Los sonidos de una gran batalla se escuchaban en el enorme patio de la familia Astrea.

En una de las paredes estaba Galatea cruzada de brazos y Alfia observando cierta batalla que se estaba librando a cabo y junto a ellas estaba Bell observando cada movimiento no perdiendose nada.

Y alrededor de todo el patio estaban el resto de la familia observando a sus dos amigas luchar.

Las personas que estaban peleando en el patio lo estaban dando todo.

Un borrón de fuego pasaba rápidamente por todos lados mostrando sus pies los cuales ardían en llamas dando grandes saltos y lanzar una poderosa patada hacia una loba.

Esta apretando los dientes bloqueo la patada con ambos brazos sintiendo como estos se quemaban pero no le importo.

Así que en un rapido movimiento lanzo un poderoso puñetazo en el estómago de Alise la cual rápidamente concentro su magia allí creando un escudo de fuego.

El puñetazo impacto en su estomago y gracias a su magia el daño se vio reducido y el puño de Neze se quemo un poco.

—je.

Una leve risa soltó Alise al ver que ella casi no salió dañada a diferencia de Neze la cual se le quemo su puño.

Y esa risa hizo que la loba frunciera un poco el ceño.

Con gran rapidez se lanzo nuevamente al ataque hacia la pelirroja la cual nuevamente prendió sus pies en llamas y esquivar el puñetazo de su amiga.

Pero lo que no se esperaba era que ella ya sabría eso moviéndose rápidamente al mismo lugar que ella.

Alise al ver eso lanzo una rápida y fuerte patada de fuego pero fue esquivada por Neze la cual rápidamente se posiciono atrás de ella abrazándola con fuerza por la espalda importandole poco la magia de fuego.

Y levantandola hizo un gran suplex impactando con una gran fuerza a Alise en el suelo la cual soltó un quejido de dolor al sentir los huesos de su espalda crujir y un poco de su sangre se escapaba de su boca.

Nunca habían entrenado a ese nivel al punto de hacerse esa cantidad de daño a ellas mismas pero por ordenes de Galatea tenían que entrenar de esa manera o si no nunca mejorarían si siempre se contenían en los entrenamientos.

Por algo la familia Freya era la más fuerte actualmente aunque no fuera ni la sombra de lo que fue la familia Zeus y Hera.

Lentamente Alise se fue levantando con dolor por ese suplex que había recibido debilitándose un poco su magia.

—e‐esa fue buena —susurro la pelirroja.

—¿Te rindes?.

—¡Nunca!.

Y concentrandose hizo que las llamas aumentaran más en todo su cuerpo y salir disparada nuevamente hacia Neze la cual se puso en guardia otra vez.

Pero cuando menos se lo espero un fuerte puñetazo rodeado de fuego impacto en su estomago haciendo que sangre se escapara de la boca de la loba.

—¿A que horas lo hizo? —pensó sorprendida ya que no vio venir ese puñetazo.

Y seguido de eso una fuerte patada en llamas impacto en su rostro mandandola de golpe al suelo con una quemadura en su mejilla.

—bien Alise —pensó Galatea con una sonrisa orgullosa.

Por consejos de la pelimorada Alise no había utilizado toda su velocidad desde el inicio, de esa manera cuando utilizará toda su velocidad tomaría a su enemigo por sorpresa y lanzar unos poderosos ataques y por lo visto funciono esa técnica.

—¿Ahora que harás Neze? —pensó Galatea viendo a la loba ponerse lentamente de pie con algo de dolor.

—¿Te rindes? —pregunto Alise con una sonrisa burlesca aun con su magia activa.

Normalmente no pudiera mantenerla por tanto tiempo activa y más aun que la potenciaba una y otra vez en distintas partes de su cuerpo pero gracias a los entrenamientos ese tiempo se había extendido.

—¿Neze? —llamo Alise preocupada al ver que la loba no decía nada creyendo que había quedado afectada por esos golpes.

Aunque estaba equivocada.

—......

Los ojos de Neze se fueron afilando más y más y su cola y su cabello se erizaban mientras sus colmillos y garras crecían.

Estaba sacando parte de su forma bestia.

Aunque como no era luna llena no podía sacarla al cien por ciento pero después de muchos entrenamientos había aprendido a como sacar una parte semi‐bestia mientras se enojaba.

No era una forma completa como cuando habia luna llena pero aumentaba su poder en gran medida.

También había aprendido a sacar ese lado suyo aunque no estuviera enojada, por alguna razón si lo quería su ira aumentaba sacando su lado semi‐bestia, era el fruto de tanto entrenamiento.

Al ya estar completa Neze se lanzo a una gran velocidad hacia Alise la cual no le dio tiempo a crear un escudo con su magia recibiendo un puñetazo de lleno en el estómago el cual le saco gran parte del oxígeno.

Y antes de que hiciera algo la tomó con fuerza del cabello e impacto su rostro en el suelo.

—auch —se quejaron algunas de las chicas al ver eso.

—cuando saca su lado bestia no tiene piedad ni aunque sea su amiga, me gusta —pensó Galatea con emoción.

Después de eso Neze soltó el cabello de Alise haciendo que esta se pusiera de pie con dolor.

Pero nuevamente Neze a una gran velocidad lanzo tres puñetazos al cuerpo de Alise haciendo que esta soltara un quejido de dolor por ello.

—no se está conteniendo —pensó Alise con sangre bajando de su cabeza viendo la gran sonrisa feroz que cargaba Neze.

Y para finalizar Neze lanzo una potente patada al estómago de Alise dándole de lleno mandandola a volar por los aires.

—no puedo seguir viendo esto —pensó Astrea bajando la mirada.

No le gustaba ver a sus hijas dañarse de esa manera entre ellas pero sabía que era necesario para mejorar.

—parece que el combate ya terminó —dijo Noin viendo como Alise estaba cerca de impactar en el suelo.

—no, no ha terminado —susurro Alfia viendo como una sonrisa empezaba a aparecer en el rostro de la pelirroja.

—con que esas tenemos —susurro Alise con una sonrisa divertida limpiando la sangre de su boca aun en el aire—. Bien, tú lo pediste Neze.

Rápidamente concentro su magia en sus pies haciendo que estos ardieran en llamas y al momento en que toco suelo salió disparada como un misil hacia Neze cubriendo su puño de un rojo fuego preparándose para un fuerte puñetazo.

Y Neze también la cual apretó con fuerza su puño marcandose las venas en su brazo señal que sería un poderoso puñetazo.

Cuando Alise estuvo lo suficientemente cerca lanzo su puñetazo cubierto de llamas y Neze lanzaba su potente ataque tambien.

En ese momento y con ambas sonriendo antes de que sus puños chocarán todos pudieron ver la imagen de un lobo gris mostrando sus colmillos atrás de Neze y un dragon imponente de color rojo atrás de Alise.

Y así ambos puños chocaron.

Una gran ventisca de viento y calor se formo al momentos en que ambos puños chocaron haciendo que más de alguno se sorprendiera por tal poder.

Ambos puños seguían juntos con Neze y Alise sonriendo, la pelirroja con emocion y la loba de una forma feroz y ninguna cediendo ese choque de fuerza agrientandose el suelo bajo ellas por tal poder y quemándose el césped.

—más.....¡Más.....¡MÁS!.

Pero alguien fue ganando terreno.

Neze abrió los ojos sorprendida al ver como las llamas en todo el cuerpo de Alise empezaban a aumentar más y más volviendo más caliente el aire a su alrededor.

El listón que mantenia atado el cabello de la pelirroja se rompió haciendo que su cabello quedara suelto pareciendo que estaba ardiendo en llamas al igual que todo su cuerpo quemando más el suelo a su alrededor.

El puño y brazo de Neze empezó a quemarse mientras más tiempo pasaba allí empezando a ceder en ese choque de puños.

—¡MÁS!.

Las llamas seguían en aumento, Alise jamás pensó que su magia sería capaz de eso, siempre pensó que era solo rodear con esa aura roja todo su cuerpo aumentando sus estadísticas y a la vez concentrar esa energía en su espada para crear un torrente de llamas.

Pero estaba equivocada.

Galatea le demostró que su magia era más que eso.....

Que era poderosa.....

Podía mejorar más y más.....

—increíble —pensó Neze viendo el poder su amiga.

Era una chica ardiente.....literalmente.

Neze al ver que no resistiría más tiempo en ese choque de puños intento retroceder pero eso fue su grave error.

Al momento en que dejó de aplicar fuerza en su puño Alise aprovecho ese momento para lanzar su potente puñetazo.

La loba intento esquivarlo pero fue tarde.

El poderoso golpe impacto de lleno en Neze creando una gran ola de llamas a todo alrededor sintiendo como su estomago se quemaba.

Y como un proyectil salió volando y rebotando por todo el suelo hasta detenerse estando con los brazos extendidos en el suelo notándose la quemadura en su estomago y con sangre bajando de su boca.

—m‐me rindo —susurro la loba.

—¡La ganadora es Alise! —grito Galatea con una sonrisa orgullosa.

—¡SI! —celebró la pelirroja desactivando su magia y dar un salto de victoria.

Aunque en eso se acordó que su amiga había quedado muy dañada por el combate.

—¡Neze!.

Preocupada corrió hacia ella pero al dar el primer paso se tambaleó y cayó de golpe al suelo.

—¿Eh? ¿Que pasa? —pensó la pelirroja extrañada.

—idiota, utilizaste tú magia por mucho tiempo y eso te agota bastante, además que Neze te dio unos potentes puñetazos, es obvio que te costaría moverte —dijo Galatea.

—jeje.

Alfia solo vio a las dos chicas dañadas para después ver a una de sus alumnas.

—Maryuu, curalas —ordenó Alfia.

—¡Si!.

La chica rápidamente se acercó a sus dos amigas y rápidamente recito su canto lanzando su magia curativa a las dos al mismo tiempo empezando a curar todas sus heridas en cuestión de segundos.

Anteriormente no era capaz de eso, tenía que curar una persona a la vez y se tardaba por lo menos medio minuto en curarlo en su totalidad si es que podía.

Pero ahora gracias al entrenamiento de Alfia pudo aprender a manejar su magia mucho mejor pudiendo curar a ambas al mismo tiempo sin desconcentrarse y de una manera más rápida ya no tardandose tanto tiempo en curar todas las heridas.

Los entrenamientos de Alfia habían dado sus frutos.

—eso dolió —dijo Neze sentándose en el césped con todas sus quemaduras curadas aunque la fatiga aún se mantenía en su cuerpo pero ya no estaba herida—. Cielos Alise, enserió lo diste todo en ese golpe.

—jeje perdón me emocione —se disculpo la pelirroja con una sonrisa nerviosa sentándose también en el césped.

Al ver que el combate ya había terminado el resto de la familia se acercó al campo de batalla el cual estaba destruido y quemado en algunas partes.

—ustedes están locas, espero no pelear con ustedes en algún momento —dijo Lyra un poco sorprendida por la demostración de poder de ambas.

Ya habia pasado una semana desde que habían iniciado los entrenamientos, semana que había estado también lleno de patrullajes, calmar a los civiles y entrenar.

La familia Ganesha aún no había encontrado la entrada al Knossos, les estaba resultando más difícil de lo que creían pero para Galatea era mejor ya que sus estudiantes entrenarian más.

Y como era obvio Evilus no había hecho ningún movimiento desde que elimino a la familia Loki, parece que las palabras de Sava eran ciertas que los esperarían en el Knossos.

—las felicito a ustedes dos por esta espléndida batalla, ambas lo hicieron increíble —elogio Galatea haciendo que Alise y Neze sonrieran avergonzadas y felices—. Ahora las observaciones.

Ambas pusieron una expresión seria ya que era momento de decirle sus errores.

—Alise, concentras mucha magia en todos tus ataques y lo único que estás haciendo es malgastar tú mente ya que la gran mayoría de ataques falla, te recomiendo que utilices tú magia de una forma más moderada y cuando estés segura que tú golpe o patada va a impactar en tú oponente allí si concentres toda la magia posible, de esa manera reducirás el consumo de tú mente.

—entendido —anoto el consejo la pelirroja en su mente.

—ahora Neze, tú forma de combate ha mejorado mucho pero fallas mucho en tú forma semi‐bestia, en esa forma dejas que los impulsos te ganen y lanzas ataques absurdos, lograste golpear a Alise ya que eran del mismo nivel y la abrumaste con tú velocidad pero si hubiera sido un oponente de un nivel superior hubiera esquivado tus ataques, tienes que aprender a controlar esos impulsos.

—entendido maestra —dijo la loba.

—y dejando eso de lado fue una batalla espléndida, ambas han mejorado mucho, principalmente tú Alise, has crecido a pasos agigantados aunque no es por quitarte mérito pero si Neze hubiera estado en su forma bestia completa hubieras perdido.

—eso lo se, Neze es muy poderosa bajo la luna llena —acepto la pelirroja la posible derrota que hubiera tenido—. Aunque eso no quita lo increíble que soy jeje.

—eso es verdad, eres muy fuerte Alise —dijo Neze con una gran sonrisa chocando su puño con su amiga.

—de verdad han mejorado —pensó Galatea con una sonrisa orgullosa viendo a las demás.

Ese no había sido el único combate del día, antes que lucharán Neze y Alise hubieron otros combates un tanto curiosos.

El primero fue Kaguya contra Ryuu una batalla donde hubo incluso más sangre que la que acaban de presenciar.

Fue un combate parejo pero al final Kaguya obtuvo la victoria aunque más de algún golpe recibió, principalmente un fuerte puñetazo que le partió el labio, Ryuu se sintió orgullosa de ese golpe.

El segundo combate fue Ryana contra Iska que para sorpresa de todos la ganadora fue Ryana.

No es que pensaran que su amiga era débil pero Ryana era una maga e Iska una combatiente cuerpo a cuerpo, era clara la ventaja de la amazona.

Y así fue....

En toda la pelea Ryana recibía puñetazos y patadas de su amiga no dándole tiempo a defenderse o a contraatacar pero aun así aguantaba cada golpe.

Parecía que Iska iba a ganar la batalla o eso fue hasta que Ryana empezó a recitar su canto a una gran velocidad.

En ese momento la amazona supo que tenía que detenerla pero grande fue su sorpresa que a pesar que la golpeaba y que esta corría y esquivaba aún así no dejaba de recitar su magia.

Ryana había aprendido canto concurrente.

Y cuando su magia se activo se decidió todo.....

No fue un torrente de llamas como veces anteriores.

Esta vez salieron disparadas múltiples bolas de fuego por todos lados sorprendiendo a Iska no sabiendo que hacer.

Gracias a Alfia había creado una nueva variante de su magia de fuego.

En el momento en que todas las bolas de fuego impactaron en el campo y que desapareciera el humo se pudo ver a Iska en el suelo con múltiples quemaduras en todo su cuerpo aceptando su derrota.

Las chicas no tardaron en felicitar a Ryana por su gran mejora y también a Iska que a pesar que perdió había demostrado que mejoro mucho en velocidad y fuerza.

Galatea se sorprendió al ver eso, su alumna había perdido ante una maga, eso no se lo espero ya que Iska era fuerte.

Así que lo único que pudo hacer fue ver a Alfia la cual solo observaba tranquilamente a Ryana.

—yo la entrene, era más que obvio el resultado —fueron las palabras que dijo Alfia con un tono tranquilo ocultando lo levemente orgullosa que estaba de su alumna.

Y hubo un combate más antes del combate de Alise y Neze.

Y ese fue Noin contra Lyra....

Un combate muy curioso....

¿Porque?.

Por la sencilla razón que termino en empate.

Normalmente todas pensaron que Noin ganaría ya que era un nivel superior a la hobbit, era más rápida, más fuerte, tenia un gran manejo con la espada y gracias al entrenamiento de Galatea todo eso había mejorado con creces.

Pero Lyra era Lyra.

Al momento en que la hobbit estaba perdiendo tomó una de sus bombas y la lanzó al suelo explotando y mandando a las dos a volar a distintas direcciones quedando ambas desorientadas y adoloridas por la explosión.

Fue en ese momento que Galatea lo dio por empate ya que sabía que la hobbit volvería a hacer algo así.

Noin le reclamo a Lyra por ello diciendo que no era justo y que no pudo lucirse frente a los demás por sus ideas locas y la hobbit sólo sonrio de forma inocente.

Al final las cosas se calmaron y estrecharon las manos como las buenas amigas que eran.

Y así había pasado toda la tarde en la sede de la familia Astrea con esos múltiples combates demostrando lo mucho que habían mejorado todas ellas.

Mientras Bell solo estaba apoyado en una de las paredes observando a las chicas platicar entre ellas sobre lo mucho que habían mejorado en esa semana notando la emoción y felicidad en cada una de ellas.

—mi familia —pensó con una sonrisa.

Desde que tuvo esa platica con Kaguya esa noche un gran peso en su corazón había desaparecido, era como si una parte de él se hubiera limpiado.

Cada vez que pasaba más tiempo junto a ellas sentía como poco a poco iba mejorando recuperando algunos recuerdos de vez en cuando.

Esa paranoia que sentía constantemente también empezaba a desaparecer y ese miedo intenso al rechazo.

Era como si poco a poco su alma se iba purificando y no estaba lejos de la realidad.

Freya con su espejo divino lo había observado de vez en cuando pudiendo confirmar esas palabras aunque su alma no había cambiado mucho.

Era una especie del bien y el mal, una parte completamente negra y una completamente blanca.

Por más días que pasara ese resultado no cambiaba, era como si esa parte llena de oscuridad ya pertenecía completamente a él.

Era raro.

Pero a pesar que su miedo, paranoia y tristeza desaparecían poco a poco había algo que por más que pasara el tiempo nunca disminuía un poco siendo el motivo principal porque una parte de su alma era completamente negra.

Y esa era su enorme sed de sangre hacia Evilus, principalmente hacia Sava.

Su odio, rencor y las intensas ganas de matarlo jamás desaparecían de él por más tiempo que pasara.

Eso y las constantes risas que escuchaba en su cabeza que a pesar que eran incomodas solo las ignoraba.

Talvez por fuera Bell ya se miraba bien pero por dentro aún estaba mal mentalmente pero ocultaria eso para no preocupar a las personas que amaba.

Solo una persona había notado eso en el albino pero decidió no hablarlo.

—¿Cuál es el siguiente combate? —pregunto Asta ansiosa queriendo ser la siguiente en pelear.

—ninguno, seguiremos hasta mañana —y los ánimos de la enana se fueron al escuchar esas palabras.

—¿Eh? ¿Porque? —pregunto Alise.

—las he exprimido a más no poder desde que comenzó todo esto, patrullan desde muy temprano en la mañana y en la tarde entrenan hasta morir hasta altas horas de la noche.....me han demostrado lo capaces que son así que merecen un descanso.

Las chicas solo se vieron entre ellas sintiéndose un poco sorprendidas.

Es cierto que a los inicios de los entrenamientos a penas podían caminar de lo cansadas que estaban señal de lo explotadas que estaban de tanto entrenar.

Pero con el pasar de los días eso iba desapareciendo al punto de que entrenar intensamente toda la tarde era normal para ellas.

Incluso en esos momentos no se sentían tan agotadas pudiendo entrenar por unas cuantas horas más a excepción de Alise y Neze la cuales ocuparon más poder de lo normal en su combate.

Pero dejando eso de lado aun se sentían capaces de seguir entrenando.

Eso solo demostraba lo mucho que habían mejorado.

—el descanso también es importante —dijo Astrea acercándose a sus hijas con una cálida sonrisa—. Deberían de aprovechar y relajarse, les vendrá muy bien.

—¡Exacto!.......aunque ese es en mi caso —susurro Galatea volteando a ver a Alfia—. No se si quieres darle descanso a tus alumnas.

Ryana, Maryuu y Celty voltearon a ver a la mujer esperando una respuesta.

—que hagan lo que quieran —dijo haciendo que las tres chicas sonrieran.

—¡Entonces esta decidido! ¡Hay que descansar! —grito Alise emocionada ganándose una mirada irritada de Alfia.

—entonces iré a darme una ducha, eso me relajará —dijo Neze estirando sus músculos.

—todas necesitamos una ducha, eso siempre es relajante —dijo Noin para después olerse a sí misma—. Principalmente yo, por culpa de Lyra ahora desprendo olor a pólvora.

—jeje —rio la hobbit orgullosa.

—no es motivo de orgullo tonta.

—yo mientras tanto prepararé algo de comer para todos, de seguro tendrán hambre —dijo Astrea con una cálida sonrisa.

—¡Y mucha! —dijo Galatea hambrienta.

—hoy fue un día muy productivo, ¿Verdad diosa Hera? —pregunto Kaguya viendo con una amable sonrisa a la diosa.

—pudrete —insulto Hera viendo con desagrado a la oriental.

La relación de Hera y Kaguya había estado muy tensa desde ese día, Hera de milagro podía estar en el mismo lugar que ella sin querer lanzarse a matarla recordando como la llamo "Suegra" frente a todos ganándose inmediatamente todo el odio de la mujer aunque eso a Kaguya solo le causaba gracia.

Aunque la gracia desapareció cuando Galatea la trató como un saco de boxeo ese día, parecía que se estaba desquitando con ella o algo así.

Lo único que le dijo Galatea ese día fue.

"Pensaba que eras distinta con esa aura misteriosa y tranquila que cargabas pero me equivoque, menos cien puntos para Slytherin".

Y desde ese día las palizas hacia ella en los entrenamientos se intensificaron pero no se quejo, de hecho se esforzó más y más en cada entrenamiento.

Y por otro lado como era obvio la relación de Kaguya y Bell volvió a ser como en el pasado.

Aunque un tanto distinta.

Kaguya cuando se confesó a Bell solo se centraba en hacerle bromas coquetas y demás para burlarse de él, ella no era sincera con lo que sentía así que eso la hacía comportarse de esa manera con el chico que amaba.

Pero eso ahora era distinto.

Kaguya cada vez que podía se comportaba de una forma cariñosa con el albino pero no para burlarse de él, simplemente lo hacía porque quería, quería estar cerca de él y demostrarle el enorme cariño que le tenía ya sea abrazandolo o queriendo darle de comer a la hora de la comida o dándole un beso en la mejilla a escondidas de su suegra.

Esta vez se comportaba de una forma sincera con él, sus bromas habían quedado de lado.

Bueno, no tan de lado ya que provocaba a sus compañeras con ese actuar y mucho más a Hera la cual tenia unas inmensas ganas de estampar su rostro contra la mesa.

Aunque Galatea se desquitaba un "poco" con ella en los entrenamientos.

La única que se mantenia al margen de todo siempre era Alfia aunque siempre cargaba un ceño fruncido al ver eso, Galatea se sentía un poco sorprendida por ese raro actuar de la mujer, no se parecía en nada a la Alfia del pasado.

Le resultaba raro que no reclamara o algo tratándose del hijo de su adorada hermana.

—vaya que ese largo viaje la hizo cambiar —pensó viendo como Ryana se acercaba lentamente a la mujer—. Interesante.

—señorita Alfia —llamo Ryana un poco nerviosa.

—¿Que quieres?.

—q‐quisiera agradecerle por todo lo que me ha ayudado —empezó a hablar haciendo el mayor esfuerzo para ver a la estricta mujer a los ojos—. Se que al principio del entrenamiento era inútil no pudiendo seguir el paso sin agotarme rápido pero gracias a sus duras palabras nunca me rendí y desde ese momento he mejorado mucho, incluso pude derrotar a Iska en un combate, algo que nunca creí posible.

Alfia solo escuchaban atentamente las palabras de la nerviosa chica.

—y todo eso es gracias a usted, por eso le agradezco por haber sacado lo mejor de mi, espero seguir recibiendo sus clases, muchas gracias —termino de hablar viendo fijamente esos ojos heterocromaticos.

—.......te equivocas, aun sigues siendo débil y no he sacado lo mejor de tí, aun te falta mucho camino y muchos más entrenamientos.......mientras tanto sigue entrenando.

Y con esas palabras Alfia le dio la espalda y se alejo de ella haciendo que Ryana sonriera de forma nerviosa.

—es su manera de decir que lo hiciste increíble —dijo Galatea levantando uno de sus pulgares—. Es algo tsundere la tonta esa así que entiendela.

—Gospel.

Un ataque mágico le dio de lleno a Galatea mandandola a volar e impactar a una pared haciendo que todos los presentes abrieran los ojos sorprendidos.

—auch, creo que es la primera vez que la miro ser golpeada —susurro Lyra.

—......

Alfia bajo la mano después de haber lanzado su magia viendo enojada donde fue a caer Galatea la cual estaba sentada en el suelo con su ropa un poco rasgada y una pequeña herida en la mejilla.

Lentamente levanto su mano y se limpio la sangre viendo con una expresión seria a Alfia.

—.......retiro lo que pensé, sigues siendo la misma llorona que se queja por el más mínimo insulto —susurro Galatea poniéndose de pie y limpiar su traje—. No aguantas ni una pequeña broma, vaya mujer.

La mirada de Alfia se afilo al escuchar esas palabras volviendo el ambiente más pesado.

—¿N‐No deberíamos de detenerlas? —pregunto Astrea nerviosa.

—nah, discutían a cada rato en el pasado, incluso se golpeaban hasta sacarse sangre, déjalas —y restandole importancia Hera se fue dejando al resto en ese ambiente tenso.

—m‐me voy a desmayar —pensó Asta sintiendo la presión.

—no has cambiado en nada —dijo Galatea moviendo un poco su hueso de su hombro el cual se había dislocado por la magia de Alfia escuchandose el sonido de un "crack" en el lugar haciendo que más de alguna pusiera una expresión de dolor.

—tú tampoco haz cambiado en nada, sigues siendo la misma boca floja perezosa e irresponsable de siempre —dijo Alfia con enojo.

—jeje creo que lo mejor sería calmarnos —pidió Astrea con una sonrisa nerviosa aunque fue ignorada.

La mirada de Galatea paso a una enojada al escuchar esas palabras de la peliplateada.

—¿Asi? pues esta perezosa e irresponsable como tú dices se hizo cargo del sobrino que tú abandonaste dándole el amor que necesitaba........idiota.

—......

—auch —fue el sonido que soltó Alise ya que hasta ella sintió esas palabras.

Mientras Bell al sentir como el ambiente se volvía cada vez más pesado tuvo la intención de detenerlas, no le gustaba verlas pelear de esa manera y lo peor de todo que ahora él tenía que ver con la discusión, no quería eso.

—.....

Alfia lentamente bajo la mirada tapando sus ojos con su cabello haciendo que más de alguna se asustara.

Se esperaban cualquier cosa, que lanzara un Gospel o que fuera a golpearla.

Sea lo que sea todas esperaban una batalla en ese lugar sintiendo como el ambiente se volvía más tenso y pesado.

—.....

Pero para sorpresa de todos Alfia simplemente se dio la vuelta y se fue caminando en dirección a las rejas de la sede que conectaban con la salida e irse de allí.

Al ver eso la mirada enojada de Galatea paso a una arrepentida al ver la manera en que reacciono Alfia.

—creo que eso si le dolió —susurro la pelimorada dándose cuenta que no midió sus palabras—. Esto es molesto y no se porque me empiezo a sentir mal cuando ella fue la que comenzó.

—y dicen ser adultas —susurro Noin.

—solo por hablar mañana cuadruplicare tú entrenamiento.

—para que hable —susurro la chica aceptando su destino.

Después de eso Galatea soltó un suspiro y empezó a caminar.

—no tengo más opción que ir a buscarla y hablar con ella —dijo con cansancio.

—por su expresión parecía muy enojada ¿Estará bien? —pregunto Alise preocupada.

—tranquila, la conozco desde hace años y se como manejarla —dijo estirando sus musculos—. Creo que es momento de tener una charla importante con Alfia, desde que llegó al pueblo no he hablado con ella seriamente, necesito saber unas cuantas cosas........y decirle unas cuantas verdades.

Después de eso volteo a ver a Bell el cual tenia una expresión preocupada.

—oye no te preocupes tontito —dijo con una leve sonrisa acercándose al albino y darle un abrazo—. Alfia y yo siempre hemos discutido, es algo normal para nosotras así que no pienses que nos hemos peleado o algo así porque te mencionamos, te conozco muy bien y se que te hechas la culpa de todos los problemas aunque no sea tú culpa.

—p‐pero.....

—solo tranquilízate conejo y déjale esto a tú linda maestra ya veras que cuando regrese todo estará solucionado.

Después de eso volteo a ver a todas las demás.

—y habló enserió con ustedes, descansen porque mañana aumentare el entrenamiento, he visto que ya se han acostumbrado al actual así que es hora de un cambio.

Algunas se pusieron nerviosos por eso pero otras como Alise y Neze pusieron una expresión de determinación listas para cualquier cosa.

—bien, volveré más tarde —dijo dándole un beso en la mejilla a Bell el cual se avergonzó—. Adiós.

Y con esas palabras Galatea se fue y salió de la sede dejando al resto en el patio de entrenamiento.

—¿Era necesario el beso en la mejilla? —pregunto Ryana un poco celosa.

—desde que dijo que era su esposa no me inspira confianza —susurro Neze con los ojos entrecerrados—. Siento que oculta algo.

—en eso tienes razón, nos está ocultando muchas cosas importantes —dijo Alise con una expresión seria—. Ya saben de lo que hablo ¿Cierto?.

—si, creo que ya se tardo en explicarlo —dijo Kaguya viendo el lugar donde se fue Galatea—. Y por lo visto mi suegra tampoco quiere hablar sobre ello.

—deja de llamarla así —pidió Neze no gustándole como sonaba eso, parecía como que Kaguya ya era la ganadora y eso la incomodaba.

—¿Porque? Tarde o temprano lo será aunque no le guste —dijo con una sonrisa divertida haciendo que más de alguna frunciera el ceño y Astrea sonriera con incomodidad.

—dejando de lado eso ¿De que están hablando? —pregunto Lyra extrañada—. ¿Que es lo que nos tiene que explicar Galatea?.

—pues algo importante —susurro Alise recordando lo que sucedió esa noche en que la familia Loki fue destruida.

"¡¿Sabes lo que hiciste?! ¡Bell era tú sobrino!".

Las que estuvieron presentes esperaban que en algún momento Galatea explicara esas palabras aunque no necesitaba mucha explicación pero aun así querían que Galatea contará la historia detrás de eso.

Pero los días fueron pasando y la mujer no habló sobre ello dejando a todas ellas con esa gran duda.

—creo que es más que obvio que tenemos que preguntarle nosotras directamente —dijo Kaguya—. Siento que nos enteraremos de cosas muy interesantes.

—si.....pero hay que hacerlo en secreto —susurro Alise volteando a ver a Bell al igual que el resto viendo al albino el cual estaba viendo el lugar donde se había ido su maestra y su tía—. Creo que lo quiere mantener en secreto de él.

—.....

—.....

—.....

—.....

Los segundos fueron pasando y las chicas seguían viendo a Bell el cual se había perdido en sus pensamientos haciendo que más de alguna notará algo.

—¿Soy yo o Bell se mira más maduro que cuando se unió a la familia? —pregunto Iska alzando una ceja.

—no eres la única —susurro Ryana—. Es más alto.

—antes eramos casi de la misma estatura y ahora es más alto que yo —dijo Neze.

—su cabello a crecido solo un poco —agregó Maryuu.

—su expresión también se siente distinta —dijo Noin.

—a aprendido a manejar la pólvora perfectamente —dijo Lyra.

—¿Y eso que tiene que ver con su apariencia? —pregunto Asta.

—en nada pero quería mencionarlo jeje.

—también su voz a cambiado un poco, la siento un poquito más grave —susurro Celty con timidez—. Me gusta su voz.

—es más musculoso —dijo Kaguya viendo a Bell de pies a cabeza con una sonrisa.

—su piel es un poco más pálida, es interesante —dijo Alise.

—......

Las chicas al ver que Ryuu no había dicho nada voltearon a verla.

—¿Que? —dijo la elfa confundida.

—¿No vas a a decir nada? —pregunto Noin.

—p‐pues no se que decir.

—di algo, al menos di que su ropa interior es más grande del lado delantero —dijo Lyra con una sonrisa divertida.

—¡¿Y porque iba a saber eso?! —grito la elfa muy avergonzada.

—porque tú robabas su ropa interior —recordó Iska.

—¡Solo fue una vez y fue un accidente!.

—aja —dijeron todas al mismo tiempo avergonzando más a su amiga.

Bell al escuchar los gritos salió de sus pensamientos y volteo a verlas.

—¿Sucede algo malo? —pregunto Bell extrañado ya que no escucho nada por estar discutiendo con su mente.

—solo estábamos hablando de lo guapo que te has puesto —elogio Kaguya con una sonría coqueta avergonzando a Bell.

—y sobre cuando Lion robaba tú ropa interior —agrego Lyra con diversión.

—¡¿Que?! —grito Bell sorprendido volteando a ver a la elfa—. ¡¿Es cierto Ryuu‐san?!.

—¡Cranel-san se que lo ha olvidado pero le explique todo en el pasado y usted me creyó! ¡Por favor, vuelva a creerme! —grito la avergonzanda elfa no queriendo que Bell la mire como una pervertida—. ¡Yo no robe nada!.

—no le creas Bell, eso te dijo en el pasado y siguió robando tú ropa interior.

—¡Lyra, cierra la boca mentirosa!.

—bueno, creo que ya se burlaron mucho de Ryuu así que entren a la sede para descansar, si Galatea dice que el entrenamiento de mañana será un infierno entonces es porque es cierto —dijo Astrea con una cálida sonrisa buscando alejar las burlas de la elfa.

—si Astrea-sama —aceptaron todos empezando a caminar a la sede, incluso Bell.

—Astrea-sama ¿Esta segura que la señorita Alfia y la señorita Galatea estarán bien? —pregunto Maryuu preocupada.

—ambas son mujeres adultas, sabrán solucionar cualquier problema que tengan —dijo Astrea aunque por dentro también se sentía nerviosa ya que no conocía del todo bien las personalidades de ambas mujeres pero según Hera esas discusiones entre ellas eran algo normal en el pasado.

Solo esperaba que si se llegaban a enfrentar no destruyeran parte de la ciudad, estaba segura que harían más daño que Evilus si no se controlaban.

—oye Bell.

En el camino a la sede Ryana se acercó al albino con una sonrisa tímida y a la vez ansiosa.

—¿Si?.

—¿Viste mi pelea? —pregunto con ilusión.

—claro, no me perdí ni un pequeño detalle —respondió haciendo que una sonrisa feliz apareciera en Ryana.

—¿Cómo lo hice? ¿Verdad que he mejorado? Honestamente creí que perdería el combate pero logré la victoria en el último momento, jeje aun no puedo creerlo.

—estuviste increíble Ryana, esa variante de tú magia de fuego fue muy poderosa, de verdad me sorprendió —dijo Bell honestamente—. Te haz vuelto muy fuerte.

Una pequeña sonrisa adornada con un sonrojo apareció en el rostro se Ryana feliz por esas palabras.

—pero como dice la señorita Alfia aun me falta mucho para mejorar pero no me rendiré —dijo con determinación.

—y yo estaré allí apoyándote.

—gracias Bell —susurro acercándose un poco más a él—. Y b‐bueno, no se si lo recuerdas pero tú y yo antes cocinabamos juntos, eramos compañeros de cocina.

—si, tengo muchos recuerdos sobre ello, era agradable.

—¡¿Enserio?! Porque me estaba preguntando si un día de estos tú y yo volviéramos a cocinar juntos como los viejos tiempos, no se que te parece —propuso con timidez esperando que aceptara.

—b‐bueno, la verdad no se si he perdido mis habilidades para cocinar así que espero no ser un estorbo.

—¿Eso es un si?.

Como respuesta Bell asintió levemente viendo como los ojos de la chica brillaron.

—¡Bien! He estado investigando sobre muchos platillos para preparar juntos, será increíble —dijo notándose en sus ojos la ilusión de volver a esos momentos con Bell.

Ryana ya lo había decidido, quizás en el pasado cuando tuvo la oportunidad de confesarse se echo para atrás en el último momento pero ahora sería distinto.

Ya había sentido una vez el horrible sentimiento de perderlo sin decirle lo mucho que lo quería así que no volvería a cometer el mismo error.

Al igual que sus amigas ella también se esforzaria para ser parte de su corazón de una manera más que amistad.

—estaba pensando en preparar algún platillo picante juntos o quizás un postre —decía Ryana con emoción.

"Le hace feliz estar junto a un psicópata".

—callate.

—¿Eh? ¿Que? —pregunto Ryana dolida y triste al escuchar lo que había dicho el albino.

—¿Eh?.......¡NO! ¡No era a tí Ryana! —grito Bell asustado no queriendo que la chica pensara cosas equivocadas—. L‐Lo que pasa es que una abeja pasó cerca de mi y fue molesta.

—oh eso jeje por un momento me asuste pensando que te estaba fastidiando —rio Ryana avergonzada y aliviada de haberse equivocado.

"Jajaja".

—maldito idiota —pensó Bell enojado ya que estuvo a punto de lastimar a alguien muy querido para él por esa estúpida voz.

—como te decía, he estado investigando muchos platillos que podemos preparar juntos, quizás podamos sorprender a tú abuela con un delicioso platillo, de seguro le encantará —volvió a hablar volviendo a su actitud animada—. ¿Que tipo de platillos le gustan a tú abuela?.

—pues —Bell al escuchar que Ryana estaba hablando otra vez decidió ignorar esa molesta voz y poner su atención en la chica—. Pues hay muchos platillos la verdad.

—te escucho —dijo para después pensar unas palabras—. No voy a cometer el mismo error que Kaguya, me voy a esforzar para caerle bien a Hera‐sama y que me apruebe como futura pareja de Bell.

Al pensar eso volteo a ver a la oriental la cual la observaba de reojo con una pequeña sonrisita típica de ella.

—sigue riendo Kaguya, ya veras más adelante —pensó la chica.

—jaja bien Ryana, dejaré que hagas tus cosas con Bell, después de todo yo estoy cien pasos adelantada a todas ustedes —pensó la oriental con una sonrisa confiada—. Dejare que te robes la atención de Bell por un rato.

—esa confianza tuya te llevará a la ruina —pensó Ryana con los ojos entrecerrados—. Mañana te voy a retar a un duelo y te voy a derrotar delante de Bell.

—yo no soy Iska, te voy a machacar en el momento en que empieces a cantar tú magia, pero mira el lado bueno, Bell estará contigo consolandote por esa aplastante derrota —pensó Kaguya con burla.

—eso ya lo veremos.

—yo también me uno a la competencia.

Kaguya y Ryana se extrañaron al escuchar una tercera voz en su platica mental viendo como Alise las miraba con una sonrisa de emoción.

—¡Yo también quiero impresionar a Bell!.

—.....

—.....

—.....

—solo competiremos las personas que recuerda Bell, solo esperemos que se vaya Alise.

—si.

Una estaca se clavo en el corazón de la pelirroja al escuchar esas palabras de sus dos amigas.

—graciosas, cuando menos sientan estaré en  un altar con un vestido de novia al lado de Bell y ustedes serán espectadoras.

—y después te llegarán diciendo que no te tomaste las pastillas de la esquizofrenia.

—¡Callate Ryana!.

Mientras Lyra solo observaba con una gotita estilo anime como Ryana, Kaguya y Alise se observaban fijamente entre ellas con rayos saliendo de sus ojos, parecía que estaban hablando de forma telepática.

—que raro —pensó la hobbit—. Y gracioso.

—¡HOLA!.

En eso antes de que todos entraron a la sede alguien los llamo desde las rejas captando su atención.

Al dirigir su mirada a ese lugar vieron a la sonriente Ardee saludandolos con un libro en sus manos.

—Ardee —susurro Astrea caminando hacia las rejas para dejarla pasar—. Ya te he dicho muchas veces que no hace falta que esperes a que alguien venga a abrir las rejas para que puedas pasar, esta también es tú casa así que puedes entrar libremente.

—jeje lo siento, es la costumbre —se disculpo con una sonrisa.

—por cierto ¿Porque no te presentaste al entrenamiento de hoy? —pregunto Astrea curiosa.

—perdón por faltar pero hoy Shakti‐nee me pido ayudar a encontrar la puerta del Knossos.

—¿Y tuvieron suerte?.

—no, ya casi hemos visto todo Dedalo y seguimos sin encontrarla ¡Pero estoy segura que pronto daremos con su guarida! —exclamo con determinación—. Solo espero no haberme quedado atrás con el entrenamiento de hoy.

—¿Cuál entrenamiento? Si lo único que recibe son clases teóricas de la maestra —susurro Asta con los ojos entrecerrados.

—preferencia —susurro Noin con envidia ya que ella recibía mucho entrenamiento por el más mínimo error que cometía como el de ahora.

—por cierto ¿A que se debe tú visita? —volvió a preguntar Astrea.

—¡Cierto!.

Con emoción Ardee camino hacia al grupo, precisamente hacia donde estaba Bell y le mostró el libro que tenía en sus manos.

—¡Mira! Estaba en oferta en la tienda —dijo con emoción.

Bell solo se acercó un poco para ver el título notando que era una historia de Argonauta, precisamente una versión extendida contando historias que no estaban en otros libros, según el escritor eran aventuras verdaderas del héroe.

—oh —susurro Bell con sorpresa.

—cuando lo vi no pude evitar comprarlo, siento que estará increíble —dijo con un brillo en los ojos—. Y dado que a los dos nos gusta el mismo cuento pues pensaba que podíamos leerlo juntos, antes que todo esto sucediera tú y yo leíamos juntos, me gustaría volver a esos momentos la verdad.

Los ojos de Ardee brillaban esperando que Bell aceptara, de verdad quería leer junto con Bell y que él fuera recuperando muchos más recuerdos sobre ella y volver a tener esa relación especial que tenían en el pasado.

—me parece bien —acepto Bell queriendo también leer ese cuento junto con Ardee.

—¡Bien! —celebró la chica—. Astrea-sama ¿No hay problema si Bell y yo nos quedamos en la sala leyendo?.

—para nada.

—¡Entonces vamos!.

Y tomando la mano de Bell corrieron juntos dentro de la sede e ir a la sala dejando al resto en la entrada.

—perfecto, no está en todo el día y viene y se lleva a Bell como si nada —dijo Neze sintiéndose un poco celosa ya que ella no había estado por mucho tiempo a solas con Bell desde que regreso con ellas, estaba segura que ni siquiera recordaba lo que sucedió ese día en el calabozo y eso le dolía.

"Te amo Neze".

—¿Acaso lo olvido? —pensó desanimada notándose en sus orejas que cayeron un poco.

—Ardee siempre tiene algo raro a su alrededor, no se, es como si dice que la sigamos y sin darnos cuenta ya la estamos siguiendo —susurro Ryuu—. Es raro, siempre le terminaba siguiendo el juego aunque no quisiera.

A los recuerdos de Ryuu llegaron aquella vez en las que ambas bailaron en medio de la calle en la Era Oscura, aunque no quería lo termino haciendo.

—es de temer —dijo Ryana.

—mmm pueden leer tantos cuentos como quiera, no me molesta —dijo Kaguya entrando a la sede para poder darse una ducha.

—mírala, actuando tranquila y de seguro esta nerviosa —susurro Alise con los ojos entrecerrados.

—es normal en ella queriendo ocultar esos sentimientos —dijo Lyra entrando también a la sede.

Poco a poco las demás fueron entrando a la sede y poder descansar de ese largo día.

—¿Esta segura que no pasará nada malo? —pregunto Maryuu aunque preocupada a su diosa—. Siento miedo de lo que pueda suceder entre la señorita Galatea y la señorita Alfia.

—tranquila, no sucederá nada malo......espero.

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De pie en un tejado de un edificio algo alto cierta mujer de cabello plateado estaba de pie observando la ciudad y el cielo el cual ya estaba de un color anaranjado señal que pronto anocheceria.

—.....

El sonido de unos pasos atrás de ella se escucharon, no le hizo falta darse la vuelta para saber quien era.

—¿Que quieres Galatea? —pregunto Alfia no quitando la mirada de la ciudad.

—Alfia —susurro la pelimorada parándose a un lado de ella y ver la ciudad—. Vengo darte una disculpa

—¿Porque?.

—una disculpa por haberte dicho tus verdades.

—estas pidiendo a gritos que te lance otro Gospel —dijo Alfia con una vena en la frente.

—jaja necesitas por lo menos unos diez Gospel para dejarme fuera de combate, aunque sea un nivel inferior soy muy resistente y rápida —rio la mujer con burla.

—me habia olvidado de lo odiasa que era tú personalidad.

—gracias —dijo con una sonrisa—. Pero ya enserió, lo siento por decirte esas palabras, no creí que te fueran a doler tanto.

—callate.

Galatea solo sonrió levemente al ver a Alfia para después sentarse en la orilla del tejado y seguir hablando mientras miraba la ciudad.

—no se porque te fuiste Alfia y te negaste a cuidar a Bell, jamás lo entenderé —susurro la pelimorada.

—......

—siempre odie eso —dijo bajando la mirada—. Cuando Bell nació todo se volvió muy animado en la sede, era el pequeño bebé consentido de todas las chicas de la familia, aun recuerdo cuando lo cargue en mis brazos cuando nació, era tan tierno y la vez tan frágil.

—......

—pero por alguna razón tú siempre lo evitaste, nunca lo cargaste aunque sea una vez, todas en la familia lo cargaron, incluso los miembros de la familia Zeus ¡Demonios! Incluso Sava lo cargo a pesar que en ese momento ya era un maldito psicópata asesino.

—¿Sava? —dijo Alfia extrañada.

—no se los detalles, Silver me lo dijo una vez aunque no se como sucedieron las cosas.

—¿Es enserio? ¿Que tenía en la cabeza ese idiota para dejar que el mayor asesino de ese entonces lo cargará? —pregunto Alfia con enojo.

—no lo se y por esa misma estupidez fue que le di un potente puñetazo por poner al pequeño Bell en peligro —dijo satisfecha por haber hecho eso—. Pero ese no es el punto, el punto es que tú jamás lo cargaste.

—simplemente no me dio la gana —dijo cruzada de brazos.

—eso es mentira, se muy bien que hay algo detrás de todo eso —dijo volteando a verla—. Siempre me enojo ese lado de tí.

—.....

—y un año después nuestra familia cayó en batalla junto a la familia Zeus ante el dragón negro, aun no se como mierda pude sobrevivir a esa batalla —dijo frustrada—. Bell estaba cerca de cumplir un año y la condición de Meteria ya era crítica, incluso había empeorado al enterarse de la muerte de Silver.

Por las calles un hombre le robo un bolso a una anciana y se echo a correr pero Galatea rompiendo un pequeño pedazo del tejado lo lanzo con mucha fuerza dándole al hombre en la cabeza dejandolo inconsciente.

Después de eso siguió platicando.

—la ciudad ya había decidido nuestro exilió, las pocas sobrevivientes ya se habían ido de la ciudad y yo también estaba a punto de irme pero decidí quedarme un día más en la sede ya que Meteria estaba cerca de morir.

Alfia apretó los puños con tristeza y frustración al recordar esa día.

Aun lo recordaba, Meteria estaba en su cama cerca de la muerte con Bell en sus brazos y en esa misma habitación estaba ella, Hera, Zeus, Galatea y una chica más de la familia haciéndole compañía a Meteria en sus últimos momentos.

—¿Recuerdas las palabras que dijo Meteria antes de morir? —pregunto Galatea.

—......

—responde la maldita pregunta.

—......

—¿Es enserió? —pregunto Galatea viéndola con una sonrisa fingida—. ¿Quieres que te las recuerde?.

—cuida a Bell —susurro Alfia.

—¿El que?.

—cuida a Bell.......eso fue lo último que me dijo antes de morir —susurro la mujer apretando sus puños.

—así que lo recuerdas —dijo volviendo a bajar la mirada—. Cuando Meteria murió decidí que ya era momento en que tenía que irme de la ciudad, estaba un poco dudosa de dejar a Bell contigo pero sabía que Hera también lo cuidaría así que me quedé tranquila, además que Meteria te lo pidió y sabía muy bien que la adorabas así que dudaba que no lo hicieras.

—.......

—así que inicie mi viaje por el mundo que estuvo muy aburrido por cierto, lo único interesante fue que conocí a la diosa Artemisa y a sus hijas, me quedé viajando con ellas por unos cuantos meses para después tomar mi propio camino otra vez.

—......

—pero años después llego a un pueblo y me entero que un niño de cabello blanco y una mujer malhumorada vivían en la montaña cercana, en ese momento pensé que eran tú y Bell así que decidí hacerles una visita, las descripciones coincidían así que no podía equivocarme.

—......

—y al llegar a esa montaña me encuentro a Hera sentada en el césped junto con Bell leyéndole un libro de héroes, era una escena linda ya que Hera estaba sonriendo de una forma maternal, jamás creí verla así.....y como ya lo sabes, no había ningún rastro de esa Alfia.

—.....

—Hera me dijo que después de la muerte de Meteria tú te habías ido un día después sin decirle nada a nadie dejando a Bell........cuando me dijo esas palabras no tienes ni idea de las inmensas ganas que me dieron de partirte la cara.

—......

—¿Acaso no te importaron las últimas palabras de Meteria?.

—si tanto te importaba ¿Porque no lo criaste tú?.

—¡Porque tú eres su maldita tía! —grito Galatea poniéndose de pie y encarando a Alfia—. ¡Bell necesitaba una figura materna y que mejor que tú para serlo ya que también lleva tú sangre! ¡Yo no podía tomar ese papel cuando Meteria te lo pidió a tí personalmente!.

—no grites.

—¡Me importa una mierda que no quieras que grite! ¡¿Que querías que le dijera a Bell cuando me hiciera esa pregunta?! "Oye mamá, ¿Porque tú tienes el cabello morado y yo blanco, no nos parecemos en nada?".

—.......

—¡¿Que mierda le diría?! "¡Oye Bell lo siento pero no soy tú mamá, solo tienes dos familiares vivos, uno es un maldito psicópata que está encerrado en la cárcel y la otra es una maldita cobarde la cual te abandono importandole una mierda las últimas palabras de su hermana!".

Al decir esas palabras Alfia sin avisar lanzo un puñetazo al rostro de Galatea dándole de lleno haciendo que retrocediera unos pasos.

—......

Lentamente Galatea llevo la mano a su boca y se limpio un hilo de sangre que bajaba lentamente.

—me golpeas porque sabes que es verdad lo que digo.

—callate.

—estuve junto a Bell gran parte de toda su infancia, lo crié, lo aconseje, lo consolé en sus momentos más difíciles.

Galatea recordó aquel amargo recuerdo de Bell llorando con fuerza por haber perdido a su amiga Hana frente a sus ojos sin poder hacer nada, recordar eso siempre le dolía.

—talvez llegue seis años tarde a su vida pero cuando vi su rostro inocente ese día que llegue a su hogar y preguntarme "¿Quien es usted?" fue cuando tome la decisión de no irme de allí y quedarme siempre a su lado cuidándolo y tomar el rol que tú no quisiste aunque no quería ser su madre, quería ser una especie de hermana mayor aunque el me empezó a llamar "maestra". No me quejo la verdad.

—.....

—¿Porque Alfia? ¿Porque lo abandonaste a pesar que Meteria te lo pidió? —pregunto dejando su ira inicial y relajarse.

—.....

—¿Acaso tenias miedo por tú enfermedad? ¿Tenías miedo de tomarle cariño y dejarlo por tú enfermedad?.

—......

—pero ahora te miro bien ¿Encontraste alguna cura en tú viaje?.

—.......algo así —susurro la mujer apartando la mirada.

—Alfia......puedo ver en tus ojos que estas arrepentida, esa es la razón por la cual no te haz acercado a hablar con Bell desde que llegamos ¿Cierto?.

—no me vengas con tus estúpidas terapias, detesto ese lado de tí —dijo sabiendo que Galatea empezaría con sus típicos consejos—. Actúas como si fueras alguien sabía.

—es porque lo soy, en el pasado cuando discutías con Meteria yo siempre hablaba contigo sobre ello y después de la platica ibas directamente hacia Meteria para pedirle disculpas, era gracioso.

—lo único que hacías era entrometerte.

—jeje pero gracias a mi sus peleas y ley del hielo no duraban más de una hora —dijo con nostalgia—. La querías tanto y aún así abandonaste el único recuerdo que dejó.

—.....

—escucha, tal vez estoy enojada, muy enojada por lo que hiciste y la única razón por la cual retuve todo eso fue por Bell, no quería incomodarlo con una discusión pero al final me obligaste a hacerlo —dijo soltando un suspiro cansado—. Si no quieres explicarme nada pues no lo hagas pero por lo menos te pido que hables con Bell, puedo ver en tus ojos que tienes un gran deseo de hablar con él pero no lo haces, no lo hagas por mi o por él, hazlo por Meteria que de seguro ha estado todos estos años queriéndote dar un golpe porque no cumpliste su última voluntad.

—callate.

—si llegaste a esta ciudad por la supuesta muerte de Bell es porque él te importa aunque no lo demuestres.

—.......

—jeje eres muy orgullosa, me recuerdas a Kaguya en ese aspecto la verdad.

—no me compares con esa oriental de cuarta —susurro Alfia con enojo.

—vaya, así que no te cae bien, adivino, es porque le dijo suegra a Hera ¿Cierto? Pues no te culpo, yo también siento cierta molestia que libero en las palizas de entrenamiento aunque debo de admitir que tuvo valor de decirle eso a Hera aunque desgraciadamente bajo muchos puntos.

—es odiosa.

—y lo peor es que se parecen en su lado orgulloso.

—.....

—bueno, dejando eso de lado habla con Bell, ya si después quieres explicarme porque lo abandonaste pues te escucharé con todo el gusto del mundo pero si o si tienes que hablar con él, espero que lo hagas Alfia.

—deja de hablar como si fueras mi madre regañandome —dijo con molestia.

—jajaja soy cuatro años mayor que tú asi que es mi deber aconsejar a los más jóvenes.

—.....

Alfia solo vio con fastidio a Galatea para después darse la vuelta para irse de allí.

—Oye Alfia.

—¿Que?.

La peliplateada al escuchar que Galatea la llamo se dio lentamente la vuelta para verla.

Y en el momento en que se dio la vuelta recibió un potente puñetazo en el rostro haciendo que retrocediera unos cuantos pasos.

—.......

Alfia quedo en shock sintiendo el dolor en su mejilla mientras un hilo de sangre bajaba por su boca viendo a Galatea la cual tenia su puño extendido.

—hay tres razones por las cuales te di ese puñetazo, la primera por el Gospel que me lanzaste en el campo de entrenamiento, la segunda por el puñetazo que me diste aquí y la tercera y es por la que si o si te lo merecías es por abandonar a Bell —dijo con una sonrisa de burla—. Pocos tienen la fortuna de golpear a la poderosa Alfia y yo soy una de ell.....

Antes de que Galatea terminara sus palabras recibió un fuerte puñetazo el cual la mando directamente al suelo.

—última vez que me golpeas —susurro Alfia con enojo.

—.......

Galatea se puso de pie lentamente escupiendo un poco de sangre y ver también enojada a Alfia.

—maldita, hoy si ya sacaste boleto —dijo la pelimorada con enojo tronando sus nudillos.

Con gran rapidez Galatea lanzo un fuerte puñetazo hacia Alfia la cual lo logró esquivar  pero no se espero que la pelimorada estirara su mano para tomarla con fuerza del cabello y jalar con fuerza hacia atrás para después estamparla con fuerza en el tejado.

—¿Que te pareció eso niña intocable? —pregunto Galatea con burla y segundos después sintió como la palma de Alfia se poso en su estomago—. ¿Eh?.

—Gospel.

Como un proyectil la pelimorada salio volando varios metros chocando en varios tejados hasta detenerse en uno con dolor en su estomago.

Lentamente Alfia se fue poniendo de pie con su cabello desarreglado ya que Galatea lo arruino cuando la estampó contra el suelo teniendo también roja su frente.

—Gospel esto y Gospel lo otro —susurro Galatea poniéndose lentamente de pie—. No eres ni mierda sin esa magia.

—¿Asi? Voy a barrer el piso contigo solo con mi fuerza —dijo Alfia con enojo al escuchar esas palabras.

—acércate vieja bruja.

Con gran velocidad Alfia corrió hacia Galatea la cual lanzo un rapido puñetazo conectando en el rostro de Alfia pero a la vez está lanzo una potente patada al estómago de la pelimorada saliendo ambas volando a distintas direcciones.

Aunque ambas parecían que estaban luchando en serio con todo su poder la verdad era que no lo estaban.

Simplemente era una "simple" pelea entre ellas, algo normal como dijo Hera.

Ninguna buscaba hacerle un daño grave a la otra, solo querían conectar su puño y ya.

Como dirían algunos, solo estaban jugando.

Pero a las personas civiles no les parecía eso viendo como los tejados salían volando por todos lados y dos bellas mujeres se movían a grandes velocidades por todos lados causando grandes ráfagas de viento con cada puñetazo que lanzaban.

Por un momento todos pensaron que era otro ataque de Evilus aunque estaban muy equivocados.

—.........¿Las detenemos? —pregunto un miembro de la familia Ganesha a lo lejos viendo a ambas batallar.

—eeeeeeeeeh —el otro dudoso las siguió observando viendo los potentes puñetazos que se lanzaban entre ellas—. Nah......es una discusión entre mujeres, es de ley no meterse en esas cosas.

—eso, eso —dijo el otro con una sonrisa nerviosa.

Galatea salió volando e impacto con un poste metálico mientras Alfia caía de pie en la calle con su cabello completamente desarreglado y con marcas de puñetazos en su rostro al igual que Galatea aunque esta estaba en peor estado.

—¿Que te pasa? Siento que eres más lenta que años atrás —pregunto la pelimorada con burla—. Aunque sea una batalla amistosa es raro que te conecte tantos golpes aunque no me quejo la verdad, aun hay muchos más que quiero darte.

—graciosa —susurro de mal humor lanzándose otra vez al ataque al igual que Galatea.

La pelea amistosa entre ellas dos iba para largo.

===Fin del capítulo===

Bueno aquí termina el capítulo de hoy espero que les haya gustado si es así voten y comenten que les pareció ya que eso me motiva a seguir escribiendo.

Se que muchos han de haber pensado que es absurdo que Galatea le pueda hacer daño a Alfia ya que esta podría derrotarla en cuestión de segundos ya que Alfia incluso le hacía frente a niveles nueve pero como dije en el transcurso del capítulo ella se estaba conteniendo ya que era una discusión "amistosa" entre ambas y si aun creen que es absurdo pues más adelante se explicaran algunas cosas.

Y otro detalle más es que.......creo que esta historia será mucho más larga de lo que tenía pensado, espero que cuando ya esté cerca del final no se hayan ido todos los lectores y queden solo dos, se que es tedioso leer historias largas pero con esta historia tengo muchas ideas que simplemente no quiero hacer las cosas apresuradas e incompletas para que al final quede mal, quiero llevarlo medianamente bien así que espero entiendan.

Esa es la razón por la cual intento sacar dos o tres capítulos por semana, para que no sientan eterna la historia, aunque sacrifique horas de sueño.

Sin más que decir me despido adiós cuídense y no tomen drogas.

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Asta.

Celty.

Noin.

Lyra.

Iska.

Ardee.

Kaguya.

Astrea.

Maryuu.

Alise.

Ryana.

Ryuu.

Neze.

En algún futuro no tan lejano........