Bakugou.

Mierda, doble mierda.

Es increíble lo rápido que uno puede cagar algo con otra persona, sin siquiera quererlo, pero con honestidad, siempre ha sido así con Deku.

Cuando se trata de él, siempre es un tira y afloja, una carrera contra el tiempo que sin piedad nos pisotear, y nos lo arrebata todo. Pero, está bien, siempre ha estado bien.

Deku y yo estamos destinados a crear malentendidos entre ambos que van deteriorando nuestra relación.

¿O quizás solo soy yo?

Si, debe de ser eso. A lo largo de mi vida me fui dando cuenta de que gran parte de las cosas que vivo al día de hoy las he construido yo, he alzado muros y muros con cimientos de orgullo y inseguridad. Me he sentado en el trono de las promesas rotas que cuando era un niño hice. Pero está bien, siempre ha estado bien.

-Hey, idiota.-llamo una voz familiar a mi lado, siempre tan predecible.

- Sabía que ibas a regresar.-Murmuré rodando los ojos, mientras dirigía mi mirada hacia él, sus ojos verdes ahora algo hinchados y rojos me miraban confundido.- Olvidaste tus cosas.

-Vamos a terminar este trabajo los dos, no me importan tus quejas. Comenzamos a hacer este trabajo juntos y lo acabaremos juntos.-Dijo en un tono de voz firme, ignorando mi comentario anterior...Ese maldito imbécil...

-Como sea.-Dije quitándole importancia.-Solo no me estorbes.

- Escucha, no sé qué pasara antes de que perdiera los recuerdos, ¿Bien? Lo siento si te hice algo.

Lo odio...En serio lo odio... ¿Por qué no puede solo cerrar la boca?

- No necesito tus disculpas vacías de significado.- Dije algo enfadado.- No necesito concretamente que te disculpes, ni si quiera tú mismo sabes por qué te estás disculpando, ¿Eres imbécil?

- El imbécil es otro.-Dijo de repente sorprendiéndome, ¿En serio este es Deku? ¿Quién rayos se cree este estúpido?

- ¿Se te ha subido mucho en estos días no?- Ya algo harto me levanté para confrontarlo, sin embargo, cuando nuestras miradas chocaron, me observó con confusión y tristeza, con enfado...

- Tú dices que no somos amigos....Si eso es así, ya entiendo por qué dejamos de serlo.-Dijo de repente llamando mi atención.- No sé el motivo exacto, no sé qué pudiera hacer yo o lo que pasará pero algo se y es que tú mismo te alejas y alejas a otros, no sé por qué, pero siento que debía decirte eso. Deberías realmente dejar de intentar alejarme a mí y a los demás.

-No necesito que tú...

-Si lo necesitas. Necesitas que alguien te lo diga Bakugou, no eres invencible, ni una clase de dios, eres ante todo como yo.-Dijo serio.- Necesitas que alguien te lo diga, necesitas urgentemente que alguien te diga que los amigos no son piedras en el camino.

¿Qué mierda quieres decir ese imbécil? Por qué mierda no sé calla. ¿Por qué mierda, aun cuando pierde sus recuerdos, sigue siendo tan imbécil?

-Realmente, puedes irte a la mierda Deku.

Lo vi suspirar unos momentos para luego tomar asiento.

-Continuemos con el trabajo, primero que nada, cuéntame sobre tu Quirk, yo no sé sobre el mío, aún no he hablado con el tipo que parece una momia, All Might, Creo que se llamada así....

Admitiré que aquel comentario me desconcertó un poco, era la primera vez que Deku llamada así a si ídolo, realmente, comienzo a creer que este imbécil, es otra persona.

- Lo que quieras saber de mi Quirk puedes verlo en tus estúpidas libretas.-Respondí cortante.

-¿Libretas?

-¿Nadie te lo dijo?- Lo observé negar levemente, suspire, solo por esta vez, le haré casi al pelo de mierdas.- Cuando estábamos en secundaria, quizás desde un poco antes, comenzaste a escribir en libretas datos sobre héroes, analizaban sus quirks, y esas cosas, ya sabes, desventajas, ventajas, cosas de la persona que lo poseía.

-¿Tan friki soy de los héroes?-Asentí.- Hey, sabes sonreír.- Comento en tono burlón, rápidamente voltee la mirada, ¿Por qué mierda....?

-Deberías sonreír más, te vez menos salvaje así.-Me abstuve de responderle algo a ese pedazo de animal.- ¿Oye, sabes dónde está la cantina?

-En serio, ¿Nadie te mostró o te dijo algo?- Pregunté sin apartar mi vista de él. El muy estúpido, soltar una leve risa, mientras me dedicaba una de sus tontas sonrisas.

- Se ofrecieron mostrarme el colegio cuando la clases acaben, pero, honestamente hoy me saltee el almuerzo y tengo algo de hambre.

Es serio...Me arrepentiré de esto.

- Toma.-Dije dándole la bolsa con la comida que los imbéciles habían comprado para mí.

-Pero es tuyo...-Dijo apenado, sin embargo le dedique una mirada muy clara " acepta está mierda o te asesino".

El pareció pensarlo unos momentos antes de reír y acercar su banco al mío, quedando uno al lado del otro, mientras bajo mi mirada confusa, comenzaba a poner la comida de la bolsa en la mesa.

- Vamos a compartir y comamos juntos.-Dijo sonriéndome.- Sabes, puedes decirme loco, pero por alguna razón quiero que seamos amigos. ¿Podemos intentar?

Aún no sé el motivo, si fue por pena, arrepentimiento, o quizás por aquel brillo de esperanza que se asomaba en su mirada...Pero simplemente asentí desviando la mirada.

- Como sea.