Capítulo 21: No quiero continuar así

La sonrisa que TaeHyung llevaba en su rostro era envidiable, estaba completamente contento por haber aprobado todos sus exámenes, en un mes se graduaría finalmente con honores, así que podía tomarse algunos días de descanso e ir una o dos veces a la semana a realizar algunas ultimas practicas de reforzamiento.

Saco las llaves de su mochila y abrió la puerta de su casa. El silencio le recibió en su hogar, pero pudo divisar en la sala a su madre y hermano sentados en el sofá con caras largas, al parecer habian estado discutiendo, el rubio guardo las llaves y se encamino a ellos.

No entendía por qué las caras.

— Hola ¿Pasó algo?— empezó TaeHyung a hablar mientras se acercaba.

— ¡¿Que si paso algo?!— grito la mujer, lo que hizo a TaeHyung sentarse junto a su hermano de un tirón.

De pronto cuando observo a BeomGyu recordó todo. Joder, les esperaba tremendo regaño.

— El parcito se va a una fiesta, me prometen llegar a más tardar a la una de la madrugada. Se acercaron las tres de la madrugada y no he podido pegar un ojo porque no llegaban, les llame y no contestaban, llame a Jimin y tampoco contestó. Finalmente los lindos no llegan a casa a dormir y ambos regresan preguntando si todo esta bien ¡Cuando estuve preocupada toda la maldita noche!.— BeomGyu y TaeHyung se iban encogiendo en el sofá a medida que los gritos aumentaban.— ¿Se puede saber en donde pasó la noche el parcito?.

— Ya te dije que con TaeHyun.— respondió bajito BeomGyu.

— ¿Y quien es TaeHyun? Porque jamás había escuchado su nombre antes.

— Es mi compañero de trabajo y es amigo de ambos mamá.— habló esta vez TaeHyung, cuando notó que su hermano no sabia que contestar, el rubio miro a BeomGyu frunciendo el ceño, ellos también debían hablar seriamente.— El vive sólo así que nos ofreció alojar con el.

— Si, además su departamento quedaba super cerca de Balenciaga, incluso nos fuimos caminando.— agrego BeomGyu para que su madre les creyera.

— ¿Así? ¿Y solo le presto ropa de recambio a TaeHyung?— interrogo la mujer, sin duda el ojo de una madre era como un águila y nunca se les escapaba nada. TaeHyung y BeomGyu se miraron entre ellos, joder era cierto, BeomGyu continuaba con su ropa de anoche mientras que el rubio llevaba la ropa del Ceo.

— Es que me voltearon una cerveza mientras bailábamos.— agregó TaeHyung rápidamente.— mi ropa no alcanzo a secarse así que me presto la suya.

La mujer les miro seriamente a ambos.

— No vuelvan a hacerme esto, estuve muy preocupada toda la noche pensando que les paso algo, mínimo avísenme que no llegaran a dormir.— habló finalmente la madre de ambos soltando un suspiro cansado.— Mientras sigan viviendo bajo este techo me deben dar explicaciones y se deben cumplir las reglas.

— Lo siento mamá, no se volverá a repetir.— dijo BeomGyu mientras el rubio asentía.

— Vayan a su habitación y dúchense.— dijo la mujer recostándose en el sofá.

— Mamá te regale una cama super cómoda para que descanses a gusto, no duermas en el sofá, le hará daño a tu espalda.— intervino TaeHyung sentándose junto a ella, dándole cariño en su brazo.

— Ay, mi bebé precioso, a veces lo olvido, nos has llenado de tanto lujos últimamente, camas nuevas, televisión, celulares, sofás nuevos, todas las facturas pagadas y las despensas llenas.— decía la mujer mientras se ponía de pie y le dejaba un beso en la mejilla a su hijo.

— Es lo mínimo que puedo hacer por ustedes gracias a mi trabajo.— le contestó TaeHyung sonriendo de lado, aunque mas parecía una mueca.— Hoy va a llegar una mesa de escritorio para BeomGyu.

— ¡Por dios, TaeHyung! Guarda algo para ti, para la universidad.— habló la señora Kim Rhea sin poder creerlo.

— Tranquila mamá, la universidad ya esta pagada por adelanto, solo me queda graduarme.— Sonrió TaeHyung, su madre fue a darle un abrazo apretado.— Me gusta regalarles cosas ahora que puedo, no se preocupen.

— Estoy tan orgullosa de ti mi niño precioso.— la mujer acarició su mejilla mientras le sonreía cálidamente.— Ahora me iré a dormir un poco, ya que un parcito de chicos no me lo permitió.— recrimino la mujer para luego ir escaleras arriba hasta su habitación.

— Ve tranquila mamá.— susurró levemente BeomGyu mientras bostezaba.

Apenas TaeHyung vio como su progenitora se encerraba en su habitación a tomar una siesta, se dirigió seriamente hacia su hermano menor, quien le sonrió tensamente.

— Tú y yo vamos a hablar seriamente, jovencito.— comenzó TaeHyung cruzándose de brazos.

BeomGyu rodó los ojos.

— Oh, vamos Pelirrojo de Balenciaga, no quiero tener la charla contigo.— le dijo BeomGyu encogiéndose en el sofá.

— En primer lugar, ahora estoy rubio. En segundo lugar, no me ruedes los ojos. Y en tercer lugar, si vamos a tener la charla.— TaeHyung elevo cada dedo para decir sus puntos, luego soltó un suspiro, recordando lo que habló con Jaehyun.— ¿Tuviste relaciones con TaeHyun?

BeomGyu abrió los ojos por lo directo de su hermano.

— TaeHyung, por favor.— TaeHyung pudo notar las mejillas rojas de BeomGyu.

— Beomie, no voy a regañarte, sólo quiero saber.— TaeHyung se acerco un poco mas hasta donde esta BeomGyu en el sofá.

— Mmm, sí.— soltó el mas joven despacio, pero el rubio logró escucharlo.

TaeHyung ya suponía que era cierto, pero escucharlo desde los labios de su hermano no podía evitar sorprenderse.

— ¿Fue tu primera vez o lo habías hecho antes?— prefirió preguntar TaeHyung, quizás hasta se llevaba una sorpresa.

— Primera vez.— contestó BeomGyu mirando hacia el frente, evitando la mirada de su hermano, sentía demasiada vergüenza en ese momento.

— ¿Y te gustó? ¿Fue como esperabas? Cuéntame BeomGyu, no me voy a enojar, pero debes conversarlo con alguien, ¿Y quien mejor que con tu hermano?— TaeHyung le sonrió para darle confianza, mientras apretaba las mejillas del contrario.

— Me da vergüenza.— se quejó BeomGyu.

— Oh vamos Beomie, a mi hubiera encantado tener un hermano mayor para hablar estas cosas con él, yo tuve que hablarle a mamá cuando tuve mi primera experiencia sexual, eso si fue horrible.— le contó TaeHyung para luego reír, acompañado de su hermano.

— ¡No! Por favor, no le digas a mamá, que vergüenza, fue lo primero que me preguntó cuando llegue y lo negué todo.— BeomGyu soltó un pequeño escalofrío solo de imaginárselo.

— No le diré nada.— TaeHyung llevo sus manos a sus boca, formulando un gesto de cerrar un cierre.

— Bien, TaeHyun y yo en la fiesta tuvimos mucha química, nos besamos mucho también.— comenzó BeomGyu a contarle, TaeHyung se acomodo en el sofá para escucharlo con atención y no perderse ningún detalle.— Bebimos demasiado también, Donghyuck creo un juego donde cada vez que las parejas se besaran debían rotarse los vasos y los estúpidos de Renjun, Jeno y Jaemin se la pasaban besándose, así que termínanos mezclando de todo.

— Lo pude notar, eran la mesa mas bulliciosa.— rio TaeHyung.

— Que ibas a notar si te emborrachaste y bailaste sobre una mesa, Jimin tenia razón.— BeomGyu soltó una carcajada al recordarlo mientras TaeHyung abría los ojos.— Hasta querías quitarte la ropa, fue épico ser espectador de eso, y te ves tan tranquilo.

— ¡Ya! — TaeHyung golpeo su brazo, recibiendo un quejido de su hermano— Continua.

— Oh si, luego de eso, el Ceo, bueno tu jefe te tomo en brazos y no se a donde te llevo, iba a ir por ti, pero TaeHyun dijo que la fiesta ya había terminado, me dijo que le llevara a su departamento porque estaba muy mareado y que vivía cerca de Balenciaga, así que le dije que si y luego volvería por ti. Intente despedirme de los chicos, pero Jimin y Hoseok se iban besuqueando hasta el primer piso, Renjun y Jaemin estaban vomitando en el baño, Jeno hablando con la pared, Mark y Donghyuck se fueron bailando en un uber junto a Yang yang y su novio. Yo me fui junto a TaeHyun caminando y en verdad su departamento estaba muy cerca, una vez dentro nos volvimos a besar, el no quería me fuera y la verdad yo tampoco quería irme y... solo pasó.— BeomGyu detuvo su hablar un momento para sonreír, recordando.— Fui el activo y se sintió fantástico, incluso repetimos.

TaeHyung abrió los ojos nuevamente.

— También fue la primera vez de TaeHyun, así que fuimos muy cuidadosos, pero el me dijo que le había gustado también. TaeHyung, fue genial.— terminó de decir BeomGyu suspirando.

— Me alegro mucho, eso es lo importante, que ambos querían y lo pasaron bien. ¿usaron condón y lubricante verdad?— le preguntó TaeHyung.

BeomGyu le miro asustado.

— Solo condón. Mierda.— BeomGyu se asusto.

— Tranquilo, los preservativos traen lubricante, pero como somos hombres poner un poco más de lubricante lo hace más sencillo. — le explicó TaeHyung.

— De todas formas, hicimos el amor, no follamos como salvajes ni nada, fue algo tranquilo, suave y con mucho cariño.— le dejo en claro BeomGyu a su hermano.

TaeHyung le sonrió a su hermano, estaba muy feliz de que su hermano haya hecho lo correcto.

— Te comportaste como un caballero, estoy orgulloso. Y me alegra mucho que hayas tenido un inicio en el sexo positivo. — BeomGyu sonrió aun sonrojado.— Y bueno, eres adolescente y pronto vas a querer follar, así que, toma.— TaeHyung saco dinero en efectivo de su billetera y se lo entrego a su hermano.— Para que te compres preservativos y lubricante, tienes que cuidarte.

— Gracias, Hyungie.— BeomGyu no pudo evitar ruborizarse, pero estaba agradecido de que se lo haya dado, ya que no hubiera sabido como pedírselo.— Quiero invitarlo a una cita, pero me da miedo.

— Oh Beomie, estoy seguro que TaeHyun estará encantado.— TaeHyung sonrió con ternura al ver así a su hermano, acariciándole su mejilla.

— TaeHyun es un modelo reconocido y viene de una familia millonaria, yo no puedo ofrecerle nada.— BeomGyu bajó la mirada desanimado.

— ¿Cómo que nada? Le vas a entregar amor, cariño, respeto y una futura relacion bonita. Que importa lo material, con pequeños detalles puedes hacer muchas cosas.— Le consoló TaeHyung dándole un breve abrazo.

BeomGyu no contesto y solo suspiró, le daba mucho miedo invitar a una cita al peli naranjo sabiendo lo conocido que es, quizás hasta tenia partidos muchos mejores, como otros modelos o idols. TaeHyung notó la mirada cabizbaja de su hermano, estuvo a punto de hablar antes que su Iphone anunciara su tono de llamada.

TaeHyung lo saco de su mochila, al darse cuenta quien lo llamaba, caminó hasta el patio de su casa para que su hermano no le escuchara y poder hablar tranquilamente.

— Hola, YoonGi.— saludó TaeHyung una vez contesto la llamada.

— Hola, cariño. ¿Estás en casa?— le dijo YoonGi con voz cansada. El rubio quiso chillar por el apodo que el Ceo le había dado.

— Si, Yoonie, estoy en casa, llegue como hace media hora.— contestó TaeHyung suspirando, mientras tocaba las flores que estaban en su jardín.

— ¿Quieres salir conmigo? Estoy en la esquina de tu casa.— soltó YoonGi, haciendo que TaeHyung se sorprendiera.

— Es imposible negarme bajo estas circunstancias.— murmuro TaeHyung riendo levemente, provocando risas en el Ceo también.— Aún llevo tu ropa, debo cambiarme.

— No te preocupes, te veras lindo con lo que te pongas.— le dijo YoonGi, provocando un sonrojo en TaeHyung.— Te espero.

TaeHyung corrió a su habitación, se arreglo un poco el cabello, se colocó perfume y bajo al primer piso nuevamente, tomando su mochila.

— Beomie saldré un momento, vuelvo pronto.— TaeHyung fue hasta la puerta principal, ignorando todas las preguntas de su hermano hacia dónde se dirigía y con quién.

Camino sobre la acera a pasos rápidos, hasta que pudo notar la aparatosa camioneta negra del Ceo, que pasa "súper" desapercibida para los demás, evitando pensar tanto en eso, abrió la puerta del vehículo y subió para cerrar la puerta para que nadie le viera.

— Hola, Yoon.— murmuro TaeHyung una vez acomodado en el asiento del copiloto.

El Ceo le tomó del cuello para darle un profundo beso.

— Hola, muñequito.— le respondió con voz ronca YoonGi luego del duradero beso.

El mayor encendió el motor de la camioneta y emprendieron viaje en un cómodo silencio, escuchando música, aprovechando de cantar durante el trayecto, dándose miradas tímidas y llenas de sentimiento, dedicándose las letras mutuamente.

— ¿Recuerdas este lugar?— pregunto el Ceo mientras estacionaba el vehículo frente a una cafetería.

TaeHyung miro el establecimiento con ilusión.

— "Dime que sí", claro que lo recuerdo.— contestó TaeHyung quitándose el cinturón de seguridad.— Me trajiste aquí luego de conocernos.

— Exactamente, se ha convertido en mi cafetería preferida gracias a eso.— YoonGi luego de quitarse también el cinturón de seguridad descendió de la camioneta, para ingresar a la cafetería junto a TaeHyung.

Procedieron a sentarse y darle su pedido a una camarera sonriente.

— Este lugar es muy acogedor.— comentó TaeHyung, luego de que les trajeron su pedido.

— Así es, pero me gusta más porque siempre me recuerda a ti.— le contesta YoonGi regalándole una sonrisa mostrando sus hoyuelos.

— Eres muy tierno, Ceo Min.— Bromeó el rubio, provocando una sonrisa en el rostro del contrario.— Aunque debo admitir que el golpe que me diste con la puerta fue doloroso.

YoonGi ensanchó su sonrisa recordando.

— Yo ese día estaba tan concentrado en el trabajo, estoy acostumbrado a la soledad en mi oficina, nadie puede entrar... y ahí estabas tú, fuiste la casualidad mas bonita de ese día, TaeHyung. — Confesó YoonGi tomando la mano de TaeHyung para proceder a acariciarla.

— Debo admitir que ese día también es un lindo recuerdo para mi.— contestó TaeHyung, mirando al Ceo, se sentía tan gustoso estando con el, su corazón no quería dejar de latir con rapidez.

— Hyungie, te cite aquí para decirte algo importante.— soltó el Ceo finalmente, cambiando totalmente su expresión y apretando aún más el agarre de sus manos.

TaeHyung detuvo el trayecto del tenedor a su boca con hot cakes para prestarle atención, abriendo los ojos un poco asustado.

— Yo te pedí iniciar una relación netamente sexual a cambio de dinero.— comenzó a decir YoonGi nervioso.— Pero ya no quiero continuar así.

TaeHyung sintió su mundo detenerse, el siempre supo que en algún momento el Ceo se iba a aburrir de el y le iba a mandar a volar, pero estarlo presenciando se sentía horrible, todo su apetito se fue, incluso se sintió palidecer. Se había acostumbrado demasiado a la compañía de YoonGi, se acostumbro a su calidez, a sus sonrisas, sus besos suaves y abrazos apretados.

¿Cómo llegó a pensar que alguien como YoonGi iba a gustar de él? Pero claro, como siempre TaeHyung olvidaba que el sólo era el putito personal del Ceo. El modelito Balenciaga se había enamorado de su Ceo, se sentía patético.

YoonGi se alarmó inmediatamente al notar la reacción de TaeHyung.

— TaeHyung ¿Qué estas haciendo?— pregunto el Ceo asustado, notando las intenciones del rubio de querer irse, ya que había tomando su mochila y se coloco de pie.

— Ya, YoonGi, no necesito muchas explicaciones para entenderlo.— Soltó TaeHyung con los ojos llorosos.

— Si las necesitas, porque creo que no lo estas entendiendo.— le recalcó el Ceo tomando su brazo, evitando que se fuera.

— YoonGi, me follaste, te aburriste y ahora lo terminas. En serio lo comprendo. — insistió TaeHyung a través de un susurro, intentando soltarse, pero estaba claro que YoonGi es mucho más fuerte que él.— Solo déjame irme, confundí las cosas e involucre a mi corazón, soy patético, ya lo sé.

YoonGi alarmado se puso de pie, llevando sus manos a la cintura del contrario evitando que se fuera, no lo iba a permitir.

— No vuelvas a decir esa mierda nunca más TaeHyung. ¿Cómo puedes pensar que eres patético? ¡Solo mírate! eres un chico fantástico, eres precioso por dentro y por fuera.— YoonGi llevo su mano a la mejilla de TaeHyung, borrando algunas lágrimas que se habían escapado de sus ojos.— ¿Entonces yo soy un idiota poca cosa por enamorarme de un ser perfecto como tú?

TaeHyung sintió que su corazón se detuvo por un segundo para luego bombear con rapidez, ¿Había escuchado bien?

— ¿Qué dijiste?— preguntó TaeHyung nervioso, mirándolo a los ojos.

— Estoy enamorado de ti, loco por ti, me gustas demasiado, TaeHyung.— YoonGi acercó su frente a la del contrario, notando como el cuerpo del rubio se tensaba.

TaeHyung se separó lentamente del Ceo y se sentó de nuevo, sin soltar la mano de YoonGi.

— A lo que me refería, es que no quiero continuar con ese acuerdo que hicimos, no quiero que sigas pensando que sólo quiero estar contigo por tu cuerpo o porque te pagaba para hacer el amor. Este último tiempo para mi no a sido así, lo hago porque me enamoré de ti.— confesó YoonGi, suspirando al terminar de hablar, realmente había puesto todo su corazón y sentimientos.

TaeHyung sonrió lentamente, llevando sus manos a las del Ceo.

— Desde que inicio "el acuerdo" yo sabia que iba a enamorarme de ti, intenté siempre mantener mis sentimientos fuera de esto, pero no pude, solo me consolaba la idea de que si esa era la única de forma de tenerte, iba a tomarla. Lo que acabas de decirme me pone muy feliz, YoonGi.— Dijo TaeHyung intentando no llorar, odiaba ser tan sensible, pero no podía guardárselo, era muy transparente con sus emociones.

— A mi me emociona mucho que sea mutuo, muñequito, me muero de ganas de que seamos pareja, pero debo arreglar un pequeño problema que tengo, además debo hacerlo especial, te lo mereces.— Murmuró YoonGi con una sonrisa enorme, tocando la naricita de TaeHyung tiernamente.

— Pero aún sigues pagándome por ser modelo.— Volvió a decir TaeHyung, tratando de no desanimarse.

— Es diferente, realmente soy tu jefe, por lo tanto debo pagar tu sueldo.— Le dijo YoonGi seriamente, prefería dejar todo claro para evitar futuros inconvenientes.— TaeHyung, tengo muy claro que tú sabes que soy muy estricto con los modelos en Balenciaga y no todos logran quedarse, incluso Jimin estuvo intentándolo durante todo un año para ingresar. Fue lo mismo contigo, primero te conocí y luego te ofrecí el trabajo, además hay que ser ciegos para no ver tu belleza y elegancia, te convertiste en una estrella, y eso lo conseguiste tu sólo, sin mi ayuda.— Agregó el Ceo siendo sincero.

— Que vergüenza, ni me lo recuerdes.— TaeHyung rio tímidamente recordando todo el tema de "ElPelirrojoDeBalenciaga" — A la salida de la universidad algunas chicas me pidieron un autógrafo, no sabia que hacer.

— ¿Debería ponerme celoso por eso?— preguntó YoonGi juguetonamente, levantando una ceja.

— No, solo tengo ojos para ti.— TaeHyung le regaló una preciosa sonrisa a YoonGi, que le dejó más enamorado.

YoonGi sin poder aguantar más, movió su silla hasta quedar al lado del rubio, para darle un beso apasionado, TaeHyung se lo devolvió de la misma forma, cargado de cariño y amor.

Sin duda, esos corazones estaban conectados. YoonGi lo podía sentir, el sabía que TaeHyung era su otra mitad, no iba a permitir que nada ni nadie se lo arrebatara, era su momento de ser feliz y lo más importante, sentirse amado y correspondido.

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