Bakugou.

Mierda.

Esa era la única palabra que se había formulado en mi cabeza al abrir los ojos. No recordaba absolutamente nada de lo ocurrido, solo sabía que había salido a "tomar aire", al menos eso fue lo que le dije al resto.

La realidad distaba mucho de ser así. Mientras esperaba a que Deku regresara, había recibido una llamada de la bastarda de Yoki, basto salir y caminar hacia el lugar donde la estúpida me indico, y el negro se apodero de mi vista.

Y ahora me encontraba en una habitación desconocida y no mentiré, estaba cagado de miedo, ¿A qué mierda de enfermo le gustaría despertar en una cama ajena cuando únicamente fuiste a tomar aire? En serio, que puta mierda.

Solté un suspiro, alterarme o sacar conclusiones no serviría de nada. No parecía tener ninguna herida física, conservaba los recuerdos y sobretodo tampoco aparentaba estar esposado, decidí crear una explosión leve que no llamara la atención solo para comprobar que mi quirk permanecía completamente intacto.

Y efectivamente, estaba en orden. ¿Por qué mierda me había dormido la estúpida esa?

Algo enfadado, me dispuse a bajarme de la cama, le eche un vistazo a la casa, esta estaba sucia, sus paredes manchadas llenas de telarañas delataban que no había vivido gente por un largo tiempo. ¿Dónde estaba...? Decidí observar dentro de los pocos muebles que había, pero nada. Ni siquiera había algo en las cajas, todo eran cosas inservibles.

Cerré mis ojos intentando tranquilizarme, y recordé que tenía mi celular, revise mis bolsillos, maldición, la maldita me lo saco. Al final, opte por salir con cuidado de la habitación, todo parecía completamente vació y sucio...

La sensación que generaba era lo más similar a estar atrapado en una película de terror, donde sabes que mires por donde mires no hay salida que valga, porque en cada salida, se encuentra tu verdugo.

Al llegar a lo que aprecia ser la sala de estar, la vi. Estaba vestida de manera casual, mientras a su lado, su traje de villano se encontraba prolijamente doblado.

-Despertaste.

-¿Que mierda hago aquí?

-Toma asiento.-Respondió dedicándome una sonrisa.- ¿Quieres té? Prepare un poco.-Respondió dedicándome una sonrisa. Simplemente me acerque y tome asiento frente a ella, mientras, con una delicadeza increíble esta servía algo de té en aquella taza que relucía de limpia a diferencia de la pocilga de casa en la que me encontraba. La observe cruzándome de brazos.

¿La imbécil me trajo para una fiesta de té? ¿Qué mierda planea?

-No te preocupes, no está envenenado. Si quisiera matarte o hacerte algo, ni siquiera estaríamos hablando.

-¿Por qué me dejaste inconsciente?

-No vendrías aquí sin chillar, y me descubrirían, preferí, usar métodos no muy bien vistos.

-Me secuestraste.

-Puedes llamarlo así si quieres.-Susurro.-Lo lamento. La verdad, soy muy egoísta, y quiero hablar de una historia que me persigue y justamente tú me debes una charla, siento que tú más que nadie tienes la respuesta que busco. Así que por favor, disfruta la comida, y guarda silencio. Solo necesitas oírme... ¿Crees poder hacerlo?

-Vete a la mierda y habla.-Murmuré, tomando con duda la taza de té y dándole un sorbo. Solo esta vez, confiaría en esta perra. Ella sonrió y asintió.

-Hace un tiempo alguien vivió en esta casa. Era una familia muy pequeña pero feliz. La madre, era una mujer fuerte y valiente, una heroína, ella llegaba agotada a casa, pero siempre sonreía. El padre, un hombre honesto de trabajo humilde, siempre dispuesto ayudar, aunque ambos pelearan en ocasiones, se amaban, y amaban al fruto de su amor, una pequeña niña.

¿Por qué mierda me contaba esto? No sabía con exactitud el motivo, pero...me daba mala espina.

-La madre era una mujer que realmente amaba ser heroína, pese a que su trabajo era más dedicado a los interrogatorios. Sin embargo un día, necesitaban apoyo, un villano fuerte estaba atacando, el héroe de turno estaba herido, y ella estaba cerca, los refuerzos tardarían...Ella decidió ayudar a los civiles y al héroe. Ese día ella nunca regreso a casa, la hija solamente esperaba observando por la ventana...Hasta que escucho a su padre gritar y romper en llanto, se acercó y ambos compartieron miradas. Y en ese momento ella lo supo, su madre nunca volvería.

-Detente.-Murmuré.- ¿A qué quieres llegar?

-El estado les dio dinero, y los héroes y civiles guardaron luto. A las semanas todo siguió igual. El mundo continuo, y la olvidaron...El dinero acabo y el padre intento mantener a su rota familia, cargaba su dolor en sus hombros, sonreía por el bien de su hija y cargaba el cansancio en bolsas bajo sus ojos...Ella lo oía llorar noche tras noche.

-¿Por qué me cuentas esto?-Murmuré sintiendo un sabor amargo recorrer mi garganta.

- Ella soñaba con ser una heroína como su mamá, pero lo guardaba para sí misma tras la muerte de su madre, porque cuando lo decía, su padre lloraba...Y ella odiaba eso. Un día, como si de una cruel broma se tratase, un villano ataco la zona, muchas casas se quemaron, y entre ellas la casa de la niña...El fuegos se extendía y ella buscaba entre el humo a su papá...Un héroe la salvo... Las cámaras inundaron la escena, y la niña gritaba desesperada por su padre, rogaba que lo salvaran... El fuego lo consumió todo, y el héroe se disculpó por llegar tarde, intento consolarla con palabras vacías. Solo se lucia frente a las cámaras, y ella lo sabía...Cuando el fuego se apagó, ella supo que su padre ya no estaría ahí, y observo con horror como el héroe posaba y presumía haberla rescatado...

Guarde silencio unos momentos observándola...La amargura con la que relataba tal historia era una que conocía, era el tipo de amargura de que te quema por dentro...El dolor callado durante años...

-Ella huyo, nadie la busco realmente, estuvo en la calle durante días, llorando, huyendo, llego a estar en un grupo que la acepto, pero ella termino alejándose al sentirse una carga. Un día...La atacaron, ella sintió que moriría, pero alguien llego y la salvo. Él pensaba marcharse, pero ella lo siguió, y él se molestó, ella le pidió que la dejara acompañarlo, quizás, porque se sentía perdida y sola. En la acepto; ella aprendió su filosofía, él le enseño a pelear y defenderse y después de mucho tiempo la niña se sintió en casa, comenzó a trabajar y con su primer sueldo alquilo un lugar. Se presentó un día, con su nombre real ante la policía para reclamar su destruido hogar, y como había registros de lo que paso, el estado le dio dinero, y ella reparo su antiguo hogar...Pero nunca se mudó, porque sentía tan vividos los crueles recuerdos. Y la casa quedo abandonada, luego de construirse...Continuo trabajando y viviendo en aquel lugar alquilado, visitando a quien la había cuidado, su trabajo, no era por que sí. Para retribuirle un poco a su tutor, ella decidió trabajar en un lugar con héroes, aun si dentro de ella, una parte de ella los odiaba y la otra los admiraba.

La observe con atención, su cabeza se encontraba gacha, apartando entre sus manos aquella taza de té. Pase la lengua por mis labios al sentirlos resecos, y observo el té en la mesa...Por alguna razón, ya no me apetecía beberlo.

- Ella aún no había descubierto su quirk...Curioso, ¿No crees? Oh quizás si lo había hecho y no lo sabía... Un día, ella conoció a dos héroes que le mostraron otro punto de vista, aun así...Ella desconfiaba de ellos. Ella estaba bien así...Era feliz, hasta que un ida, los héroes llevaron a su tutor a prisión y nuevamente quedo sola. Nuevamente un héroe le arrebato su vida.-Hizo una pequeña pausa.-Ella continuo trabajando, quizás porque era lo único que le quedaba, su trabajo y dos amigos, que para su mala suerte eran héroes...Y que ella termino apreciando. Pero un día, caminando ella descubrió a alguien llorando, quizás motivada por su propio dolor ella se acercó a esa persona, quería ayudarla...Y lo vio, vio en los ojos de estas sus recuerdos, sintió sus recuerdos como propios, y deseo ayudarlo, deseo borrar sus memorias. Y eso paso.

Poco a poco ella levanto su rostro sonriendo apenada, mientras por sus mejillas lágrimas comenzaban a deslizarse hasta caer, mordió suavemente su labio y apretando sus ojos, para luego clavarlos en mí...

-Tomura la encontró un día, le ofreció una venganza, un hogar, un lugar al que pertenecer...Ella solo acepto.-Hizo una pausa.-El resto lo conoces.

Ambos guardamos silencio, observándonos, hasta que una leve risa resonó en el aire, fruncí el ceño al observar como reía mientras secaba sus lágrimas solo para darle un sorbo a su té.

-Lo lamento, quizás fue una mala id...

-¿Qué quieres de mí?-Pregunte seriamente.-Dijiste que buscabas una respuesta, que en mi encontrarías la que buscas.

Ella volteo la mirada algo apenada, mordiéndose ligeramente el labio, antes de tomar aire y comenzar a hablar.

-Deberías probar un poco de los pasteles que traje, son muy ricos, perdona que hayan pocos.

Esa maldita imbécil....

-Escúchame, me importa una mierda lo que ocurriera en el puto pasado.-Respondí cruzándome de brazos, ella abrió sus ojos observándome.-Tu podías haberte convertido en la estúpida heroína que querías, podrías haber seguido y ser la clase de heroína que intenta salvar a todos, mierda, podrías haber hecho tanto pero preferiste dejar que el recuerdo de un héroe barato de persiguiera.-Hice una pausa.-Las tragedias son parte de la vida, tu madre lo sabía, sabía que quizás no sobreviviría pero elegido salvar antes de dejar morir, tu padre lucho, lucho contra el dolor, contra las cuentas por ti, por ambos.

-No pretendía dejar que todo se fuera a la mierda, no quería...Yo no.-La interrumpí.

-Mierda, lo se.-Finalice.-Sé que no era putamente sencillo. A veces es tan fácil cegarte y hacer cosas malas y al final del puto día, te ves al espejo y te preguntas a quien mierda realmente lastimaste más. No sentiré pena por ti, porque creo que no es lo que buscas, si hubieras querido a alguien que te acunara en palabras llenas de afecto no me hubieras traído a mí, sino que hubieras traído a Deku.-Ella simplemente bajo la mirada asintiendo.-Eres la puta villana de la historia, pero, el villano siempre puede convertirse en héroe al final del día si decide redimirse. Aun puedes hacer las cosas putamente bien.

En ningún momento aparte mi mirada de ella, sabía que quizás no era lo que esperaba oír, pero tampoco podía pretender que ella no había cometido errores...A lo mejor estaba siendo demasiado duro con ella, y eso, podría tener consecuencias buenas o malas. En serio, esto es una puta mierda.

-Mierda, no soy bueno con toda esta basura, solo...No puedes huir de lo que sientes, algún día debes enfrentarte a tus sentimientos, a tus decisiones a tu pasado. No puedes esconderte borrando recuerdos, si hacer que otros olviden como se sienten para sentirte menos miserable, porque al final del día, todo sigue exactamente igual en tu vida, simplemente no hay nada, porque tú no has construido nada por lo que valga la pena levantarte y luchar.-Nuevamente hice una pausa, pensando bien en mis siguientes palabras.- Me importa una mierda la filosofía de Stain, me importa una mierda las creencias del bastardo de las manos, y a ti también, tu más que nadie, deberías saber lo que quieres en tu vida, quien quieres ser, deja de tapar tus putos oídos y de cerrar los ojos como si fueras una niña pequeña, es tiempo de que hagas las cosas bien.

-Bakugou...-Murmuro dejando el té sobre la mesa y levantando su mirada, ahora sus ojos azules.-Yo...

-¿Quieres mi puta opinión? Eres una imbécil. No creo que seas una villana con todas las letras, pero si pienso que debes tener un castigo por lo que hiciste.

-Lo se.-Murmuro entre sollozos, mientras secaba sus lágrimas y me dedicaba una sonrisa.

-Luces terrible.-Murmuré.-Realmente, ahora mismo estás más fea que con tu puto traje de villano.

-Vete a la mierda Bakugou.-dijo agarrando un postre y lanzándome a la cara, mientras soltaba una carcajada, para mi suerte aquel trozo de pastel solo me rozo la mejilla, fruncí el ceño y rodé los ojos.

-¿Dejaras a mi familia tranquila?-Pregunte algo preocupado por el bienestar de esta. No iba a admitirlo en voz alta, pero la sola idea de que algo les pasara me asustaba...

-Oh, sobre eso...Mentí.-Dijo avergonzada.-No iba a hacerles nada de cualquier manera.- Abrí mis ojos ante tal revelación.-No me mires así...Perdí a mi familia, se el dolor que es perder gente que amas...Jamás dejaría que otros pasaran por eso, además, cuando vi tus recuerdos, realmente me di cuenta lo importante que son para ti. Lamento haberlos usando para que vinieras.

-En serio, vete a la mierda.-Respondí frunciendo el ceño, no quería admitirlo, pero la hija de puta, había jugado muy bien sus cartas, había disparado justo en mi punto débil, lo había apretado haciéndome caer en su juego.

-Lo tendré en cuenta.-Respondió rodando los ojos.- En serio, come lo que traje, endulzara tu carácter. Además, no puedes quejarte es mejor que tu antiguo secuestro.

-¿Sabes lo extraño que es esto?-Ella asintió.- Estas realmente mal si piensas que esto es normal.

-Sí, lo siento, no fue mi mejor plan...Perdona.-Dijo levantándose y tomando aquellos postres y envolviéndolos.

-¿Que mierda haces?-Pregunto observando lo que hacía.

-Sé que no lo comerás ahora.-Susurro entregándome el paquete, dude unos momentos antes de agarrarlo.-Créeme están bien, sería estúpido matarte luego de lo que me has ayudado, siento que les debo demasiado a Midoriya y a ti.

-Creo que fue más Deku que yo.-Respondí suspirando.-Honestamente si hubiera Sido por mi te hubiera explotado la puta cara.

Ella simplemente sonrió, tomando un observo de su té, por mi parte me límite a imitar su acción en silencio. Toda esta situación era completamente surreal. Suspire, ¿Cómo me vi envuelto en todo esto?

-Sabes, me sorprendió demasiado que te negaras a que borrara tus recuerdos.-Comento riendo.-Creí que dirías que sí, parecías desesperado por olvidar todo lo que te atormentaba.

-¿Me ves cara de huir de mis problemas?-Pregunto cruzándome de brazos.

-¿No es lo que has estado haciendo parte de tu vida?-Pregunto con una sonrisa burlona.

-Estoy considerando explotarte la cara.-Ella rodó los ojos.- ¿Por qué mierda atacaste a Deku? Hasta donde sé, El bastardo no te hizo nada.

-¿Quieres la verdad?-Asentí.-La idea era atacarte a ti, solo que mi atención se desvío a otro objetivo. No pude evitar ver al hijo de Endeavor, y cuando observé que este quería acercarse a ayudar a Midoriya y mi mirada conecto con la de él, supe que era el...Que debía usar mi Quirk en el. Puede decirse que fue un accidente...

-¿¡Cómo mierda pue...

-Él lo quería.-Finalizo suspirando.- Él quería olvidar y cumplí su deseó. Escucha, entiendo que me equivoqué, pero siempre que use mi Quirk fue para ayudar... Excepto cuando ayude a Tomura a robar el registro de quirks... Él me dijo que ayudaba a muchos, pero, en el fondo sé que era mentira...

-¿Por qué mierda Deku quería...-Hice una pausa, al observar su mirada de lastima, y como si hubiera recibido un balde de agua fría, lo entendí.-El... ¿Él quería olvidarme cierto?

Ella asintió algo apenada.

-Él quería olvidar la tristeza que le generaban los recuerdos de lo que fue...Supongo que solo fue un pensamiento que surgió en un momento de tristeza. Por su manera de pensar y...Por el cariño que tiene hacia ti, entiendo que realmente no quería borrar esos recuerdos.

-Maldición...-Murmuré, llevando mi mano a mi cabello y peinando lo ligeramente hacia atrás.-Joder...Entonces fue mi cu...

-Tu no le dijiste que pensará en eso, tampoco me dijiste que lo atacará.-Susurro.-No es tu culpa. Además, cuando vi tus recuerdos entendí, que era un dolor compartido...Lamento haber intervenido. En su momento me pareció una buena idea, creí que ayudaba, no fue hasta que tuve la oportunidad de hablar con Midoriya cuando caí en cuenta que tan equivocada estaba. Es bastante extraño y doloroso, ver cómo todo en lo que creías cae frente a ti, pero, creo que tú más que nadie, me entiendes con eso.

-A este maldito punto, no sé si agradecerte tu invención o mandarte a la puta mierda. Pero si, puedo entender tu puta mierda. Al fin y al cabo, muchas de mis creencias se han derrumbado dejando sus restos, para que me tropiece una y otra vez.

-Lo segundo llevas haciéndolo desde que comenzamos a hablar.-Comento riendo.- Sabía que entenderías.

Suspiré mientras observaba el techo.

-Como sea...Realmente esto apesta.

-No tuve tiempo de limpiar, y hace tiempo no vengo, lo siento.

-No tu casa imbécil, hablo de la situación.

-En ese caso, si, apesta demasiado.-Respondió sonriendo.

-¿Cómo recupera sus rec...

-Detente.-Dijo frunciendo el ceño.-No voy a decirte ese dato. Ya decidí a quien se lo diré.

-¿Entonces para que mierda me trajiste si no ibas a contarme nada relacionado con Deku?

-Te lo dije, ¿No? Soy egoísta, al menos lo suficiente para solo traerte y contarte mi historia.-Hizo una pausa.- Quiero contarte, pero, en serio, necesito esa información, sin ella, él no va a escucharme.

Suspiré. Podía entender a lo que se refería, sin embargó realmente quería saber la manera de ayudar a Deku, sobre todo al saber que si no hubiera sido por la discusión que se generó aquel día, él no hubiera estado con ese pensamiento en la cabeza...

Preferiría haber Sido yo, pero no, tuvo que ser el estúpido de Deku...Realmente, yo no tengo tanto que perder...

-Sobre Hawks y Endeavor. ¿Qué harás cuando ellos se enteren?

-Afrontar las consecuencias por supuesto.

-Al menos no eres una cobarde.

-Si lo soy. Sabes, simpatice contigo cuando vi tus recuerdos. Gran parte de mi vida me la he pasado huyendo. A veces pienso que use mi Quirk por ser egoísta y no para ayudar.

-¿A qué te refieres?

-Los quirks tienen un límite.-Comento jugando con su cabello.- Cada que uso mi Quirk de manera descontrolada, pierdo recuerdos.

La observé atónito, ¿Tanto le dolía recordar que prefería perder recuerdos?

-Lo llamo efecto espejo, por qué al final se termina reflejando, y me perjudica también. También tengo limitaciones físicas. Cuando lo utilizo demasiado, me siento más débil y cansada, además de sentir un horrible dolor de cabeza. La intensidad con que lo usé hace que pierda recuerdos... Llevo usando mi Quirk sin control hace mucho tiempo Bakugou. Siendo honesta contigo, no sé controlarlo demasiado, así que a veces veo recuerdos sin quererlo.

-¿Cómo mierda recuerdas tu historia?-Pregunto desconfiado.

-Renuncie a la liga.-Susurro.-Ese día, siento que abrí la caja de Pandora que los abría todos...Conozco el riesgo, así que escribí en un cuaderno muchos de mis recuerdos para tener memoria de estos. Luego de lo ocurrido ese día, leí aquel viejo cuaderno, y recordé más cosas, por primera vez, sentía que volvía a ser yo...

-¿Que harás ahora?

-Esperar...-Susurro.- ¿Que harás tú Bakugou?

-¿Qué quieres decir?

-Por favor conozco tus recuerdos, conozco cada acción que has hecho, y estos días veo que has mejorado, pero aún te falta un largo camino.

-Mira quién habla.

Ella soltó una risa animada.

-Tú y yo, nos hubiéramos llevado muy bien, me preguntó si en otra vida fuimos amigos.

-¿Crees en esas mierdas?

-¿Tu no?

-Son estupideces.

-Deberías leer, la historia del tiempo.

-Debería leer muchas cosas.

Ambos guardamos silenció.

-Merecemos un nuevo comienzo Bakugou. Uno en donde podamos ser nosotros mismos sin miedo, dónde podamos deshacernos de nuestros miedos y renacer de nuestras cenizas.

La observe en silencio unos momentos, y cuando pretendía decir algo, escuche un ruido afuera.

-Acaban de llegar.-Murmuro sonriendo algo apenada.- Me hubiera gustado hablar más.

-¿Llegar?-Pregunte confuso acercándome un poco aquella ventana quedándome perplejo con lo que veía.-¿Porque tu...

-Es lo correcto.-Respondió interrumpiéndome.-Por primera vez quiero hacer lo correcto. Estoy cansada de huir, de pretender que estoy bien. La he cagado durante años Bakugou, tú más que nadie sabes cómo me siento, sabes lo que es arruinar algo, sentirte culpable y atormentado en las noches por tus recuerdos, por las preguntas que golpean tu puerta, que destrozan tu corazón. Estoy cansada...Quiero, por primera vez, quiero tener la oportunidad de hacer algo bien, de ser libre.

Esa estúpida... Bufé negando, podía entenderlo a la perfección, podía comprender cómo se sentía y sus ganas de liberar de aquellas cadenas. Sabía que lo que había hecho era lo mejor, pero, y aunque no creí decirlo nunca, la maldita no era tan...Desagradable como en un principio pensé que era.

Sin embargó, el castigó por sus acciones lo merecía, ambos los merecíamos. Pero también merecíamos un nuevo camino, uno de redención, de perdón, comprensión. Merecíamos comenzar de cero, iniciar siendo quienes realmente somos.

-Al final del puto día supongo que solo nos queda intentar ser una mejor versión de nosotros mismos.-Susurre.-Es una puta mierda esto.

La mayoría del tiempo somos niños fingiendo ser adultos, enfrentando situaciones desagradables intentando construirnos y entendernos. Buscando un hogar, alguien que nos comprenda.

Observé su sonrisa sincera y apenada, y lo supe. Supe que ella había elegido ese camino, buscando sanarse y buscando un perdón...Uno hacia sí misma.

Y sabía que era lo correcto, entendía el por qué ella me eligió para esta despedida, porque, si hubiera Sido otro, la hubiera observado con pena, la hubiera morado con una lástima haciéndola sentir peor.

Me busco por qué podía entenderla, y por qué era honesto con cada palabra, por qué de mis labios saldría la puta realidad. Ella actuó como la mierda y merecía eso, pero también, supo redimirse, agachar la cabeza, darse cuenta de su error y pedir perdón. Y por eso, merecía una nueva oportunidad.

Solo esperaba que está se le fuera dada. Suspiré, me preguntó, al final del día, realmente estamos eligiendo los mejores caminos en nuestras vidas.

-Me debes la respuesta que busco-Dije cruzándome de brazos, ella soltó una carcajada y negó.-Creo que tú tienes la respuesta también busco.

-No me necesitas para responderla, tú mismo sabes la respuesta Bakugou-Hizo una pausa.-Gracias por escucharme.

Asentí...Observándola unos momentos.

-¿Hay otra salida?

Ella abrió sus ojos sorprendida.

-¿Qué?

-Responde.

-Hay una puerta trasera...¿Por q...

-Me deberás un favor, ya veré cuando lo uso.-Conteste algo burlón mientras me daba la vuelta, para buscar dicha salida, en aquellos momentos sentí la puerta derribarse, ellos habían entrado.

Y no me encontrarían dentro. Suspiré, era lo mejor, solo está vez, solo por esta vez, no sería un hijo de puta.

Por qué en sus ojos podía sentirme reflejado, y comprendido, quería que ella entendiera, que al final, realmente la comprendía, me preguntó...

¿Esto me vuelve un héroe o un villano?

Sin embargó, ¿Realmente importa la respuesta?

Ahora mismo, mi mente me llevaba de nuevo a Deku, a la UA, solo quería llegar; quería continuar y enfrentar todo lo que no enfrente.

No importa demasiado lo que me espera, sé qué debo hacer.

Me he esforzado por cambiar, por abrir los ojos y mejorar. Sé que esa imbécil también lo hace, y está fue su manera de demostrarlo.

Al final, supongo que esto debía suceder.

.-.-.-.-.

Nota de autor:

¡Hola! ¡Omg, no puedo creer que haya regresado! Lamento mucho haber desaparecido, realmente la facultad me tiene re mal. Pero díganme, ¿Qué les pareció el capítulo? ¿Qué creen que pase? ¿Alguna parte favorita?

Ahora sí, vamos a ponernos serios. Por favor lean hasta el final.

Lamento mucho el haber desaparecido, verán, como muchos, por culpa de la cuarentena los profesores mandan demasiados trabajos, más las clases virtuales realmente no tengo mucho tiempo. Ajeno a eso, no les mentiré, me siento estresada y desmotivada, por favor, no se equivoquen, sigo amando escribir, pero, me desmotiva bastante la cuarentena y la cantidad de tareas.

Les contare algo que me pasa, en mi facultad mandan demasiados trabajos grupales, si, incluso en cuarentena, y todo bien, pero encontrar compañeros para trabajar sin saber cómo si son o no responsables es complicado. Fuera de eso, tengo una materia en particular que me tiene estresada, desmotivada, y asustada.

Esta materia explica mal los trabajos, nadie entiende nada, yo la primera, y para peor voy atrasada en los trabajos y eso que vamos dos. Entonces casi no tengo tiempo.

A veces me siento algo mal, desanimada por estar tanto tiempo encerrada, a veces surgen discusiones en casa-Ya saben cosas normales.-y hace poco tuve un problema con una amiga que me dejo mal, aún estoy algo mal, pero que todo ya mejoro bastante.

No puedo prometer actualizar más seguido, me gustaría pero por ahora siento que no será posible, intentare actualizar algunas historias y escribir aunque sea de a poco los capítulos.

La verdad no sé cómo habrá quedado el capítulo, tuve problemas para escribirlo, cancele dos veces la publicación, lo reescribí varias veces, en un principio iba a ser de Kirishima, luego paso a ser Yoki, luego pensé en Endeavor y termino siendo Bakugou.

Por si tienen curiosidad el capituló tiene 3837 palabras sin la nota de autor. También he actualizado otras tres historias de bnha que tengo.

-.-.

Siendo estas:

-¿¡Donde esta papá!?

"Endeavor el héroe número 1 es afectado por un Quirk y ahora sus hijos deberán dejar de lado cualquier rencor y cuidarlo.

-¿Shoto, donde dejaste a papá?

- Dijo que quería ir a afuera, así que lo saqué al jardín.

-¡Oh por dios!"

-.-.--.

- Nuestro Squad.

"Conjunto de relatos que cuentan los días del Bakusquad como amigos".

-.-.--.

-Kacchan y Deku

"El destino sabe trazar caminos que nos entrelazan y cuando el tiempo llega al límite construye razones para alejarnos"

Serie de relatos que cuentan la infancia de Izuku y Katsuki, mientras tanto, nos dejan ver cómo algo que marchaba bien de un momento a otro, puede dar vuelta e ir cuesta abajo.

-.-.--.

Eso sería todo, Espero que les haya gustado, muchas gracias por el apoyo y por la paciencia, un abrazo y cuídense.

¡bye!