11
Taehyung fue el primero en despertarse. Aún era temprano así que no había prisa por levantarse, así que de quedó mirando al techo sumido en sus pensamientos hasta que el cuerpo que descansaba a su lado se removió entre las sabanas.
Las rosas que antes adornaron la cama esa noche estaban machacadas siendo un completo desperdicio. Jung dormía con mucha calma, y su expresión parecía cansada; Kim recordó la noche con él, la forma en la que Hoseok gemía agudamente, sus lágrimas al llegar al orgasmo, tan erótico. Se había sentido bien y se arrepintió de pensar en cómo habría sido con Jimin, era consciente de que tenía que olvidarse del omega. Ahora estaba casado con Hoseok y habían consumado su matrimonio, sólo faltaba la marca.
Volvió a mirar el rostro de Hoseok, por supuesto que no había amor pero le atraía de una forma que no podía comprender. Cuando pensaba en la palabra amor, pensaba en Jimin, era el omega a quien amaba, siempre lo había hecho y creía que siempre sería así, en su corazón no había espacio para nadie que no fuera Park.
Finalmente se levantó de la cama, se dio una ducha rápida y fue directo a la cocina para desayunar. Jimin estaba ahí con un semblante triste, Taehyung se acercó despacio y le pregunto qué le pasaba. El omega sólo lloro.
—Estás en esta situación por mi culpa.
Taehyung sonrío para reconfortarlo.
—Para serte sincero esta situación no es tan desagradable como pensé.
Jimin lo miro sorprendido, en su rostro fácilmente se podía leer la incógnita "¿De verdad?", Taehyung sonrío de nuevo al ver su cara y con cariño acarició su mejilla.
—De verdad —contestó y apretó las mejillas de Jimin como un gesto de cariño.
Hoseok miraba la escena desde puerta de la cocina, reprimiendo sus ganas de interrumpir. Se había despertado y no encontró a Taehyung por ningún lado, por lo que salió a buscarlo. Sí que su esposo era descarado, no había pasado ni un día de matrimonio y Taehyung estaba siéndole infiel, pero a él que le importaba.
Hoseok sabía que Taehyung amaba a Jimin, acepto el matrimonio con otra persona por un acuerdo no por amor.
—Interrumpo —dijo por fin, entrando a la cocina, fue directo a la estufa al ver que había una olla hirviendo de café y se sirvió un poco. Taehyung negó apartando la mano, Jimin sólo lo miro apenado.
—Para nada —dijo Taehyung y escucho un fuerte impacto, todos lo escucharon.
Y de pronto fue como si el tiempo se detuviera, Taehyung salió de la cocina lo más rápido que pudo; su respiración estaba acelerada, los pies de Jimin que habían seguido los pasos de Taehyung, temblaron y cayó al suelo cubriendo su boca para no gritar.
Hoseok miro por la ventana para descubrir que todo estaba en llamas.
—¡Papá!... ¡Papá!
Era tarde para Taehyung su padre había muerto, la bala en su cabeza le había arrebatado la vida.
—Jimin ayúdame por favor —Hoseok rogó al omega, que aún no salía del shock, ¿Wonho en verdad estaba muerto?, ¿En verdad todo eso estaba pasando?, no era sólo una horrible pesadilla.
Taehyung temblaba a lado del cuerpo de su padre y Hoseok no podía hacerlo reaccionar. Los llantos y gritos llenos de melancolía que venían de afuera estaban torturando su cabeza.
—Jimin tenemos que salir de aquí —volvió a decir mientras trataba de mover a Taehyung que se había quedado paralizado.
Jimin se movió temblando, tomó a Taehyung de un brazo y junto con Hoseok trataron de hacer que reaccionara.
—¡Suéltame! —grito Taehyung apartando a los dos empujándolos, Jimin cayó al piso y Hoseok se golpeó contra una mesa—. Papá... ¡Papá despierta!
—Está muerto Taehyung y seremos los siguientes si no nos vamos de aquí —el pelirrojo, que era el que estaba más consciente de los tres ayudo a Jimin a levantarse.
—¡Cállate!
Y Hoseok de verdad estaba empezando a molestarse, no iba a morir, no había llegado desde tan lejos sólo para morir.
—¡Hagan lo que quieran!, ¡Yo no me voy a morir con ustedes! — Hoseok trato de salir de la casa que estaba empezando a incendiarse.
Había mucho ruido afuera y la situación no parecía mejor, se oían disparos venir de todas partes y gritos, gritos que le ponían la piel de gallina.
—¡Hoseok espera! —Jimin lo siguió—. No sé qué hacer —Jimin tenía los ojos empapados en lágrimas y temblaba de pies a cabeza.
—Como si yo sí supiera que debemos hacer, no ves a tu alrededor. Parece una cacería, sólo vámonos Jimin.
—Pero... ¿Y Taehyung?
La puerta principal de la casa se se abrió de repente y Hoseok vio todo en cámara lenta.
Un humano disparando en dirección a Jimin, Taehyung cayendo al suelo encima del omega para protegerlo con su hombro sangrando. Aquel mismo humano cayendo muerto al suelo después de que un lobo negro le mordiera el cuello degollándolo.
Ahora era él, el que no podía moverse de la impresión.
—Tenemos que irnos de aquí, los humanos nos están atacando —Dijo el lobo que al parecer era Jackson—. Jaebum sabe a dónde ir, nos está esperando en la cascada.
Hoseok asintió asustado y de acuerdo. Se acercó hasta donde estaban Park y Kim para asegurarse de que Taehyung respiraba y se alegró porque así fuera.
—Al parecer la bala solo te hizo un raspón, ¿Puedes ponerte de pie? —Kim asintió, pero su cuerpo parecía desvanecerse y débil por lo que Hoseok tuvo que apoyarlo en su hombro— aguanta Taehyung, debes proteger a Jimin, vamos.
Hoseok empezó a caminar detrás de Jackson.
—Yo no voy —la aguda voz de Jimin hizo que Hoseok se detuviera—. Mi primo esta sólo en casa, no podrá escapar con los niños.
—Jimin no puedes ayudarlo, morirás antes de que llegues ahí —Hoseok se estaba empezando a sentir frustrado. Recordó a los niños, realmente no tenía corazón para abandonarlos a su suerte.
—Debo hacerlo.
—Jackson cuida a Taehyung y a Jimin. Yo los alcanzare después.
El lobo asintió algo sorprendido, Hoseok echo en su espalda a Taehyung y Jimin se convirtió en lobo también, sabiendo que sería más fácil moverse en su forma animal.
—Cuídense —les dijo cuándo se separaron, los miro irse y negó para si mismo odiando su actitud suicida. Finalmente corrió por el bosque directo a buscar a SeokJin y a los niños.
Le faltaba la respiración, las imágenes a su alrededor no eran buenas, el lugar que conoció, el lugar al que llegó dispuesto a volverlo su hogar ya no existía. Ahora sólo eran llamas y tal vez mañana cenizas, lo que si sabía es que no podía quedarse a comprobar aquello.
La casa de Jin también estaba en llamas, el fuego se esparcía muy rápido por el fuerte viento y los árboles se caían. Entro rápido.
—¡Seokjin!, ¡Jin! —tosió fuerte, se estaba ahogando por el humo.
—Tío Hobbie —Yugyeom salió de debajo de la mesa.
—Oh dios —Hoseok lo tomó en brazos, SeokJin estaba más atrás inconsciente y Jungkook en sus brazos—, Jin reacciona por favor.
Jungkook se removió asustado y llorando, Hoseok tuvo que poner a Yugyeom en el suelo y le dio respiración de boca a boca a Jin tratando se hacerlo reaccionar.
Y se quedó ahí sin saber qué hacer. Estaba perdido, eso era seguro, no iba a poder proteger a esos niños, ni a SeokJin.
La puerta se abrió, sí tal vez ese era su fin. Sus ojos se cruzaron con los de aquel cazador que lo apuntaba con una escopeta. Los niños se escondieron detrás de él y empezó a lagrimear porque sabía que no los iba a poder ayudar.
—Por favor —rogó—, sólo los niños.
—¡¿Youngjae por qué tardas tanto, hay alguien ahí?! —una voz masculina grito desde afuera de la puerta.
—¡No hay nadie! —gritó de regreso el cazador—, será mejor que nos vallamos la casa está a punto de caerse.
El cazador salió, no sin antes hacerle una seña para que se mantuviera en silencio.
Hoseok había muerto y vuelto a la vida, todo en un mismo día.
—Lo siento Jin —dijo después de un rato. Cuando los cazadores ya no estaban, tomó a los niños en sus brazos y salió de ahí sin suprimir las lágrimas.
No se reunió con los demás, no ayudo a SeokJin como prometió, pero escapo.
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