Capítulo 5: Wanda ha desaparecido

Las luces comenzaron a entrar por los pequeños agujeros de la persiana, el rubio al notar la luz se giró dejando su rostro hundido en el almohadón, no duró mucho en esa postura hasta que recordó lo que ocurrió ayer tarde. Tenía que levantarse y llamar a Clint.

Se levantó de la cama algo adormilado aún y agarró su teléfono, miró la hora y el teléfono marcaba las 8:30, era muy pronto para llamar a Clint, pero él no podía esperar, él necesitaba saber cómo estaba Wanda.

Sin pensarlo más buscó en la agenda de contactos el teléfono de Clint y lo llamó.

El teléfono marco seis pitidos, al séptimo el arquero respondió.
-Diga- habló Clint.
-Clint, soy Steve, ¿ha despertado Wanda?
-¿No hablaste ayer con ella?
-No, la llamada se cortó.
-Que raro, ella me dijo que sí que habló contigo.
-¿Está despierta?- preguntó Steve.
-Iré a ver.

Después de veinte segundos de espera Clint respondió.
-Steve- habló apurado Clint.
-¿Qué pasa?- Steve se puso nervioso.
-Wanda ha desaparecido.
-¿¡Cómo!?- el grito que dio Steve hizo que algunos en la base se despertaran y que a Clint le doliera el tímpano.
-No esta por ninguna parte, tampoco su ropa, ni zapatos, no hay nada suyo.
-Clint en media hora estamos allí.

Steve colgó la llamada y salió corriendo hacia la habitación de su amiga y compañera Natasha.
Comenzó a golpear desesperado la puerta.
-¿Qué ocurre?- apareció Nat mientras se rascaba la cabeza.
-Wanda ha desaparecido.
-No puedes ser- Natasha se adentró a su habitación y empezó a recoger la ropa tirada por el suelo, sin pensarlo se quitó la bata que llevaba, quedando en ropa interior y se puso la ropa que había utilizado ayer. Steve se sorprendió ante la rapidez que tenía la chica para vestirse.
-¿Has avisado a alguien más?- preguntó la pelirroja mientras se ponía un zapato a la pata coja.
-No, avisaré a los demás.
-Rhodes no está, avisa a Bucky y que se venga- propuso Nat.
-Vale- Steve se marchó en busca de los demás.

Ya había avisado a Sam y a Visión, solo faltaba Bucky. Abrió la puerta de su habitación sin preguntar y encontró a Bucky sentado en el escritorio con una libreta en mano.
-Amigo, necesito tú ayuda- habló entrecortado Steve.
-¿Qué ocurre?- Bucky se bajó del escritorio y se acercó a su amigo.
-No hay tiempo para explicaciones, vamos- Steve salió otra vez corriendo y Bucky lo siguió.

Ya en el hangar, subieron al quinjet. Todos estaban preocupados, menos el soldado del brazo de metal, este lo que estaba es confundido.
-¿Alguien me va a decir qué ocurre?- habló Bucky, todos menos Natasha que era la que conducía le miraron.
-Bucky para ti no es importante pero para nosotros sí, te hemos traído para sacarte de la base y que conozcas nuestros problemas- Bucky asintió y volvió a bajar la cabeza. Los demás dejaron de mirarle y volvieron a lo suyo.

En la casa de los Barton el pánico y la preocupación les invadía a uno y cada uno de los familiares. Los pequeños lloraban a escondidas para no preocupar más a sus padres, Clint daba vueltas en círculos en el salón y Laura alimentaba al pequeño Nathaniel, su mano derecha temblaba eso hacia que la comida se cayera de la cuchara, era un momento muy difícil para todos.

Clint paró de dar vueltas al escuchar el sonido del quinjet aterrizar. Salió de la casa y se encontró a los Vengadores acercándose hasta la casa. Una vez ya delante de ellos, las palabras no salían ni por parte del arquero ni de los Vengadores.
-Clint- la primera en hablar fue Natasha.
-Pasar- dijo cabizbajo Clint mientras se apartaba para dejar pasar a sus compañeros, el ultimo en entrar fue Bucky. Clint lo miró extrañado, ¿qué hacía él aquí?

Los Vengadores entraron en la casa y Laura no dudó en abrazarlos a todos, al primero en abrazar fue a Steve.
-Laura- dijo Steve en forma de saludo.
-Hola- dijo ella.
Después abrazó a Visión y a Sam, más tarde a Natasha. Cuando Laura se separó de Nat, vio a un hombre castaño al lado de la entrada, ella se acercó a él y se presentó.
-Hola, soy Laura- le extendió la mano.
-Bucky Barnes- Bucky tímidamente agarró su mano y la zarandeó de arriba a abajo. Laura le sonrió débilmente y volvió junto su marido.
-¿Podemos subir arriba?- preguntó Steve.
-Sí claro, vamos- Clint comenzó a subir las escaleras con su mujer, los Vengadores les siguieron, menos Bucky, él se quedó apoyado en el marco de la puerta sin moverse.

Bajó su mirada y se encontró con una bonita foto, con su brazo humano la agarró y la pudo ver mejor. La foto mostraba una niña de seis o siete años junto a una chica más mayor, al otro lado de la chica había un niño de nueve años, los tres sacaban la lengua divertidamente.
-Ella es Wanda- Bucky se sorprendió y torpemente dejó la foto en la mesa, miró hacia atrás y no vio a nadie, bajó su mirada y se encontró a la niña de la foto, la pequeña tenía los ojos completamente llorosos y sus manitas temblaban.
-Lo siento- se disculpó el soldado por haber tocado la fotografía.
-No pasa nada- la pequeña se acercó hasta la foto y la agarro con sus temblorosas manos. El soldado al ver eso se agachó a su altura y agarró la foto poniéndola a la altura de la pequeña para que ella la pudiese ver.
-¿Por qué lloras?, ¿por qué todos están preocupados?- le preguntó Bucky a la niña.
-Wanda, mi hermana, ha desaparecido- la niña comenzó a sollozar y se giró para esconderse en el pecho del soldado. Bucky se sorprendió ante la acción de la niña, hacía tiempo que alguien no le abrazaba.

El castaño dejó la fotografía en la mesa y delicadamente fue abrazando a la pequeña. Ella levantó su cabecita y le miró a los ojos. Bucky sonrió débilmente.
-¿Tú conoces a mi hermana?- la pequeña se separó del soldado para poder hablarle.
-No, yo soy nuevo en todo esto- se explicó.
-Toma- la pequeña acercó su mano a uno de los bolsillos de su chaqueta y de ahí saco una Polaroid. Bucky extendió su mano y agarró la foto con sus dedos, la miró y quedó completamente hipnotizado ante la belleza de la mujer que mostraba la pequeña fotografía. -Ella es mi hermana.
-Pero, ¿por qué me das la foto?
-Para que la conozcas- la pequeña sonrió tímidamente y Bucky solo asintió guardando la fotografía en su bolsillo.

Arriba en la habitación de los pequeños Barton se encontraban los Vengadores, Clint había encontrado una nota escrita por Wanda.

Clint, me marcho a buscar ayuda con mis poderes, quiero que sepas que os quiero muchísimo y os agradezco de corazón que me hayáis ayudado. Estaré bien

~Un abrazo, Wanda~

Clint se preguntaba porqué Wanda se había ido sin decir nada, ella podría habérselo explicado, seguro que la hubiese entendido. Todo había pasado tan rápido.

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