciones, nos asedian!!

Los soldados en los muros comenzaron a disparar a los zeds que se acercaban al campamento, mientras los civiles corrían a buscar refugio.

Gabriel, Diana y yo corríamos a buscar un lugar donde escondernos, cuando escuchamos un golpe bastante fuerte en el portón principal, después se escucho otro golpe, y así hasta que un juggernaut derribó el portón.

Primero entro el juggernaut al campamento y poco después entraron los demás zeds.

Se hizo un absoluto caos, la gente corría despavorida, mientras que el ejército intentaba frenar a los zeds.

Pero con los gritos de las personas y el ruido de los disparos, cada vez venía más y más zeds.

Diana: Tenemos que salir de aquí, son demasiados, el ejército no los podrá detener los por mucho tiempo.

Gabriel: ___ hay que ir por tu auto, ese es nuestro boleto de salida.

___: Bien, hora de correr.

Salimos corriendo hacia donde estaban los autos de las personas que habían sido llevadas aquí.

Atrás de nosotros escuchamos varios gruñidos, volteé hacia atrás y ví a varios soldados convertidos en zeds.

Corriendo hacia nosotros.

Derrepente tres soldados les comenzaron a disparar a sus compañeros caídos, lo que hizo que los zeds fueran por los soldados.

Mientras corríamos a dónde estaban los autos la situación se descontrolaba cada vez más, sobrevivientes siendo devorados por los zeds en cada esquina, soldados intentando defender el campamento y cada vez eran más zeds, ya sean los sobrevivientes y soldados que fueron infectados o zeds que fueron atraídos por todo el ruido.

Entre el caos nos topamos con dos soldados.

Soldado 1: Tiene que salir de aquí ahora, los zeds ya casi toman el campamento.

Gabriel: Justo eso estamos haciendo.

Un soldado me volteo a ver.

Soldado 2: Chico ¿sabes disparar?

___: Yo.... nunca eh usado una arma de fuego.

Soldado 2: ¿alguno de ustedes sabe disparar?

Gabriel, Diana y yo negamos con la cabeza.

Soldado 2: Carajo, ten chico, está es una colt 1911 tiene un cargador de siete disparos, más uno en la recámara, usa munición .45 ACP ( Automatic Colt Pistol )

Soldado 1: ¿Estás seguro? ¡Es solo un civil!

Soldado 2: Si estoy seguro, tenemos que ayudarlos en todo lo que podamos.

Soldado 1: ¡Ese ya no es nuestro problema, nos dieron órdenes de retirada.

Diana: ¡¿Se retiran, a dónde van?!

Soldado 1: Es información clasificada.

Soldado 2: escucha amigo, si le das en el pecho a un zed la potencia del disparo puede derribar al zed, lo que les dará un poco de tiempo para escapar, o si la bala le daña la espina dejaras al zed paralizado, suerte hay fuera.

Los soldados se fueron, huyendo a quien sabe dónde.

Yo simplemente me quedé viendo la pistola que el soldado me había dado.

Gabriel: __ tenemos que irnos ahora.

___: Si, claro *Nervioso*

Al avanzar un poco más, nos topamos con un zed, yo levanté la pistola y jale el gatillo, el ruido me aturdio un poco y el retroceso fue más fuerte de lo que esperaba, pero por suerte el disparo le dio en la pierna, lo que hizo que el zed cayera.

El zed seguía avanzando hacia nosotros, arrastrándose por el suelo, pero ahora era más lento que antes, por lo que pudimos huir de el sin mucho problema.

Después de correr unos minutos llegamos al estacionamiento.

Soldado: ¡Corran los cubro!

Nosotros seguimos corriendo mientras atrás de nosotros el soldado le disparaba a los zeds que venían.

Se escuchó un rugido parecido al de un animal.

Un salvaje tacleo al soldado y acabo con el.

Nos subimos lo más rápido que pudimos a mi auto y escapamos del campamento.

Mientras manejaba, alejándonos cada ves más del campamento vimos varios helicópteros militares volando en formación.

En el campamento solo habían tres helicópteros, pero veíamos docenas de helicópteros en el aire.

Gabriel: El ejército....nos abandono *Nervioso*

Diana: Estamos por nuestra cuenta *Miedo*

___: ¿Saben que? Que se joda el ejército, nos tenemos a nosotros y juntos vamos a sobrevivir.

Gabriel: Supongo que tienes razón amigo

Diana: Si, juntos sobreviviremos.

Volví a acelerar, yendo a....quien sabe dónde.