"¿Japón?"

Se repetía Sunwoo mientras llegaba a su casa con un Changmin de la mano.

Desde que su Hyung le había dicho la invitación de ir los dos juntos, había aceptado apenas pronunció toda la oración, pero ¿Quien no lo haría?

Se había tirado encima del castaño y le llenó el rostro de besitos, provocando las risitas de Changmin y haciéndolo sonreír más a el. Pero luego toda su felicidad se fue al caño cuando el mayor le recordó su aún menoria de edad, así que por eso se encontraban adentrándose a su hogar con un nervioso Castaño.

-Dios Hyung, relájate - hablo Sunwoo tratando de tranquilizar a su mayor, pero sinceramente el se encontraba más nervioso. Él deseaba hacer ese viaje como jamás pensó desear algo, pero no sabría que haría si su madre le da una respuesta negativa.

Pero conocía a su madre, aunque no pareciera, es una madre muy permisiva, sabía que le diría que si al instante.

-No.

-¿¡Pero Mamá!? - grito el moreno alzando los brazos.

-No Sunwoo - volvió a repetir - No es como que te vas a la vuelta de la esquina amor, entiende...

Changmin solo se encontraba sentado en el sofá junto a un alterado pelirrojo que discutía con una tranquila madre.

-¡Es una oportunidad única y tú me lo estás prohibiendo!

SunGa desvió la mirada y la poso en un avergonzado castaño, que ni siquiera se atrevió a alzar la mirada por causar ese enfrentamiento entre madre e hijo.

-¡No importa que no me dejes ir, me escaparé!

-Amor, eres menor de edad, ni siquiera te dejarán mirar el avión sin mí firma y el de tu padre.

Sunwoo al oír que nombró a su progenitor aumento más su rabia, ese señor ni siquiera tenía voz ni voto en su vida.

-Puedo falsificar tu firma y con mi papá no sé cómo haré, pero...

-Sunwoo - hablo dulce el castaño interrumpiendolo. El pelirrojo volteo aún con las cejas juntas a su Hyung - Ve a tu cuarto, hablaré con tu madre.

-Pero...- dijo casi berrindudo, no quería dejar esa conversación a manos de Changmin, cuyo chico puede ser persuadido hasta por su perro imaginario.

-Ve - lo dijo de una manera tan melódica pero a la vez autoritaria.

Sunwoo se estremeció al oírla y también por tener los finos dedos del mayor acariciando la parte posterior de su cuello.

-Bien - dijo cual niño regañado, asintió y se levantó del sofá, miro por última vez a su madre y fue directo a la habitación (que ni bien había cerrado la puerta, ya pego su oreja a ella, no pudiendo sacarse esa manía)

Al quedar solo la dueña de la casa y el castaño, el ambiente tenso se había esfumado, pero Changmin aún seguia con su intranquilidad - Primero que nada...- Inicio - quiero que sepas que mi intención jamás fue causar esto - se disculpó - Créame que al invitar a Sunwoo en ningun momento lo hice con la intención de desautorizarla, yo...

-Changmin cariño - lo interrumpió calmada - No hace falta que te expliques, entiendo - trato de calmar a un nervioso castaño - Lo que si me gustaría saber es cómo surgió toda esa idea de viajar a Japón - pregunto curiosa doblando sus piernas.

Changmin se rasco la nunca nervioso debatiéndose entre ser sincero o atreverse a mentirle a la madre de Sunwoo - Debo ir a Japón solo por unos días por temas de mi universidad - explicó - Estábamos viendo una serie con su hijo cuando decidí comentarle acerca de mi futura corta ausencia y en eso salió mi invitación, ni siquiera sé porque lo dije, simplemente mi boca solo se abrió y lo invito solo.

-¿Tú no querías ir con mi hijo? - pregunto SunGa curiosa.

-Oh, no me mal entiendas mis palabras - dijo agrando los ojos y moviendo sus manos - Claro que me encantaría ir con Sunwoo, aunque ya e ido a Japón en varias ocasiones, nunca me tomé el tiempo de disfrutarla realmente y esta vez me gustaría que ambos tuviéramos la misma experiencia.

SunGa asintió entendiendo - Pero quiero que comprendas Changmin, que esto es una gran responsabilidad, Sunwoo no puede solo decidir e irse a otro país, así sea por un lapso reducible de tiempo, no podré dormir tranquila sabiendo que mi pequeño se encuentra a Kilómetros de mi. - Explicó.

Changmin asintió con la cabeza baja, claro que comprendía a SunGa, aunque en pocas palabras le había dado a entender que Sunwoo no tenía el permiso que pidió, entendía la posición de madre y sobre todo la respetaba.

-Aunque por otro lado - volvió a hablar la señora Kim - Se que dentro de mis posibilidades desgraciadamente jamás podré darle ese lujo a mi hijo - dijo con tristeza - Y viniendo la invitación de un muchachito de su casa, tan decente, tan bonito que sobre todo le hace tanto bien a mi hijo, me pone contenta Changmin.

El nombrado parpadeo no entendíendo a donde la madre de Sunwoo quería llegar con todo ese discurso - Y aparte, Sunwoo probablemente me odiaría toda la vida si tú subes a ese avión sin el...

-¿Q-que? - se preguntó Changmin ilusionado - ¿Eso quiere decir que...?

-¡ME VOY CONTIGO HYUNG! - grito un Sunwoo adentrándose a la sala con los brazos abiertos.

La señora Kim miraba con ternura a su hijo que venía con los ojos brillantes y los brazos extendidos dispuesto a abrazar a ese chico, o eso creía.

SunGa agrando los ojos al sentir que fue elevada del suelo. Sunwoo al oir secretamente la conversación entre su Hyung y su madre y llegando a la parte en la que ella le había dado el permiso, no pudo evitar su emoción, abrió su puerta y fue corriendo junto a su madre, la abrazo de la cintura y la elevó abrazándola, como cuando ella hacía con el de pequeño.

-¡Gracias mami! - exclamo el alto de corazón. Haciendo a SunGa aguar sus ojos al nuevamente oír la forma en la que Sunwoo lo llamaba cuando era su pequeño bebé - ¡Por eso eres mi madre favorita! - dijo bajandola de nuevo.

SunGa rodó los ojos, limpiandose sus lágrimas con una mano y la otra golpeando el hombro de su hijo.

Y Changmin veía la escena aguantando sus propias lágrimas. Jamas pensó sentirse tan bien con solo ver a Sunwoo abrazar a su madre.

-Ya duerme tonto...

-¡No puedo! - se escuchó del otro lado de la pantalla.

Ambos estaban en una vídeo llamada. Sunwoo había llamado a Changmin apenas esté le aviso que ya estaba en su cuarto.

-Se que estás emocionado, pero debo dormir - lo regaño - Mañana tenemos que organizar todo...

-¡No puedo creer que visitaré Japón! - volvió a hablar el pelirrojo ignorando todo lo que le había dicho su Hyung - Afortunadamente tengo mi pasaporte, mi padre me lo había sacado cuando justamente también queria que vayamos juntos a Japón ¿Porque? Ni idea, aunque...creo que su hijo es japonés, seguro quería que pasemos tiempo juntos, puff, patrañas...en fin...solo falta la firma del permiso de mi papá, pero de eso se encarga mi madre, me dijo que mañana hablaría con el y...

Changmin miraba a Sunwoo con una sonrisa, el menor tenía la misma expresión que SongJin cuando hablaba sin parar.

"Kim Sunwoo ahora mismo me apagas tu celular o no te dejo ir ni a la esquina"

Changmin río al oír el grito de regaño de la madre del moreno.

-Ahora si ve a dormir - le dijo el mayor divertido.

Aunque Sunwoo acaba de ser regañado, aún seguía sonriendo.

-Ok, bye - le dio una sonrisa mostrando todo sus dientes - Te quiero~

Y corto.

Changmin aún podía oír el eco del sonido al finalizar la llamada, agrandando sus ojos exageradamente.

"Acaba de..."

En cambio Sunwoo miraba la pantalla de su teléfono totalmente alterado, mientras se tapaba la boca con una mano aún sin creer las palabras que el mismo había soltado.

"¡Acabo de...!"

Ambos se encontraban acostados, con los ojos bien abiertos mirando sus techos, como si fuera que este le daría la respuesta a sus corazones, siendo ambos techos testigos de lo que allí se hizo y ahora donde allí se dijo.

"Acaba de decirme te quiero"

"Acabo de decirle te quiero"

Al día siguiente...

-¿Sunwoo? - pregunto Wonyoung apenas vio entrar a su pelirrojo amigo en su habitación - ¿Qué haces aquí?

Los dos amigos se encontraban con sus uniformes puestos. Wonyoung mirando al moreno con las cejas juntas como este caminaba hacia la pared luego venia hacia ella, luego volteaba para caminar de nuevo hacia su pared.

-¿Podrías calmarte? - pregunto fastidiada viendo a Sunwoo que aún caminaba, yendo y viniendo sin hablar.

-Tu...- hablo deteniéndose frente a su pelilila amiga - Tu sabes Wonyoung.

-¿Estas borracho? - interrogó a su amigo - Sabes que Sunwoo...- chasqueo la lengua - No estoy para tus momentos de drama, debemos estar en el instituto en veinte minutos. - Wonyoung se alejó del moreno y fue a sentarse frente a su espejo para arreglar su cabello.

-Se que sabes lo de Changmin y Luhan - dijo parándose detrás de ella. Wonyoung solo viendo su reflejo en el espejo y tensandose al instante.

-N-No se de qué estás hablando - desvío su mirada peinandose un mechón de pelo de forma nerviosa.

-Se que sabes quién es el padre de tu adorado oppa, Xiao Wonyoung.

La nombrada cerró los ojos, ya era inútil negarlo, claro que sabía quien es el padre de Oh Changmin. Giro con pena, no atreviéndose a mirar al chico que tenía en frente.

-Tu viste Wonyoung, tú lo viste - replicó el moreno - Estaba tan mal por el simple hecho que sus padres se separarán y tú eres la hija del posible causante.

-No - negó - Sehun se va a divorciar porque quiere, te prohibido que incluyas a mi papá en esto Sunwoo.

-¿Es el amante, no? - la miro - Yo digo que ya está bastante inmiscuido.

La pelilila suspiro, se levantó de donde estaba y camino hacia su cama para tumbarse boca arriba, aunque las palabras de Sunwoo sonaban feas, sabía que eran verdaderas.

-Solo quiero que sepas que el cariño que le tengo a Changmin oppa no es por ser el hijo de la pareja de mi padre, yo en realidad lo quiero...

"Lo quiero" automáticamente al alto se le vino a la mente la forma tan estúpida en la que ayer se le había confesado al mayor, negó con la cabeza tratando de ahuyentar ese recuerdo.

-Dios - soltó un suspiro de cansancio, se froto el rostro y se sentó en donde segundos antes estuvo su amiga - Cuando todo esto salga a la luz, no quiero imaginar cómo se pondrá Changmin.

-Sunwoo - llamó la pelilila desde la cama, levantándose con solo sus codos para poder mirar a su amigo - Yo no tengo miedo ¿Y sabes porque? - pregunto retórica - Porque al igual que Changmin contigo, tú también lo cambiaste.

Sunwoo lo miro no entiendo a donde quería llegar.

-Todos hablan del bien que Changmin te hizo, pero nadie se da cuenta el bien que le hiciste - expreso - Changmin es totalmente otra persona gracias a ti - el moreno la miraba sin emitir sonido alguno - Es más abierto, más seguro y más sincero consigo mismo, al igual que él vio en ti lo que no todos podemos ver, tú hiciste exactamente lo mismo, tú viste en el lo que incluso sus amigos no lograron divisar, le hiciste amarse así mismo, le hiciste ver el mundo en otra perspectiva, tú le hiciste una mejor persona Sunwoo.

Sunwoo se quedó en el aire, mirando en ningún punto en específico. Jamás se puso a pensar en eso, todos pensaban lo peor de él, tachandolo de mal chico y el equivocadamente pensó que estando con una buena chica cambiarían el concepto que tienen los demás de el. Pero sus amigos sabían que él no era malo, su familia sabía que él no era malo, Oh Changmin sabía que él no era malo y sobre todo; El mismo sabía que no era malo.

-¿Y esa cara de estúpido?

Changmin dejo de observar su móvil para levantar la cabeza al oír la pregunta de su japonés amigo.

-Tienes cara que no has dormido nada - hablo Yoshi sentándose frente a su mejor amigo.

Changmin bloqueo su móvil y tiro sus castaños cabellos hacia atrás soltando un suspiro de cansancio - Casi no dormí nada - contestó.

-¿Tiene algo que ver con tu niño? - pregunto sacando su teléfono para escribir a su novio.

El castaño frunció el ceño al oírlo - ¿Porque cada que algo pasa en mi vida, piensas que tiene que ver con el?

Yoshi bajo su móvil mirándolo obvio - Tal vez sea porque cada que algo interesante pasa en tu vida siempre tiene que ver con el.

-Eso no es...- luego cerró los ojos apretando los labios. Discutir con Yoshi será pelearse con una pared - Ayer me dijo que me quería.

Changmin miro ansioso, esperando que el peligris dejará de escribir en su teléfono para que le prestará atención.

Yoshi levantó la mirada al sentir como su amigo lo miraba - ¿Oh, esperas que conteste algo? - dijo burlón - Es que creí que preferias que me guarde mi comentario a lo que me estás contando, ya que considerando que es algo interesante que acaba de pasarte y sorpresivamente viene de el.

El coreano rodó los ojos, no sabía cómo Yoshi siempre lograba tener la última palabra.

-Solo escupe - demandó.

-Que vulgar - contestó el japonés arrugando la nariz - Pero volviendo al tema...- miro a su amigo - ¿Que le respondiste?

-Nada - enunció - Me cortó.

- Entonces fue por teléfono.

-Hicimos video llamada. - destacó.

Yoshi puso una mano bajo su mentón, haciendo su conocido mini análisis mental, provocando inquietud en el castaño.

-¿Es la primera vez?

-Si - alegó Changmin moviendo sus dedos en la mesa.

-Pero no puede solo soltar un te quiero de la nada y más ahora sabiendo que fue su primer te quiero - dijo el japonés no entiendo el porqué el niño de su amigo se había confesado de la nada - ¿Estaban teniendo sexo telefónico o algo?

-¡No! - contesto alterado, mirando en ambas direcciones para asegurarse que nadie los había oído.

Afortunadamente todos estaban en sus cosas y no le prestaban atención a los dos amigos hablando en el comedor.

-Pensé qué tal vez solo lo soltó en medio del orgasmo - dijo encogiendo de hombros - Es bien sabido que durante la etapa de calentura las palabras fluyen - explicó - Cuando quiero sacarle cosas a Haruto, simplemente debo excitarlo.

-No quería saber eso - respondió Changmin haciendo una mueca - Pero no, estábamos hablando normal porque...

Changmin agrando los ojos cuando la respuesta de la duda que no lo dejo dormir vino a su cabeza. Sunwoo posiblemente solo hablaba por la euforia que sentía, es que el moreno estaba tan emocionado por salir por primera vez del país que anoche lo llamo casi a la mitad de la noche solo por eso, tal vez eso justificaba las palabras dichas la noche anterior.

-¿Y que le responderás? - hablo Yoshi sacándole de su divague.

-¿Que? - pregunto Changmin parpadeando confundido.

-A tu niño - aclaro - ¿Que le dirás? aunque no sea una palabra comprometedora como una declaración de amor, de igual manera es una confesión densa.

Changmin nuevamente se perdió en sus pensamientos ¿Que le respondería? Sinceramente no sabía... ¿El quería a Sunwoo?

"Eres precioso"

"Mi príncipe"

"Me encantas cuando llevas tus lentes"

"Eres tan bonito hasta cuándo lloras, pero igual no lo hagas Hyung"

"Hyung"

Su corazón se oprimía con los recuerdos que tenía con Sunwoo, con el encima, Sunwoo pidiéndole mimos como el bebé que era, Sunwoo enfadandose por decirle que era un Bebé, sus besos, sus caricias, sus mordidas, sus insultos, sus burlas, su voz, su piercing, su cuerpo, su... ¡puta mierda! Ahora tenía miedo de no solo quererlo.

-Por tu mirada puedo darme cuenta que tal vez descubriste algo más - dijo Yoshi con calma.

-N-no - contesto - No. - dijo una vez más pero esta vez firme.

Yoshi solo se encogió de hombros, ahora mismo Changmin necesitaba tiempo para asimilarlo - A todo esto - volvió a hablar el japonés - ¿Cómo se llama?

Changmin miro a su amigo con las cejas juntas, haciéndolo salir del trance de auto convercerse que lo de Sunwoo solo es algo anodino - ¿Quién? - pregunto no entiendo ahora de quién habla el japonés.

-El señor que vende pan - le respondió rodando los ojos - Hablo del señor que se come tu pan, aunque de señor no tiene nada - dijo burlón.

Changmin río nervioso, ahora como carajos salía de esto, no podía simplemente decir el nombre de Sunwoo como si nada, no podía confesar de la nada que se estaba enrrollando con su casi hermano. Quiso golpear su cabeza con la mesa, no salía de una mentira para entrar en otra.

-¿Mi n-niño? - tartamudeo - E'hm...se llama - decía rascándose la parte posterior de su cuello, pensando en cualquier nombre al azar - Kevin - respondió - Si, Kevin, Kevin Moon.

-¿Kevin Moon? - dijo Yoshi arrugando sus labios - ¿Es extranjero?

-Si, Canadiense - contestó metiendo su dedo en la boca y mordiéndose las uñas nervioso - Kevin Moon, extranjero, sujeto desconocido, imposible que lo conozcas, jamas se han visto, nunca, never.

Cuando Yoshi estaba por abrir sus labios para responder a la rara actitud de su mejor amigo, una tercera persona se unió al grupo.

-¿De qué hablan? - hablo Jacob llegando a su mejor amigo y saludando a Yoshi con una sonrisa.

-De Ke...

-¡Que tarde se nos está haciendo! - grito Changmin interrumpiendo al peligris - Vamos antes que lleguemos tarde - dijo levantándose de su asiento.

-Pero...- hablo el japonés viendo el reloj de su muñeca - Aun me queda quince minutos y aparte no tenemos la primera clase juntos.

-¿No? - dijo el castaño empezando a sudar - Igual quiero acompañarte - fue junto a Yoshi y le estironeo del brazo - Vamos - trato de alzarlo usando toda su fuerza.

Yoshi lo miró extrañado, pero igual se levantó. Changmin agradeció, necesitaba alejar a Yoshi de Jacob.

-Oye Changmin - llamo el canadiense, ignorando la nada disimulada huida del castaño - Está noche traeré a Kevin a la casa...

Changmin se tenso en su lugar y Yoshi pudo notarlo, no respondió a Jacob y solo corrió aún estirando el brazo del japonés.

-¿Invitará a Kevin a tu casa?

- Es la casa de los tres - respondió empezando a respirar normal - Aparte, te dije que ellos ya sabían de el y mis amigos se llevan bien con...el.

Yoshi no dijo nada, sabía que su amigo lo estaba mintiendo y decidió no presionarlo, si Changmin no deseaba decirle la verdad a de ser por algo y lo que menos le importa al japonés son los dramas innecesarios como el que su amigo estaba armando.

Ya siendo las ocho de la noche, los horarios universitarios y escolares ya finalizaron horas antes. Con un Changmin vestido con su pijama y leyéndo el libro de suspenso que se encontraba en su mano y con un Sunwoo mordiéndose las uñas nervioso frente a su departamento, debatiéndose de si entrar o no.

El pelirrojo se maldecía por haber soltado algo tan delicado como un "te quiero" aunque el sentimiento era verdadero, esperaba que Oh Changmin muriera sin saberlo.

Se sentía el chico más imbécil, seguro su Hyung pensaba que era el niño más infantil por haberse declarado de esa forma. Bien solo podía actuar como si no hubiera pasado nada, pero no sabría cómo reaccionaria el mayor. Mañana ambos se irían de viaje y no quería volver las cosas incómodas, así que decidido tocó el comunicador para que lo dejen pasar y solucionar la mierda que el mismo causó.

-¿Porque carajos me abres tu?

Fue lo primero que dijo Sunwoo al ver aún sonriente canadiense con cabellos granates abriéndole la puerta con aires de grandeza.

-¿A qué se debe tu visita en mi humilde aposento joven Sunwoo?

El pelirrojo giro los ojos entrando al departamento, el tono juguetón de Kevin solo se debe a su buen humor, lo cual significa sexo o Jacob y por su elevada porción de humor, esta vez se debía a ambos.

-¿Sabes si Changmin se encuentra?

Kevin llevo una mano a su mentón fingiendo pensar y con la otra cerró la puerta.

-¿El joven Changmin? - volvió a hablar, provocando más la molestia en su mejor amigo - Lamento informarte que el príncipe Oh si se encuentra en su alcoba, pero a su gusto, no desea ver a nadie.

-¿Enserio?

-No - Kevin río - Ni vergas si está - hablo - Jacob me pidió que te abriera, supongo porque sabe que Changmin Hyung está en el departamento.- dijo encogiéndose de hombros.

-¿Pasarás la noche aquí?

-Depende - contesto volviendo a encoger sus hombros - ¿Y tú?

Sunwoo suspiró casando - Depende...

El canadiense pudo notar algo más en lo dicho por el moreno, solo esperaba que Sunwoo no metiera la pata con Changmin, porque si así fuera jamás volvería a hablarle, el apuesta todo por esa relación, solo desea que Changmin y Sunwoo jamás se separen, porque a la vista de todos, son el bien del otro y sinceramente no sabría cómo lidiar si su mejor amigo vuelve a ser ese chico desconsiderado de antes de conocer a sus fabulosos Hyungs.

Changmin frunció el ceño cuando oyó la puerta siendo tocada, pero lo ignoro, solo mojo su dedo y giro a la siguiente página para seguir leyendo, pero nuevamente se volvió a oír.

-¿Quien? - pregunto de mala gana.

Sabía que Jacob se encontraba con Kevin y Younghoon aviso que vendría mas tarde con su novio. Solo rogaba que no fuera ninguno de sus amigos invitándolo a salir con los niños, porque ciertamente aún no sabía cómo actuar frente a Sunwoo luego de su confesión y sumándole que aún no asimilaba del todo, el nuevo sentimiento que el moreno despertaba en él, prefería evitarlo hasta ya estar listo.

La puerta fue abierta y lentamente ingreso un moreno en ella. Changmin acomodo bien sus lentes, viendo sorprendido a Sunwoo entrar de forma tímida a su habitación.

-Hola - Murmuró Sunwoo.

El castaño trago grueso viéndolo, no devolvió el saludo, solo espero con las cejas juntas que el alto vuelva a hablar.

-¿Estabas leyendo?

-¿Sunwoo que haces aquí?

-Yo...

Changmin cerró la tapa de su libro y lo dejo encima de su mesita de luz. Sunwoo camino de forma lenta hacia donde se encontraba su Hyung y sin permiso se sentó junto a él.

-Yo quería verte.

Changmin junto las cejas al escucharlo, odiando a su corazón, ya que ahora que es consciente que está enamorado de ese idiota que se encontraba a nada de convulsionar frente suyo, ahora esa simple oración hacia que su débil corazón empezará a bombear con fuerza.

-¿Algo en especial? - pregunto con disimulada indiferencia, pero por dentro estaba muriéndose.

-No - contesto - Simplemente quería verte. - dijo mirándolo.

"No me hagas esto" pensaba Changmin viéndolo estúpidamente enamorado.

-T-tambien - siguió el pelirrojo - Sobre lo que dije ayer...

Changmin en todo momento supo que su visita solo se debía a eso, conociéndo a Sunwoo, probablemente a de estar demasiado avergonzado por haberle dicho que lo quería, que no pudo esperar hasta mañana para solucionar lo que el supone es un mal entendido.

-No tienes que decir nada Sunwoo- le sonrió, aunque fuera la sonrisa más falsa - Entiendo que solo lo dijiste por la emoción del viaje...

-Bueno, si...- respondió el pelirrojo rascándose el cuello - Es obvio que lo quiero - nuevamente dijo, pero desviando el rostro para que su Hyung no viera lo sonrojado que está - Pero no quería decirlo así nada más o que usted piense que solo lo dije porque me llevará de viaje, aunque agradezco que me hayas elegido como su acompañante, quiero aclararle que no te quiero por su dinero, usted me gusta realmente.

Changmin arrugó la nariz enternecido, Sunwoo se encontraba tan nervioso que le está hablando con tanta formalidad que le dan ganas chillar por lo adorable que se ve.

-Creo que es momento en que tú me digas que también le gustó o me quiere o lo que sea - volvió a hablar el moreno, pero con su peculiar tono molesto - No puedo ser yo el único que se humille aquí.

-No veo que revelar sus sentimientos sea un acto de humillación.

Sunwoo bufo - Y me lo dice la persona que lo está ignorando.

Changmin negó y entonces el moreno giro el rostro para verlo - No estoy ignorando tus sentimientos Sunwoo - hablo serio, sorprendiendo al menor por el tono usado - simplemente que mis sentimientos aún no están listo para ser confesados.

El moreno giro los ojos pero aún nervioso - No es como que me digas que me amas...

Changmin bajo la cabeza inefable, Sunwoo espero que su Hyung lo gritara por soltar una broma así, que chille insultandolo o alguna reacción peculiar en el, pero nada ocurrió.

El cuarto se quedó en un profundo silencio, los corazones de ambos hacían eco como un tambor, latiendo por la persona contraria, como hablandose solo entre ellos.

-¿H-yung... usted? - pregunto Sunwoo con los ojos abiertos.

Llevo una mano a su boca y miró a un avergonzado castaño que parecía querer hacerse una bolita.

¿Su Hyung lo ama?

¿A él?

¿Su Hyung enamorado de el? De una persona drogadicta, alcohólica, promiscua, pobre y entre otros calificativos que aunque no parecía dañaban su autoestima.

¿Ese hermoso y puro chico tiene sentimientos hacia el?

-¿Cómo? ¿Cuando?

Changmin se atrevió a levantar la cabeza y miró a un shockeado moreno que parecía ahora a nada de desmayarse.

-No lo sé - dijo de forma baja - No es como que tenia planeado enamorarme de un patán.

Sunwoo al oír una vez más el insulto que su Hyung tenía olvidado para él, fue como desbloquear algo muy dentro de él. Fue como si su corazón latía a un ritmo en el que el pueda entender la melodía, en el que el pudiera comprenderla. Como si la palabra "patán" fuera la clave de lo que tanto no quería abrir.

-¿S-Sunwoo, que? - pregunto Changmin nervioso.

El pelirrojo se había tirado encima de su Hyung, se había puesto entre sus piernas, había tomado ambas manos y las coloco encima de su cabeza y prácticamente pego su rostro al suyo.

-¿Que dijiste? - preguntó mandón.

-S-Sunwoo - hablo el castaño ignorando la pregunta y tratando de safarse del agarre.

-Responde - ordenó viendo fijamente al chico de abajo haciéndolo estremecerse. El pelirrojo relamió sus labios sin despegar la mirada de los ojos de su Hyung que lo veía entre molesto y apenado.

-¿Para que quieres oírlo? - contestó el mayor ya cansado - ¿Quieres subir tu ego? - lo miro enojado- ¿¡Presumir que el idiota nerd virginal de mierda se enamoró perdidamente de ti!?

Sunwoo sintió su corazón latir a mil por hora con tan sólo una oración de Changmin, no podía negar que no le gustaba, quería que las cosas fuesen tal cuál el decía y no le importaba ese sentimiento de temor que nacía en él cada vez que pensaba en la posible "futura relación" que podían llegar a tener; en aquel momento el moreno quería ser tan egoísta y pensar en tener a su Hyung.

La orgullosa sonrisa en el rostro del menor no se hizo esperar y el castaño sintió un estupido aleteo solo por haber soltado una de las frases más ridículas de su vida con tal de hacer feliz a Sunwoo. Era todo una ostentación poder ver esa agradable sonrisa que formaban los labios más apetitosos que había visto jamás.

- Tu ya no eres un virginal...

-Tan perfecto para arruinar momentos - dijo Changmin con las mejillas rojas.

Cada quien podía sentir el fresco aliento del contrario, un aroma tentador que querían tener mucho más cerca. Sunwoo se decidió por no separar sus manos de las muñecas del menor y sabía que estaba cometiendo una locura pero su corazón clamaba y clamaba por llegar a algo con su Hyung, no había forma de contradecirlo porque incluso su mente estaba de parte de su bobo corazón enamorado.

Ninguno de los dos hizo movimiento alguno cuando les pareció sentir el roce de sus narices; estaban demasiado cerca, tanto que sus corazones comenzaron a latir con una intensidad tan única y veloz, como nunca antes. El más alto sentía que dentro de su pecho, pequeños "Mini Sunwoo's" como él, preparaban el equipo de fuegos artificiales que serían lanzados en cuanto sus labios con los de Changmin hicieran un pronto contacto.

-Amo tus ojos - hablo de la nada el menor.

Changmin lo miro parpadeando mientras abría sus ojos sorprendidos.

-Amo tu pequeña narisita - dijo mirando la nariz que parecía un botón pequeño. - Amo tu aroma, tan dulce, tan única, tan tu...- Changmin trago grueso al oír la forma tan melodica de hablar. - Tu piel, tan suave - dijo acariciando con su pulgar las suaves muñecas de su Hyung - incluso tengo miedo de rasparla, como si fuera una delicada hoja de papel.

Sus palabras fueron interrumpidas cuando vio que la lengua del mayor humedecía sus labios y Sunwoo se preguntó si era por causa de la vergüenza del momento o porque simplemente los estaba preparando para unos de sus rondas de besos; la respuesta que su mente le mandó a toda prisa fue lo segundo.

Sin esperar más, Sunwoo inclinó su cabeza forzando un roce entre los labios de ambos, no era que quería ir lento o pedir permiso por un beso porque sin duda el permiso estaba dado, era sólo que quería sentir una vez más esa sensación placentera de sentir con sus propios labios los de su Hyung favorito. Y al cabo de unos prontos segundos, Changmin selló un beso que se le fue correspondido de inmediato.

-Sobre todo amos tus labios - volvió a hablar el moreno, mirando directamente a aquellos labios que acaba de besar - Y tú lengua joder...

Sin decir nada más, el moreno volvió a explorar con delicadeza los labios de Changmin siguiendo el compás que este último marcaba. Sunwoo llegó a pensar que el ritmo del beso, ya fuese intenso o lento, no sería de vital importancia puesto que su única intensión era sentir esos acolchonados labios que se habían vuelto su adicción número uno en sólo semanas.

Movían sus bocas aplacando con sumo agrado el beso que ambos se daban, la sensación cálida, húmeda y deliciosa los motivaba a no querer separarse y por supuesto eso estaba saliéndose de control. Ambos perdían el control que sus cuerpos habían mantenido por mucho tiempo; no, no se trataba de nada sexual, era simplemente un fuerte deseo que ambos sentían por querer más y más.

Se devoraban los labios, se daban el preciso amor a través de ellos empalagándose con el delicioso sabor de los labios de cada quien, una completa adicción que no querían frenar, algo mágico que estaban experimentando ahora.

Ambos se separaron con las respiraciones agitadas. Sunwoo apoyo su frente contra la de su Hyung, esperando que su pecho se regularice. De forma lenta soltó los brazos del castaño y llevo sus manos a su pequeña cintura y Changmin automáticamente enterró sus dedos en la roja cabellera.

-Tambien te amo Changmin.

Sunwoo jamás pensó que decir esas palabras podrían ser tan ligeras y pesadas a la vez, jamás pensó que siquiera diría algo así, pero allí se encontraba, siendo el, el primero en decirlo y extrañamente no se arrepentía, avergonzado obviamente, pero no arrepentido.

Porque el amaba a su Hyung. Amaba sus gritos de delfín que soltaba de la nada, amaba sus repentinos cambios de humor, amaba su sencillez y su manera tan inocente de ver la vida, amaba su pésimo sentido del humor, amaba su manera peculiar de ser.

Amaba la forma en la que dice su nombre, la forma en la que lo regaña, incluso su expresión de cuando lo golpea. Ama hacerle el amor, sus gemidos, sus gritos. Joder. Ama a Oh Changmin.

El moreno lo atrajo más a él por medio de sus manos en la cintura. Sus mentes sólo se concentraban en el placer que sentían y sus cerebros mandaban severas órdenes para seguir con el acto.

Changmin estaba muy emocionado, jamás creyó estar enamorado y que la persona le correspondiera. Pero allí se encontraba, enamorado de Kim Sunwoo y este amandolo de vuelta; así que fue él quien esta vez golpeó a Sunwoo en los labios con su lengua pidiendo el correcto permiso para introducirla; obviamente el moreno no se negó y abrió paso para que su húmeda lengua conociera nuevamente con delicadeza la del pelirojo.

Pese a toda esa adrenalina que ambos sentían e impulsaban, el beso terminaba resultando tierno y... eso gustó a ambos, era finalmente un beso romántico y suave, de esos besos en los cuales dos personas ponían en bandeja sus corazones enamorados demostrando el amor que se tenían.

El beso fue bajando entonces toda esa intensidad para convertirse en uno casto, puro y suave en donde ambos conseguían disfrutar de esa nueva sensación. Changmin fue dejando poco a poco el agarre en la nuca del pelirrojo.

El oxigeno jugaba en contra de ellos y tuvieron que alejarse con fastidio sólo por unos segundos en los cuales se dedicaron a observarse con unas de las más apacibles sonrisas del mundo.

Ambos traían los ojos vidriosos y los labios propios del efecto de un lindo beso, húmedos y parcialmente hinchados. El mayor se estremeció cuando Sunwoo comenzó a hacerle suaves masajes en la cintura entrando a su cuerpo esa incertidumbre de saber si estuvo en un error todo ese tiempo pensando que jamás podría gustar del alto. Optó por no pensar más en eso y colocó su palma sobre el rostro del menor sonriéndose ambos con alegría; Changmin acercó entonces su rostro una vez más en busca de un nuevo beso que lo llevaría definitivamente al cielo, un beso que no se le fue negado, un beso que hizo que su corazón palpitase incontrolable. La mejor sensación que había tenido en el mundo era la textura suave y húmeda de los bellos belfos de Sunwoo que encajaban tan a la perfección con los suyos.

-Te amo Sunwoo - Susurró tras separarse un poco puesto que era de vital importancia, sintió que si se lo guardaba por un segundo más, moriría; y qué bien que le hizo decirlo.

Se mantuvieron en el mismo contacto y posición por más tiempo, besándose y no dejando que nada les interrumpiese a pesar oir algunos murmullos en las habitaciones ajenas.

Se separaron con lentitud buscando algo de oxígeno que pudieran conseguir para sus pulmones, sonriéndose tímidos pero cómplices debido al progreso que habían hecho en cuanto a su relación.

-Dilo una vez más - pidió Sunwoo infantil dándole una corta mordida a su mentón y luego depositar un beso en ella.

Changmin sonrió haciendo desparecer sus ojos. Se dieron un beso mas, luego otro y otro y otro más.

Y por primera vez, el menor quería hacer de todo, desde brincar como liebre hasta arrastrase como lagartija, quería hablar, abrazar, sonreír, quería hacer todo lo que Changmin quisiera y consentir a su tierno novio de cabellos castaño...

¿Novio?

¿Soy el novio de este?

Sunwoo tragó saliva preocupándose por un instante puesto que de relaciones sentimentales no sabía nada además de saber que se abrazaban, besaban, compartían almuerzo y platicas, también follaban y eso. ¿Pero cómo podría ahora sobrellevar una relación amorosa con alguien tan opuesto a él? Y fue cuando recordó un dicho pronunciado por su hermana "Los opuestos se atraen"

Esbozó una sonrisa pensando en aquella frase que le devolvió la confianza, sí, era cierto que Changmin y él tenían tantas diferencias pero a lo largo del tiempo en el que estuvieron conviviendo se dio cuenta de que congeniaban demasiado bien, su relación era natural y espontánea, demasiado cómoda. Y entonces Sunwoo no tuvo más opción que asumir aquel satisfactorio cargo de ser el novio de su ex-virginal Hyung.

Ambos no volvieron a hablarse luego de declarar en voz alta el amor que se tenían, porque no hacía falta más palabras, con solo mirarse a los ojos podían darse cuenta de lo que antes no vieron o se negaron a ver, pero ahora simplemente lo aceptaban como si fuera que llevaban años esperando por dicho sentimiento, como si toda su vida estaban preparados para esto.

Lo único que hacían era besarse, acariciarse, mirarse, sonreirse y volver a lo primero.

Sólo el roce de los labios de Sunwoo con los de Changmin fue capaz de agitar sus sensibles corazones en un beso que significó demasiado para los dos.

El moreno ejerció presión en el beso listo para combinar sus labios con los de su Hyung. Quiso llorar de alegría ya que no esperaba encontrarse en esa situación y no tenía más miedo porque estaba vez todo estaba aclarado; él quería llorar como un niño, quería también sonreír, quería amar y gritarle a Changmin la falta que le hizo sin razón. Quería culpar al bajo por su ausencia en su vida, por su silencio, por su bobo detalle en iniciar una relación de forma mágica pero lo más importante era culparlo por haberlo enamorado como un loco.

El mayor podía sentir la sonrisa que se dibujaba en los labios de Sunwoo mientras lo besaba y no pudo ser más feliz él también puesto que esa acorazonada sonrisa se debía a él y no pensaba borrarla nunca, quería que el pelirrojo sonriese así siempre.

Sunwoo trazó con la punta de la lengua el labio inferior de Changmin antes de separarse. Él pudo contemplar con la tenue luz de la habitación el bello rostro del castaño, adorable y masculino al mismo tiempo. Las manos que aún acogían su rostro no sirvieron mejor pues empezaron a acariciar las mejillas del mayor con los pulgares consiguiendo sentir esa tibia sensación proviniendo de ellas. Los labios de Changmin habían quedado levemente hinchados junto con un exquisito brillo que hizo que Sunwoo volviese a capturarlos en busca de un corto beso.

Cuando ese pequeño beso terminó el mayor le sonrió amplio y nadie podía culparlo, él se encontraba feliz de poder finalmente estar involucrado en una relación amorosa con quien menos esperó pero con quien al mismo tiempo sabía que todo saldría bien.

Juntaron sus cuerpos en un abrazo que parecía durar la eternidad y ellos habían adquirido con su más puro amor el elíxir de la juventud para permanecer así por mucho tiempo.

Estaban convencidos aunque aún hubiesen ciertas dudas y temores pero algo dentro de ellos les decía que lo que hacían era lo correcto, que la elección de su amor era el correcto.

El menor aspiró el aroma de la cabellera castaña de su ahora novio regalándole un beso ahí.

-Tienes al novio más guapo ¿Sabes? - dijo juguetón el moreno casi ronroneando puesto que el castaño masajeaba la parte posterior de su cuello con sus dedos.

-¿Novio? - pregunto Changmin curioso mirando al alto divertido.

-Sep, fuimos novios hace minutos, que tú no te hayas enterado ya no es asunto mio.

Changmin sonrió, viendo el reflejo de la hermana de su novio en el, ya que le parecía a Songjin cuando mencionaba sus cientos de idols que se casaban con ella en su mente.

Cuando estaba por contestar a su ridículo Dongsaeng, la puerta fue tocada y ambos se miraron con las cejas juntas por ser interrumpidos y voltearon a a la puerta.

-¿Que? - grito Changmin.

-Vamos a cenar - se escuchó gritar del otro lado - Todos están abajo, solo le esperamos a ustedes.

Sunwoo chasqueo la lengua, aunque deseaba estar mucho más tiempo así con su Hyung, también deseaba comer y Changmin pudo darse cuenta de eso. Negó con la cabeza divertido, ni siquiera era consiente la forma en la que perfectamente lee a Sunwoo.

Luego de gritarle a Younghoon que bajaban enseguida (quien era el que había tocado su puerta) Miro a Sunwoo y este lo miro de vuelta, compartieron una mirada cómplice y ambos se tomaron de la mano y bajaron a la sala donde lo esperaban su grupo de amigos.

-Woonyoung no vendrá - hablo Chanhee bloqueado su móvil.

Kevin también había bloqueado el suyo al intentar marcar a Eric pero le daba apagado.

Ambas parejas estaban sentadas en el sofá esperando que la pareja faltante decidiera por fin aparecer. Cuando eso ocurrió, nadie dijo nada, sólo se limitaron a sonreír al ver a un Changmin con las mejillas pinceladas en rojo como el cabello del chico quien lo traía de la mano; los cuatro chicos se sintieron tan feliz por la pareja que no disimularon en verlos fijamente.

-¿Pueden dejar de mirarnos? - argumento refunfuñando el moreno por todas las miradas puesta en ellos.

Afortunadamente para Sunwoo y Changmin, Jacob se había encargado de la situación, hablando de cualquier tema al azar y así desviar la atención de ellos dos que se habían sentado aún con las manos entrelazadas.

-Es extraño que Woonyoung no quisiera venir - hablo Chanhee antes de meter una pizza a la boca.

-A de estar con Eric - comento Younghoon, tomando una servilleta y pasándole a su novio.

-Nogh - respondió el pelirrosa con la boca llena - Woonyoung estaba sola cuando le llame - hablo luego de tragar lo que tenía en la boca.

-Y cuando yo llamo a Eric, me da apagado - añadió el peligranate.

-Bueno, no siempre deben estar juntos - mencionó el de lentes.

Sunwoo frunció el ceño al oírlos, el también había notado algo extraño en ellos, aunque su novio tenía razón y no siempre deben estar juntos, pero ese no era el caso de ellos dos.

Cuando el fue a hablar con Woonyoung acerca de Changmin, había entrado sin más, ya que sabía que Luhan a esa hora ya estaría trabajando y cuando tocó la puerta de su cuarto y está le abrió vio algo extraño en su rostro, pero el moreno pensó que se debía a su recién despertar, así que le restó importancia, lo que si le llamo la atención es que Eric no se encontraba con ella, ya que su mejor amigo siempre pasaba por su novia e iban juntos al instituto, pero aquel día Changmin opacaba tanto su mente que no comentó nada.

-Estoy aburrido - dijo Jacob tirándose en el respaldero del sillón - ¿Y si jugamos algo? - Los miembros restantes lo miraron curiosos.

-¿Qué propones? - pregunto Younghoon.

-Verdad o reto - respondió su canadiense amigo al instante como si fuera que estaba esperando esa pregunta.

Los menores del lugar se echaron a reír al oír al rubio, haciendo que Changmin, Younghoon y sobre todo Jacob le miren raro debido a sus carcajadas.

-¿Que es gracioso? - pregunto el castaño al moreno.

-¿Verdad o reto? - hablo Sunwoo al parar de reír - ¿Que somos? ¿Un grupo de niños clichés?

-Tenemos dieciocho - dijo Chanhee y luego volteó a ver a su pelirrojo amigo - Bueno, Kevin y yo ya tenemos dieciocho - se burló - Sunwoo puede jugar con ustedes si quieren.

-¡Oye! - grito el mencionado.

-Oh, no sabía que a ustedes no le gustaban jugar eso - dijo Jacob de forma baja - Es que nunca lo jugue y ahora que tengo más amigos, quiciera quemar esa etapa de mi vida.

Kevin, Chanhee y Sunwoo se sintieron mal por burlarse de Jacob al proponer ese estupido juego; habían olvidado como eran esos tres Hyung, que las cosas que ellos veían aburridos y estúpidos, los Hyung lo veían de forma nueva y experimentable, así que Kevin para que la sonrisa de su Hyung favorito vuelva hablo:

-No te preocupes Hyung - dijo con una sonrisa - Aunque nosotros ya dejamos de jugar a ese juego desde los catorce, ahora jugaras con nosotros.

Sunwoo miro orgulloso a su amigo, aunque ninguno quería jugar a ese bobo juego de adolescentes hormonales, su canadiense amigo se había ofrecido solo para hacer sonreír a Jacob.

-Asi que pregunta lo que quieras a Sunwoo - finalizó Kevin.

¡Maldito bastardo! Lo maldijo el moreno en su mente.

Jacob asintió feliz, tomó una almohada y la abrazo haciendo enternecer a todos.

-Ok - dijo el rubio - ¿Quien fue tu primer amor?

Jacob había soltado esa pregunta con ganas de oír que ese niño estaba loco por su mejor amigo, aunque sabía que Changmin lo regañaría luego, al menos confirmaría lo obvio.

-¿No se supone que debo escoger entre verdad o reto? - dijo Sunwoo mirando mal a todos.

-Te reto a que me digas quién fue tu primer amor - formuló Jacob divertido provocando que el moreno girará los ojos.

-Cabe aclarar que esto fue hace años - enunció el pelirrojo dejando su lata de coca cola en la mesita frente a ellos - solo responderé eso y no quiero que me jodan.

Todos los miraban curiosos y ansiosos esperando que Sunwoo revele el nombre de la primera persona quién le había robado el corazón, excepto Kevin, el ya sabía quién fue dicha persona y solo esperaba que su amigo lo dijera porque quería ver tres reacciones en específico.

-Choi Chanhee.

Jacob, Younghoon, Changmin y sobre todo el pelirrosa miraban a Sunwoo con lo ojos y labios formados en una gran "O"

-¿Q-que? - pregunto Choi aún sin creerlo.

- Fue hace años - respondió Sunwoo desviando la mirada - De hecho fue por ti por quién supe que me gustaba los chicos, tu estabas en esa etapa de desarrollo y te volvías cada vez más hermoso, ya sabes, todos se te acercaban y yo me ponía tan celoso que no te hablaba por días - decía y bajo la mirada avergonzado - Estuve mucho tiempo enamorado de ti, hasta que un día simplemente te superé.

-¿Cuántos años tenías? - pregunto Chanhee con el rostro completamente rojo.

Kevin solo miraba la escena con una sonrisa, había olvidado ese pequeño detalle y ahora lo estaba disfrutando.

-¿Que caso tiene? - le contesto indiferente - Te dije que fue hace tiempo...

-¡Responde! - le gritó Chanhee ya alterado.

-Joder nosé ¿Catorce, quince? No me acuerdo - dijo encogiéndose de hombros.

Sunwoo tuvo que cubrirse el rostro ya que su pelirrosa amigo había saltado hacia el para empezar a darle golpes a ciegas y el no era como Changmin, los golpes de Chanhee dolían y fuerte.

-Pero...¿¡Porque me pegas!?

-¡Te odio! - decía Chanhee aún golpeándolo con sus puños - ¡No sabes el infierno que viví por tu culpa! - confesó y dejó de golpear a su amigo.

-¿Que? - pregunto Sunwoo confundido.

-¡Estuve enamorado de ti por años, fuiste mi primer beso y también el responsable de mi primer corazón roto! - grito - ¡Siempre te veía con personas diferentes y a mí me ignorabas y yo sufría estúpidamente por ti!.

Kevin se sentía el peor amigo por estar disfrutando de esto.

-¿De qué mierdas hablas? - formuló Sunwoo.

-Que tu también me gustabas pedazo de animal. - confesó dejando sorprendidos a todos.

-¿P-porque nunca me lo dijiste?

-No se - dijo Chanhee más calmado y lentamente fue a sentarse de nuevo junto a su incómodo novio - A la única persona quién me atreví a confesarle fue a Kevin.

Carajo, maldijo el canadiense, eso le pasaba por entretenerse con las desgracias ajenas.

-¿Que? - dijo Sunwoo sin creerse - El único que sabía mis sentimientos hacia ti era Kevin.

-Joder, que tarde es - hablo Kevin viendo su imaginario reloj en su muñeca - Vamos a mimir, dejemos a los Hyung descansar...

-Kevin Moon - dijeron el pelirrosa y pelirrojo al unísono.

-No me miren así - se defendió el mencionado - Ustedes confiaron en mi, no podía simplemente ir a revelar al otro de sus sentimientos, aparte yo sería incapaz de meterme en donde no me llaman - finalizó cínico.

Sunwoo y Chanhee lo miraron incrédulo por ser tan descarado - ¡Pero si eso es lo que más te encanta hacer! - le gritó el pelirrosa.

-Lo que sea - dijo el peligranate chasqueando la lengua - Si no fuera por mí, ustedes probablemente serían como Woonyoung y Eric y jamás habían conocido a Younghoon y a Changmin.

-Eres un...- dijo Sunwoo entrecerrando los ojos.

-De nada - replicó Kevin guiñandole un ojo.

Changmin y Younghoon se miraron no sabiendo como sentirse. Sus actuales parejas habían desarrollado sentimientos años atrás y ahora como si nada lo estaban comentando.

Jacob miraba sorprendido sus acciones. Como se habían discutido y arreglado solo en cuestión de segundos. Si el caso fuera en su grupo, si Changmin o Younghoon confesaban que se habían gustado alguna vez, el probablemente armaría un drama de una semana como mínimo.

La atmósfera volvió, pareciese que todos habían olvidado sobre lo de Chanhee y Sunwoo, ya que como ellos habían dicho, fue hace años y era innecesario siquiera seguir con el tema.

El juego volvió a iniciar, absolutamente todos elegían verdad ya que ninguno quería escoger reto por miedo a que lo hagan levantar del cómodo sofá. Pero las preguntas solo consintieron en preguntas bobas, ya no queriendo tocar terreno peligroso.

Así que gracias a eso sabían que Sunwoo comió arena hasta los seis, que Kevin solo hace poco supo multiplicar, que Chanhee acosaba a Younghoon porque le parecía muy guapo, que Jacob gusto de Kevin desde la primera vez que lo vio, que Younghoon era muy bueno rapeando. Lo que parecía no avergonzarse nunca era Changmin, el chico era tan trasparente que incluso sus respuestas eran predecibles.

Y entre risas y anécdotas tontas, dieron por terminado su cena de amigos.

-Ya debes irte - dijo Changmin sin soltar a Sunwoo.

Ambos se encontraban en la habitación del castaño, supuestamente solo para darse el beso de despedida, quien había ofrecido el menor por medio de un susurro.

Changmin se había levantado y Sunwoo lo había abrazado por detrás y en esa posición habían subido las escaleras con dificultad. Sus amigos lo miraban solo con un pensamiento en la mente; que ninguno se atreva a dejar ir al otro, ya que de todo corazón deseaban que esa nueva relación que recién esta floreciendo, sea sana y sobre todo duradera.

-Mañana a esta hora, estaremos pisando tierra japonesa - dijo Sunwoo entusiasmado.

-Pero antes debes ir a dormir - le respondió su Hyung parándose de puntillas para tratar de tener la misma estatura - Mañana tienes trabajo y debes ir a empacar.

El moreno sonrió avergonzado, desde la noche que su madre le había dado el permiso, el de la emoción ya había echo su equipaje.

Changmin se apresuró en tomar el rostro de Sunwoo con ambas manos y en plantar un casto besito en los labios ya listos del moreno, para luego besar su piercing.

El pelirrojo no podía con tanta azúcar que le daba Changmin en un solo día, lo peor de todo era que se estaba contagiando, a su medida, pero lo hacía. Separó sus labios y abrazó a su hermoso novio escondiendo su rostro en el hueco entre su cuello y hombros.

Changmin sabía que Sunwoo estaba ruborizado. Usó una mano para acariciar delicadamente la espalda de su novio.

-Sunwoo - murmuró Changmin dulce, recibiendo un "¿Mmm?" Cómo respuesta - Largo.

El moreno chasqueo la lengua y se alejó del cuerpo de su novio, el mayor le enseño la puerta y este le enseño su lengua cual niño de cinco. Changmin negó con la cabeza y vio al pelirrojo salir de su cuarto.

Ambos sonrieron una vez estuvieron solos, las cosas no estaban saliendo forzadas, no le daban ganas de escupir cursilerías como los dos pensaban que se sentían cuando se enamoraban, aunque era muy temprano para juzgar ya aquello, ya que no hacía más de tres horas en la que "Sunwoo decidió hacerlo su novio" el presentía que las cosas no cambiarían. Estarían los besos, insultos, las peleas de siempre y sobre todo el sexo y los dos esperaban que así fuera, las cosas estaban perfectamente cómo están, solo esperaban que absolutamente nada cambiará.

Cuando describo a Kevin sonreír mientras da su típico "De nada" me lo imagino así ...

Bueno en fin...esos tontos ya se dijeron ailobeyou...¿No sé lo esperaban, no?

11 de septiembre del 2021