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Taki había despertado luego de dormir por diez minutos en la primera hora de la noche. La monja no era de quedarse dormida mucho tiempo pues tampoco quería termina quedándose completamente dormida, era algo que precisamente quería evitar.
Aunque claro que dormir sólo diez minutos por cada hora de la noche le estaba afectando. Taki sé miró al espejo y pensó en lo fatal que sé veía ahora y siempre, no era de verle algo positivo a su apariencia, disgustando le su piel completamente pálida, sus pupilas anormales y su pelo corto que no crecía más allá de cómo lo tenía ahora. La monja solo veía a un ser horrible al mirarse al espejo, más sabiendo lo que hizo en el pasado...
Aunque en otro momento, recordó las palabras de Boyfriend respecto a ella. Le costaba creer que lo dijese enserio, tenía sus dudas al respecto.
-(Pero sé oyó tan sincero....)-Pensó, Taki poniendo una mano sobré su ligeramente sonrojada mejilla mientras seguía pensando en el peliazul a la par qué también pensaba en lo raro que sé sentía saber qué un chico sé sintiera atraído por ella.-(Extrañó, aunque creo que no tengo derecho a decirle extraña a la gente...)
En un momento, Taki pasó de tocar su mejilla a tocar su pelo. Su pelo era un rizo bastante rebelde, aunque recordaba que hubo un tiempo en el que sé veía mejor...
Taki recordó que tenía un cepillo para el pelo en alguna parte, nunca lo había usado antes, lo había recogido en su momento cuándo sé lo encontró, pero ahora solo lo tenía como algo para rellenar su algo vacía vida.
También hubo un tiempo en qué quería peinarse y verse ver, pero descartó la idea apenas volvió a verse a un espejo. Ahora quería intentar que su peinado sé viera bien para el día de mañana.
Era algo que dijo Boyfriend:"En las citas hay que verse bien para causar una primera impresión"
"Aunque tampoco hay que esforzarse de más. Igual me gusta mucho como te vez ahora"
Taki sé ruborizo ligeramente nuevamente al recordar las palabras de Boyfriend. Sonrió un poco por lo bien que empezaba a sentirse el nuevo sentimiento que estaba sintiendo.
El momento no duro mucho, pues empezó a frustrarse por lo rebelde de su pelo para quedarse derecho. Taki intentó y intentó indefinidamente, hasta qué sé dió cuenta de que era algo inútil tratar que su pelo sé viera diferentes. La peligris suspiró derrotada y dejo el peina cerca en la mesita de luz cerca del espejo.
-(Mamá también sé frustraba con mí pelo de esta forma....)-Pensó con dolor, Taki al recordar eso y entré otras cosas que hacía si progenitora para que su pelo sé viera de mejor manera en el pasado.-(De todas formas... A el le gusta como está ahora)-Pensó la peligris mostrándose más alegré al pensar en el peliazul con quién tendría una cita.
Ella no sabía nada sobre ese tipo de cosas hasta apenas el medio día cuándo Boyfriend empezó a explicaré, así qué estaba confundida y sin saber qué hacer.
Ante este tipo de cosas, Taki pensó en buscar la respuesta al leer la santa biblia. Cosa que haría luego de otros diez minutos de sueño, pues la peligris necesitaba descansar los ojos un poco luego de estar intentando peinar su pelo durante cuarenta minutos sin éxito. No hace falta mencionar que le estresó mucho al darse cuenta de eso, verdad?
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Taki estaba terminando de leer. Alfinal no encontró una respuesta directa a sus preocupaciones principales, pero le relajó leer un rato almenos.
La peligris pensó que lo mejor sería dejar que las cosas pasasen, aún así, de verdad que sé sentía nervosa por no saber lo que haría apenas la hora de la cita llegase.
Taki no quería estresarse mucho respecto al tema, pero tampoco sabía cómo manejar todo el asunto, de repente empezó a tenerse preguntas que no recordaba haber tenido con anterioridad. Era sobre su apariencia principalmente. Ella miró sus prendas de monja y no sé sintió cómoda al pensar ir así a su cita. Luego sé preguntó sí esto era normal. El estar teniendo preguntas respecto a su apariencia le estaba rompiendo la cabeza bastante.
Taki pensó que sólo era por falta de sueño. Así que procedió con volver a dormir por diez minutos más.
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Taki pensó que el tiempo estaba extraño hoy. Sé sentía como sí aveces fuera demasiado lento o demasiado rápido. No entendía el porque todo sé sentía tan diferentes últimamente.
Boyfriend volvió a pasar por su mente, cosa qué le hacía sentir bien en cierta parte, pero también recordaba sobre lo poco que sabía de las relaciones, cosa qué le causaba estrés.
Empezó a tener dudas otras vez sobre sí lo que sentía estaba bien o no. Sé sentía bien el sentimiento, pero por como fue educada, lo que sentía podía ser enrealidad un pecado.
Taki tenía miedo de pecar, pero por otra parte no creía creer que algo tan bueno podría ser llamado pecado.
-(Aparte, mis padres no tenían el derecho de decir que era pecado y no)-Pensó, Taki con mucho enojó dentro de su ser.
Aun así. Seguía teniendo miedo y dudas al respecto a sobre sí lo que estaba sintiendo era bueno o malo.
-(No estaría mal darle otra ojeada a la biblia)-Pensó, Taki teniendo fe de que lo que sentía no fuera realmente malo.
Ella realmente deseaba que no fuera él casó.
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Boyfriend estaba preguntándose cómo debería ir a su cita de esté día.
-(Taki es una monja, así que debería de ir con traje y bien peinado, no?)-Pensó, Boyfriend con una sonrisa decidida, que no duro mucho porque enseguida volvió a tener una mirada insegura.-(Pero ese no es mí estilo. No soy un chico de traje... Debo ser yo, pero a la vez no tan yo, pero a su vez no tan chico con clase, pero... Ay, creo que me acabo de romper la cabeza yo sólo)
Boyfriend sé sintió mareado de repente, así que procedió a ir al baño a mojarse un poco la cara.
Luego sé mojar y secar su casa con una toalla, Boyfriend sé miró al espejo y sonrió con cierto aire de confianza.
-(Mejor ser yo. Estoy seguro que le gustó más así)-Pensó confianza, Boyfriend.-(Aunque clado, usar una prenda diferente a lo habitual tampoco está de más)-Pensó él peliazul teniendo la idea de tomarse un baño y usar un conjunto de ropa que mejor sé le viese.
Lo pensó con profundidad, no quería estropear las cosas con Taki por un descuidó.
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-(Me preguntó sí a Taki le gustarán las flores)-Pensó un ya más arreglado, Boyfriend mientras miraba su mano derecha dónde tenía un pequeño ramo de flores de color blanco.-(Que mal que no haya flores grises o fucsias disponibles en este momento, ese parece ser su color favorito)-Pensó él peliazul al recordad los colores de la iglesia de Taki.-(Igual las flores blancas no están tan mal. Bonitas igual que ella. Tal vez sí le digo eso le empiecen a gustar más las flores blancas)-Pensó un poco fantasioso el chico mientras sonreía de forma genuina.
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Taki empezaba a sentirse nerviosa y ansiosa al ser consciente de que la hora de la cita había llegado. La peligris intentó respirar con calma para calmar los latidos de su pecho. No recordando la última vez que su corazón latió de tal forma como ahora.
Taki logró mantener la calma y bajar un poco su sonrojó bastante bien a pesar de todo. Apenas lo logró, escuchó a alguien tocar la puerta de la iglesia. La peligris ya sé imaginaba quién era, pues tampoco había alguien más que viniese a su iglesia de todos modos. Por lo menos no por esté día.
Taki respiró profundo una última vez al estar enfrenté de la puerta. Luego la abrió y saludo como era debido.
-Hey Taki!
Boyfriend salió de forma enérgica.
-Te vez bien!
Él la halagó. Taki sé ruborizo un poco y perdió por un momento su postura calmada.
-Gracias.-Dijo Taki casi automáticamente mientras sé notaba su rubor.
Boyfriend le volvió a sonreír y le mostró el pequeño ramo de flores.-Toma, son para ti.
-Oh...
Taki no sé esperaba recibir un presente, aunque tampoco sabía que esperarse realmente. Sólo agarró las flores y sé les quedó mirando un poco.
-No sé sí te gusten las flores.-Dijo algo apenado, Boyfriend. Captando la atención de Taki.-Pero espero que te gusten.
Taki volvió a ver las flores y una pequeña sonrisa sé formó en sus labios.
-No sabía que teníamos que darnos presentes apenas empezar.-Dijo Taki manteniendo la pequeña sonrisa.
Boyfriend sé rascó la mejilla con algo de pena.-Je, je. Bueno, cómo tal estoy bien con que hayas aceptado darme una oportunidad.-Dijo sonriente el peliazul.
Taki no sentía que eso fuese un trató justo. Aunque tampoco tenía algo que ofrecerle al chico en estos momentos...
-De acuerdo.-Dijo Taki sintiéndose mal al pensar que podía hacer algo mejor, pero no sabía el que podía hacer mejor.
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Taki y Boyfriend sé encontraban en un restaurante simple. Por ahora la peligris no le pareció diferente entrar al lugar y hablar con el chico mientras esperaban la comida como fue el día anterior en la cafetería
Sólo por el echó de qué él chico trató de poner su mano sobré la de Taki. La peligris no reaccionó bien por no estar acostumbrada a ese tipo de cosas. Y Boyfriend sé sintió mal por incomodar a su cita, así qué cambió de tema al instante para ignorar ese vergonzoso momento.
-¿Tienes planes en tu vida, Taki?-Preguntò, Boyfriend sonriendo nerviosamente.
-Sí, planeó hacer misas los fines de semana y mantener impecable la iglesia durante el resto de días.-Explicó, Taki.
-¿Eso es todo?-Preguntò, Boyfriend. Recibiendo un asentimiento por parte de Taki.-Hmm, está bien. Aunque, ¿Enserio no quieres hacer algo más en algún futuro?
-No realmente....-Dijo honesta, Taki.-Tu... crees que es algo malo?
-No, no! Es bueno que quieras una vida más calmada, je, je, je.
Boyfriend río nerviosamente, para luego toser.-Ejem, seguramente ya lo has notado, pero mí objetivo es volverme un gran cantante algún día.
-Hmm, eh notado que cantas mucho en voz baja.-Dijo Taki.
Boyfriend rascó su mejilla mientras sé reía un poco.-Je, je. Me apasiona cantar cualquier tipo de música. No es por presumir, pero te sorprenderías con mí habilidad al cantar.
-Hmm, suenas muy confiando.... Y algo presumido.
-No, enserio!-Dijo Boyfriend a la par qué sé le ocurría una idea.-Deberíamos de cantar más adelante, debes de tener una voz hermosa al cantar.
-Me han dicho que mí cantó suena a un piano roto.
-¿Quien te dijo eso?
-Alguien con quién tuve algunos problemas alfinal.-Dijo Taki con calma.-Igual creo que algo de razones tenía. Mí voz suena muy rara.
-A mí me gustaría escucharte, Taki.-Dijo Boyfriend sonriendo con sinceridad.
Taki sé descolocó un poco por él comentario del chico.-De acuerdo... Tal vez no sea mala idea cantar un poco en algún momento.
Boyfriend sonrió más al escucharla.-Bien! Creo que podríamos cantar luego de comer.
-Tan de repente?-Dijo Taki.
Boyfriend asintió.-Ya te dije que me apasiona cantar.
-No lo dijiste.
-Oh... Pues te lo digo ahora, ja, ja.
-Ja...
Taki río un poco. La actitud de chico la hacía sentir cómoda la verdad.
Al ver a Taki sonreír, Boyfriend sé arriesgó a hacer de nuevo la jugada de poner una mano sobré la de ella.
Taki no sé mostró disgustada ante dicho acto. Empezaba a disfrutar este tipo de atención por parte del chico. La peligris mostró una sonrisa más, dando un golpe directo al corazón de Boyfriend.
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Taki estaba saliendo del restaurante siendo guiado por Boyfriend mientras el peliazul la tenía sujetada de su mano.
Boyfriend le había dicho que un buen lugar para cantar sería un parque algo lejos del lugar donde sé encontraban ahora. No le importaba a Taki irse tan lejos, estaba más concentrada hablando con el chico mientras disfrutaba estar tomados de la mano. Un momento en dónde deseaba no tener que estar usando guantes ahora.
La peculiar pareja tardó su tiempo en llegar a un parque, siendo más específicos, a una parte que era una cancha de básquet.
-Un amigo y yo nos la pasamos cantando mucho por aquí.-Comentó, Boyfriend.
Taki inclinó la cabeza.-Vamos a cantar aquí.
-Nah, sería raro cantar con tu cita en una cancha de básquet. Aparte de que no vamos a competir.-Dijo Boyfriend mirando alrededor.-Creo que lo mejor sería encontrar una banca o un lugar donde nos sintamos más cómodos.
Taki rascó su mejilla teniendo una sugerencia en mente.-Me gustaría cantar en un lugar más alejado de la gente la verdad.-Comentó la peligris mientras abraza un brazo con el otro.
-Oh, está bien.-Dijo Boyfriend tratando de recordar un lugar dónde su cita sé sienta cómoda.-Hmm, creó que conozco un lugar. Ven. Yo te guió.
Boyfriend volvió a agarrar la mano de Taki. Está última no tuvo problemas en dejarse guiar por el chico.
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En una parte algo abandonada del parque, Boyfriend y Taki estaban teniendo un dueto de rap el cual estaba apuntó de terminar.
-Hey, no cantas tan mal.-Dijo Boyfriend luego de cantar la última nota que la canción que estaban cantando.-La canción que sugeriste tampoco estuvo mal, ¿Tu la compusiste?
Taki sé ruborizo un poco a la par qué tosía un poco por haber cantando luego de un tiempo.-Sí, lo escribí en su momento juntó con otras dos canciones más.
-Deberíamos cantar más algún otro día.-Sugirió, Boyfriend sonriente.
Taki sonrió ante la propuesta.-Me gusta la idea.-Dijo la peligris habiendo disfrutado el cantar con el chico con anterioridad.
Boyfriend sonrió de forma más torpe mientras sé rascaba la mejilla con timidez.-Entonces, ¿Te gustaría tener otra cita más adelante?
Taki sé quedó callada un rato antes de responder.
-No me negaría a seguir saliendo contigo la verdad.-Dijo con honestidad, Taki a la par qué sonreía genuinamente.
Boyfriend sonrió ampliamente mientras sus mejillas sé teñía de un rojo carmesí.
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Al final de la cita, Boyfriend estaba acompañando a su cita hasta llegar a la iglesia dónde tendrían que despedirse luego de un agradable día saliendo.
-Por cierto, Taki. ¿Tienes número de celular?-Preguntò de repente, Boyfriend.
Taki negó con un movimiento de cabeza.-Nunca eh tenido un celular. ¿Por qué preguntas?
-No es nada, sólo quería estar comunicado contigo más seguido.-Dijo honesto, Boyfriend.
-Oh....-Exclamó, Taki sin saber qué más decir.
Boyfriend sonrió con calma.-Bueno, supongo que te veré otro día. De nuevo, gracias por darme una oportunidad, Taki.-Dijo el peliazul de forma sincera antes de darse media vuelta y alejarse de la iglesia.
Taki empezó a sentirse ansiosa al ver cómo su cita sé iba y en un momento le dió por decirle algo.
-¡Tengo número de teléfono!-Gritó de repente, Taki. Llamando la atención de Boyfriend, quién sé detuvo a mirarla. La peligris sé mostró nerviosa mientras juntaba sus manos y tenía una mirada casi tímida.-No es la forma más moderna de comunicarse comparada a un celular, pero sirve, no?
-¡Claro!-Dijo animadamente, Boyfriend mientras volvía a caminar hacia Taki.
Taki sonrió algo temblorosa mientras le pasaba el número de si iglesia al chico.
Boyfriend sonriente volvió a despedirse de ella, haciendo de nuevo ese gestó de guiñar un ojo que siempre hacía sentir rara a Taki. Ahora sé sintió algo más agradable que las última veces.
Taki sonrió nuevamente mientras por dentro sé preguntaba sí era bueno sentirse tan bien.
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