6

En un nuevo día, Boyfriend sé encontraba tarareando una canción mientras sé dirigía a la iglesia de Taki.

Sé sentía cómo sí hubieran pasado meses sin oír de ella, lo cuál solo era una exageración del chico, pues solo pasó un día y la había llamado de ante mano, bueno, tal vez la emoción y los nervios finalmente lo estaban consumiendo, pero no dejaría que eso lo frenará.

Había llegado muy lejos, y con confianza pensaba que podía llegar a más.

Boyfriend sonrió más al visualizar de cerca la iglesia de aspecto lúgubre, mientras seguía caminando, no miró tan al frente y terminó chocando con alguien más pequeño que él.

-"Beep? Lo siento amigo"-Él sé disculpó con la persona con la cuál chocó, notando que era un menor, y lo más notable, un demonio.

Un demonio como monster, pero a diferencia del aterrador demonio de limón, esté era pequeño como un niño de cinco años, su cabeza en forma de limón era roja y con un tallo enorme. Y su cuerpo era negro, pero con manchas con forma de estrellas.

Él mini demonio con cabeza de limón sé quedó mirando a Boyfriend, con esos enormes ojos rojos inyectados en sangres y sin decir nada.

A pesar del historial que tenía Boyfriend con cierto demonios, no sé mostró a la defensiva, pues de lejos sé notaba que solo era un niño quién lo miraba, también un demonio, pero un niño al fin y al cabo.

-"¿Que pasa, kid?"-Saludó él, con algo de simpatía, mientras sonreía con confianza.

El contrario más joven parpadeó e inclinó la cabeza aun lado antes de que su mirada sé fijará al suelo, encontrándose algo, que enseguida agarró y miro con curiosidad entre sus manos.

El objeto en cuestión era un micrófono. Boyfriend debió dejarlo caer durante el tarareo y el choque.

-"Ehm, eso es mío"-Boyfriend extendió su mano hacía el niño, sonriendolé con algo de impaciencia, mientras hacía señas para que le pasará su tal preciado micrófono.

Pero el mini demonio no hizo caso, haciéndose aun lado, mientras sujetaba el micrófono cerca suyo. Por curiosidad abrió su mandíbula y lanzó un tarareo que pasó por el micrófono, encontrando su acto divertido, el cabeza de limón sé ríe infantilmente frente la mirada del mayor.

Boyfriend sonrió con algo más de dureza, no teniendo la paciencia para entablar conversación con un niño, no está vez, volvió a extender su mano mientras hablaba con sutileza.-"Niño, sí me dejaras agarrar mí micrófono-"

-"No!"-Él menor respondió a la defensiva, abrazando el micrófono a su cuerpo, apenas vio que el contrario.

Boyfriend siseo en voz baja y algo molestó respondió.-"Agh, niño, ¿Tus padres no te enseñaron a no robar y esas cosas?"

-"Nooo, porque yo no tengo esas cosas"-El menor respondió a la defensiva, pero luego mostró algo de curiosidad inocente.-"¿Que son padres?"

Boyfriend sé congeló en ese momento, mostrando una pizca de empática, juntó a un gran arrepentimiento.

-"Oh, mierda yo-"-Maldijo en un susurró para que el otro no lo escuchará, era muchas cosas, pero molestar a un menor no estaba en su actitud, sintiéndose culpable de lo que dijo, mientras su cara mostraba algo se miedo.-"Niño... ¿Que tal si hacemos un trueque"-Dijo en voz alta, deseando cambiar de tema.

-"¿Que es un trueque?"-Suerte para él. El pequeño demonio sé distrajo con eso.

Boyfriend suspiró sutilmente, para luego alzar una mano y levantar un dedo mientras hablaba.-"Te dare algo a cambio del micrófono, así ninguno pierde nada, bueno... tu no pierdes nada, niño"

-"Algo como..."-El otro levantó más la vista y luego señaló.-"¿Tu gorra?"

Boyfriend colocó una mano donde su gorra roja, no encontrando las ganas de hacer ese trueque.

-"No, no, eh..."

El rapero comenzó a mirar alrededor, deteniéndose al centrar su atención de nuevo a la iglesia de Taki.

-(Ella podría?...)-Pensó en esa publicidad de que ella lo ayudará con el trueque, pero después pensó que eso lo haría quedar mal.-(Ehm... pero puedo pedirle que vigile a este diablillo mientras busco otra cosa para intercambiar)-Esa idea le convenció más. Mirando de vuelta al menor.-"Mira, sí me esperas dentro de esa iglesia, prometo conseguirte algo mejor que ese micrófono"

El menor inclinó la cabeza, mirándolo con inocencia infantil.-"¿Que es una iglesia?"

-"Es ese edificio todo grande y negro de allí"-Boyfriend apuntó a las puertas de la iglesia, mientras explicaba.

El niño giró la cabeza y notó la iglesia, expresando mucha curiosidad por el lugar antes de volver a girar su cabeza hacía Boyfriend.

-"¿Y solo debo esperar dentro?"-Preguntó él.

Boyfriend asintió.-"Sí, dentro está una amiga mía, ella te cuidara mientras yo voy a buscar, ehh, un instrumento"

-"¿Que es un instrumento?"

-"Es algo genial, tú solo creeme"-Dijo él, queriendo sonar seguro para ganarse la confianza del otro.

-"Hmm, bien"-El menor finalmente cedió.

-"¡Genial! Sígueme"-Boyfriend le hizo una señal para que lo siguiera por detrás.

Boyfriend tocó una de las puertas de la iglesia, no recibiendo una respuesta al instante, ni durante, ni después, cómo sabía que probablemente el niño a sus espaldas no iba a tener tanta paciencia, intentó abrir la puerta, sorprendiéndose de que está no tuviera seguro.

-"¿Taki?"-Dijo Boyfriend apenas entrar, con el otro niño poniéndose aún lado con él.-"Ehm, espérame aquí, ire a buscarla"-Le pidió al otro, quién por suerte le obedeció, notándose un poco asustado, tal vez por cómo sé veía la iglesia por dentro, qué hasta el rapero admitía que era lúgubre.

Boyfriend sé adentró más a la iglesia, encontrando raro no encontrar a Taki, ni cuando la llamo de vuelta, comenzando a preocuparse un poco, sé adentró más, olvidado en parte a la otra personal con la cuál entró.

¡Ahhh!

Fue en el instante en que Boyfriend escuchó un grito muy agudo, qué se acordó del niño demonio que dejó sólo, y quien pensó que escuchó gritar, dándose la vuelta rápido  y corriendo de vuelta por donde vino, encontrándose finalmente con Taki... ¡Sujetando al niño desde su tallo!

-"¿¡Taki!?"-Exclamó, Boyfriend, claramente desconcertado por todo lo que estaba presenciando. La expresión molesta de su cita y el horrible sonido de una motosierra encendida combinada con los llantos de un niño.

La chica con traje de monja parecía pérdida en su mundo, mientras mantenía sostenido al demonio con una mano, usando su mano libre para mantener sujetada su motosierra.

-"Demonio, demonio..."-Dijo en un tono apagó, sonriendo de forma vacía y con una mirada inerte.-"Debes ser... purificado"

Taki parecía estar a punto de levantar la motosierra.

-"¡Taki, para!"

Al instante en que Boyfriend la llamó de vuelta, la susodicha recuperó un poco la cordura, cómo para mirarle con perplejidad antes de reaccionar con más molestia.

-"¡Es un demonio!"-Respondió casi automáticamente.

Boyfriend estaba perplejo, no entendiendo porque ella reaccionaba así.

-"¡Es un niño, Taki!"-Expresó, notándose algo molesto, pensando en usar su micrófono, pero recordó que el niño lo había robado anteriormente, pero sirvió para qué él pudiera calmarse y reaccionar de una mejor manera.-"T-taki... ¿Por que?"-Preguntó con incertidumbre, aún sin creer que la chica con la cual salió hace poco sé estaba comportando como una psicópata.

-"¿P-por que?"-Dijo ella, hablando cómo sí también estuviera perdida por lo que hacía, ignorando el echó de que el pequeño demonio seguía forcejeando. La alta respondió con lo que sabía.-"Los demonios, pecadores... ¡Deben morir! Su sangre... p-purifica el mundo! ¡Quema!"

Boyfriend no entendía nada, todo parecía pura paranoia de Taki, pero a la vez ella hablaba cómo sí estuviera confundida... ¿asustada? Era raro, pero él sintió que era así.

-"Taki~"-Boyfriend cantó con mas calma, notando que eso llamó más la atención de la otra, más que la vez que solo le gritó. Tosiendo un poco, decidió seguir hablando con el mismo tono.-"No se que te hace que esto es algo bueno, pero no lo es, ¿No se supone que tú religión habla del perdon y amar al prójimo? ¡Eso es lo que deberías hacer, Taki! ¡Serías mejor para eso que para... esto... piénsalo"

Taki mostró una expresión apagada antes de mostrarse pensativa ante la respuesta del contrario.-"¿A-amar?"

-"¡Sí! ¡Mensaje de amor y paz!"-Él sonrió forzadamente, mientras hacia la seña de la paz con ambas manos, desviaba un poco la mirada al notar que el niño demonio comenzaba a llorar... sangre.-(Eso no es bueno)-Tragó saliva, mostrándole a Taki la mirada más suplicante que a dado en su vida.-"Se que eres mejor que esto, Taki, mas bello y mejor"

La mujer alta parecía estar cayendo en las palabras del más bajó, sonrojándose un poco, con su motosierra apagándose sin haber sido usada.

-"Eso, eso, bien"-Boyfriend sonrió menos nervioso al sentir cierto progreso.-"Ahora, confía en mí y suelta al niño"

-"P-pero demonio!-"

-"Créeme, Taki, los demonios no son tan malo-"

¡AHHHHHHH!

El demonio menor había alcanzado su límite, usando de forma inconsciente sus poderes demoníacos, invocó una lluvia de sangre que salieron como proyectiles desde sus ojos, logrando derribar por completo a Taki.

-"Boop..."-Exclamó con desconcierto, Boyfriend, para luego saltar al frente y atrapar al niño demonio antes de que cayera al suelo, casi instintivamente.

-"Sollozo. ¡Ella fue mala conmigo!"-Exclamó el niño, entre lágrimas de sangre que aún salían.

-"... Lo siento, niño"-Fue lo único que pudo decir, Boyfriend entre su desconcierto y perplejidad, soltando con cuidado al demonio, quién aprovecho para salir de allí lo más rápido que sus pequeñas patas podían.

Lo cual era entendible...

Fue cuándo Boyfriend miró a Taki, notando que sé levantó a medias, que salió de su desconcierto.

-"¿Taki?"-Fue entonces cuando la vio hiperventilar, qué sé mostró realmente preocupado y fue a socorrerla.-"¡Taki! Oh, oh, calma, calma!"

-"¿¡Calmarme!?"-Taki respondió exaltada, poniéndola histórica el solo poder ver rojo, con la incomodidad de sentir la sangre nublando su vista, su sabor invadiendo su boca, y humedeciendo su ropa. Una pesadilla, solo quería gritar, pero de nuevo, el sabor de la sangre la hizo escupir y luego toser, costándole respirar en medio de un ataque de nervios.

-"¡Taki!"-Boyfriend la llamó, pero no respondió a su gritó.-"¡TAKI!"-Gritó otra vez, está vez acercándose más a ella y aprovechando que ella estaba sentada en el piso, sujeto su cara con ambas manos, queriendo que ella volviera en sí, pero incluso con eso, la albina siguió hiperventilando sin control.-"... Taki~"-Fue entonces que recordó que lo que llamaba más su atención no eran los gritos, si no el canto, SU canto.-"En la desesperación encuentras la fe~ grande eres tú~ oh~ mí salvadora~ eres tú~"

Boyfriend notó qué Taki sé había calmado al punto de dejar de hiperventilar, sé había sorprendido de sí mismo, nunca había sido de apoyo emocional antes, sólo sé aliviaba de que ella ya no este teniendo un ataque de nervios, juraría él qué casi presentía que iba a llorar...

-"Es solo sangre..."-Dijo él, quitando como pudo lo que había en la cara de la otra, por lo menos en la parte de los ojos, para que ella pudiera abrirlos sin mucha dificultad.

-"...Por favor"-Taki medio cómo que pidió algo de espacio personal, alejándose mientras giraba su cuerpo aun lado, queriendo limpiarse la sangre ella sola.

Boyfriend fue comprensivo al darle su espacio, pensando ahora en que hacer, mientras miraba su propio hombro, tuvo una idea no tan brillante, comenzando a quitarse su camisa blanca frente a la mirada de Taki.

-"¿Que estás haciendo?"-Preguntó ella, mirando a medias la acción del otro sin comprender.

El otro sólo le sonrió mientras le extendía la mano con su camiseta.-"Para limpiarte la cara al menos"

Taki miró la playera, mientras algo de sangre aún goteaba de ella, en un agarre rápido, acepto tomar la camiseta y usarla de pañuelo, limpiando con desesperación la sangre en su cara, terminando con lanzar un enorme suspiró al hacerlo.

Al terminar de suspirar, Taki miró con una mirada suave al otro, mientras su velo se había caído, mostrando su corto cabello grisáceo manchado de rojo por la sangre.

-"... Gracias"-Respondió ella, con un todo plácido, luego de estar un rato mirándolo.

Boyfriend le sonrió nerviosamente, mientras un genuino rubor adornaba sus mejillas.

-"De nada"-Respondió, aún sintiéndose extraño por todo lo que acabo de presenciar y sentir en tan poco tiempo.

Algo era seguro, Taki era más de lo que su corta mente sé había planteado.

En... muchos sentidos...

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top