Benjamin.

Los ultimos meses habian estado tan agobiantes en mi vida, ya nada era igual, ni el trabajo, ni la casa, ni Milene.
Entendí la razon por la cual no queria tener relaciones conmigo, pero no entendia la razon por la cual nisiquiera queria que le tomara la mano, se habia vuelto tan distante y yo tambien estaba comenzando a hacerlo.

-Señor Benjamin, aqui tiene los informes y... ¿le sucede algo señor?.

-No es nada Katy, por favor continúa con tu excelente trabajo- le dije mientras le sonreía brevemente.

-Bueno señor recuerde que si necesite algo- dijo mientras colocaba su mano sobre la mía- yo siempre estaré para usted.

Ronroeno ella antes de irse de la oficina moviendo sus caderas, yo gire la silla para evitar seguir viéndole luego observe mi mano. ¿Cuando habia sido la ultima vez que toque a Milene? 4 no son casi ya 5 meses, desde que toque su suave piel.
El sonido de la puerta de mi oficina me distrajo, gire la silla y me quede estático cuando observe a Mary, me levante para saludarle pero ella solo me propisiono una gran bofetada.

-Idiota, inútil, ¿que haces aqui?.

-Trabajando- respondi obvio.

-Vendras conmigo- ordeno.

-Mary estoy trabajando y no creo sea buena ide...

Me detuve cuando la observe tirar todo lo que estaba sobre mi escritorio, luego pateo este con fuerza moviendolo un poco de su lugar.

-Dije, ahora- dijo totalmente autoritaria.

Yo solo trague saliva y la acompañé, le dije a Chanel que se encargará de todo en mi ausencia.
Maldición como caminaba tan rapido con tremendos tacones.
Debía admitir que me sorprendí bastante cuando llegue a casa, Mary me paro esperado a que abriera la puerta lo cual hice, ella entro con rapidez y yo fui detras de ella, observe como entro a la habitacion del bebe yo fui detras de ella solo para mirar como abofeteaba a Milene.

-¿Que te pasa?- grito Milene molesta.

-Lo mismo te pregunto yo, no puedes estar aqui y encerrarte en tu burbujita del sufrimiento sola, no eres la única- le grito mientras me señalaba.

-¿Y tu que sabes sobre lo que me pasa?- pregunto Milene con la miraba agachada.

-¡Lose muy bien!- grito Mary- yo tambien tuve un aborto, la razon del gran chisme por el cual me divorcie no solo fue porque mi esposo me engaño eso, solo fue un error de ambos. Yo sabia que estaba embarazada sin embargo no me molesto seguir con mi vida diaria y cuando sucedio eso- Mary guardo silencio un momento- me sentia tan culpable, mi esposo trato de ayudarme pero yo no lo permití, senti que no lo merecía porque habia sido toda mi culpa, me aleje de él, lo descuide y él en un momento de debilidad cayo, me engaño con otra mujer porque yo lo permití... Y no pienso quedarme de brazos cruzados para ver como aquella situación de repita en Ben, no en él, no se lo merece, la razon por la que te detestaba, por la cual queria que se alejarla de ti, es porque me vi a mi reflejada en ti, no eres la única que esta sufriendo.

-Mary- la llame.

-No la defiendas Ben- me grito mientras me miraba- pues estar aqui encerrada y culparte de todo y hacerlo aun mas cuando lo que me paso a mi, tambien te pase a ti. No eres la única que esta sufriendo Milene, no eres la única que se siente culpaba por la vida de esa pequeña, no eres la única la cual se siente vacía por dentro. Tambien Ben - la oi decir ya entre lagrimas- y si no puedes entender esto que te estoy diciendo, eres mucho mas estúpida que yo.

Yo solo observe como mi prima se dio la vuelta para irse, el sonido de sus tacones sonaban por toda la casa, seguido de un fuerte azote de puerta.
Yo me acerque a Milene para ver la bofetada que le habia dado Mary, acerque mi mano dudoso, todo se habia vuelto tan desconocido para mi, ya nisiquiera sabia si era correcto por lo que decidí alejarme.

-Lamento lo que te hizo Mary.

Ella solo me observo corto la distancia entre ambos y me abrazo ocultando su rostro en mi pecho.

-Lo siento Ben, no sabia que tambien te lastimaba.

Yo me quede callado, aquel vacío que sentia era como si se estuviese llenando otra vez, abrace a Milene y no pude evitar llorar, no sabia que era, tal vez tristeza, tal vez felicidad o si eran ambas.

-No yo lo siento, debí haberte insisto en que te quedaras en casa, jamas debí haberte dejado sola.

-No, no, no fue tu culpa... No fue culpa de ninguno de los dos, solo fue un accidente.

Dijo y ambos quedamos en silencio, senti como ella despego la mirada de mi pecho, sus manos viajaron hasta mis hombros, sus pequeñas manos acariciaron mis mejillas, yo baje la mirada un poco para observarlo a los ojos.

-Bésame Ben.

Yo solo obedecí su orden sin pensarlo un segundo, la extrañaba tanto, la necesitaba con todo lo que tenia.
La cargue entre mis brazos para llevarla a nuestra habitacion, no sabia que tan lejos llenaríamos pero estaba dispuesto a descubrirlo, queria sentirla otra vez y sentir que era solamente mía.
Y realmente fue asi aquella noche, varios sentimientos encontrados fueron dispersado, el temor disminuyó, el dolor y la fue compartido por ambos.
Nuestra perdida era algo que nunca olvidaríamos sin embargo era algo que estaba dispuesto a cargar junto a ella, era algo en donde los dos saldríamos juntos, adelante a un nuevo futuro.