No pude resistir y lo tapé con la palma de mi mano.

— Milk, no puedo — dije entregándole la prueba, pero ella no lo agarró.

— ¿Tienes miedo? — asenti — Bulma, tranquila, todo va estar bien. No te voy a dejar sola. 

— Pe-pero si sale positivo ¿Qué hago? — digo.

— Tranquila, saldrás de esto, saca tu mano y míralo — dijo.

— ¿Y Vegeta? ¿Qué crees que dirá si es en verdad que estoy embarazada?

— No te preocupes, encontraremos la manera para decirle.

Tragué duro. Si salia positivo. .¿Qué hago? ¿Cómo se lo diré? ¿Lo aceptará? ¿Me dejará? ¿Me odiará?.
Todas estas preguntas me ponían más nerviosa y las ganas de querer saber crecían cada vez más.

Aunque en un principio ni quería.

Sigo pensando. Todavía no lo veo.
Sigo parada en seco y no me muevo.
Sigo mirando a la nada, mi respiración es lenta y silenciosa. Me sentía piedra total cómo estaba, mi mente total estaba en blanco.

— ¿Bulma? — llamó mi atención.

Me giré a verla sintiendo un nudo en mi estómago.

— No puedo. — suelto.

— ¿Qué? — dice confundida.

— Milk.. yo.. — mordí mi labio inferior — Posiblemente sea positivo — dijo con voz casi baja.

— ¿Porqué? — pregunta.

Tomé aire — Hace una semana había comenzado a presenciar un comportamiento extraño e inusual en mi.

—¿Cómo cuáles?

— Cómo.. mucho apetito, fue por eso que comencé a tomar horas extras en educación fisíca, por que sentía que comenzaba a engordar un poco. Y.. bueno, sólo vomité una vez pero pensé por qué comí mucho esa vez y me empaché — dije soltando el aire que tenía acumulado.

— Son casi los mismos que tuve. — sonríe ligeramente — Estás embarazada. — afirmó.

Al escuchar esas palabras.

Estaba dispuesta a voltear el objeto de una vez por todas, pero mi celular timbró.
Lo saqué a ver que era, llegó un mensaje. Y sin abrirlo y sólo viéndolo por notificaciones pude ver que se trataba de Vegeta preguntandome dónde estaba.

Mandé al carajo aquello y volteé la prueba y saqué mi mano para poder verlo.

— Positivo.. — dije y comencé a derramar lágrimas.
Milk me abrazó, correspondí a su abrazo aún viendo el objeto dónde mostraba dos rayitas bien marcadas en la pequeña pantalla verde.

No lo podía creer... ¡Seré mamá!

¿Por qué lloro?

¿Por qué sé que el 89 por ciento de mujeres a mi edad se embarazan, y luego de contarle a su 'Pareja' ellos terminan botandolas, dejándolas solas y sin ayuda de nadie. Y luego se convierten en madre solteras?, si, es por eso. Eso y por muchas otras cosas más, y en todas esas incluían la mayor parte Vegeta.

— Tranquila Bulma.. saldremos de esto. — dice. — Estoy igual de asustada que tú.

— Quien... ¿Quién es el padre de tu hijo? — pregunté.

Ella sonrió, pero era una sonrisa triste — Goku.

— Él es un buen chico. — digo.
No lo conocía mucho. Pero podía asrgurar que era buena gente.

— ¿Y acaso Vegeta no lo es?

— Lo es, pero.. no lo sé Milk, tengo miedo. No me siento lista para tener un bebé. — apreté la prueba entre mis manos — Soy demasiado joven.

— Igual yo pero.., por algo así lo quiso el destino, ¿No lo crees?

— No sé.. ya son muchas cosas que me eatán pasando.., primero lo de Yamcha.. mis notaas, mis papás.. — guardé silencio separándome de ella — ¡Mis papás van a matarme! ¡¿Que crees que dirán cuándo se enteren que su hija menor está embarazada?! ¡Ya los harté con mis calificaciones! ¡¿Ahora con esto?! — volví a abrazarla llorando nuevamente sobre su hombro — Me van a odiar mucho más de lo que ya lo hacen.

— No digas eso, estás yendo muy bien en tus clases, haz recuperado bastante, no pueden quejarse, y acerca de esto.. tienen que entenderlo, en su nieto de todas formas.

— No sé que pensar Milk.. me siento muy presionada ahora. — me separé de ella limpiando el resto de lágrimas.

Guardé la prueba en el pequeño bolso entre mis cosas.

— Lo mejor es irnos, tengo que decirle a Goku sobre esto. — asentí.

Me enjuague la cara tallando mis ojos y echando un poco de agua alrededor de ellos. Me sequé con papel higiénico las partes recién mencionadas y salimos cómo si nada hubiera pasado.

Decidí no encontrarme con Vegeta, lo más seguro es que lloraría cómo bebé en frente de él y le diría sobre mi embarazo. Y era algo que realmente no quería.

Ni siquiera sabía si debía decírselo. Quiero decir, él es el padre y tiene todo el derecho de saberlo, pero.. me ahorraría mucho dolor y sufrimiento si no se lo digo.
Que estúpido, quizás él no se lo tomé tan mal, quizás él quiere ser papá, bueno tal vez no, pero quizá él tiene ese sueño.

No sabía con certeza cuál de las dos versiones puede ser que Vegeta reaccione.
Pero sí en verdad fuera una mala. Terminaría destrozada por ambas partes.
Una, por qué no aceptaría la responsabilidad y me dejaría sola con el cargo.
Y segunda, por que ahora estaba más segura de lo que sentía por él, y sí, estaba enamorada, terminé cayendo en lo que creí olvidado.

Pero en sí, tenía que decírselo obligado. Aunque no lo quiera y termine yéndose de esta Universidad huyendo, ya lo sabía y podría estar tranquila y no cargando con un peso encima durante mucho tiempo sintiendo angustia si no se lo digo.

Bueno, ya estaba decidido, se lo iba a decir, pero no ahora. Tengo que buscar una buena manera para hacerlo.

Espero y no me odie por haberlo dejado plantado.

Llegué al cuarto, él no estaba por mi suerte, me senté en mi cama soltando un suspiro pensando en las tantas maneras para decirle.

Tal vez no hoy. Pero ya lo tendría para un poquito más adelante.
No me sentía lista para decirsélo aún.

— Vegeta... serás papa.. — susurraba para mi misma. Aún pensando — Mm.. puede ser. — para no olvidarme me levanté y me senté en el escritorio agarrando un lápiz y hoja, comencé a anotar esa pequeña pero sincera frase — Vegeta.. una pregunta.. ¿Alguna vez se te pasó por la mente forma una familia? — seguía — No, muy estúpido, se dará cuenta. — jugaba con el lápiz pensando —  Vegeta.. estoy esperando un bebe.. — proseguia — Nooo estoy esperando un bebé, sí, pero no dirá nada por que no especifiqué de quién. Aunque puedo añadirlo — pensé un poco, pero luego negué y lo taché — Que tal.. unos zapatos de bebé, dónde habría una nota dónde dirá... "Vegeta serás papá" — decia — no, no, no muy cursi, mucha cosa, ¿Y si en verdad no quiere y lo despresia todo? — taché. — Necesito algo bueno..

Pensé otra vez, me ponía cada vez más nerviosa.

Un bebé..

Tengo un bebé creciendo dentro mío.
Sonreí un poco.., imaginar unos segundos que tenía otra vida creciendo dentro me hacía sentir bien por unos momentos, un bebé, quizás hasta una replica mía, o no pero iba a ser mi hijo o hija, era tierno pensar en ello. Y sólo pensar en eso me daba cierta emoción, y nervios a la misma vez.

Lo malo era volver a la realidad, la cuâl era cruda, y difícil, era pasar por mucho y encima de muchos, tendría que preparme psicólogicamente para lo que se venía, podían venir cómo cosas buenas, cómo malas, pero de igual forma todo me iba a chocar, no sólo los que me rodeaban, sino también el proceso para cargar a este bebé.  Sería uno largo y complicado, de eso estaba segura.

¿En qué momento no nos habremos cuidado?
No recordaba, eso era lo frustrante y torturoso. Muy aparte que ni siquiera sabía cuánto tiempo llevaba.

— Vegeta querido, serás padre. — digo mirando hacia un punto específico, un libro.

Literalmente, ser madre aún no estaba en mis planes, no hasta tener mi trabajo, una pareja, y un techo seguro dónde vivir. Y una vez cuándo mi vida esté hecha junto mi pareja, podríamos pasar al siguiente paso, que sería formar una familia. Por que realmente ya estaríamos estables.

— Vegeta ¡Seremos papás! — casi grito mordiendo inconscientemente el lápiz. — Vegeta.. — susurro su nombre recostando mi cabeza en la mesa. — Estoy esperando un hijo tuyo..

Vegeta.

Media hora esperando, ¿Qué rayos estaba pasando?

Le escribí y no me respondió. Me dijo que ya vendría, no comprendo.

¿Se estará vacilando conmigo?
Hice una mueca golpeando una pared molesto. Se estaba burlando de mi.

Vine aquí con un motivo, el cuál era aclarar algunas cosas, no sólo con ella, sino también conmigo.
Cabe aclarar que nuevamente sentía esas extrañas sensaciones cuándo estaba con ella, lo malo es que ya tenía en mente lo que podría ser. Pero no quería aceptarlo, no hasta consultarlo con ella. Hasta saber cómo ella se sentía también.

No sabía dónde estaría, no me importaba ahora en esos momentos, sólo quería estar solo, y que nadie molestara para entonces.
Decidí por ir a mi habitación, no creo que ella esté, supongo que fue a "Atender" a algo mucho más importante.

Entré a los primeros pasillos que conllevan a las habitaciones, pasé por el pasillo que lleva a mi habitación.
Cuándo estuve cerca de la mía, a los no muy pocos metros abrir la puerta, alcancé a escuchar unos susurros, ni tantos, pero eran provenientes de adentro.
Asomé mi oreja a la puerta hasta pegarla.

"Vegeta querido, serás padre".

"Vegeta ¡Seremos papas!".

"Estoy estoy esperando un hijo tuyo.."

Me alejé de la puerta exageradamente mientras las palabras que había dicho resonaban en mi mente.

¿Qué había sido eso?
¿Que digo?
¡Bulma embarazada!

— ¿Un bebé? — susurré.

No lo podía creer, empecé a ver hacia todos lados buscando nada, esperando que este fuera un sueño, del cual quiero despertar.
Joder. Ella está embarazada.. embarazada de mi hijo según lo que acabo de oír.

¿Yo?

Seguía enfrente de la puerta sin poder creer lo que mis oídos escucharon, no sabía como reaccionar ante tal cosa.

¿Qué hay que decir? ¡Ella estaba diciendo que voy a ser papá!

Mierda.. esto está mal.

Bulma

Sentí la presencia de alguien más, tal vez no dentro, pero lo sentía cerca. Me volteé a ver con dirección a la puerta.

La curiosidad me ganó, me levanté de la silla y me dirigí a la puerta con intención de abrirla.

Cuándo giré la manija, sentí cómo si alguien más quisiese girarla, por lo solté, y en definitiva, ese alguien quería entrar, y ese alguien que entró, tenía un semblante preocupante y frustrado.

— Ve-Vegeta. Oye.. sobre lo que.. — iba a decirle o inventarle una excusa del por que no pude verlo, pero me interrumpió.

— ¿Es verdad? — preguntó de repente.

Alcé una ceja confundida — ¿Que cosa? — no sabía a que se refería, pero ya me estaba poniendo nerviosa.

— Eso.

— ¿Qué eso? ¡No entiendo! ¿De qué hablas? — comencé a desesperarme por su tanto misterio.

— ¿Estás embarazada?

La piel se me hizo de gallina al escuchar nuevamente aquella palabra.

"Embarazada"

¿Cómo rayos se enteró?
Maldita sea Milk, seguro ella se lo dijo.

— No fue Milk si piensas eso.

¿Ah?
— ¿Entonces?

— Te escuché hablando.

Jamás debí hablar tan alto, debí ser un poco más discreta, ¿Y si no era él que escuchaba? ¿Y si pudo haber sido otro? Agradecí aquello, ya que pudo haber sido un chismoso y así toda la escuela se enteraba.
Aún no sabia como decirle, aún no era un tema que podía manejar. No estaba lista.
Me cuentro nerviosa, ¡Estoy nerviosa!, mis piernas empezaron a temblar al igual que mis manos.
Maldita sea Bulma. Siento que voy a desfallecer aquí mismo.

— Di algo. — dijo sacándome de mis pensamientos.

Sentí mis manos sudar un poco.

— Si.. — agaché la cabeza tímidamente, no tenía el valor suficiente para verlo. — Estoy embarazada.

Faltan poco capítulos :')) ♡