15 de septiembre de 2005

El halloween sangriento habia pasado, finalizó con un detenido (Kazutora) y un herido (Baji) junto con la victoria de la Toman.

Ese día sería la reunión de la Toman, por lo que Yumi decidió que ese sería un buen momento para visitar a Baji, ninguno de los chicos estaría en el hospital.

--¿Vienes a cuidar mis heridas?  Sonrió Baji burlón al verla entrar. -- me hace falta una enfermera.

Yumi rodo los ojos, había ido a verlo otras tres veces pero siempre con los chicos.

--no te ves tan mal como para necesitar una enfermera-- se sentó a su lado, en la mesita de noche estaba lleno de regalos y canastas de recupérate, posiblemente la mayoría eran de Chifuyu.

--esta vez casi no la cuento-- indico el chico-- pensaste rápido, gracias por no rendirte conmigo.

La chica nego.

--Michi-kun me hizo reaccionar, estaba en shock, sin el...

--lo se, ese idiota lo hizo-- sonrió.

--¿Por eso le ofreciste el puesto de capitán de la primera división? -- pregunto la chica directa, sabía que de eso se trataba la reunión de hoy.

--no es como si me retirará del todo de la Toman-- explico Baji-- pero necesito un tiempo, para recuperarme y que los humos se calmen, aún se rumora que fui un traidor.

-- y por eso quieres que Michi-kun tome el puesto, porque también está al tanto de lo de Kisaki-- la pelinegra hablo con detenimiento-- lo que pasó ese día, fue culpa de el, ¿Verdad? Lo escuche... Dijo que Kazutora había fallado cuando creímos que no te había apuñalado.

--ese maldito Kisaki-- gruño el pelinegro--no entiendo en que estaba pensando Mikey cuando le permitió entrar, después de lo que ví...

La chica parpadeo sorprendida, quería saber más referente a ello

--¿Que viste?

Mierda, la chica no lo dejaría pasar.

--Kisaki le propuso un trato a Mikey, para sacar a Pachin de la cárcel...

-- asi que fue por eso...-- murmuró ella--Mikey no dejaría entrar a la Toman a alguien como el si no fuese por algo de peso, entendiendo lo de ese modo, es mucho más difícil librarnos de Kisaki. 

--¿Y si lo matamos?

La chica le dió un zape.

--ay, ¿Estoy herido sabes? -- refunfuño el chico

--no digas tonterías, si vamos a detener a Kisaki no va a ser matandolo, ¿No aprendiste nada con lo que pasó este Halloween?

Si aquello llegase a pasar y Baji matara a Kisaki, este terminaría en prisión y no era como algo que quisiera ver.

--¿Entonces que tienes en mente?

--Kisaki es un cobarde que no pelea de frente, piensa y ejecuta, tenemos que ganarle en su mismo juego --indico la chica --hay que dejarle en evidencia ante Mikey, así que no hagas tonterías.

Baji sonrió de lado.

--si te digo que no te prometo nada tendrás que cuidarme?

La chica le miro con enfado.

--te daré otra bofetada si sigues con lo mismo, pero si, tendré que evitar que te metas en problema, tonto -- expreso la chica.

La chica se despidió y prometió volver otro día, Baji la dejó marchar sin dejar de observarla.

Le pediría que saliera con el... Pero no estaba tan demente como para tener que enfrentar a Mikey, ya estaba lo suficiente lastimado.

(...)

--¡Esto es terrible!--se lamento Takemichi

Tanto el como Hina observaban a Mikey y Emma en una heladería.

--si Yumi-chan los ve-- se lamento Hina-- Mikey-kun le romperá el corazón.

Tanto al rubio como a la chica no se les había pasado por alto las miradas de la pelinegra hacia el comandante de la Toman, era obvio que algo pasaba ahí.

--puede ser un malentendido...--murmuro Takemichi.

--¡No cabe duda! ¡Mikey y Emma-chan engañan a Yumi-chan y Draken! Y pensar que eran amigo. 

--Hina... No estás asumiendo las cosas muy deprisa?

--¡No lo dejes pasar así de fácil! Es el honor de tu hermana el que está en juego-- expreso Hina enojada, no iba a dejar que un chico jugará con los sentimientos de su amiga. --¡Tenemos que hacer que confiesen!

La chica se levantó decidida a ir a encarar a la parejita.

--¿Vas a ir así como así? No creo que sea buena idea-- tartamudeo el teñido

--¡Tenemos que cerciorarnos! ¡No dejaré que jueguen con los sentimientos de Yumi-chan!

--Hina...

Fue justo en ese instante que Hina se dirigía hacia la pareja que Takemichi vio a la distancia a dos chicos y no eran cualquiera.

Draken y Yumi caminaban juntos hablando tranquilamente, ambos se acercaban a paso calmó había el

--¿Pasa algo? -- Yumi se acercó a su hermano con confianza-- me pareció que Hina-chan me mencionaban.

--N-Nee-san...-- Takemichi sentía que en cualquier momento se desmayaría.

En la mesa, Hina ya había encargado a ambos.

--¡Expliquense por favor!

--¿Eh? --tanto Draken cómo la pelinegra atraídos por el ruido se dirigieron a la mesa --¿Emma y Mikey?

--¡No es lo que piensan!-- se adelantó Takemichi.

--¿Draken?-- expreso sorprendida Emma

Mikey ladeó la mirada algo incómodo.

--se acabo--lloro Takemichi.

Pero a diferencia de lo que pensaba que pasaría Draken se mofo.

--¿Sacaste a tu hermanita de paseo en su cumpleaños?

--no molestes-- murmuró el rubio incómodo.

--¿Hermana...?--pregunto Takemichi sorprendido

--¿Que? ¿No lo sabías, Takemichi?-- pregunto Draken -- Mikey y Emma son hermanos, aunque de madres diferentes

--¿¡EHHHH?!

--Pero si ya te lo había dicho, Hina-- murmuró pensativa Emma.

--¿Algo que decir señorita detective?

Hina se hizo la desentendida.

--parece que malinterpretaron las cosas -- dijo Yumi sonriendo -- solo falta que digan que Draken-san y yo estábamos saliendo cuando solo me pidió que le acompañará para comprarle algo a emma por su cumpleaños.

--ah, es cierto-- Draken colocó un oso de peluche en la cabeza de Emma-- toma. Feliz cumpleaños.

--¿Eh? ¿No es el peluche que querías el otro día?

Emma observo el obsequio embelesada sin saber que decir, se le notaba la felicidad.

--me alegro por ti, Emma-chan-- expreso Hina, sabía lo mucho que debía ser aquel regalo para la chica.

--mi trabajo aquí está hecho-- se estiró Yumi, había pasado media tarde caminando con Draken.

Había Sido difícil encontrar un obsequio ideal, ya que Draken a pesar de demostrar que no le interesaba de lo había tomado muy enserio.

--eh, Yumi-- le detuvo Mikey al ver que la chica se marchaba cómo acto reflejo se había levantado.

--¿Si?

Los presentes observaron aquello sin moverse.

--hay un lugar al que quiero ir contigo...

Aquello la tomo por sorpresa, sintió las mejillas rojas.

--si, claro, voy a ir a cambiarme, si quieres puedes ir por mi en una hora.--se sentía tan nerviosa.

Con una sonrisa se despidió de los chicos, Takemichi volvió la mirada a Mikey, que volvía a su forma inexpresiva.

¿Que demonios estaba pasando? ¿Entonces si era cierto lo que había dicho Hina? Mikey y Yumi... ¿Se gustaban?

No sabía porque... Pero se sintió inquieto.

(...)

Estaba nerviosa.

Muy nerviosa. 

Ya se había visto en varias ocasiones con Mikey, pero la mayoría de ellas junto con Draken y los chicos, ademas, en aquel momento no sabía que sentía algo por el rubio.

No era una chica insegura, sabía que era bonita dentro de lo que cabe pero... Pero esa no era la cuestión, conocía lo suficiente a Mikey cómo para saber que no le interesaba el físico.

Cuando la hora paso y el motor de la Babu de Mikey resonó, la chica ya había salido de casa para reunirse con el.

El trayecto fue en silencio, y ella lo agradeció, la última vez que había montado su moto traía en su regazo a Baji moribundo, ahora que habían dejado todo ese embrollo atrás se sonrió feliz de poder recostarse en la espalda del rubio sin sentir aquella adrenalina insana.

--no te quedes dormida-- le susurro el rubio por encima del hombro.

Ella nego levemente, aún cuando el viento en su rostro la arrullaba, no creía poder dormir ahora.

Cuando Mikey detuvo la moto, Yumi entendió en dónde estaban.

--es...-- la chica aguanto las ganas de llorar.

--¿Lo conoces?

--venia aquí con mi padre cuando peleaba con mamá, los atardeceres aqui son hermosos... Hacia mucho que no venía.

La nostalgia le dió de golpe...años... Ya habían pasado años.

--no se porque, pero este lugar, me transmite la misma paz que tú me das-- aquello logro avergonzar a la chica.--desde lo que pasó con Baji me siento inseguro, con miedo.

--¿El invencible Mikey tiene miedo? -- susurro la chica

Ambos se habían sentado en la pradera cerca del muelle, la vista era increíble, además de que estaba apunto de atardecer el color rojizo daba al ambiente algo especial.

--¿Irónico verdad? Alguien a quien llaman invencible siendo agobiado.

--no tanto, sigues siendo un humano, Mikey y el que las demás personas te tengan en un pedestal no lo borra-- expreso la chica-- es normal tener miedo.

Mikey la observó, el atardecer empezaba  a caer sobre ellos, los reflejos anaranjadas impactaron en el rostro de la chica.

Se sentía cálido.

--ese día perdí el control, deje que mi rabia y odio me dominarán, fue como si la oscuridad me envolviera y me lanzará a un precipicio sin fondo...

--Mikey...

--prometeme que si vuelve a pasar, vas a detenerme-- pidió el rubio observándola a los ojos con seriedad.

Había una desesperación increíble en su voz, últimamente Mikey estaba dejando ver su lado más humano ante ella. 

--lo prometo -- expreso ella en un susurro tomando su mano con fuerza.-- no importa lo que pase.

Dejándose llevar por el momento y la cercanía de la chica, el rubio se movió había adelante.

Sus labios impactaron.

Fue tenue y ligero, un contacto que apenas se sintió.

No sabía porque lo había hecho, su propia impulsividad le había ganado.

Yumi, sorprendida no sabía que decir, no esperaba que el rubio decidiera plantarle un beso, sonrojada intento decir algo pero las palabras simplemente no salían.

--ahora estoy más tranquilo-- murmuró el rubio con una sonrisa, volvió la vista hacia el atardecer que se abría ante ellos-- ya no tengo miedo.

"Me gustas" pensó la chica "de verdad me gustas"

Pero no lo dijo, al igual que el contempló el amanecer

No tenía prisa... Podía disfrutar de lo que sea que pasaba entre ambos de esa manera.

Sonrió ligeramente.

Quien sabe que les deparaba en un futuro.

(...)

2012

Takemichi había vuelto al futuro. Estaba más que desorientado por lo que había pasado, al parecer ahora era parte de los altos mandos de la Toman.

Vivía en una mansión gigantesca, no era un perdedor en el futuro.

--¡Buen día, señor! --exclamaron los empleados en una inclinación en cuanto llegó

--contesta el teléfono, Takemichi-- expreso un pelinegro que estaba al fondo

--¡¿Chifuyu?! ¡Menos mal, Chifuyu! No entendía nada de lo que pasaba

--¿Eh? ¿De que estás hablando?-- le miro con extrañeza-- hay reunión administrativa, vamos

--¿Reunión administrativa? ¿Quien va? ¿Que se administra?

Se sentía tan confundido.

--vamos, compañero. ¿Quien más que tú podría asistir? Estás en el alto mando de  la Tokyo Manji, Takemichi Hanagaki.

"¿¡Estoy en el alto mando de la Toman?!"

No quiso hacer más preguntas, dejo que Chifuyu lo guiara hacia la dichosa reunión.

En el lugar, varios hombres vestidos de traje comían en un escándalo.

--¿Quien demonios pidió medusas?

--¿¡Que paso con mi arroz frito!?

No había demorado ni un minuto desde que se sentó que la atención de todos quedó eclipsadas por la chica que acababa de llegar.

--lamento la tardanza-- expreso 

Casi no la reconoce, su cabello era de un escarlata brillante, tenía un vestido corto de encaje y unos tacones altos que repiqueteaban a cada paso, a su lado, un chico de cabello negro y largo le acompañaba.

"¿Nee-san!? ¿¡Baji-san!?"

¿Que demonios habia su hermana en una reunión administrativa de la Toman? .

Baji movió la silla para que la chica se sentara, ella con una sonrisa de agradecimiento le susurro algo, el moreno asintio.

¿Desde cuándo eran tan... Amigos?

--para empezar, quiero hablar de los fondos de tesorería...--empezo la reunión.

--mas importante aún, ¿Dónde está mi maldito arroz frito?-- refunfuño Pachin--y aún falta gente por llegar.

--callate un poco Pa, come en silencio-- le indico Muto con fastidio.--¿Y quién demonios falta? ¿Mitsuya?

--el arroz frito se deja para el final, pelon-- indico Smiley 

--¿Ehhhh? ¿Cómo que bobo? ¿¡Con quién crees que hablas!?-- salto en un grito Peyan--¡Sabes bien que Pachinnes un imbécil!

--si-- le dió la razón el chico.

--debieron pedir que primero les prepararán el arroz-- se notaba que se estaba enfadando a pesar de su sonrisa.

--¡Cállate! Además, aún falta la gente.

--¿Te refieres a Mikey?-- Muto lo miro de reojo.

Todas las miradas se dirigieron a la pelirroja que comía en silencio.

Ella al notar la pregunta silenciosa los confronto.

-- ah estado muy ocupado, como ya les había dicho, estoy en representación de mi esposo, así que todo lo consecuente en la reunión, yo sé lo haré saber.

No podía ser cierto

Observo el anillo que tenía su hermana en el dedo

¿Que demonios habia pasado en este futuro?

Su hermana... ¿Estaba casada con Mikey?