-Mira, Eren- el rubio le mostró lo que había comprado en un locar- es artesanía de comchitas- sus ojos brillaban-¿No está bonito?-

-¡Si!¡Muy lindo!- sonrío-¿A quien se lo vas a dar?-

-Quizas a los abuelos cuando visite Berlín-

-Si, a la abuela le va a gustar mucho- sacó su celular y tomó fotografías.

-Jeje, estos chicos- sonreía Carla.

-...- Levi estaba sentada en el sofá, tenía su mirada sobre las manos.

Le costaba un poco hablar con la familia de Eren, ya que son de mundos muy diferentes.

-Levi- habló Carla.

-¿Eh?¿Si?-

-Quieres mucho a Eren, ¿No?- la miró.

-Emm si, la quiero mucho. Es una buena amiga-

-Jeje- soltó una risa- Eren siempre habla de ti y de todo lo que has hecho por ella, en verdad estoy muy feliz de ver a mi hija así. Ella sonríe mucho, nunca ha dejado de hacerlo-

-Lo sé, Eren es una persona muy amable  y muy risueña-

-Aunque no lo creas, Eren no fue así siempre- Grisha se sentó al lado de la azabache.

-¿Aahh?- miró al castaño.

-Es que, el cambió repentino de una ciudad a otra- se abrazó a si misma- mi pequeña sufría, dejar a sus amistades a sus abuelos... De hecho, desde que llegamos a Francia, ella no ha vuelto a Alemania. Tal vez en las próximas vacaciones lo haga-

-Eeh- desvío la mirada- S-si- asintió, aunque no le gustaba mucho la idea de tener tan lejos a Eren.

-La cosa es que... Me gustaría que vinieras con nosotros a Alemania-

-¿Que?¿Por qué?-

-Porque ella necesita de ti, eres su mejor amiga, ¿No?-

-Si- asintió- Soy....- miró a Eren, quien se sacaba selfies con su hermano mayor- soy su mejor amiga-

-Jeje, muchas gracias, Levi- le acarició la cabellera azabache.

A la noche, Levi y Eren estaban en la habitación.

La castaña miraba por la ventana y la azabache estaba en la cama.

-Esta muy bonita la noche, Levi. Deberías venir a ver la luna- decía alegre.

-Eren-

-¿Si?-

-¿Que pasó en Alemania?-

Al nombrar ese país, la sonrisa de Eren se borró de inmediato.

Giró para ver a Levi, quien la miraba seriamente.

Bajó su mirada.

No sabía si decirle.