Era de imaginarse que un chico tan atractivo y tan odioso tendría novia, pero ¡¿Nathaly, en serio?!

—¡Qué siga la música Dj! —grita ella y me sorprendo al ver que es Ricardo el que está detrás de la consola de sonido. Él la ve y pone sus ojos en blanco para dar comienzo de nuevo a la música.

Ella abre el baile con el chico siete a quien le pega el trasero contoneándose en su pelvis «vayan a un cuarto cochinones», por Dios mi mente sigue hablando y yo trato de ver hacia otro lado cuando veo que él posa sus manos sobre las caderas de ella.

Me giro no soporto verla, no he tenido trato alguno con ella, pero ya me cae mal, de las escaleras desciende una chica rubia acomodándose la blusa un poco apurada, la trae mal abotonada y sospecho que ella tiene algo que ver con el chico siete, ella se para en el último escalón y Andres le reclama algo.

—Ok, esto es muy raro —me digo, pero como no es mi problema lo dejo pasar.

Pasa un chico con bebidas en una bandeja atropellando a todo el mundo y tomo un vaso, lo llevo a mi boca y es fuerte arrugo la cara apenas bebo un sorbo, pero se siente bien, comienzo a bailar al ritmo de 24K magic de Bruno Mars sola en la pista donde me dejó Ximena y cierro los ojos sintiendo el ritmo en mi cuerpo.

Abro los ojos sorprendida al sentir unas manos que me toman de las caderas pegandome a su cuerpo, giro inmediatamente y veo que es Andres, así que le sigo el ritmo, no voy a negar que baila muy bien bailamos un par de canciones más y me lleva de la mano afuera para tomar un poco de aire.

—Ven, quiero presentarte a alguien —me dice al oído— nos acercamos al chico siete y no se porque comienzo a ponerme nerviosa— hermano, ella es Stella —él chico siete me ve de arriba abajo como si me scaneara y hace una sonrisita de medio lado que resalta un ojuelo de su mejilla, me extiende la mano y se presenta:

—Hola, me llamo Javier —me quedo ahí parada sin decir nada, es como si las palabras no salieran de mi boca— ¿Y tú?

—Ella es Stella ya te lo había dicho —responde por mí Andres y me siento una total estúpida al no poder decir nada.

Vuelvo a escuchar la vocecita de Nathaly llamando a su chocolatico y él pone los ojos en blanco.

—Me tengo que ir —dice y se va detrás de su novia.

Me quedo un rato tomando aire mientras Andres me acompaña.

—Debo entrar Ximena debe estar buscándome, me dijo que no me alejara de donde me dejó —le digo y él es tan caballero que me acompaña adentro otra vez.

Me deja en el lugar donde estaba antes y va por un par de tragos para nosotros. Mi cabeza está más mareada que antes, pero igual le acepto el trago cuando regresa y lo bebo de un solo trago.

—Hey, bebe de a poco, no quiero que te embriagues y tus amigas me maten luego —me dice, pero ya es tarde.

Ricardo coloca en la consola Side to side de Ariana Grande y todos saltan a la pista apretandonos a Andres y a mí. Mis tetas se pegan a su pecho y veo como su mirada baja a verlas unos instantes, carraspea la garganta y sube la vista de nuevo a mi cara; me toma de las caderas y bailamos como podemos entre tanta gente.

El dj vuelve a cambiar la melodía cuando Javier levanta una mano haciéndole una señal con esta, ahora suena Earned it de The weekend y las luces se apagan, solo quedan encendidas las luces de la consola donde está Ricardo. No se si es por la bebida, pero comienzo a frotarme en el cuerpo de Andres solo siento sus manos descender de mi cintura a mis caderas y me pega mucho más a él.

Tengo mucho calor y la cabeza me da muchas vueltas, necesito salir de la multitud, le digo al oído que necesito agua, el asiente y se ofrece a ir por ella, me deja en un rincón para que tome aire, pero comienzo a sentir como mi estomago se revuelve, busco con la mirada alguna puerta que me indique el sanitario y camino apurada cuando lo encuentro, no quiero vomitar delante de todos.

Gracias a mi mala suerte no veo a la chica que está delante de mí y la tropiezo haciendo que derrame su trago sobre sus tacones dorados.

—¡Pero que mierda, no ves por donde caminas estúpida! —me grita y abro los ojos al ver que es Nathaly.

«No te tropieces en su camino me dijeron, pero ahí voy y es lo primero que hago».

Le pido una disculpa e intento abrir la puerta del sanitario y está ocupado, las amigas de Nathaly le están limpiando sus tacones mientras ella me mata con la mirada. Un chico se ofrece amablemente a llevarme al baño de arriba y acepto, entramos a una de las habitaciones y me indica donde es, entro y mojo mi cara y mi nuca con agua fría, a ver si así se me pasa el mareo, pero no, salgo de nuevo y el chico aún está ahí parado en la puerta impidiendo la salida.

Le pido permiso para salir, pero este sonríe y niega con la cabeza.

—Favor por favor —me dice y no entiendo lo que quiere, se aparta de la puerta y se acerca a mi, lleva sus manos a la bragueta de su pantalón y comienza a deslizarla hacia abajo.

«estoy en verdaderos problemas»

Andres:

Voy por un poco de agua para Stella, en verdad la veo muy mal, seguro no acostumbra a beber y vengo yo y le sirvo más en vez de evitar que continúe tomando, llego al lugar donde la dejé y no la encuentro, le pregunto a Nathaly a quien "sus garrapatas" le están limpiando algo y le pregunto si a visto a Stella, pero solo me grita que alguien le ensució sus tacones caros y me fastidia así que la dejo hablando sola.

Busco a Stella y no la encuentro por ningun lado, paso al lado de las escaleras y escucho un grito que viene de arriba, sé que suena loco con la música a todo volumen, pero estoy seguro que escuché a alguien gritar, sin más subo y ahora escucho el grito de un chico, me acerco a la puerta donde creo que escuché el alarido y la abro encontrando a Tyler, un chico de cabello castaño de un metro ochenta tirado en el suelo agarrando sus partes nobles.

Veo hacia al frente y veo a Stella respirando agitada, me acerco a ella preocupado.

—¿Qué pasó, estás bien?

—¡Si, este idiota queria obligarme a que le diera una mamada!

No puedo creer lo que acaba de decir, aprieto mis nudillos tan fuerte que puedo ver lo blancos que se ponen, me acerco a Tyler y lo tomo del sweater que tiene puesto y lo obligo a levantarse.

—¡Estas en serios problemas idiota! —le grito en el rostro y lo bajo a jalones por las escaleras para echarlo de la casa. Lo saco por la puerta y lo echo al jardín, todos los de la fiesta se acercan para ver el chisme.

—¡Solo le pedí una mamada, era favor por favor, pero la muy estúpida me pateó!

Mi furia crece cada vez más y lo vuelvo a tomar del sweater y lo levanto.

—¡Repite lo que dijiste imbécil!

—¡Es una estupida, que no sabe que si la llevan a una habitación mínimo debe dar una mamada! —siento la mano de Javier sobre mi hombro tratando de calmarme, pero es inútil— Oh, vamos amigo tu sabes muy bien sobre eso, con esa boquita debe dar unas muy buenas.

Y mi paciencia llega a su límite, cierro mi puño y se lo planto en la cara haciéndolo caer al césped. De ahí todo se volvió una locura, Tyler se levanta para responder el golpe y Javier se mete y le pega a él.

Stella.

   No sé en qué momento pasa todo, pero se ven golpes por todos lados, los amigos de Tyler no se quedaron atrás y lo están defendiendo, Andres y Javier dan y reciben golpes de ellos hasta el pobre Ricardo se lleva un golpe que le rompe el labio.

   Se escuchan a lo lejos unas sirenas de policía y todos comienzan a correr en diferentes direcciones. Nathaly se lleva a Javier, Andres me toma de la mano, ya del susto se me bajó la borrachera y me monta en su auto en el asiento trasero, Ricardo se monta en el del copiloto y le pide que arranque.

   Andres deja las marcas de los neumáticos en el asfalto y vamos rumbo a mi casa.

—¡Esperen, Ximena y Ahslye, deben seguir en la casa, deben estar buscándome!

—Tranquila —dice Ricardo quien está cubriendose el labio con un pañuelo— Ahslye se fue hace un buen rato y Ximena igual.

—¿Cómo lo sabes? O sea que ¡me dejaron sola!

—Sola no, te dejaron conmigo —responde Andres.

«Yo las mato».