☀️ ፧ 𝘃𝗲𝗶𝗻𝘁𝗲 • ✦⁾
✦ #20 — sᴄᴇɴᴇ
╴ ╴ ╴ ╴ ╴ ╴ ╴╴ ╴ ╴ ╴ ╴ ╴
—¡Estoy aquí! —gritó Beomgyu, pasando el umbral de la puerta con los brazos abiertos, seguido de Soobin, pero antes de seguir hablando, se calló.
Aquella escena fue... simplemente impresionante, dejándole una mueca de horror en su cara.
No, inesperada, o quien sabe, hasta un poco turbia.
La manera en como Riki y Sunoo estaban acurrucados en la cama del pelirosa le resultó inquietante y a su vez sorpresiva.
Y es que Sunoo se veía tan cómodo en el pecho de Riki, mientras éste lo atraía hacia él con su mano en su cintura, parecía simplemente mentira.
Se veía calmado, respiraba tan tranquilo, incluso parecía no querer soltarlo, y Riki... él se veía disfrutando del momento.
Esa misma mañana el mismo Sunoo estaba regañado por haber quedado al cuidado de Riki, y ahora estaban dormidos, y acurrucados cual pareja.
Incluso Soobin que sabía de la situación gracias a Beomgyu, estaba horrorizado de ver a su mejor amigo en esa escena.
Por poco y pide un poco de insulina para él y Beomgyu.
¿Qué se habían perdido?
. . . . . . . . . . . . . . . . ꒰ ☁︎ ꒱ ,, ⌲
Como no quisieron despertar a Sunoo, Soobin se encargó de despertar a Riki, para que se levantara y se fueran a su dormitorio.
Con sumo cuidado, Beomgyu sostuvo a Sunoo, mientras Riki se levantaba, una vez que se quitó, Beomgyu lo dejó abrazando una almohada para que volviera a acomodarse.
Riki le dió una última mirada a Sunoo, mientras escuchaba los chasquidos de un beso de despedida entre Soobin y el Choi menor, ni siquiera le dieron ganas de voltear.
Se veía tan plácido durmiendo, que por un momento casi se devuelve a dormir junto a él.
Una sonrisa y un suspiro enamorados salieron de Riki, era inevitable no enamorarse de aquel chico.
Todo le fue pausado por la mano de Soobin en el hombro, indicándole que tenían que irse.
Cuando estuvo en la puerta, se despidió de Beomgyu mientras éste le decía “Gracias por cuidar a Sunnie”, y él le respondía “No es nada, cuando quieras”.
Y obviamente lo haría sin renegar.
Caminó junto a Soobin con una sonrisa en sus labios.
Había tenido una mañana muy linda con Sunoo, simplemente se sentía en las nubes.
¡Incluso le preparó un sándwich con juguito de fresa!
Podía casarse ya mismo si Sunoo se lo pedía.
—¿Y bueno? —la voz de Soobin lo sacó de sus pensamientos—. ¿Ya me vas a decir cómo estuvo?
—¿Quieres el resumen o a detalle?
—Si es muy meloso, haz el resumen —dijo con una mueca de asco.
—Se lo dices al que casi le da diabetes por culpa tuya y de Beomgyu, idiota —quejó Riki.
Soobin le miró mal—. Habla antes de que me arrepienta de haber preguntado cómo estuvo tu día con el niño.
Nishimura rodó los ojos—. En la mañana estuvo rebelde, según Park eso iba a ser normal durante unos días, hasta que comenzó a buscar su celular. Tuvimos algo así como que un acercamiento, le bajó todo el berrinche de una vez.
—¡Te lo cogiste, Nishimura Rik-
El mencionado le tapó la boca a Soobin con su mano, callándole las quejas por lo que estaba haciendo.
Lo había gritado en medio pasillo, y unas cuántas personas voltearon a ellos.
Riki apartó su mano cuando sintió la saliva de Soobin en su palma, limpiándose en su pantalón con una mueca de asco.
—¡Por qué me callaste así, imbécil! —espetó mientras volvían a caminar.
Riki rió—. ¿Y qué querías que hiciera? ¿Besarte?
El otro le quiso seguir el juego—. No hubiera sido malo.
Riki hizo una mueca, y Soobin soltó una carcajada.
—Asco, mejor sigo hablando.
El otro rió, pero más bajo.
Riki suspiró—. No me lo cogí, descerebrado, fue un acercamiento, estuvimos cerca, nada más. Después le pregunté si tenían para comer, y terminó haciéndonos un sándwich. Todo normal.
—¿Y cómo fue que terminaron durmiendo así?
—Me habló porque le dolía un poco la cabeza, le dí la pastilla que me dijo, y al rato se quedó dormido, no sé, seguro daba sueño, entonces yo me recosté a su lado y de pronto me abrazó.
—Y claramente tú no ibas a quitarte y te dormiste también —continuó Soobin en un tono obvio, Riki asintió—. Bueno, algo es algo.
—Ojalá me dejen cuidarlo más seguido —dijo con una sonrisa.
—Mañana tienes que verlo otra vez, Romeo —le detuvo—. Mañana vuelves a clase, y él también.
Riki rodó sus ojos y siguió caminando seguido de Soobin.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top