Me senté a esperar al autobús, cuando escuche a alguien acercarse, levante la cabeza para ver de quien se trataba. Era un chico bastante alto de cabello negro quien me sonreía.

¿Espera me estaba sonriendo? ¿A mi?

— Hola — saludo.

— Eh, hola — conteste.

— ¿Sabes si por aquí pasa la línea que va al centro o donde tengo que ir a cogerla? — pregunto mirandome con sus ojos negros.

— Es el próximo autobús — respondí.

— Gracias — contestó sentándose a mi lado.

— ¿Y dime estudias en esta universidad? — preguntó señalando hacia la universidad.

Me gire hacia la universidad.

— Si.

El chico desconocido sonrió enseñando sus dientes blancos.

— Oh mira ahí está — hablo levantándose. — ¿Subes?

Asentí con la cabeza y me levanté siguiéndolo.

Ambos subimos al autobús.

— Y dime precioso.

Espera me acaba de llamar precioso.

— ¿Cual es tu nombre? — pregunto sentándose. — ¿Quieres ventana?

— Bueno, eh está bien — dije pasando hacia el asiento de la ventanilla.

— Me llamo Jimin, Park Jimin — conteste a su pregunta.

El chico sonrió.

— Yo soy Yoongi, Min Yoongi, pero puedes llamarme Suga.

Yoongi durante el viaje me contó sobre su vida. Era de Taegu, pero se había mudado a Estados Unidos con su padre, quien vivía allá.

¿De que me sonaba a mi eso?

Yoongi se quedó viendo hacia la ventana.

— Tengo que bajarme aquí ya — dijo levantándose.

Era la calle del hospital.

— Nos vemos pronto por el Instituto — hablo despidiéndose con la mano.

— Si — susurre.

Yoongi se bajo y corrio hacia el hospital cruzando la calle, un coche le pito cuando lo esquivo.

Cuando cruzo al otro lado se giro hacia el autobús y agitó su brazo con una gran sonrisa.

— Que chico más majo — hablo una mujer de los asientos de al lado.

— ¿Perdón?

— Si tu novio — respondio.

— No es mi novio, lo he conocido cuando cogí el autobús en el instituto.

— ¡Oh!

— Me tengo que bajar ya — dije levantándome y despidiéndome de la mujer.

— Adios joven y buena suerte.

— Eh, gracias — conteste.

Me dirigí hacia casa, cuando llegue y abrí la puerta me dirigí a la cocina, los papas aún no habían llegado.

Me saque algo de la nevera y comence a comer, cuando escuche la puerta abrirse.

— ¿Mamá?

— Hola — saludo entrando a la cocina.

— ¿Cómo fue el trabajo? — pregunte dándole un abrazo.

Mamá comenzó a contarme sobre su día y a preguntarme cómo me había ido a mi.

— Bien — conteste. — Esto... mamá, mañana voy a ir a casa de un compañero a hacer un trabajo del profesor de Filosofía.

— Ayer perfecto cariño, con compañeritos.

— Si — sonreí.

Si mamá supiera que me hacen bullying...suspire.

— ¿Qué ocurre hijo? — pregunto viéndome.

— Estoy algo cansado, ayer estuve estudiando toda la noche para el examen de Biología — respondí.

— Entonces ves a descansar, cariño.

Asentí con la cabeza y me dirigí hacia el piso de arriba.

Me había quedado dormido, ¿que hora seria? Eran las dos de la madrugada.

Me levante y fui a la cocina a beber agua y volver a mi habitación. Cuando volví mire el teléfono tenía un mensaje de Namjoon, diciendome la dirección de su casa y que no me retrasase, que luego tenían fiesta y no se la querían perder por nada en el mundo por mi.

Como si yo tuviera culpa...

Me volví a meter en la cama, cuando volvio a sonar una notificación de mensajeria.

¿Quién era ahora?

Mire el móvil, era Kook.

¿Kook me había escrito? Espera mi Kook.

Jungkook: Eyy!!

Yo: Si?

Jungkook: ¿No duermes?

Yo: Me acabo de despertar iba a volverme a dormir.

Jungkook: jaja, que avurrido.

Mire el movil me había escrito "aburrido" con ¿V?

Jungkook: eyy, contestame no me dejes en visto.

Yo: me voy a dormir, buenas noches.

Silencie el móvil.