Ambos ingresaron a la casa Kim, el menor totalmente furioso y Changmin aún sin entender la situación.

-¡TU! - grito el moreno al llegar a su cocina y encontrar a su hermanita poniendo la mesa.

Su hermana salto de su lugar y volteó a ver a Sunwoo sorprendida.

-¿Q-que haces aquí?

-Si no sabías, está también es mi casa - la desafío acercándose a ella intimidante.

La menor, aunque se asustó al principio, no se dejó achicar, ella ya estaba acostumbrada al temperamento de su hermano mayor.

-Que bueno que me haces acordar, ya que pareciese que solo usas esta casa como un hotel - la pelinegra se dejó mostrar que no estaba absolutamente intimidada - O un motel...

Changmin se avergonzó por la referencia.

-¿Que son estos gritos? - la madre de ambos ingreso a la sala sin entender el porqué de los gritos de sus hijos.

Changmin se arrepintió de no pedir a su primo que lo esperara afuera, así él podría solo escaparse de esa incómoda situación y huir.

-¡Que tu pequeña escoria tomo mi teléfono robo el número de mi Hyung y lo llamo!

-¡Solo quería conocer a tu novio, se suponía que tú deberías estar en alguna esquina emborrachandote!

-¿¡Ese era tu plan!? - río alterado y se acercó a su hermana casi empujándola - Que sea la última vez Kim Songjin que tú te atrevas a tocar mís co...

-¡Suficiente! - grito SunGa - ¿No tienen vergüenza de comportarse así?

-¡Tu hija se atrevió a husmear en mi teléfono, es a ella a la que le tiene que dar vergüenza!

-¡No me grites! - lo regaño su madre - Songjin, no quiero que vuelvas a tocar las cosas de tu hermano - también reto a la Kim menor.

-Solo quería...

-No me importa que querías, estuvo mal y lo sabes.

La niña bufo y luego de mirar mal a su hermano, se dio le vuelta y salió del comedor. SunGa volvió a mirar a su único hijo.

- Y tú Sunwoo - suspiro - ¿Te parece que fue manera de venir a atropellar así a tu hermana?

Sunwoo río - ¿Es enserio?

-Solo es una niña, estaba curiosa con tu nuevo amigo - Sunwoo chasqueo la lengua - Deberías de tratar más con ella, eres la única figura paterna que tiene, debes...

-¿Y eso la culpa de quién es? - le dijo Sunwoo casi con odio.

Al igual que su hermana, solo dio la vuelta y salió del comedor, olvidando al pobre Changmin que estaba modo planta, una planta muy incómoda si se lo preguntan.

SunGa puso ambas manos en su cintura y miró hacia arriba pestañeando tratando de retener las lágrimas que querían salir.

-Lamento que vieras eso.

-No, señora Kim, no debe disculparse - Changmin hablaba bajo, el solo quería salir de esa casa.

SunGa se sentó en la silla más cercana.

-¿También te llevas así con tus hermanos?

Changmin miro a ambos costados, como preguntándose si le hablaba a el.

-¿Eh? - la miró confundido - Ah no, no tengo hermanos.

La señora Kim solo asintió, el comedor se llenó de un silencio incómodo, la madre de Sunwoo solo estaba sentada, sin decir nada más. Changmin la pudo observar mejor, era una señora que no pasaba sus treinta y cinco años, aunque tenía el rostro cansado, unas notorias ojeras y el cabello seco y descuidado.

SunGa suspiro y se frotó el rostro.

-Tienes unas bonitas manos - Changmin rompió el silencio.

El tomaba eso como unos de sus defectos, no sabía lidiar con esas clases de momentos y sin darse cuenta siempre dice lo primero que se le viene a la mente.

La señora Kim miro al pelinaranja y luego observo sus manos y sonrió, ella pensaba que el mayor era un buen chico.

-¿Tienes hambre? - hablo - Hice comida, siempre suelo cocinar más con la esperanza de que Sunwoo venga a comer - Changmin frunció el seño por lo escuchado - Y ahora que Sogjin esta molesta, supongo que tampoco saldrá a cenar.

Eso sí ya no le gusto al pelinaranja, fue criado de otra manera y una de esas era que tanto el desayuno, el almuerzo y la cena eran muy importantes, no importa el humor que tengas o si tienes hambre o no, compartes obligatoriamente la mesa y compartes con tu familia.

-O podríamos cenar todo juntos - ni sabía de dónde salió eso, pero igual lo propuso.

-No conoces a mis hijos, si están molestos, no habrá manera de sacarlos.

-No se preocupe señora Kim, yo...

-Changmin, no es necesario que te involucres...

Pero Changmin solo le sonrió confiado a la mujer, el hará que esos dos testarudos salgan a comer con su madre así tenga que sacarlos de sus orejas.

Toco la puerta nervioso, no quería ser un metiche, pero de alguna manera sentía que lo que pasó fue su culpa y quería solucionarlo, no deseaba ver la expresión de tristeza en la señora Kim nuevamente.

-Mama, no quiero comer - Se escuchó del otra lado.

-Soy yo - respondió el mayor recargando su frente en la puerta.

Luego de escuchar varios movimientos y luego pasos, la puerta finalmente fue abierta.

-Hola - saludo el pelinaranja - ¿Puedo pasar?

Sogjin asintió y lo dejo pasar. Changmin sonrió al observar el cuarto de la Kim menor; tenía póster pegados por todas partes, peluches al rededor de toda su cama, un estante llenas de discos y phoscard.

Sogjin se sentó en su cama con la cabeza gacha y jugando con sus dedos.

-¿Quiénes son? - pregunto apuntando al póster que estaba sobre su cama. Sinceramente no le importaba saber quiénes eran, pero quería que la hermanita de Sunwoo deje de estar nerviosa.

La niña lo míro entre indignada y sorprendida - ¿¡No sabes quién son!? - le gritó a lo que Changmin negó - ¡Son el mejor grupo de la historia, la banda más talentosa, más completa, la más visual, la más TODO!

Changmin no sabía porque, pero por la mirada que le daba la pelinegra, sentía que debia disculparse.

-¿Bts? - pregunto, ya que es el único grupo que sabía que se escuchaba por todas partes y también el único grupo del kpop que conocía.

-¡Claro que no! - Changmin solo se pregunto porque seguía gritando - ¡Son GOT7!

Changmin solo agrando los ojos "sorprendido" ya que sentía que si hacía un mal movimiento la Kim menor saltaría por el.

-No puedes aceptarte como novio de mi hermano si no te gusta Got7.

-¿Que? - la miró confundido - Mira, no sé de dónde sacas que yo y tú hermano tenemos algo, pero yo solo soy su Hyung. - trato de explicarle.

"Clarooooo" pensó la pelinegra recordando los gemidos que lo despertaron aquella noche.

Changmin pudo adivinar el pensamiento de la menor y carraspeo incómodo, así que recordó para que vino. - Vamos a cenar, tu madre nos espera - dijo ofreciéndole su mano.

La niña salto feliz de su cama y tomo la mano del mayor - Que suaves manos tienes - comento la pelinegra acariciando la mano de Changmin.

El pelinaranja solo le sonrió ¿Era normal que una niña sea tan bipolar?

-Cariño ¿Puedes esperarme en la cocina? debo traer a tu hermano.

La niña le dio una mirada pícara que hizo avergonzar al mayor y luego ella salió corriendo rumbo a su mamá.

Changmin suspiro, ahora venía lo más difícil.

Changmin abrió la puerta sin siquiera preguntar si podía pasar, lo cual debió pensar considerando el humor de Sunwoo.

Pero totalmente opuesto a sus pensamientos, Sunwoo se encontraba tranquilo, sentado en el medio de su cama, sosteniendo una nota, que Changmin tuvo una sospecha de que pudiera ser.

Sunwoo levantó la mirada y al observar que solo era su Hyung quien había entrado sin avisar sabiendo que odia cuando hacen eso, solo dio una leves palmadas a su lado, invitándolo, a lo que Changmin dudoso fue a sentarse.

-Me siento el hombre más idiota - dijo extendiéndole la nota, Changmin la tomo y la leyó.

"Niño idiota, apenas abras los ojos quiero que me escribas, te deje un conjunto de ropa a los pies de la cama, bañate si quieres, no, hazlo, apestas horrible. En la cocina te deje comida, sólo calienta la y también te deje algo para el dolor de cabeza, ni se te ocurra revisar mis cosas, creeme me daré cuenta -_-."

Ambos soltaron una risa.

-La letra es idéntica a "Q" no sé porque no la reconocí. - el moreno negó.

-Ya lo dijiste, porque eres un idiota - jugo. Sunwoo lo miro ofendido y se atrevió a morderle el hombro - ¡Auch!

-Para la colección - dijo sonriéndole inocente, a lo que Changmin le golpeó fuerte en el hombro - ¡Auch! - tomo la almohada del menor y lo volvió a golpear - ¡Dolió!

-Ese era el propósito.- le dio otro golpe.

- ¡Ya van tres golpes!

Otro almohadazo - ¡Cuatro! - luego le dio otro directo a la carta - ¡Cinco!

Sunwoo rápidamente tomo la almohada que su Hyung usaba para golpearlo y lo tiró al piso - ¿Porque me pega? solo lo mordí una vez.

-Ahora recordé que no te había golpeado lo suficientemente por dejar mi cuerpo lleno de marcas.

-Ahh era eso...- otro almohadazo justo en el pene.

-"Era eso" - bufo el pelinaranja - Tengo mi cuerpo llenos de chupetones y mordidas.

- ¿Puedo ver? - El moreno se atrevió a soltar una risa y tomo su otra almohada antes que Changmin lo golpee nuevamente.

-Cuando lo hice, no pareció quejarse - se burló, tomando a Changmin de los hombros y empujándolo en su lado de la cama.

-Porque en aquellas circunstancias no era consciente de mis actos - respondió con los brazos cruzados, Sunwoo se sentó encima.

-Tampoco yo, así que ya no me golpees. - el moreno puso ambos brazos a cada lado de la cabeza de su mayor.

-No prometo nada.

- Lo mismo con mis marca.

Ninguno de los dos volvió a hablar, pero no despegaron la mirada del otro, ambos estaban deseosos de volver a probar los labios del otro.

Changmin observaba como Sunwoo sacaba su lengua y remojaba su labio inferior, lengua que el tuvo ganas de retenerlo con sus dientes para luego chuparlo y que Sunwoo suelte ese gemido que lo pone loco cada que lo escucha, para luego proceder a besar esa carnosa boca, esos labios que solo sabían hacer maravilla...

-¿Deseas besarme Hyung? - pregunto Sunwoo acercándose lentamente al rostro de su mayor.

Y Changmin más desinhibido, asintió mirándole a los ojos para luego volver a viajar su mirada en esos labios que ya estaba a nada de tocar lo suyo...

Sus narices ya estaba rozandose, Changmin lo esperaba con los labios abierto, deseoso por qué Sunwoo le coma la boca como vulgarmente dice el menor...

-Mama pregunta si saldrán a comer, que la comida se enfría - Sogjin golpeó la puerta interrumpiendolos.

Ambos muy a su pesar se separaron.

-Vamos a cenar - dijo Changmin arreglándose la ropa.

Sunwoo lo miro como si fuera que acaba de salirle tres cabezas - No iré a ninguna parte.

-Sunwoo tu madre preparo la cena, no puedes...

-Si puedo. - lo interrumpió el moreno frunciendo el seño.

-Sunwoo...

-Changmin...

-No iré, así que pierdes el tiempo - Sunwoo se recostó en la cabecera de su cama y tomó su teléfono.

-Si vas conmigo, te tocaré el pene.

-Acepto.

-Madre, esta deliciosa la rica comida que nos has preparado - hablo Sunwoo con una sonrisa extremadamente fingida.

Changmin quería golpearse o golpearlo ya que Sunwoo era el peor actor del mundo.

Bien, no sabía porque Carajos propuso tocar el pene del menor, pero ya lo dijo y no pudo retractarse, pero la única condición era que su madre tenga una cena satisfactoria y Sunwoo se lo tomó muy enserio, ya que no paraba de alargar tanto a ella como a su comida.

Todo parecía bien...

Su madre y su hermana no creían su pésima actuación.

Su hermana le miraba como preguntándose porque mejor no fue abortado.

Y su madre le miraba con preocupación pensando qué tal vez su niño estuviese drogado.

Y Changmin quería clavarle el tenedor en el muslo, Sunwoo estaba sobreactuando haciendo la cena más incómoda.

-Me alegra que te guste cariño.

-Como No Podría Gustarme La Comida Que Mi Querida Madre Nos Prepara - acentuaba cada que decía una sílaba pareciendo más irreal su actuación - Gracias Señor Jesús Por Bendecir Está Familia Que Ni Siquiera Es Católica. - finalizó sonriendo entre dientes. Parecía la sonrisa de Stich.

-Bueeeno - corto Sogjin porque ya le estaba dando miedo su hermano. - ¿Y como se conocieron?

-Que te importa - escupió su hermano, a lo que recibió una mala mirada de su Hyung - Digo, No Es De Tu Incumbencia Hermosa Hermana, Métete En Tus Asuntos y Ve A Ver Si Ya Puso la Marrana.

La madre negó divertida, sabía que la rara actitud de su hijo se debía al pelinaranja que se encontraba a un lado. Se sorprendió cuando Sunwoo ingreso al comedor, se acercó a darle un beso y le dijo que tenía tanta hambre y que le esperaba en la mesa, no sabía que poder sobrenatural hizo el amigo de su hijo para lograr que Sunwoo hiciese lo que ella intentaba hacer por meses, pero lo agradecía infinitamente.

-De hecho - hablo SunGa - Yo también estoy curiosa por saber su relación- Su hijo lo mira mal - De amistad...

-Claro - contesto Sunwoo sonriendo entre dientes - Pregunten Por Mí Vida Privada, Cuando Ustedes Saben Que Odio Hablar De Mi.

-Nos conocimos porque mi amigo es novio de su amigo - explicó Changmin suave, inconscientemente poniendo una mano sobre la de Sunwoo.

Es lo mismo que su mamá hacía con su padre cada que él se altera, pone su mano sobre la de él y hace girar su dedo pulgar hasta lograr que su padre se calme y sin darse cuenta estaba haciendo lo mismo con el menor.

Al igual que el mayor, Sunwoo tampoco fue consciente de la forma en la que se calmaba, simplemente al sentir el tacto del bajo, su cuerpo automáticamente se relajo.

La señora Kim y su hija se miraron cómplices, pero ambas decidieron no decir nada al respecto, aunque la menor tenía una ganas de molestar a su explosivo hermano.

-¿Y dormirás con mi hermano? - Songjin se mordió la lengua, no pudo evitarlo, aunque se estaba muriendo de la curiosidad al saber si ese lindo pelinaranja y su hermano volverán a pasar la noche juntos.

Changmin agrando los ojos, se había olvidado de ese detalle.

-Puedes quedarte a dormir aquí si quieres querido - propuso la señora Kim.

Changmin rápidamente se levantó de la mesa y negó - Gracias señora Kim, pero no es necesario, mañana tengo Universidad y solo voy a llamar un taxi y...

-Hyung quédate - hablo suave el moreno, tomando la muñeca del mayor y haciendo que vuelva a sentarse - Mañana yo te llevaré en la moto.

-¡No volveré a montar esa cosa! - respondió Changmin mirando con horror al pelirrojo.

El alto estuvo a nada de soltar un "prefieres montar otra cosa" pero sabía que Changmin le daría una cachetada por atrevido y su mamá otra por desubicado y su hermana también pero solo para no quedarse atrás.

Luego de varios refunfuños, logro hacer que su Hyung accediera a dormir nuevamente con el.

-Solo insististe tanto porque tenemos un acuerdo. - dijo Changmin sentándose en la cama del menor mientras le enviaba un mensaje a Jacob diciéndole que se quedaría a dormir en la casa de su primo.

No quería que Jacob se preocupe y terminé llamando a su mamá.

-Eres muy listo Hyung - respondió frente a su armario para buscar una pijama para ambos.

Aunque no era para nada cierto, de hecho se había olvidado totalmente del trato cuando Changmin mencionó que ya debía irse, si le ofreció su cama no fue con segundas intenciones, simplemente le preocupo el hecho que su Hyung se expusiera a altas horas de la noche, pero obviamente Changmin va a morir sin saber eso.

-Ten - dijo extendiendole un conjunto de pijama azul de cuando tenía quince.

Changmin lo miro dudoso - ¿Y eso que odias que otros usen tu ropa?

-Si te la ofrecí es por algo... - dijo molesto empezando a desvestirse.

-Bien- dijo tomando la ropa - Pero si mañana enloqueces y me pides tu ropa a gritos, te golpeare.

Sunwoo rodó los ojos.

Ambos ya se encontraban acostados uno al lado del otro, sin siquiera tocarse, ambos mirando el techo como la cosa más interesante.

El pelirrojo simplemente pensaba, aunque trataba de no darle muchas vueltas, las palabras de su compañera hacian eco en su cabeza. Changmin por otro lado, se encontraba sumamente nervioso, quería ir y golpear a su yo del pasado de dos horas que ni siquiera se atreva a insinuar tocar el pene de su menor, pero ya está hecho, aunque Sunwoo ni daba indicios de querer que Changmin ya cumpla su parte del trato, igual estaba inquieto.

-Changmin, dios, deja de moverte - lo regaño - No haremos nada, deja de preocuparte - golpeó la frente del mayor con su dedo.

-No estaba preocupado - bufo.

-Hyung, pareciese que estás a punto de llorar.

Changmin lo miro ofendido - ¡Claro que no! - luego recordó quienes más estaban en la casa - Claro que no- susurro más bajo - Tu pene no me intimida.

-Aja.

Pero luego ninguno volvió a hablar, el silencio era tanto que se podía escuchar la forma en la que ambos tragaban saliva.

-Antes me imaginaba que al día siguiente de mi primera vez me levantaría temprano a hacerle el desayuno a mi novia para luego sorprenderla, primero despertarla a basé de besos.

Changmin no sabía porque dijo aquello, pero simplemente quería decirlo.

Sunwoo río y Changmin lo miro molesto - Muy cliché - el moreno se acomodó de lado para poder ver mejor a su Hyung - ¿Te levantarias temprano a hacerle el desayuno? - río - ¿Te imaginabas follarla de noche?

Changmin asintió tranquilo - En un lujoso hotel, luego de haber tenido una velada maravillosa.

-En cambio, lo perdiste en un lujoso coche luego de haber tenido mis maravillosos dedos.

Changmin río y por primera vez lo hizo con Sunwoo.

El pelinaranja también cambio de posición y se acostó de lado mirando al moreno.

-Hoy me prestaste nuevamente tu ropa - susurro - me harás sentir especial.

Sunwoo se acercó más y cuando estuvo donde quiso, envolvió la cintura de su mayor en sus brazos - Que no se te suba los humos, solo eres mi Hyung favorito. - se pegó totalmente al cuerpo contrario -Tócame. - rogó por primera vez el moreno.

-No se que haré con mis manos.

Sunwoo bufó con molestia y Changmin se quedó mirando sus labios rojos cuando tímidamente poso sus palmas en el pecho del menor.

-No quiero que te sientas obligado a nada - susurro sobre su boca.

-Lo se - susurro igual no despegando su mirada del piercing - Pero y-yo quiero.

Esta vez sí alzó la mirada para demostrar a Sunwoo que estaba seguro.

Las manos de Changmin pasaron a su cuello para descansar a sus lados, para luego apartarse.

Sunwoo gimió con impaciencia y el mayor suspiró, sin siquiera seguir una orden, Changmin por voluntad propia se había sacado la camisa del pelirrojo.

Sunwoo trago grueso al ver a su Hyung con el pecho descubierto, le encantaba la forma suelta de ser de Changmin cada que se encontraba caliente.

-Solo déjate llevar Hyung, no me iré a ninguna parte, solo haz lo que tus manos te pide a cosquillas.

El pelirrojo se sorprendió, ya que lo primero que toco Changmin, fue su pelo tras su nuca, lugar que no sabía que era su punto débil, pero allí estaba, casi ronroneando de placer por el simple hecho de tener las suaves manos de su mayor masajeando su mayor zona erógena.

Las grandes manos del moreno empezaron a acariciar su cintura, aunque aún se encontraba de lado mirándose, no le pareció incómodo para ninguno la posición. Sunwoo lentamente bajo su mano por el muslo descubierto de su Hyung y empezo a acariciarlo provocando un suspiro en Changmin, luego tomo una pierna del pelinaranja y lo subió encima suyo, Changmin trago grueso ya que así podía sentir la dura verga de su Donsaeng, y probablemente el la suya.

Sorprendiendo a ambos, fue Changmin el que tomo la iniciativa de cortar toda distancia entre ellos, ya que aún tenía su mano tras el cuello del menor, atrajo a este a un beso, un beso lleno de brusquedad, sin cuidado, un beso con una pasión explosiva.

Sus manos cayeron sobre el pecho de Sunwoo nuevamente , una vez que el moreno empujó la cabeza hacia un lado, liberando sus labios necesitados y empezó a chupar contusiones a lo largo de sus clavículas, como un collar.

-S-sunwoo ya no dejes marcas~

Pero el menor lo ignoro totalmente, empujó a Changmin para meterse en su ahora nuevo lugar favorito, entre las piernas de su Hyung. Empezó a besar el largo cuello de Changmin y este se entregó totalmente, inclinando su cuello a un lado para que Sunwoo deje su nombre en chupones si quiere.

El moreno tomó la mano derecha de Changmin , guiándolo hacia abajo entre sus cuerpos. El pelinaranja tuvo que reprimir un grito cuando sabía que definitivamente había tocado la polla dura de su menor a través de la fina tela.

- Hazlo por favor, me estoy volviendo loco~

-N-no sé cómo...

-Solo haz lo que haces con el tuyo.

Sunwoo trazó un camino de besos ahora descendientes conduciendo entonces sus gruesos labios hacia el pecho de Changmin quien desde un inicio se propuso a contener su gemidos, ya no quería miradás pícaras de parte de la hermana del menor.

Changmin estaba tendido totalmente sobre su espalda, con su pecho desnudo a los labios del moreno que se hallaba de rodillas, puestas estas a los lados del cuerpo del mayor, y con la cabeza inclinada hacia abajo.

Sunwoo sabía que Changmin aún no estaba preparado para dejar que le chupen sus pezones, pero el ya no podía, sentía que si no ponía sus labios en esos pezones rosas que lo llamaban a gritos a ser chupados moriría y como el niño obediente que no es, lo hizo.

Separó sus grueso labios y dejó ir la lengua trazando un contorno circular al rededor del pezón derecho de su su Hyung para después engullírselo en la boca. La exquisita sensación provocó que Changmin gimiese por la sorpresa, igual eso motivo al menor a seguir con ese delicado trabajo oral sobre el pezón de su Hyung; dejó ir aquel empezando a juguetear con su lengua sobre este, golpeándolo con suavidad buscando escuchar más jadeos de Changmin los cuales eran su primordial afán.

Ajusto con sus labios aquel pezón luego de juguetear con su lengua, Changmin estaba a nada de hacer sangrar sus labios debido a la fuerza con la que los mordia, jamás, pero jamás pensó que tendría unos labios mamandolos, pero joder, si no se ponía a gritar de placer con esa voz chillona que aún desconocía del porque se vuelve aguda cada que está excitado, solo es por el respeto a la casa y a sus habitantes.

Siguió con el otro pezón repartiendo besos entre la intersección de ambos pezones hasta finalmente conseguir tenerlo entre sus labios. Sunwoo sólo podía disfrutar del sinsabor en ellos pero amaba su delicada textura, un par de ricos botones de piel rosada tan suaves que lograban despertar la bestia en su interior, el moreno quería morderlos a su gusto. Chupó, lamió y se engulló los pezones vírgenes de su su hyung como si su vida dependiese de ello.

El jadeo de Changmin sonó más bien como el permiso del cielo para que Sunwoo pudiese morderlos y no sólo lamerlos. Su pene palpitó y una sonrisa satisfactoria se dibujó en sus labios que traían mismo chupón el pezón que iba lamiendo. Su boca era hábil, toda maestra, recalcando una vez más que era el mejor con sus labios, los gemidos de Changmin eran la prueba clara del buen trabajo que hacía porque sonaban deliciosos, intensos, moderados pero delirantes.

Las manos del pelinaranja que habían estado posadas sobre la cabeza del alto fueron poco a poco descendiendo haciendo un corto paseo por la espalda ancha de Sunwoo; fue sólo corto pues el propósito de Changmin era hacer que sus manos se dirigiesen hacia otra parte, así que, como pudo, hizo que sus manos finalmente tocasen el endurecido bulto de Sunwoo.

Sunwoo dejó de lamer por la sorpresa para permitirle a su boca liberar un excitante jadeo, Changmin no dejaba de sorprenderlo. Le enternecio esa torpeza con la que Changmin moldeaba su gran bulto.

-¿Quieres verlo? - besó el oído de su hyung - ¿Quieres ver mi pene?

El tono seductor en la pregunta morbosa de Sunwoo encendió cada poro de la piel de Changmin. Sunwoo consiguió el afirmativo jadeo por parte del más bajo, separándose muy a su pesar, del cuerpo del moreno, ya que sentía que le faltaba el aire. El pelirrojo quiso gruñir, pues odió la sensación de no sentir el calor emanante del cuerpo de Changmin pero supo camuflar bien eso con el morboso pensamiento en donde ya mismo se imaginaba a las manos de su hyung ajustando el grosor de su pene tras masturbarlo.

El más alto tomó el borde de su pantalón pijama y fue bajándola lentamente buscando enloquecer a Changmin.

Sunwoo posó la mirada sobre la boca entreabierta del mayor imaginándose que se vería linda, mucho más linda ajustando el contorno de su polla.

Sunwoo se libero del pantalón tirándolo en el piso, ahora sólo estaba en bóxers y ya se le marcaba la enorme erección que ocultaba. El deseo en los ojos de Changmin volvía loco a Sunwoo y hacía el esfuerzo para controlarse, debía ser muy delicado y paciente con su Hyung pese a que resultaba imposible pues la expresión de Changmin, hecha una mezcla de ternura y perversión, le gritaba a la cara el tomarlo con fuerza.

Sunwoo no perdía la mirada del rostro del mayor, específicamente de sus ojos los cuales también lo observaban transmitiendo de forma muda el mismo deseo. El moreno asintió y tomó el elástico de sus bóxers y tiró de ellos hacia abajo liberando una gran erección latente, mucho más admirable de lo que Changmin recordaba.

El pene de Sunwoo traía el mismo color bronceado, era largo, grueso, el glande era color rosa y se hallaba barnizado debido al líquido pre-seminal que Sunwoo había estado liberando producto de la potente excitación que llevaba. Changmin siguió apreciando, bien, aquella noche ya lo vio, pero solo recuerda la envidia que sintió al ser más grande que el suyo, pero ahora podía observar cada absoluta vena, fijó su mirada ahora en los testículos, un par de bolas endurecidas recubiertas por el tejido de piel que se veía tan liso, Changmin quería picotear uno para comprobar si son suaves como se los ve. Regresó la mirada hacia el miembro en sí notando que en aquel doloroso grosor, habían prominentes venas creando un relieve desigual que lo forzó a lamer sus labios.

-Tócala... Hyung...

No esperó más y elevó sus pálidas manos en petición a lo que el menor en un grave jadeo suplicó, atrapó entonces la gorda polla de Sunwoo con ambas manos, a penas si quiera podía cerrar el puño completo mientras ajustaba la erección del pelirrojo con sus manos. Sonrió con satisfacción importándole poco o nada revelar ese lado pervertido suyo, el pene de Sunwoo era cálido, aterciopelado, Changmin comenzó a masturbarlo lentamente logrando que un gemido prolongado y delirante se escapase de los labios de Sunwoo.

-Sigue...

Changmin sintió entonces que su menor le daba el permiso para sujetar su pene a su antojo, importándole que pudiera hacer algo mal. Inició con masturbaciones ya más rápidas haciendo que sus ojos viajasen hacia arriba pasando por el marcado abdomen de Sunwoo, luego por su formado pecho barnizado por el sudor y finalmente parar en su rostro en donde se expresaban los más orgásmicos gestos. Sentía que el miembro del menor palpitaba cada vez más seguido.

-¿Te gusta asi? - pregunto tímidamente el mayor

- Sí, sigue haciendo eso~

Changmin siguió sus instrucciones para difundir el líquido preseminal sobre ella, mojandolo un poco para poder deslizar su mano hacia arriba y hacia abajo más fácil.

- Joder, sí~ .- Sunwoo animó y Changmin en realidad se sentía bien y orgulloso de sí mismo ya que era capaz de complacer a Sunwoo.

-Más rápido, vamos. Juega con mis bolas.

Changmin estaba confundido al principio, pero luego obedeció rápidamente, lo que provocó un jadeo deslizarse entre los labios entreabiertos de Sunwoo.

-Ven aquí, pero no te detengas.- Sunwoo pidió y Changmin se inclinó para besarlo, aunque no fue correspondido del todo.

-Tu mano es tan buena... bien príncipe más rápido, vamos.- Sunwoo exhaló y Changmin estaba absolutamente sin habla cuando miró que el moreno lo estaba disfrutando tanto como él jamás pensó que lo haría ¡Estaba tocando un pene que no era suyo y no le estaba dando asco, más bien todo lo contrario!

-Estoy cerca Hyung.

Changmin aceleró los movimientos, y se sorprendió de que su brazo no había realmente sido agobiante en el proceso.

- Uf, carajo. Voy a... ahh~ - Sunwoo gimió y echó la cabeza hacia atrás mientras sus músculos se apretaban, mientras se venía en el pecho de oro del pelinaranja.

Changmin le sonrió triunfante, con el sueño apoderándose de el, , pero aún así no dejo de sonreír a Sunwoo como si fuese que acaba de recorrer la maratón del año. Sunwoo igualmente le sonrió a un Changmin que luchaba con sus ojos para que se mantuvieran abiertos.

-Te dije que lo hacía rico - dijo y luego cerro sus ojos.

Sunwoo soltó una risa. Tal vez, solo tal vez, podría empezar a llevarse bien con este idiota.

-¡Eres tan molesto! - grito Sunwoo a primera hora de la mañana del día siguiente.

¿La razón? Changmin por supuesto.

-¡Solo te pido que te vayas a comprarme un cepillo de dientes!

-¡Ya te dije que uses el mío!

-¡Y mi respuestas siempre será un Guacala!

La Kim menor rodaba los ojos, ella podía escuchar su mini discusión desde la cocina.

-Dios, eres tan molesto - bufo Sunwoo agachándose bajo la cama para ver si no se encontraba su corbata del colegio.

-Perdón por cuidar mi higiene vocal.

-Lo que te hace falta para que te calles es mi...

-¿Seguirán así? - se pudo escuchar una tercera voz dentro de la habitación.

Sunwoo se levantó molesto ya con su corbata en mano y mirando mal a la pequeña demonia que acaba de ingresar a su cuarto sin permiso alguno.

Cuando estaba a nada de gritar las una y mil groserías a su hermana, está le mostró la mano en señal que se detuviera en su discurso.

-Dame dinero, iré a comprarle el cepillo en el almacén de la vuelta.

Sunwoo chasqueo la lengua, pero camino hacia su mesita de luz y tomó su billetera para sacar dinero para que se le compré el dichoso cepillo al molesto de su Hyung.

-¿Podrías llevártelo contigo? - le susurró a su hermana a lo que ella soltó una risita. Miro por última vez a sus dos mayores y se dispuso a salir de su casa.

-Sunwoo...

-¿Que? - contesto seco, estaba frente a su espejo poniéndose la corbata..

-No sé que ponerme.

-¡Agh! - soltó un jadeo al aire. Luego volteo a mirarlo - ¿Y porque no te pones lo que te sacaste ayer?

Changmin arrugó su nariz - Está sucia, huele a comida.

Sunwoo rodó los ojos, camino hacia su armario y abrió la valijera ya que allí se encontraba sus ropas viejas. Luego de mirar esperando ver una prenda que le sirva a su Hyung, tomo una camisa celeste que le había regalado su madre por sus dieciséis, camisa que el jamás uso por cierto y unos jeans rasgados de cuando tenía catorce y se lo tendió a su Hyung lo cual miraba extrañado.

-Pontelo.

Changmin hizo lo pedido.

-Huele a guardado y a armario.

Sunwoo cerro sus ojos buscando la más mínima paciencia para seguir tolerando a su Hyung y no matarlo con la manga de su camisa con olor a guardado y a armario.

-Entonces ponte tú ropa que huele a comida.

Changmin lo miro molestó y ya más familiarizado con el hecho de que Sunwoo ya lo vio desnudo más de una vez, se desvistió y vistió sin vergüenza a un costado. Se paró frente el espejo y empezó a arreglarse el cabello, dio un salto por el susto cuando sintió unos cálidos brazos enroscarse en su cintura.

-Desnudarte frente mío señorito Oh - le susurraron en su nuca - ¿Y tú decencia?

-Junto a la tuya mientras me observabas - suspiro de placer mientras Sunwoo se le pegaba por detrás.

-Ver tu cuerpo tan blanco como un lienzo, solo decoradas con mis marcas me llenan de satisfacción - Sunwoo acariciaba la nuca de Changmin con su nariz.

-¿P-porque?

Pero Sunwoo en vez de responder, dio la vuelta a Changmin y antes que este diga algo, apretó su cintura y se agachó para tomar sus labios entre los suyos. Changmin aunque sorprendido, correspondió igual, coloco un brazo tras su cuello y la otra como siempre enterrado en el cabello del moreno.

Aunque el beso estaba lleno de pasión, lo hicieron lento, sin prisa, tomando su tiempo para saborear el labio contrario, Changmin chupaba la lengua de Sunwoo de una manera tan exquisita que si no se ponía gemir como Changmin siempre lo hace, solo era por vergüenza.

Empujó suave el cuerpo de Changmin hacia la pared más cercana y empezo a dar embestidas sobre la ropa mientras disfrutaba del masaje que el mayor le proporcionaba en su cuero cabelludo.

La lengua de ambos eran tan ágiles que se complementaban de una manera tan excitante, Changmin amaba besar, lamer, chupar, morder el labio inferior del moreno, era tan carnosa que lo incitaba a tenerlo en su boca cada que lo veía.

Sunwoo olvidándose totalmente del tiempo, tomo a Changmin del trasero y lo levantó del suelo, el por instinto envolvió sus piernas en su cintura.

Sunwoo camino hacia su cama aún con la boca de Changmin sobre la suya y cuando estaba a nada de tirar al mayor a la cama y hacerlo suyo hasta escucharlo nuevamente gemir tan alto como cuando lo hacen...

-Vaya, enserio te tiene que gustar tanto, porque conociéndote y dejar que alguien que aún no sé a cepillado los dientes te bese, es porque esto va para algo serio...

-¡Auch! - grito Changmin cuando Sunwoo por el susto lo soltó provocando que cayera de cola en el piso.

-¿Y su madre? - pregunto el mayor.

Los tres se encontraban desayunando en el comedor, la Kim menor con su leche con cereal, el Kim odioso bebiendo una taza con chocolate caliente, cosa que hizo que el pelinaranja lo mire con una ceja arqueada y Sunwoo lo miro como diciendo que si llega a decir algo para burlarse le pasaría la moto encima y Changmin bebiendo una taza de café puro.

-Trabajando - respondieron los hermanos al unísono.

Changmin solo asintió, también tenía curiosidad por saber de su padre, pero no pregunto nada, apreciaba demasiado su vida como para preguntar algo así a Sunwoo.

Songjin termino su desayuno y se limpio la boca solo con sus manos, tomo su mochila que estaba junto a ella, como de costumbre se despidió con un beso en su mejilla a su hermano y sorprendiendo a Changmin, también se despidió así con el.

-Lo siento por eso - hablo Sunwoo cuando su hermana cerró la puerta de su casa - Suele ser muy afectiva con las personas que le caen bien.

Changmin asintió - Es un halago supongo - se encogió de hombro - ¿Cuántos años tiene?

-Doce - contesto Sunwoo y luego bebió de su Chocolate.

Changmin agrando los ojos, porque él le ponía nueve años máximo, aunque los Kim no son de aparentar su edad, Sunwoo parecía un chico entre sus 22 o 23 y con suerte el niño tenía 17.

-¿No la llevas? - pregunto, ya que Sunwoo y Sogjin tenían el mismo uniforme, indicando que van al mismo colegio.

-Siempre se va con su amiga que vive en el barrio - Sunwoo termino de desayunar y llevó su taza en el fregadero. - ¿A qué hora debes estar en tu universidad? - pregunto el moreno mirando al pelinaranja que desayunaba tranquilo.

Changmin tomo su celular que estaba sobre la mesa, muy cerca de el, vio la hora y luego volvió a bloquearla.

-Dentro de 20 minutos - Sunwoo asintió- ¿No se supone que tu ya deberias ir a tu instituto? - pregunto frunciendo el seño.

-Supones bien.

Changmin rodo los ojos y solo se dispuso a terminar su café. Sunwoo salió de la cocina para luego minutos después entrar con su mochila en el hombro y su celular y la llave de su motocicleta en la mano.

-Vamos - dijo haciendo un movimiento de cabeza.

Chagnmin rápidamente se levantó, se limpio los labios y rápido fue a lavar su taza y fue corriendo hacia Sunwoo.

-¿Y tú casco? - pregunto Changmin con seño fruncido.

- Está encima del mueble, ve a traerlo, arrancaré la moto.

-¡No te rías! - le gritó Changmin con los brazos cruzados.

-Es que...- rió - ¿Cómo es posible que no puedas subirte?

-Callate y ayudame.

Sunwoo se bajó de la moto, tomo su casco de las manos de su Hyung, con cuidado lo colocó sobre la cabeza del pelinaranja y lo abrochó. Tomo a Changmin de la cintura y con cuidado lo sento, luego fue a sentarse y esperando que Changmin lo rodee con sus brazos y cuando lo hizo, sonrió asiendo rujir la moto y arrancando hacia la universidad de su Hyung.

-¿Y tú qué clases tiene a primera hora? - pregunto Changmin colocando su cabeza aún dentro del casco sobre el hombro de Sunwoo.

Ambos estaban esperando que el semáforo se pusiera en verde para avanzar.

-Historia - bufo - La odio.

-Tu odias todo - Changmin rodo los ojos aunque Sunwoo no pudiera verlo.

-Buen punto, pero está materia me hará reprobar - contestó con la mirada en el semáforo.

-Yo podría ayudarte, soy bueno en esa asignatura.

-Por supuesto que lo eres.

Changmin ignoro el sarcasmo - ¿Cuando tienes examen?

-Mañana - respondio despreocupado.

-¿¡Mañana tienes examen y estás así de tranquilo!?

-Claro que no - hablo - Estaba tan preocupado, ni cuando me hiciste la paja anoche pude disfrutarlo del todo, porque pensaba en que reprobaria historia.

Changmin frunció el entrecejo, sabía que hablo nuevamente con sarcasmo, pero eso no evitaba su molestia, metió una mano dentro de la camisa de Sunwoo y lo pincho cerca de su ombligo.

-¡Auch! No pinches - lo regaño.

-No tienes que ser grosero todo el tiempo.

El semáforo se puso en verde y Sunwoo arranco.

La motocicleta de Sunwoo paro a una cuadra antes de llegar a la universidad, pedido por Changmin obviamente.

-Ya puedes soltarme - se burló el moreno al bajar la mirada y ver como unos brazos se aferraban a su abdomen.

-¿Llegamos? - pregunto Changmin desconcertado. Se separó del cuerpo del menor y se sentó recto, levantó el plástico del casco y reconoció la esquina. - P-podrias...?

No hizo falta que Changmin termine la frase, Sunwoo se levantó de la mato y luego fue hacia Changmin, lo tomo de la cintura y el mayor envolvió sus brazos tras el cuello del pelirrojo y este lo bajo con cuidado, cuando Changmin tocó el piso con sus pies, ninguno soltó al otro, a ambos le parecía divertido la situación debido a que Changmin aún conservaba el casco en su cabeza.

-Gracias.

Sunwoo solo asintió y subió sus manos lentamente hasta llegar a su casco y con cuidado lo saco.

Ninguno dijo nada, Changmin sabía que debía separarse e ir a sus clases, aunque ninguno lo decía en voz alta, ambos deseaban lo mismo, pero ninguno se atrevía a hacer lo que sus ojos suplicaban.

El primero en separarse fue Changmin, dio tres pasos hacia atrás, saliendo del agarre del moreno.

-Yo...-carraspeo - Ya debo irme.

Sunwoo solo asintió

-No olvidó que te ayudaré, te veré después de tus clases- Sunwoo asintió nuevamente - Tal vez lleve algo para la merienda y comemos con tu hermana.

Sunwoo le sonrió y vio a Changmin dar la vuelta y empezar a caminar. Entonces el volvió a su moto, cuando estaba por subirse sintió como estiraban el final de su camisa y cuando volteo para preguntar a Changmin que se le había olvidado, ya que sabía que era el porqué su olor era inconfundible, unos labios se estampan contra los suyo antes que siquiera pudiera abrirlos, de la sorpresa casi cae hacia atrás, afortunadamente su moto impidió aquella vergonzosa caída.

Changmin lo besó sin esperar siquiera que se recupere, envolvió sus brazos tras su cuello mientras cambiaba de ángulo, inicio un beso largo pero suave, lento, sensual, lleno de caricias, que Sunwoo apenas poso sus manos en su cintura transformó rápidamente el beso en una guerra de lenguas, suspiros y mordiscos desesperados por dominar la boca contraria. Cada vez que Changmin intentaba cambiar el rumbo del beso terminaba soltando un gemido y riéndose ante aquel juego brusco de bocas, al final simplemente se resigno.

-Soy un tonto - dijo Changmin luego de separarse. Sunwoo sabía que su Hyung era un tonto, pero esta vez quería saber porqué razón en específico. -No tengo mochila, no puedo ir a mis clases sin mis apuntes.

Sunwoo sonrió, porque era verdad, su Hyung era un tonto - Vamos a mi casa - dijo extendiendole la mano.

-P-pero tu tienes escuela. - Changmin no estaba anonadado por su propuesta, más bien porque el mismísimo Kim Sunwoo acaba de entrelazar sus dedos con los suyos.

-Iremos a estudiar, si repruebo es por tu culpa.

Changmin rodó los ojos, allí estába su mismísimo Kim Sunwoo.

Se dejó ayudar nuevamente, Sunwoo luego de subirle a su moto, le coloco su casco y luego el subió a su respectivo asiento.

-Hyung

-¿Mmm? - respondió Changmin abrazándose a Sunwoo mientras apoyaba su cabeza totalmente en su espalda.

-Hoy no iré a clase solo por ti. - hizo sonar su motocicleta - Eres una mala influencia...¡Auch no pinches!

Hoy estaría todo un día en una casa sola con Kim Sunwoo, veremos quién mata primero a quien.

Primero que nada, la sonrisa de Sunwoo hace referencia al de Lilo y Stich, jhshddjsa

¡Muchas gracias por el apoyo que le dan a este fanfic❤❤

Sus comentarios me motivan a seguir escribiendo, ya me malcriaron :(

Me encanta ver qué haya personas que también amén en Sunkyu como a mí.

Decidí cambiar el nombre ya que primero pensaba hacer al Kyu modo "nadie brilla más que yo" pero no pude, sad </3

En fin...

Los amo muchito *w*

02 de julio del 2021