Epílogo

Trece años pasaron en menos de lo esperado.

En esos trece años pasados, siete meses después, nació Trunks, un bello niño de cabellos lilas y ojos azules.

En esos trece años, Vegeta logró terminar su carrera, en lo que fue a Japón, pudo pedir un plazo de dos semanas a la Universidad para que pueda viajar y terminar su compromiso, visitar a sus padres, y pasar tiempo con su ahora esposa.

Bulma pudo seguir sus estudios hasta los 5 meses en los que tuvo que utilizar faja y cubrir su abultado vientre en esos meses, pidió el mismo plazo al igual que Vegeta, y también le concedieron.
Era predecido que tenía que dejar la Universidad, y uvo que hacerlo en los demás meses, pero le dieron oportunidad para retornar sus estudios después de que de a luz, ya que aún en su estado, destacaba en todos los aspectos. Y le veían un buen futuro, y no iban a desaprovechar un ejemplo a seguir tirado, es por eso que ahora ella se logró graduar, después de Vegeta, pero lo logró.

La madre de Vegeta viajó a los Estados Unidos para cuidar a su nieto mientras sus padres terminaban de estudiar, Vegeta se quedó junto su madre mientras Bulma acababa.

Después de que Bulma se graduó, volvieron a Japón, en donde pudieron conseguir un empleo honorable para ambos.

Al principio, vivieron en casa de los padres de Vegeta, ya que gracias a la inmensa casa que portaban sus padres, pudieron hacerles un espacio más el bebe para que pudieran vivir hasta que puedan conseguir una casa cerca, o hasta cumplir por lo menos 25 años, para entonces necesitaban ayuda sobre los cuidados del bebé, charlas, saber cocinar, los gastos que se harán, entre otras cosas, con tal de que sepan lidiar. La madre de Bulma también iba a verlos y a su nieto, ella los ayudaba mientras los padres de Vegeta trabajan y ella se tomaba sus días de descanso.

Pasaron cinco años, y después de mucho trabajo duro, pudieron conseguir una casa cerca de ambas casas de sus padres, a un precio cómodo, con habitaciones suficientes, todo hecho a su comodidad, ni tan grande, ni tan pequeña.

Para entonces el pequeño Trunks ya iba al Nido, Vegeta y Bulma terminaban de trabajar a las 4 de la tarde, por ello, ponían al pequeño Trunks en clases extras, en lo que sus padres trabajaban, y luego se turnaban para saber quien lo recogería y quien haría el almuerzo, y así era su rutina. Hasta que Trunks entró a Secundaria, ahora en la actualidad con trece años, todo un jovencito. Ahora no era necesario que sus padres lo recojan, podía tomar normalmente el bus hasta llegar a su casa.

Actualidad.

Bulma se encontraba en la cocina, estaba terminando de dar los últimos toques al almuerzo que preparaba. Hizo Takoyakis, los favoritos de su hijo.

Hoy era sábado, y nadie salía a trabajar o a estudiar.
Vegeta se encontraba descansando, ayer se quedó hasta las una de la mañana jugando con los videojuegos junto a su hijo, quien le insistía, y no dejaba dormir. Para entonces eran las 10, y se cansaron de jugar a la hora ya dicha. Después no pudo conciliar el sueño hasta las dos de la mañana, fue donde Bulma le dio unos relajantes masajes que hicieron que este lograra descansar por fin.

Eran las una y media. Trunks bajó hacia la primera planta, donde se encontraba su madre poniendo los cubiertos en la mesa.

— ¿Mamá te ayudo?

— Claro. Ayúdame colocando los vasos y el jugo de naranja por favor.

Trunks actuó rapidamente e hizo lo que su madre le pidió, saco los vasos del estante y los coloco a un lado de los cubiertos, después trajo la jarra con jugo de naranja, la cual daba buena pinta, y la puso en medio de la mesa. Fue hacia la cocina, donde su madre estaba sirviendo el primer plato, se paro a un lado de ella, esperando la siguiente indicación.

— Levanta a tu padre Trunks. Luego ambos se me lavan las manos. Quiero que estén impecables.

— Voy.

El peli-lila salió disparado de la cocina hasta la habitación de sus padres. Entusiasmado, abrió la puerta, encontrando a su padre aun con los ojos cerrados, cubierto por la gigantesca colcha color Champan. El aun dormia, el acostumbraba dormir al lado izquierdo, donde apuntaba la puerta, mientras Bulma dormía del lado derecho, apuntando hacia el balcón.

Trunks entro sigilosamente, se puso en puntillas y empezó a andar hacia la cama de sus padres.

Una de las cosas que le gustaba a Trunks, era despertar a su padre. ¿De que forma?, tirándose encima de el, Cómo si jugaran a las luchas.
Entonces, se puso en frente de el, viendo fijamente a su padre, quien tenía su brazo estirado hacia atrás, y su antebrazo en su frente, mientras su otro brazo se encontraba fuera de la cama. Este dormía sin camisa, se encontraban en temporada de verano, y el calor era tremendo.

Dio unos pasos hacia atrás, preparando su salto.

Corrió hacia la cama, estando en la orilla, tomo impulsó, y cayó encima de su padre, quien reacciono rápidamente y se levantó de golpe, fue donde Trunks, se paro y corrió hacia la puerta, escapando de un regaño de su padre.

— ¡Mocoso de...! — le lanzó una almohada, la cual choco con su espalda, pero este salió rápidamente de la habitación, cerrando la puerta.

Ya era costumbre ser despertado así todos los fines de semana. O claro, siempre que es el quien es el ultimo en levantarse.

Vegeta tocó su rostro, dirigió su mirada hacia el reloj que colgaba encima de la puerta de entrada, era hora de levantarse, pensó que era aun de mañana. Se quitó las sabanas de encima y después dirigirse hacia el baño, iba a darse una relajante ducha, para estar al cien y no quedarse adormilado.

Trunks llegó al baño aun corriendo, se encontraba en risas, le encantaba hacer enojar a su padre, en especial cuando este estaba desprevenido, tomando una ciesta, o como casos como estos, durmiendo.
Dio vuelta al grifo de agua, haciendo que el agua caiga en sus manos, se echó un poco del jabón liquido, se enjuago las manos, y por ultimo, cerro el grifo. Seco sus manos con la toalla que colgaba de un aro. Salió del baño, y con la misma bajo hacia el comedor, donde se encontraba el almuerzo listo.

— ¿Ya despertaste a tu padre, Trunks?

— Si.

En eso, se acordó de un trabajo que les dejaron en la escuela, su expresión divertida cambio a una de asombro, aun tenía tiempo, pero no dejaría sus cosas para después, sino las cosas se acumulan y luego se le complican.

— Mamá, ¿Puedo hacerte una pregunta?

— Claro, dime.

Su tarea consistía en solo preguntas para el cuaderno de 'Personas, Familia, Relaciones Humanas'. Pero solo se acordaba de una pregunta, y era la cual mas le inquietaba.

— ¿Como se conocieron papá y tu?

Bulma se sentó, se sorprendió por la repentina pregunta de su hijo. Se le quedo viendo.

— ¿Porque lo preguntas hijo?

— Es que.. en el colegio nos dejaron un trabajo, un roll de preguntas hacia nuestros padres, tipo, como una entrevista, pero están todas plantadas en mi cuaderno, pero solo me acuerdo la que te acabo de preguntar, y me gustaría saberlo.

— Pues.. es una larga historia.

— ¿Te pidió que fueras su novia?

— Algo así.

— ¿Ah?

— Nuestra historia, es muy diferente a las demás que quizas hayas escuchado en tu vida cariño.— dijo dándole un bocado a su plato.

— Entonces... ¿Como comenzaron?

— Jaja es chistoso. Ni tu mismo te lo creerías. Te sorprenderá.

— Ya nada mas me sorprende en este mundo mamá. Ya se como se hacen y nacen los bebes. ¿Que otra cosa más me sorprendería?

Bulma estaba un poco dudosa al responder aquella pregunta de su hijo, no quería que este se queje de algo, o quizás se sienta avergonzado de que sus padres comenzaron siendo algo... ridículo.

— Pues.. nosotros.. no..

Se le complicaba decirle. No encontraba las palabras correctas para confesarse a su hijo.

— Comenzamos siendo.. Amigos Con Derechos.

Un silencio abundó, espero algún reclamo departe de su hijo, o reproche. Arrepentida de sus palabras, iba a rehusarse de sus palabras pero:

— ¡¿Queeeeee?! — alargó la palabra. Bulma cruzo dedos. — ¡¡Que genia!!

Un gran alivio inundó su pecho.

— ¿En serio mamá?

— Si. — dijo tímidamente.

— ¡Es genial! ¡Mis padres..! ¡No lo creo! — se paro de la mesa, agarrándose la cabeza, sin aun creer lo que su madre dijo.

— Ay hijo, ni se te ocurra poner eso en tu cuaderno, seria vergonzoso.

Apoyo su codo en la mesa, y recargo su cabeza en su mano, y empezó a jugar con la comida.
Recordando los 'Bellos' momentos que vivió en su juventud.

— Y dime, ¿Dime como fue? .. ¿Que paso después?... ¿Como terminaron así? — pregunto entusiasmado el pequeño — ¡Esta historia me intriga!

— Ay hijo, ¿Como quieres que te diga esas cosas?.. — dijo sonrojandose, aun jugando con la comida.

— ¿Ah? Oh no.. jajaja— rasco su nuca entendiendo el mensaje de madre. — me refiero a como terminaron así, enamorados.

— Como te dije.. ¡Tendría que contártelo por una semana.! Ya que esas cosas son largas y mm.. incomodas de decir. Todo sucedió tan rapido.

— Oh vamos, por favor mamá.

— ¿Que tanto hablan? — preguntó Vegeta apareciendo.

— Nada, cosas de su escuela, ven ya sienta te, ya esta la comida, se enfría.

Vegeta se sentó en una silla que quedaba al lado de Bulma y Trunks al frente de ambos.

— Ma.. Porfa.. — susurró haciendo súplicas con sus manos.

— Ahorita no hijo, estamos comiendo. Mas tarde te cuento como comenzó la historia. Ya sabes, siendo Amigos Con Derechos.

Vegeta.

Trunks estaba en un mundo de imaginación, pensando y sacando teorías sobre como paso todo entre sus padres, aun de encontraba emocionado, no veía la hora para que su madre le contase.

Y Bulma recordaba cada momento de esos días de Universidad.

El día que ambos dijeron sera Amigos Con Derechos.

El día que fingieron ser novios.

El día que se entero de su embarazo.

El día que le pidió que fuera su esposa.

El día de la boda.

Y el día donde el pequeño Trunks nació.

Hasta el día de hoy. 

(•••)

En la habitación de Vegeta y Bulma reinaba el silencio, Vegeta se encontraba terminando un formulario en su computadora portátil, encima de la cama. Mientras Bulma tomaba un baño.
Después de minutos, ella salió con su bata puesta, y una toalla que estaba enrollado en su cabello. Se quito la toalla que cubría su pelo, para después agarrar su secadora y secarse el pelo mientras lo sacudía.

— Oye Vegeta..

— Que.

— Em..

Dejo la secadora encima de su tocador, desenchufo el cable, y se encaminó hacia su esposo.

— Como vemos, Trunks está por entrar a la etapa de la adolescencia.

— ¿Y? — dijo guardando unos papeles dentro de un folder.

— Pues, un muchacho de su edad necesita... una charla.

— ¿Que tipo de charla?

— Ya sabes.. de padre e hijo.

— No se de que me estas hablando Bulma.

— ¡Ay! Esas platicas que un muchacho de su edad requiere antes de entrar a la etapa de adolescente. ¿Acaso a ti nunca te las hicieron?

— No.

— Que difícil eres de hablar. — espetó.

— No tengo la culpa que no seas específica.

— ¡Ahg! ¡Me refiero a esas platicas sobre la sexualidad y formas de protección! Trunks ya sabe como nacen y se hacen los bebes.. en cualquier momento su cuerpo se enfrentará a los cambios hormonales y físicos, su cuerpo empezará a comportarse de otra manera. No queremos que luego nos venga con la noticia que dejo a una niña embarazada.

— Si tanto sabes de esos temas, ¿Porque no se lo hablas tu?

— Las madres no podemos hablarles de eso a nuestros hijos hombres, es una charla de hombre a hombre.

— Tsk.

— No me digas que ya te quieres convertir en abuelo. — burló.

— ¡No! Jamás... aun estoy demasiado joven, y no soportaría ver mocosos llamándome abuelo, cuando aun estoy demasiado joven. Ya soporte que me llamasen papá a los 23.

— ¡Ja! Eso de viste pensar antes de dejarme embarazada de tu hijo.. — dijo acostándose al lado de Vegeta.— aunque.. no me arrepiento de nada.

— Vas a tirar mis papeles, mujer.

— Entonces.. ¿Lo harás? ¿Abuelito..?

— ¡No me llames así! Se oye espantoso.

— Por eso.. lo harás, y le dirás las formas y métodos de protección. Así quizás hasta que cumplas cincuenta.

— No estoy preparado para eso.

— Vegeta..

— ¿Que?

— Vegeta.. — empezó a decir entre dientes.

— ¿Que?

— ¡Hazlo! Mañana tienes tiempo, es domingo, no trabajas, yo tengo un compromiso.

— ¿Así? ¿Cual?

— Mi amiga Diana cumple treinta y dos. Y saldremos a comer, junto con otras amigas.

— Tch, que molesto. Tu sales y yo no.

— No seas gruñón. Si mañana después de que tengas la platica con Trunks, lo mandamos a casa de Goten a que pase la noche, y, tenemos casa sola. — dijo con una sonrisa pícara, tocando el fornido pecho de su esposo con su dedo índice.

— ¡Puro chantaje contigo mujer!

— ¿Entonces..?

— Ahg ¡Bien! Pero será la primera y última vez.

— Oh vamos, no te va a matar decirle unas cuántas veces más luego de eso. ¿O si? — él no respondió. Eso sólo hizo que su sonrisa se extendiera, sabía que tuvo razón. — Él te quiere mucho, le hará bien esa charla. — se inclinó para poder abrazarlo, él silenciosamente pasó su brazo alrededor del cuello de la mujer para acercarla a él. — Así cómo yo te quiero a ti. — alzó la cabeza para verlo. Él mantenía su cabeza recostada sobre su cabeza escondiendo su nariz en ella.

— ¿Sólo me quieres? ¿En serio? — dijo mientras una ligera sonrisa se le escapaba sin dejar de ver el monitor.

Ella rió ante el comentario. — ¿Y tú? ¿Sólo me quieres? — respondió con otra pregunta.

— Yo pregunté primero.

— ¿Tú que crees?

— Que no.

— ¡Hey! — le dio un pequeño codazo, él siguió sonriendo — Si no fuera así, yo no estaría aquí contigo. — se acurrucó más a su lado — Te amo muchisímo, ¿Oíste cabeza hueca? — le obligó a verla con sus manos volteando su rostro.

— ¿Ahora nos llamamos por apodos?

— ¿Y tú? ¿Cuánto me amas?

— ¿Qué hora es?

— Las diez de con treinta.

— Agregale diez ceros. Eso es.. — Ella sonrió con ternura. — Más mil. —  y sin más, cerraron la noche con un cálido y profundo beso.

Ahora si que si puedo decir que es el final de esta historia ♡

Sigo sin dejar de agradecerles por todo el apoyo que le han dado a esta historia, por todo el cariño y amor, en serio lo aprecio bastante y me alegra mucho 💕

Espero verlos en otros libros, son libres de pasar por mis otras historias en mi perfil, muchisimas gracias a todos❤
Y cuidense mucho que valen oro 🙏

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top