CAPITULO 19
Pasado
Caminaba con normalidad por el pasillo de la escuela en compañía de Sakura, habían tenido intensivo el día de hoy habían demorado más de lo normal.
--no seas malaaaa-- lloro Sakura-- ayúdame ¿Si?
--no vamos a hacer trampa en el examen de química, lo digo enserio-- dijo contundente.
--pero si es fácil, solo te sientas delante mío y...
--no.
--pero...
Sakura no termino de hablar.
Ambas chicas se quedaron paralizadas al verlo.
El casillero estaba rallado y maltrecho, se veían incluso algunos cortes de navaja.
Yumi suspiro.
--esto es horrible, ¿Quien pudo ser? -- Sakura miro a los lados del pasillo pero no había seña de nadie.
--no lo se-- Yumi lo analizo más de cercaz no había una palabra concreta, en si eran rallones a lazar-- no faltan los tontos
Jamás había sufrido acoso, y no había molestado a nadie como para merecer que le hicieran algo así, podía ser una equivocacion.
--reportemoslo a la escuela-- añadió Sakura.
-- después sera, iba a ir con Emma de compras, y voy tarde-- le resto importancia-- lo haré mañana, nos vemos.
Sakura aún no muy convencida se despidió.
La chica cruzó la calle y le envío un mensaje a Emma, indicándole que llegaría un poco tarde.
Al parecer la chica se había animado a pedirle una cita a Draken eh iban a comprar un vestido para la ocasión.
Debido a que ya era un poco tarde, la calle por dónde iba cruzando estaba desolada, se sintió un poco insegura cuando vio a un chico cruzar cerca de su lado.
Su preocupacion fue a mayor cuando vio que varios chicos se aglomeraban en la salida del callejón
Pensó en dar media vuelta
Y entonces lo vio.
--¿A dónde crees que vas dulzura?
Cierto pelirrojo vestido de negro le detuvo.
--Kyoto-san -- murmuró ella.
Algo en la mirada del chico la dejo helada, estaba rodeada de aproximadamente unos 15 chicos.
Todos con un uniforme azul oscuro.
--¿Acaso no me extrañaste? No respondes mis mensajes -- dió un paso hacia ella amenazante.
--crei haber dejado todo claro la última vez-- murmuró ella intentando no verlo fijamente.
Intento correr, pero dos de los fortachones que le acompañaban le tomo de ambos brazos.
Le era imposible huir, y mucho menos correr, eran diez contra ella sola.
Sin miramientos el chico le abofeteo.
Sintió el rostro ardiente en dónde le había golpeado, sorprendida le miro.
--solo yo decido eso.
((...))
Le habían sujetado las muñecas por la espalda y llevado a la mansión de Kyoto, ella la conocía pero nunca había entrado en ella, noto que el lugar estaba atestado de chicos que no conocía.
Todos en uniforme azul.
--te creaste una pandilla-- murmuró ella en cuanto el pelirrojo entro en el cuarto.
El sonrió de oreja a oreja.
--¿Porque tan esquiva?
La chica se encontraba en el rincón más remoto del cuarto, manteniéndose lo más alejada que podía de el.
--¿Tu que crees? Esto se llama secuestro.
--¿No se supone que éramos amigos? -- el chico se acercó peligrosamente a ella-- oh, es cierto, tu concepto de amigo es algo erróneo.
Lanzo unos papeles a los pies de la chica.
Aterrada noto lo que eran.
Fotos, fotos suyas con Mikey, algunas incluso anteriores a qué estuviesen saliendo juntos.
--eres un acosador-- susurro.
El chico ahora enojado, sujeto el rostro de la chica de forma nada delicada para que le mirara a los ojos.
--¿No es esto lo que te gusta?-- cuestiono irónico --te gusta los criminales ¿No?
La chica le sostuvo la mirada.
--¿Por eso creaste una pandilla?
Kyoto rio.
--algo así, cuando tienes dinero es fácil obtener lo que quieres, contraté a muchos chicos para ser parte de esto, justo ahora deben estar en guerra con Toman.
Yumi lo recordó, había empatisado con Kyoto debido a que sus padres eran tan ausentes como su madre, tenían dinero a montón pero nunca estaban en casa, lo más probable es que no tendrían ni idea de lo que estaba haciendo su hijo justo ahora.
-- Mikey los va a destrozar-- indico ella.
El chico la miro con el seño fruncido.
--no me interesa si ganan o pierden, solo necesito que les den una paliza mientras tú y yo ajustamos cuentas-- sonrió con malicia-- vas a desear nunca haber elegido a ese pandillero de quinta antes de a mi
--estas loco.
El chico, aún más enojado debido a su claro rechazo, saco un pañuelo, intento negarse pero teniendo las manos sujetas.
Lentamente se sintió débil.
Todo alrededor empezó a marearse, cerro los ojos.
((...))
Al despertar noto que estaba sobre una superficie suave.
Sus manos ya no estaban sujetas pero aún así la debilidad le hacia sentir que aunque quisiera moverlas no podría.
Observo alrededor aún mareada.
Estaba sobre la cama, la cuál estaba rodeada de artefactos extraños, parecía un estudio de fotografía.
--¿Ya despertaste?
Apenas pudo alzar la mirada para observar al chico.
Tenía una cámara en las manos y la miraba con una sonrisa.
--¿Que estás...?
--nadie se burla de mi, Yumi-- se acercó lentamente a ella-- ¿Seguirá queriéndote el imbécil de Manjiro después de ver esto?
Lentamente, empezó a desabotonar la camisa de la fémina, Yumi intento apartarlo pero sus manos apenas y se movieron, se sentía tan indefensa.
--e-eres despreciable.
De nuevo le abofeteo, estaba tan desorientada que no sintió el dolor.
El chico sin esperar más, termino de desabotonar la camisa dejándola solo en corpiño, sintió las manos del muchacho recorrer sus muslos hasta adentrarse en sus faldas, aquel tacto le pareció asqueroso.
--sonrie-- el flash de la camara se activo.
La chica aparto la mirada asqueada, se sentía tan vulnerable, aguanto las lágrimas por lo impotente que se sentía.
Kyoto estuvo los primeros minutos tomándole fotos, y por la sonrisa que daba debía verse lamentable.
Ese era su objetivo, hacerla sufrir.
Se sintió tonta en haber confiado en alguien así.
--veamos si tú imbécil pandijero te querrá después de esto.
Dejo la cámara a un lado y gateo hacia ella en la cama, empezó a tocarla, las caricias eran tozcas.
Jamás había sentido tanto asco en su vida.
Kyoto aprovechando su vulnerabilidad atacó sus labios, la chica sorprendida obto por única reacción morderle.
--Mikey no es un ser despreciable como tú.
El chico se aparto, volvió a abofetearla con fuerza, esta vez si sintió el dolor, una ligera línea de sangre descendió de la barbilla de la pelinegra.
--callate-- volvio a arremeter contra ella.
En un intento de quitarle el corpiño rompió la pequeña cadena que tenía en su cuello, haciendo volar el anillo que sujetaba.
El anillo que Mikey le había regalado.
Tomando fuerzas y debido al golpe que anteriormente había recibido al fin su cuerpo reaccionó, levanto la rodilla.
Kyoto solto un grito de dolor, le había golpeado justo en su zona sencible.
La chica rodó sobre si, sentía que todo a su alrededor daba vueltas, apenas supo cómo había tomado una de las lámparas para estamparla en la cabeza del chico quien cayó inconsciente en la cama
La chica, tomando aire, busco a tientas el anillo.
Tenía que marcharse de allí.
((...))
No sabía cómo había logrado colocarse en pie, se sentía aún mareada por la droga que Kyoto le había suministrado, se había sentido tan importante el no poder defenderse.
Apenas había alcanzado una cuadra cuando se topo con varios chicos vestidos con el uniforme de la pandilla de Kyoto.
--oe, esa no es la chica que quería el jefe?
--¿Que haces por fuera?
No estaba en condiciones de pelear, no sabía si era por su estado pero había empezado a temblar.
Cerro los ojos esperando su final, posiblemente la volverían a llevar a aquella mansión.
--que chiste-- aquella voz era diferente.
Un chico moreno de cabellos blancos había aparecido en escena, colocandose frente a ella.
--¿Eh? ¿Quieres pelea? ¿Que es tan gracioso?
Los tipos le miraban amenazante.
--tres gorilas contra una chica, las pandillas actuales en Tokyo son un chiste. -- añadió el muchacho sin inmutarse.
Los tres chicos corpulentos se lanzaron hacia el muchacho, grande fue su sorpresa al ver cómo esté en simples movimientos los vencía.
Yumi observo asombrada la habilidad de ese chico.
Le recordó a Mikey.
Con un último puñetazo dejo al tercero de ellos inconsciente.
El muchacho no espero a nada más, metió sus manos a los bolsillos y empezó a caminar.
La chica le miro marchar.
--¡Oye!-- el chico paro su andar-- gracias.
El no se giró
Siguió caminando.
((...))
Al llegar a casa ya estaba en sus cinco sentidos, le dolía el rostro y tenía uno que otro raspón.
Estaba llegando por el patio trasero cuando escucho la voz preocupada de Takemichi.
--¿Que vamos a hacer Chifuyu? Está pasando, no cambie nada-- se lamente el teñido.
--no lo sabías-- le defendió Chifuyu.
--lo había dicho, me dijo que si tan solo no hubiese conocido a Kyoto, no sabía muy bien a qué se refería y como había cortado lazos con el... Creí que no pasará pero debe ser esto. -- suspiro -- Mikey va a enloquecer si se entera de que algo le pase, ¿Y si es como aquella vez con Kazutora? Dudo que esta vez se detenga, no si la lastiman.
La chica escuchaba la conversación sorprendida, no entendía muy bien de que hablaban.
--¿De verdad piensas que está es la razón por la que Mikey en un futuro es como es?
--eso creo, ¿Que otra razón tendría para corromperse? -- Takemichi bajo la mirada, estaba realmente preocupado-- si algo le pasa a mi hermana, Mikey dejara de ser el mismo.
La chica se quedó allí quieta, Takemichi tenía razón, Mikey ya tenía suficiente que cargar, más después de lo que había pasado con Baji y Kisaki.
No podía hacerle eso.
Cuando escucho el motor de la motocicleta, la chica respiro profundamente y sonrió.
Mikey había bajado de la moto y corrió hacia ella desesperado.
Había ido a preguntarle a Takemichi si habían noticias de ella
grande fue su sorpresa al verla a solo unos pasos de su casa.
Sus brazos la envolvieron, se notaba desesperado.
Verlo así, le conmovió.
--crei que...
La chica sonrio.
--estoy bien--dijo segura.
Se aparto para revisarla, frunció el seño al ver el labio partido
--¿De verdad? Llegaron varios tipos con uniforme azul a buscar pelea, los derrotamos pero después... Uno de ellos dijo tu nombre, que su jefe te tenía.
El recordar a Kyoto y como le había amordazado le alteró un poco.
Debía ser fuerte.
No mostrarlo.
Volvió a sonreír.
--no paso nada, me metí en una pelea para escapar --explico ella. --no te preocupes por mi.
En eso, Takemichi y Chifuyu salieron, sorprendidos y aliviados de verla allí.
--¡Nee-san!
--¿Estás bien?
La chica asintio sin dejar de sonreír.
-- si que son exagerados-- expreso ella -- cómo le dije a Mikey, nada paso. Estoy bien.
--¿De verdad? -- la mirada esperanzada de Takemichi le impacto un poco.
--asi es, nada paso-- volvió a abrazar a Mikey-- dijiste que era fuerte, así que no te preocupes.
Mikey le miro no muy convencido.
--solo me asusté un poco.
La chica le resto importancia.
--como siempre ustedes exagerando todos-- se giró hacia la casa-- que dia más pesado, dile a Emma que le recompesare más tarde.
--claro...-- susurro Mikey viendola marchar.
Los tres chicos la vieron entrar a la casa de manera despreocupada.
-- me alegro de que esté bien--; suspiro Takemichi.
--si...--susurro Mikey no muy convencida.
Sentía que algo no estaba bien
((...))
Apenas cerro la puerta de su cuarto se dejó caer, sentía su cuerpo pesado, sucio.
Se mordió el labio intentando borrar de su memoria lo que había vivido
El como no había tenido control de nada, el como alguien la había usado de manera tan rastrera sin que ella pudiera defenderse.
Tomo entre sus manos el pequeño anillo.
Soltó un sollozo.
En la oscuridad de su cuarto, sola... Empezó a llorar.
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