Los personajes de Naruto, no me pertenecen, yo solo los uso para escribir esta historia sin fines de lucro.

—¿Pasa algo Shisui?—cuestionó Madara al ver que de pronto se quedó en silencio mientras los clientes completaban las firmas en los documentos. El muchacho no respondió y siguió entregando los documentos. El Uchiha mayor miró discretamente y pronto encontró el motivo del cambio en su sobrino.

—Ha sido un placer hacer negocios con ustedes—los tres tipos se pusieron de pie, dispuestos a marcharse—nos estaremos viendo, hasta luego—Shisui fingió una sonrisa al despedirse y en seguida volvió sus orbes en dirección a donde se sentó Hinata.

—¿Estás bien?—Shisui no respondió con palabras, sólo movió la cabeza en afirmación—¿Quieres que nos marchemos?—la mesera les trajo una botella que habían pedido con anterioridad y Shisui no dudó en servirse una copa.

—Aún no—respondió sin dudarlo y sin dejar de evaluar lo sucedido entre esos tipos y la ojiperla.

—¿Que hace ese antisocial con ella?—Madara no podía ver los rasgos de Neji, pero desde su lugar, si podía ver a Tobirama y verlo con ella le trajo mucha curiosidad.

—Veo que Sasuke tenía razón, ella ya está con alguien más—murmuro el menor con tristeza—aparentemente, soy el único tonto—añadió dolido y bebiendo el contenido de la copa.

—Hay algo extraño—soltó Madara al ver como la joven se puso abruptamente de pie, mientras el hombre a su lado le hablaba de algo que no lograban escuchar. Shisui apretó la mandíbula cuando el castaño la abrazó. No podía evitarlo, estaba muy celoso y lo único que deseaba era golpear a ese tipo para arrebatársela.

—¿Extraño? ¿Le llamas extraño a que ella ya esté con alguien más?—cuestionó con enfado y evidentemente ardido.

—Deja de evaluar la escena como un tonto enamorado y mira todo con frialdad—el menor chasqueó la lengua y haciendo a un lado su arrastrado orgullo, siguió la orden de Madara. No pasó mucho tiempo para que le diera la razón, había algo extraño y verla llorando se lo confirmó. Ella parecía muy alterada ¿que le había dicho el hermano de Hashirama para ponerla en ese estado? Incluso, se sorprendió al verla reírse sin humor y lo que era peor, sin dejar de lado el amargo llanto. Ese comportamiento no iba con ella y no pudo evitar preocuparse.

—¿Que rayos le dijeron para ponerla así?—Madara se preguntó lo mismo y mientras lo pensaba, ella pareció sentirse observada, dado que buscó en todas las direcciones, hasta que sus hermosas orbes se clavaron en las de Shisui. El azabache mas joven quedó pasmado al verla tan descompuesta y su impresión aumentó, en el momento en que logró apreciar los rasgos del varón a su lado. Altura superior a la de ella, cabello castaño, postura altiva y su mirada... ¡maldita sea! Sus orbes eran muy similares a las de ella ¿acaso eran familiares?

—Senju—se giró al escuchar el gruñido de su tío y cuando siguió su mirada, se encontró con los tres pares de ojos clavados en ellos, incluso Tobirama, lo veía con desaprobación—y a juzgar por sus rasgos, estoy seguro que ese muchacho es Neji Hyuga—tenía sentido y no sólo por su gran parecido con Hiashi, sino también, por encontrarse con Tobirama, ambos formaban parte del ejército y tras encontrarlos cenando fuera de la base, indicaba que eran amigos, o algo por el estilo.

—¿Neji? ¿El primo de Hinata?—ahora todo tenía sentido, ese hombre con exóticos ojos luna, era uno de los dos familiares que le quedaban a ella, además, la manera en que lo veía, le dejaba claro que ya sabía sobre él.

...

—¿Conoces a esas personas?—Neji finalmente tomó la palabra, no obstante, su inquisitiva mirada, no abandonó a los tipos de la otra mesa—Hinata ¿me estás escuchando?—la ojiluna desvió sus orbes y se encontró con las orbes del albino. No tenía que ser un genio para asegurar que él sabía sobre el incidente entre Shisui y ella.

—Lo siento, me distraje—repuso tratando de lucir lo mas normal posible frente a Neji.

—Responde mi pregunta ¿conoces a esas personas?—obviamente no iba ser fácil ignorar al castaño.

—Si—respondió fingiendo desinterés—pero no estamos aquí para hablar sobre ellos—Neji no se quedó conforme, sin embargo, dejó para otro momento los cuestionamientos sobre esas personas y se enfocó en el tema que los llevó a reunirse con su superior.

Tobirama notó la incomodidad de la chica y estaba seguro que no seria bueno continuar con un tema tan delicado, estando el Uchiha tan cerca de ella—¿Están listos para ordenar?—el Senju volvió su atención hacia la ojiluna. Si ella optaba por marcharse, no pondría objeción y a juzgar por su semblante, estaba seguro que iba a ponerse de pie, pidiéndole al castaño que se marcharan, sin embargo, ella lo dejó sorprendido.

—Si, lo estamos—contrario a lo que creyó Tobirama, la chica fue quien respondió y se concentró en detallar lo que quería cenar, luego la siguió Neji y por último, también él hizo su elección.

La cena transcurrió entre conversaciones que no tenian nada que ver con el asunto sobre Shimura. Tanto Neji, como el albino, pensaron que era mejor continuar en otro momento, después de todo, lo mas importante ya había sido dicho.

—Discúlpenme un momento, debo responder esta llamada—Neji se alejó un poco, dejando a Hinata con Tobirama. La cena ya había concluido y solo esperaban la cuenta para marcharse.

—¡Hinata!—la ojiluna levantó su rostro para enfocarse en Tobirama—Digame ¿su primo sabe lo que sucedió entre los Uchiha y usted?—la joven palideció y sin ser consciente, volteó en dirección a Shisui, quien no había dejado de verla—No está obligada a responder y quizás piense que soy un entrometido, pero en el poco tiempo que llevo de tratar a Neji, he notado lo protector que es con usted y...—ella lo interrumpió casi en pánico.

—Solo sabe lo que yo le hice a Shisui—le daba mucha pena ver al varón frente a ella, mismo que seguramente ya sabía toda la historia, de lo contrario, no se lo hubiera preguntado.

—Escuche, yo me enteré por mera casualidad—le explicó que durante la cena en casa de su hermano, se habló del tema en cuestión—no la estoy juzgando y de antemano le digo, que lo sucedido fue una total canallada por parte de esas personas, especialmente por las dos aquí presentes—la chica se sorprendió ¿acaso la entendía? ¿No la creía una mala persona debido a sus actos?—Estoy completamente seguro que todo lo hizo para salvar a su familia y no tuvo otra elección, tal como le sucedió a su primo ¿no es cierto?

—Yo... yo traté de negarme, créame, hice hasta lo imposible por no cumplir ese descabellado pedido, pero no podía perder a mas personas, por lo tanto, no me quedó otro remedio que acceder—ella intentó no llorar—sabía que ese hombre hablaba en serio, incluso me mostró evidencia de la vigilancia que mantenía con Hanabi y con Neji—Tobirama negó con la cabeza, Danzó había ido demasiado lejos—Fui consciente y supe que todo iba terminar mal, sin embargo, las cosas salieron peor de lo que podía haber imaginado.

—Es increíble lo que ese tipo les hizo, especialmente a usted—él sabía sobre lo sucedido al grupo donde se encontraba Neji y ahora que ella le contó, pudo asociar todo ¿hasta donde llegaba la maldad de Shimura?

—Nunca pensé que después de haberle rogado para que autorizara el ingreso de mi hermana para estudiar en otro país, él volvería a aparecer, pidiendo que le pagara el favor que me hizo —le contó que se había negado y fue entonces que le mostró las fotografías de Hanabi y poco después, se enteró del atentado contra Neji—

—Su tristeza me demuestra que usted se enamoró del muchacho—ella se estremeció, ese hombre si que era perspicaz, aparentemente, nada escapaba ante su mirada—Quizás si le cuenta a él las razones que la llevaron a realizar ese pedido, la pueda entender y al final, terminen solucionando los malos entendidos—cuando escucho la conversación entre su hermano y amigos, no dudó en suponer que esa relación estaba totalmente destruida, no obstante, ahora que veía a la chica, pensó de otra manera, dado que al parecer, ella si se había enamorado y a juzgar por la forma en que Shisui la veía, podía asegurar que también él sentía lo mismo.

—Si le contaron lo sucedido durante la fiesta, entenderá que no hay manera de arreglar una relación cimentada en mentiras y engaños—Hinata sonrió con tristeza. No importaba cuanto lo amara, eso no cambiaría los hechos.

—Tiene razón, la relación comenzó de manera errónea, pero a pesar de todo lo malo, surgieron sentimientos sinceros—la ojiluna prefería pensar que Shisui sólo se burló de ella para obtener el puesto y los diferentes vídeos hablando sobre enamorarla, se lo dejaban muy en claro—Sin embargo, hay algo que no logró entender—el Senju se mostró pensativo—¿cual era el interés de Shimura en que usted enamorara a Shisui?

—Desde que Danzo apareció repentinamente en mi apartamento, me he hecho la misma pregunta y cuando se lo pregunté, él me respondió que no era asunto mío.

—Vaya, vaya, aparentemente, Danzo esconde mucho más de lo que creíamos... a estas alturas, ya nada me sorprendería de ese hombre—Neji se acercó sonriendo luego de terminar la llamada y les dijo que ya había pagado la cuenta.

—¿Todo bien Nii-San?—a ella le pareció extraño verlo sonreír y pensó que el motivo era Tenten.

—Claro, no te preocupes—el joven volvió a sonreír y fue entonces que Tobirama se puso de pie y ofreció cortésmente la mano a la ojiluna. Ella se ruborizó y aceptó, después de todo, sólo fue por unos segundos para ponerse de pie.

Los tres se dirigieron a la salida, mientras que Madara se apresuró a liquidar la cuenta. Lo último que deseaba era otro escándalo por parte de Shisui y cuando lo miró con la intención de seguir a la joven, fue mas rápido y lo detuvo. No era buena idea dejarlo solo ahora que estaba tan alterado.

A pesar de su enfado, el Uchiha menor esperó a su tío y cuando finalmente salieron, solo pudo divisar a Hinata marchándose con el mismo castaño que llegó.

—Hiciste una excelente presentación, sabía que eras muy capaz de manejar la empresa, incluso estás a la par de Itachi—elogió Madara tratando de distraer al muchacho, sin embargo, la expresión de Shisui permaneció distante. En otro momento, se hubiera sentido orgulloso de escuchar tales elegíos, pero luego de lo ocurrido con la mujer que amaba, se sintió vacío. Si bien es cierto que obtuvo lo que se propuso, también era cierto que tuvo que pagar un alto precio.

—Gracias tío, pero no todo el mérito es mío, después de todo, la mayoría de mis conocimientos, fueron adquiridos gracias a ustedes, quienes nunca se rindieron conmigo—Madara se volvió sentir culpable, su sobrino habló con tristeza y la arrogancia que siempre lo caracterizaba, parecía haber sido reemplazada por melancolía. Quizás fue demasiado lejos al acorralarlo para ganarse el puesto. No quería perderlo debido a su despreocupado proceder, pero tal vez, debió pensar en otra alternativa para tentarlo.

Durante el trayecto a su hogar, el mayor lo observó revisando el celular, parecía ansioso y supuso que buscaba información sobre la ojiluna. Al pensar en ella, volvió a sentir la punzada de culpabilidad, dado que comprobó personalmente que se había enamorado del muchacho.

—¿Quieres que hablémoos sobre lo sucedido?—cuestionó el azabache mayor, una vez que arribaron a la mansión.

—Te lo agradezco, pero me siento algo cansado y prefiero ir a dormir—en realidad, dormir era lo ultimo que haría ¿como podía conciliar el sueño estando lejos de ella?

—En ese caso, haré lo mismo—repuso Madara—mañana a primera hora debo salir de la cuidad y tardaré un par de días en regresar, por lo tanto, cualquier cosa que necesites, no dudes en llamarme, o pedirle ayuda a Izuna.

—No sabía que pensabas viajar—Shisui se sorprendió por la repentina noticia.

—Fue algo de última hora y no pude negarme, pero trataré de regresar pronto—Madara no quiso decirle a ninguno de ellos a donde iría.

—Está bien, sólo ve con cuidado—el muchacho le dio una palmada al hombro de su tío y se dirigió a su habitación, sin percatarse de lo sorprendido que dejó al mayor. Para Madara, el comportamiento del chico era lo que siempre había deseado. A pesar de saberse querido por él, Shisui nunca le pidió ir con cuidado, al contrario, el chico a menudo se burlaba de ellos, diciendo que si no regresaban, heredaría todo y viviría una eterna fiesta. Algo mas que le debía a esa joven de exóticas orbes.

...

Tal como lo había planeado, Madara salió temprano de Konoha, con el único propósito de averiguar todo sobre la familia Hyuga y su extraña conexión con Danzo Shimura.

—¿En que puedo ayudarlo señor Uchiha?—el azabache no perdió tiempo y fue directamente a encontrarse con el veterano médico Sarutobi, mismo que se desconcertó por su petición de mantener una conversación. El anciano conocía a la familia Uchiha, aunque no de cerca, por lo tanto, no tenía idea del porqué quería hablar con él.

—Seré directo con usted—ambos se hallaban reunidos en una cafetería cerca del hospital—estoy aquí para obtener información sobre una persona que en el poco tiempo que llevo de conocerla, ya se ha hecho muy importante en la vida de mi familia... me refiero a Hinata Hyuga—el mayor frunció el ceño con desconfianza, lo que no pasó desapercibido por el Uchiha.

—Lo siento, pero no le entiendo ¿a que se refiere con que ella es importante?—quiso indagar, dado que no tenía intención de darle a conocer detalles sobre la chica a un desconocido. Madara suspiro con resignación, sabía que no iba ser fácil obtener lo que deseaba y tendría que darle todos los pormenores de lo sucedido entre Shisui y ella, o al menos, casi todos.

—Bien, antes que nada, debo aclarar que no tengo ninguna intención de dañar a Hinata... ella es, bueno, era la novia de mi sobrino Shisui y la responsable de hacerlo volver al buen camino—aclaró, pensando que quizás con esa información, el anciano cedería, sin embargo, estaba lejos de lograr persuadirlo.

—No me sorprende, ella es una buena chica,

—Lo se, es por eso que quiero saber mas acerca de ella, especialmente sobre la conexión con Shimura.

—El que usted esté buscando respuestas, me indica que ella no les contó nada y no seré yo quien lo haga—el mayor sorbió su café y estaba listo para marcharse—Escuché, si de verdad le tienen aprecio, no la molesten, ella ha sufrido mucho para salir adelante y no es justo que vengan a querer remover el doloroso pasado que dejó atrás—escuchar eso, le dejó mas claro al Uchiha que había mucho mas sobre esa historia y no pensaba irse sin obtener respuestas.

—Entiendo su desconfianza, pero créame, de verdad estoy interesado en ayudarla y fue el mismo Hashirama, quien me envió con usted—Hiruzen se detuvo por completo al escuchar el nombre del Senju—Si no me cree, puedo llamarlo para que se lo diga.

—Hashirama Senju es un hombre de honor y si él fue quien lo envió, significa que confía en usted—Madara dejó escapar el aire que mantuvo en sus pulmones. Aparentemente, el tarado de su amigo era muy admirado en dónde quiera que iba—pero si quiere que yo hable, también usted tendrá que hacerlo... dígame el verdadero interés sobre conocer el pasado de Hinata—el moreno intentó decir lo que ya había dicho, no obstante, el anciano lo interrumpió y volvió z presionar. Escuchar el nombre de Danzo, lo puso en estado de alerta y temía que ese tipo hubiera vuelto a molestar a la ojiluna.

—Bien, comenzaré con aclarar que mi familia no tiene una buena relación con Danzo—Hiruzen asintió y se sintió un poco mas tranquilo—días atrás, se celebró una fiesta por mi cumpleaños, donde yo anunciaría que mi sobrino Shisui, ocuparía un importante puesto en nuestra empresa, también fue cuando él me presentó a Hinata como su novia, sin embargo, a mitad de la celebración, Shimura apareció frente a todos nosotros con el pretexto de felicitar a Shisui—con sólo recordarlo, le causaba molestia—Sabía que algo no andaba bien, pues como ya lo dije, no mantenemos buenas relaciones y no tardé mucho en confirmar que efectivamente, sus intenciones no eran buenas.

—Quiere ser mas claro, no le estoy entendiendo.

—Danzo se burló de Shisui y le dijo que Hinata se había acercado a él, siguiendo sus órdenes, ademas, dijo que él era como su propio padre—el golpe sobre la mesa desconcertó al azabache y al encarar a Sarutobi, apreció la ira en sus ojos.

—Eso hombre es un canalla, él fue quien mas provecho obtuvo de la desgracia que atravesó la familia Hyuga y fue precisamente Hinata, quien mas afectada resultó en todo.

—¿Que papel exactamente tenía Shimura en esa familia?—el corazón del moreno se aceleraba a medida que el mayor se disponía a narrar lo sucedido.

—Hiashi era socio de Danzo y durante un tiempo, todo parecía marchar bien, no obstante, Hiashi comenzó a notar algunas discrepancias en las inversiones mas recientes, a lo que Danzo, aseguraba que no se trataba de nada grave. En un par de ocasiones, Hiashi me contó que estaba muy preocupado por la situación que estaba atravesando y a pesar de ser un hombre sumamente calculador, terminó siendo estafado por una empresa fantasma en la que se invirtió el poco capital que aún le quedaba. Él trató de averiguar quién fue el responsable, pero...—el anciano suspiró con melancolía—las personas solemos ser malvadas cuando llegan los tiempos difíciles.

—¿Que quiere decir?

—A pesar de haber sido un hombre muy respetado y adulado por su riqueza e ingenio, apenas se supo sobre la ruina y todos aquellos que se decían sus amigos, terminaron dándole la espalda, ocasionando que Hiashi cayera en una severa depresión. Neji, Hinata y Hanabi, pasaron por el doloroso proceso, viendo cómo poco a poco, su vida cambiaba—el Uchiha escuchaba con atención y cada vez se sentía mas intrigado—Semanas antes de su muerte, Hiashi comenzó a reaccionar, prometiendo que llegaría al fondo de todo y la última vez que lo miré, me contó que estaba muy cerca de la verdad... lamentablemente, luego del supuesto suicido, todo quedó en especulaciones.

—¡Vaya! Pobres chicos—soltó Madara.

—Y como si las cosas no pudieran empeorar, luego de meses sin regresar, apareció Danzo, diciendo que sería él, quien se encargaría de la custodia de los tres chicos. Ese día, ellos quedaron bajo su tutela y al poco tiempo, envió a Neji fuera del país. Hinata sólo tenía quince años y se vio obligada a tomar la responsabilidad de Hanabi, ya que Danzo, prácticamente vendió las pocas posesiones que le quedaban a la familia y las abandonó a su suerte.

—Ellas eran menores ¿como pudo abandonarlas?

—Las personas llamaban a las niñas, las hijas del cobarde Hyuga—le contó cómo fue que Shimura comenzó a quejarse de lo mucho que gastaba en ellas y sin mas alternativas, Hinata se vio obligada a trabajar—Dos años después, Hanabi fue aprobada para estudiar en el extranjero y fue entonces que la mayor volvió a llenarse de determinación, obteniendo dos trabajos, solamente había un problema.

—¿Cual?—cuestionó Madara sintiéndose miserable por lo que hicieron a esa pobre chica.

—Hanabi aún no era mayor de edad y necesitaba la aprobación de su tutor—el moreno apretó los puños mientras escuchaba y una idea se fue formando en su cerebro—Con Neji y Hanabi lejos, sólo quedaba Hinata y cuando Hashirama me contó que le agradó su desempeño en el quirófano, no dude en animarlo para que le hiciera una oferta. Ella merecía comenzar desde cero, en un lugar donde no la juzgaran, donde pudiera vivir tranquilamente.

—Entiendo—Madara sabía parte de la historia, pero lo que le contó el anciano lo dejó muy impresionado.

—Escuché, esto que diré es muy delicado, ya que no tengo pruebas que lo respalden, pero desde que Hiashi se asoció con Shimura, todo comenzó a ir cuesta abajo y he sospechado que él estuvo involucrado en la ruina de las empresas Hyuga, por lo tanto, si Hinata se prestó para hacer lo que él le ordenó, puedo asegurar que no tuvo otra opción—No tuve elección. Lo dicho por Hinata mientras era juzgada, lo golpeó de lleno ¿eso era lo que ella había querido decir? Por otro lado, la joven le dejó claro que no lo quería cerca y que jamas sería como un padre.

—¡Ese maldito!—murmuró Madara.

—Ahora dígame ¿cuál es el interés que tiene Danzo en su sobrino?—Hiruzen sintió curiosidad acerca del interés en torno a ese muchacho.

—Es exactamente lo que me he estado preguntando desde esa desastrosa noche y aún no logró averiguarlo—respondió frustrado.

—Tratándose de él, es mejor que llegue pronto al fondo de todo ese enredo—el moreno asintió estando de acuerdo—y por último le reitero que Hinata es una buena chica, ella sólo tuvo la mala suerte de estar involucrada con Shimura.

—A decir verdad, ya lo intuía, sólo necesitaba confirmarlo—habiendo terminado con las preguntas, Madara se puso de pie, siendo imitado por el anciano—Le agradezco mucho su tiempo y la información que compartio conmigo... le doy mi palabra que nada de lo que hablamos aquí, será divulgado—Hiruzen quedó complacido y se despidieron con una reverencia.

...

Durante las siguientes horas, Madara visitó el cementerio donde se hallaba la última morada del patriarca Hyuga y su esposa. A pesar de la ausencia de los chicos, las lápidas tenían algunas flores y tras leer las dedicatorias, confirmó que venían del médico y su esposa, quienes no habían abandonado las lápidas.

Luego del cementerio, se dirigió a la que fue la gran residencia Hyuga y se dedicó a realizar preguntas referentes a los antiguos dueños, comprobando lo que le contó Hiruzen. Las personas se referían a Hiashi, como un cobarde que no supo lidiar con la pobreza y tal como sucedió en la mansión, también ocurrió en lo que fue la empresa familiar, la cual aún permanecía inactiva y sólo dos veladores se encargaban de mantenerla libre del vandalismo.

A pesar de la renuncia de las personas a dejarlo entrar para buscar algo, alguna pista, o cualquier cosa que lo condujera al responsable, el azabache no desistió. Él era alguien que no se rendía fácilmente, así que valiéndose de su posición, logró su objetivo. Un agente del banco lo acompañó y era quien respondía las preguntas.

—¿Donde estaba la oficina de los archivos?—necesitaba revisar si había algo olvidado entre los cajones, no obstante, el lugar no le proporcionó absolutamente nada, ni siquiera un viejo recibo.

—Usted es la segunda persona en solicitar entrar aquí—el azabache encaró al empleado.

—¿Quien mas estuvo aquí?—de inmediato se imaginó que el maldito anciano había ido a llevarse toda clase de pruebas que pudieran incriminarlo.

—El señor Hyuga se llevó todos los libros de contabilidad y archivos importantes y tras su muerte, nadie más volvió, hasta unos meses atrás, cuando apareció un sujeto que dijo ser investigador, él llegó acompañado de dos militares... ellos entraron aquí y después de varias horas buscando en todas las oficinas de cada piso, salieron llevándose un par de cajas con todo lo que lograron recopilar—Madara frunció el ceño y el empleado se apresuró a aclarar—A pesar de ser propiedad del banco, no pudimos impedir que se llevarán lo que encontraron, pues contaban con una orden de allanamiento respaldada por un juez.

—¿Sabe el nombre de esas personas?—cuestionó con mucha curiosidad, ya que estaba descubriendo que tras esa linda chica, había mucho mas de lo que pudieron imaginar.

—No, ellos sólo mostraron la orden del juez, misma que era completamente legal. Sabía que eran militares por los atuendos y el otro tipo dijo ser investigador, pero no dijeron sus nombres—incluso me prohibieron entrar con ellos y esperé abajo hasta que ellos terminaron—Madara asintió y se dirigió al aeropuerto. Su vuelo salía en dos horas y no quería perderlo, ya que apenas llegará a Konoha, continuaría con las indagaciones.

[...]

Karin se hallaba sola en la cafetería del hospital, pues tanto Ino, como Hinata, no tuvieron el mismo horario de descanso y ella terminó primero con su turno. Aburrida, decidió esperarlas un rato, después de todo, no tenía nada que hacer y moría por saber como le había ido a la ojiluna con su atractivo primo. La joven optó por comer una ensalada de frutas y mientras la movía sin mucho interés, se dedicó a observar su celular. Pronto se perdió en lo que veía, sin prestarle atención a su entorno y de pronto sintió un aroma que conocía a la perfección.

Cerró los ojos y dejó lo que veía para levantar el rostro y en ese momento, sus orbes se conectaron con las del Uchiha—¿Que quieres aquí?—cuestionó con disgusto y sorpresa.

—Vine a hablar contigo y no me iré sin hacerlo—la chica frunció el ceño y cuando estaba por levantarse con la intención de irse, el azabache volvió a tomar la palabra—No se te ocurra dejarme aquí, porque no dudaré en secuestrarte hasta que aclaremos las cosas entre nosotros—ella sabía que Sasuke no estaba sólo alardeando, en el tiempo que llevaban juntos, comprobó que cuando quería algo, nadie lo hacía cambiar de opinión.

—Ya te dije que no tenemos nada que aclarar—replicó la pelirroja cruzándose de brazos.

—Quieras o no, me vas a escuchar, así que decide si lo hacemos aquí, o en otro lado—sin querer atraer mas la atención de quienes se hallaban en la cafetería, Karin accedió a ir con él.

...

Sasuke ni siquiera cuestionó, él sólo se dirigió al apartamento de la chica, quien a pesar de sus protestas, terminó accediendo—Bien, ya estamos aquí, ahora dime lo que tengas que decir y retírate... hay asuntos de los que debo ocuparme—ella trataba de mostrarse indiferente, aunque por dentro, se debatía entre arrojarse a su brazos, o golpearlo por lo que le hicieron a Hinata.

—No lo sabes, pero mi familia lleva mucho tiempo lidiando con el despreocupado comportamiento de Shisui, incluso, los intentos de secuestro que sufrió, fueron el resultado de su proceder. El tío Madara y mis padres, fueron quienes mas se preocupaban por su seguridad, ya que él, no tenía la intención de sentar cabeza.

—¿Y que te hace pensar que a mí me interesa la historia de ese imbecil?—ya estaba bastante molesta y ahora le contaban sobre ese tipo.

—Por favor, déjame terminar—él le indicó que se sentará y Karin muy a regañadientes, accedió—Como te decía, la familia se preocupó mucho por él y luego de mucho pensarlo, el tío Madara optó por tentarlo. Deliberadamente, le dijo que yo era el mas adecuado para ese puesto y Shisui rápidamente mordió el anzuelo, sin embargo, tampoco se lo podían poner fácil y...—Sasuke se arrepintió de haber sugerido a Hinata, pero como el mismo Obito dijo, el tiempo ya no podía regresar.

—Y fue cuando se les ocurrió arrojar a Hina a la boca del lobo ¿no es cierto?

—El pedido era claro, él necesitaba encontrar a una buena chica que logrará amarlo, no obstante, le fue muy difícil conseguir a alguien que realmente valiera la pena y en la fiesta de Hashirama, lo reté pidiendo que lo intentara con Hinata... estaba seguro que le iba ser muy difícil acercarse a ella, incluso creí que ni siquiera lo dejaría avanzar.

—Tienes razón y de no haber sido por ese maldito anciano, Hina jamás lo hubiera considerado una opción, es simple, cualquiera puede ver lo opuestos que son—reprochó Karin sin contener por mas tiempo las ganas de echarse a llorar—Si tan solo supieran lo dura que ha sido la vida con ella... no es justo Sasuke, realmente no lo es—el Uchiha se puso de pie y fue hacia ella. La joven se resistió, pero después de forcejear inútilmente, se rindió buscando consuelo en los brazos del hombre que amaba.

—Perdóname—le dijo acariciandole la espalda—estoy muy arrepentido y si estas de acuerdo, me disculparé con Hinata—Karin se sorprendió al escucharlo, ya que su arrogante novio no solía reconocer sus errores y como si no pudiera sorprenderla mas, el azabache también le contó lo mal que se sentía por Obito, puesto que de no ser por su propuesta, quizás Hinata y Obito ya fueran una pareja de novios enamorados.

—Eres un tonto ¿lo sabes?—le dijo aún con lágrimas bajando por sus mejillas.

—Si—respondió ya mas tranquilo—Ahora dime ¿que impulso a Hinata a acercarse a Shisui? Digo, ustedes ya conocen nuestros motivos, pero no se dijo nada sobre ella—a pesar de querer molestarse por la curiosidad de Sasuke, la chica comprendió que era normal, pues si ella aún no lo supiera, podía asegurar que Hinata no viviría tranquila hasta que se lo dijera.

—Lo siento, pero eso es algo que no me corresponde aclarar... lo único que puedo decir, es que se trata de algo muy delicado y no tiene nada que ver con las frivolidades de tú primo—el azabache ya no quiso insistir, después de todo, ya había logrado que lo aceptara de nuevo a su lado y eso ya era un avance.

[...]

Hinata llegó a su apartamento y se dedicó a limpiar a fondo, pues en los últimos días, sólo lo hacía superficialmente. Necesitaba distraerse y a eso se debía que hubiera estado jugando con los cachorros, incluyendo al que muy pronto sería suyo desde que llegó del hospital.

Debía verse muy afectada, ya que Kurenai y su marido, le preguntaron si estaba bien. La pareja fue muy educada al guardar silencio, aceptando la respuesta que dio sobre estar cansada, por lo tanto, ellos no continuaron indagando sobre lo que seguramente ya sabían. El celular vibró y al encenderlo, vio que se trataba de un mensaje de Neji, avisando que en media hora llegaría a verla. La ojiluna frunció el ceño, pues no habían quedado de verse y no pudo evitar preocuparse, al pensar que quizás había mas información en el caso de su padre.

Sin querer ponerse ansiosa, se apresuró a terminar y de paso preparó algo para cenar con Neji. No habían pasado diez minutos, cuando escuchó la puerta y aún refunfuñando por no lograr terminar la cena, se fue abrir. Su alegre rostro, palideció al mirar a la persona que llegó.

—¡Hinata!—había tenido que realizar varias llamadas para obtener la dirección de la joven.

—Usted... ¿que desea aquí?—la joven no comprendía el motivo de su visita y a pesar de no querer ser descortés, se mantuvo a la defensiva.

—Necesitó hablar contigo de algo muy importante.

—Perdóneme señor Uchiha, pero no creo que haya algo de lo que debamos hablar—la ojiluna solo habló con Madara la noche de la fiesta y francamente, pensó que esa sería la última vez que lo haría.

—Se trata de Danzo y lo que te ha obligado hacer desde la muerte de tu padre—la sorpresa en el rostro de la Hyuga fue visible y sin pensarlo, se hizo a un lado para dejarlo entrar—Se lo que sucedió y tengo la completa seguridad, que él te chantajeó con algo para que te acercaras a Shisui ¿no es cierto?

—Aunque así fuera, eso no tiene relevancia para usted—no cabía duda, Madara era muy astuto, ya que rápidamente sacó sus propias conclusiones.

—Antes de refutar tu comentario, necesito disculparme contigo por lo sucedido. Créeme, no fue nuestra intención que tú resultaras expuesta.

—Todo bien señor Uchiha, después de todo, yo también tenía motivos para acercarme a él—le dijo evitando llorar.

—Hinata, se que Danzo es, o mas bien, fue tu tutor legal—ella se volvió a sorprender—y existen múltiples sospechas sobre su proceder durante la sociedad que mantuvo con tu padre y ahora que se ha declarado nuestro enemigo, puedo ayudarte a exponerlo.

—¿Exponerlo?—ella no se esperaba ese ofrecimiento.

—Así es y de resultar culpable, podríamos enviarlo a prisión por el resto de su vida... lo único que te pido, es que me digas cuál es el motivo del odio que siente hacia Shisui—ella sonrió con tristeza y el Uchiha lo notó.

—Lo lamento, pero si esa es la condición para ayudarme, puede irse de una vez, ya que ese hombre no me reveló esa información.

—No me malinterpretes, no te estoy ofreciendo mi ayuda a cambio de algo, solo pensé que quizás tú lo sabías, sin embargo, eso no cambia mi oferta de ayuda—le aclaró con seguridad—Lo único cierto, es que Shimura ha dañado a tu familia y ahora intenta hacer lo mismo con la mía, por lo tanto, debemos unirnos para descubrir algo que pueda incriminarlo en la ruina financiera que sufrió tu padre.

—Es claro que ambos hechos no están relacionados, así que lo mejor será, que usted se dedique solo a indagar sobre lo que los involucra a ustedes, de lo referente a los Hyuga, nos ocuparemos nosotros—no quiso ser tan ruda, pero lo mejor era guardar las distancias—Entenderá que después de lo ocurrido, no es buena idea mantenernos en contacto.

—Entiendo tu desconfianza y no puedo culparte, no obstante, continuaré insistiendo, esto es algo personal, es algo que te debo—ella pensaba continuar negándose, pero los efusivos golpes en la puerta, la hicieron recordar que su primo ya debía haber llegado.

—Nii-san—murmuró mirando a Madara con preocupación. El azabache arqueó una ceja y se giró en dirección a la puerta, misma que de no ser abierta, sería derrumbada.

—Abre Hinata, ya estoy aquí y te tengo una sorpresa.

—¿No piensas abrir?—pregunto Madara y ella no tuvo mas remedio que hacerlo.

—Hina, te extrañe mucho—ni bien la puerta se abrió, el azabache enfocó a una chica con largo cabello castaño lanzándose hacia Hinata. Neji estaba sonriendo un poco más atrás, pero al percatarse de su presencia, la sonrisa desapareció.

—Hanabi—la mayor de las hermanas se conmovió al abrazar a su hermanita. Luego del regreso de Neji, ella era el otro vínculo que le faltaba para sentirse completa.

—Por respeto a mis dos primas, no le diré lo que se merece—ambas chicas soltaron el abrazo y se concentraron en Neji, quien se veía furioso con la presencia de Madara.

—Nii-San ¿que pasa?—Hinata lo sostuvo del brazo, con la intención de tranquilizarlo.

—¿Que te pasa a ti Hinata?—cuestionó Hanabi, mirando al azabache con despreció—¿Como es posible que después de lo que está persona y su familia te hicieron, todavía lo recibas?—Neji se había encargado de tramitar el regreso de Hanabi a Konoha, donde continuaría el resto de sus estudios y sería una sorpresa para su prima mayor. Esa tarde se encargó de recogerla en el aeropuerto y durante el trayecto, Hanabi le mostró el vídeo que un amigo le envió, con lo sucedido en la fiesta de los Uchiha.

—Comprendo su molestia y lamento mucho lo sucedido—el azabache se sintió apenado cuando miró a Hinata. Era obvio que ella no sabía que decir.

—No, usted no comprende, ella fue públicamente humillada por su familia y si les queda algo de honor, le dirá a su sobrino que no se le vuelva acercar a Hinata, ella ya no volverá a estar sola y no permitiré que nadie vuelva a dañarla—advirtió Neji.

—Basta de charlas innecesarias, márchese de aquí—ordenó Hanabi. La ojiluna miró a Madara y él entendió que lo mejor era retirarse.

—De nuevo me disculpo... con permiso—finalmente Madara se marchó y ambos castaños miraron hacia Hinata en busca de una explicación.

Continuara.

Bien, aquí está otro capítulo de esta historia, ojalá les guste y de antemano, me disculpo por tanta demora en las actualizaciones, pero les garantizo que no pienso dejar incompleta ninguna de las historias, solo les pido paciencia.

Me disculpo por las posibles faltas de ortografía que seguramente se me quedaron sin que las notara, apenas las encontré y las iré corrigiendo 😊💕