https://youtu.be/-PCKmzXU940

Las balas pasaban a su lado, los gritos de todo tipo daban vueltas en su cabeza.

Estaba a cubierto, respirando agitadamente, acababa de correr un maratón para llegar a este punto de cobertura.

A pesar de los gritos, el sonido de las balas pasando a su lado, de estas mismas chocando con su apoyo y del cadáver a su lado, se asomó con su arma, disparando hacia el 4to piso de un edificio, atinándole a uno de los 5 furrys arriba y causando grandes grietas en la estructura.

Se volvió a poner a cubierto rápidamente, oyendo 4 silbidos de balas más fuertes que los demás, francotiradores.

¡UN ABATIDO!

Gritó en su comunicador, una oleada de balas de su lado fue disparada hacia el mismo lugar, los tiradores se cubrirían, y por ello, vio a su compañero correr hacia él, agachando la cabeza.

Cuando llegó, lo ayudó tomando su cabeza y agachándola hasta su altura, su compañero lo había hecho bien, solo fue un acto reflejo.

¡LLEGÓ EL APOYO!

El recién llegado le gritó, y apenas lo hizo, un sonido estridente vino del cielo.

Ambos levantaron sus cabezas, viendo a un avión de combate soltar un objeto hacia el edificio, causando su derrumbe, y que las balas disminuyeran un poco su intensidad.

La calma no llegó, pues otro avión táctico enemigo disparó en su posición, matando a varios de atrás, por fortuna los escombros cubrieron a los 2, y por la velocidad del vehículo, el ataque solo duró un instante, luego comenzó a perseguir a aquel que tiró la bomba.

¡PUTA MADRE, DERRIBEN A ESA AVE!

Otra vez, él gritó por su comunicador, otras 4 naves pasaron por encima, aliadas y enemigas, combatiendo unas con otras.

No pudieron seguir observando, pues un soldado enemigo había llegado a su posición.

El furry disparó al segundo, que cayó al piso, gritando de dolor, sujetando su pecho, del que comenzó a salir sangre.

Por la corta distancia, el primero golpeó la muñeca del enemigo con su arma, obligándolo a soltar su rifle de asalto, pero tampoco tuvo tiempo para hacer algo más, pues recibió una embestida, iniciando un combate a pata.

Ambos soltaban golpes al rostro y principalmente, intentaban atinar al cuello, el combate no duró mucho, pues el enemigo recibió un disparo en el lado derecho del cráneo, que había explotado la mitad de su cabeza en esa dirección, permaneciendo en su lugar un tiempo antes de caer hacia el lado izquierdo, muerto.

El primero, salpicado de sangre, se reincorporó, retomando su cobertura, tomando su arma y dando un asentimiento para agradecer a su compañero.

El segundo sacó una jeringa de uno de sus bolsillos con un líquido anaranjado, inyectándosela a un lado de la herida.

Ambos se prepararon para continuar con la batalla, hasta que una explosión vino de arriba.

Girando nuevamente sus cabezas, observaron uno de los aviones de combate, envuelto en llamas y cayendo a gran velocidad, era enemigo.

Y como un maldito kamikase, redirigió su nave con dirección hacia el punto donde este escuadrón estaba...donde este dúo de soldados estaba.

¡CARAJ_

https://youtu.be/tNIngM2WkIg

EASHI: Mami, ¿Dónde está papá? ¿Y Aarin? - la pequeña preguntó inocentemente, sentado sobre los hombros de su madre, Britany, que llevaba de la mano a su hermano humano, Doku -

La tiburón miró a su niña con una expresión complicada, no sabía que debería responderle, habían pasado solo 2 días, ella claro que se había desesperado, estaba aterrada, y muy triste por la situación, fue gracias a sus crías que se mantuvo fuerte.

BRITANY: Pronto vendrán cariño, solo hay que esperar - le sonrió a su hija, nunca se había sentido tan hipócrita, pero tenía que mantenerlo tranquilo, y antes de que la pequeña hiciera algo, fue interrumpida - Ve con tus hermanos, juega 

Mandó a su niña con el resto de crías, que se entretenían con diversos juguetes y juegos inventados, riéndose e ignorando la situación del exterior.

Ahora mismo, estaban en la base militar principal, al menos en este momento, en un refugio subterráneo dentro de la misma, cuya seguridad, como era de suponer, estaba al tope de su capacidad, no solo tenían la vida de las 'Matriarcas', sino que también, de los herederos humanos.

¿Por qué se tomó esta decisión? Pues, cuando las cosas en esa alcantarilla se complicaron, para horror de todos los que trabajaban en la base, un gran movimiento comenzó.

Los demás países entraron en un estado de guerra interna, el grupo terrorista los atacaba, tenían pocas bajas, sin embargo, el problema recaía en que los tenían encerrados, por lo que no podían mandar apoyo.

Por supuesto, algunos simplemente se zafaron de esta molestia, y mandaron su apoyo, aunque los terroristas dejaron de atacarlos, juntaron sus fuerzas con los aliados del país, duplicando el fuego.

El ataque en la alcantarilla resultó en el fracaso del equipo de 6, después de eso, de una forma repentina comenzaron ataques a diferentes puntos de la ciudad, y claro, hubo una respuesta.

En tan solo 2 días, la ciudad entera ahora era un campo de guerra, edificios semidestruidos, escombros, un poco de todo.

Por supuesto que antes del conflicto en sí, los civiles fueron evacuados, y, a pesar de la histeria colectiva, todo salió bien.

Las hembras no habían sido evacuadas, pues inicialmente se pensaba que el refugio subterráneo sería suficiente para proteger a las matriarcas y sus crías hasta que esto termine.

Sin embargo, el enemigo consiguió avanzar lo suficiente para preocupar a los altos mandos, y en lugar de malgastar recursos para defender un lugar con múltiples puntos ciegos, se decidió por llevar al harem a su propia base.

Estaban más protegidos que los calzones de una monja, era la mejor opción en este momento, además, contaba con un túnel subterráneo que guiaba a otra base de emergencia, en caso de que esta cayera.

Ambos bandos tenían mucho poder, tanto que se repelían mutuamente, evitando que el avance fuera demasiado preocupante.

Por parte del enemigo, los 'Colmillo venenoso', aunque sus armas usaban balas antiguas, de metal, poseían grandes números y una buena organización, y el detalle que realmente los hacía peligrosos, era que tenían múltiples espías infiltrados en el ejército.

Espías como Vusse, y muchos más, que pasaban la información al otro lado, sorprendentemente, los líderes del ejército, es decir, los comandantes, eran extremadamente competentes para no tener experiencia en conflictos bélicos.

Fue por esta razón, que incluso aunque el enemigo supiera sus movimientos, ellos lideraban de tal manera que podían contrarrestarlo, básicamente improvisaban, y era efectivo.

El ejército, poseía las 'Armas de pulso', éstas lanzaban pequeñas ráfagas de vibraciones, simulando las balas, cuando tenían contacto con algo que no fuese el aire, lo hacían vibrar de tal manera que causaba una gran destrucción.

Si era disparada a una pared de concreto, fácilmente podría hacer una grieta de 4 metros en todas direcciones, si es disparada a algo orgánico...pues, lo más probable es que le explote por completo el sitio golpeado, un brazo, una pierna, aunque también depende del lugar de impacto.

¿Cómo funcionaba? Pues las vibraciones disparadas se movían a una excesiva velocidad, era como una pelota rebotando, solo que sin necesidad de apoyarse en nada más que el aire, y debido a su movimiento, al entrar en contacto con otra superficie, le pasaban la vibración.

Esta solo duraba un micro segundo antes de disiparse, y debido a su tamaño, causaba daños en un lugar concreto, aunque bien usadas, podían hacer daño en área de forma monstruosa.

Solamente con estas armas de alto secreto y nulo comercio, fueron capaces de resistir los ataques, ¿Por qué no eliminaron a sus enemigos rápidamente con esta fuerza de ataque monstruosa? Pues porque con la muerte de los suyos, el 'Colmillo venenoso' se hizo con estas armas.

Gracias a los expertos que tenían, y sobre todo, a los infiltrados, lograron hacerse con la información de estas armas, replicándolas, por lo que ambos bandos estaban igualados.

Otra ventaja del ejército, era, como ya se dijo, la capacidad de sus comandantes de dirigir a sus hombres.

Por ahora, esta guerra estaba en un punto muerto.

Aarin estaba dibujando en el piso, usando una piedra que encontró por ahí, frotándola con fuerza para dejar marcas blancas, usándola como si fuese un crayón.

Después de realizar unos cuantos trazos más, quedó mirando el resultado, que era una especie de ventana rectangular, con diversos cuadrados pequeños en la parte inferior, y un par de nubes y un círculo en la parte de arriba.

Era claro que eso era el edificio donde vivía, a diferencia de sus hermanos, al pequeño humano le gustaba ver por la ventana y apreciar el paisaje.

Miró su dibujo de forma un tanto nostálgica, solo fueron 2 días, pero siendo un pequeño niño, para él el tiempo pasaba sumamente lento, así que lo sintió como una completa eternidad.

Su padre estaba con él, jugando y a veces acariciando su cabeza para mantenerlo tranquilo, aunque pasaba más tiempo con Mirdroj, pero se daba cuenta de que a Dash no le agradaba para nada.

Pensaba como estaban su madre y hermanos, a decir verdad, no se arrepentía de nada, prefería que él haya sido el raptado y no alguno de los demás, por lo que no sentía un genuino miedo de lo que le pasara con tal de que sus hermanos estuvieran a salvo.

Algo cayó detrás de él, lo que lo hizo voltearse, encontrando a su padre, que estaba sentado sobre sus rodillas, de puntitas, usando las manos para no perder el equilibrio.

El detalle que realmente lo hizo ponerse de pie y correr a su progenitor fue que estaba desnudo, y con la cabeza agachada, su rostro siendo tapado por su larga melena.

Aarin tomó los hombros de su padre, e intentó ayudarlo a ponerse de pie, Dash tardó en reaccionar, y levantó la mirada a su hijo, sonrió ligeramente, sin ponerse de pie, lo abrazó.

Ninguno realmente tenía en cuenta que el humano mayor no tenía ninguna prenda, eso era irrelevante para ambos, él solo se sentó en el piso, en posición de loto, acariciando la cabeza del pequeño, que se veía claramente preocupado por lo que le pasó a su padre, no pudiendo evitar mirar arriba.

Ohh...quizá me pasé un poco...pero cumpliste
con tu parte, yo lo haré con la mía

Mirdroj, que estaba enroscada en las vigas metálicas del techo, apenas mostrando su rostro escamoso, mostró lo que posiblemente era una sonrisa, aunque causó repugnancia en Aarin.

No entendía sus palabras, pero cuando el pelirrojo le acarició la mejilla y lo miró con tristeza, supo que algo pasaba.

Un grupo de furrys entró al lugar, el primero le sujetó suavemente el brazo, haciendo una seña para que fuera con él.

Ellos habían recibido claras instrucciones de tratar con extremo cuidado al pequeño humano, sino...se las verían con 'Madre'.

Aarin no entendía qué pasaba, miró a quienes estaban tras él, luego a su padre, que lo soltó, y sin decir nada, tomó su mano, como una señal que decía 'Todo estará bien'

Había tardado, pero la serpiente gigante cumplió su 'promesa con Dash', así que, estaba feliz por su pequeño.

Aarin fue alejado de su padre, mientras pataleaba y luchaba por zafarse del agarre de los furrys que se lo llevaban, extendiendo la mano a su progenitor, intentando alcanzarlo, él solo le sonreía, mientras Mirdroj lo envolvía de nuevo.

Antes de poder ver cualquier cosa, las puertas metálicas se cerraron.

El general estaba en su oficina, mirando seriamente un holograma, que mostraba la ciudad, y varios puntos rojos y verdes, obviamente, los verdes eran sus aliados, y los rojos, enemigos.

Los rastreadores en los trajes de sus hombres servían para saber su posición exacta, mientras que los enemigos, simplemente eran lugares donde había avistamientos, eran posibles posiciones de esos furrys.

Poniendo atención, había un pequeño extremo donde la cantidad de puntos rojos era menor, mandaría a un escuadrón de espionaje para que compruebe el lugar, quizá francotiradores para despejar la zona de una vez.

Pensó en esto, luego, otro pensamiento llegó a su mente, cambió la imagen del holograma a una de la monstruosidad que atacó en un inicio.

Miró su imagen, completamente estirada, marcando su longitud y ancho, luego, estaba su información.

Sus científicos la llamaron 'Serpentus Tinicus', claro que ninguno de sus hombres la llamarían de esa forma, por lo que era conocida simplemente como 'Sertinidus'.

Poseía una armadura natural, que eran sus escamas, según algunos estudios, estas debían de ser muy resistentes, con un grosor de 1 cm aproximadamente.

Podía moverse rápidamente, lo que daba claros indicios de que su esqueleto poseía múltiples articulaciones, y con músculos muy fuertes, lo suficiente para mover su gran cuerpo.

Se investigó del porqué solo había uno de estos ejemplares, y no había ningún rastro de sus antepasados, pero como era de suponerse, no encontraron mucho, por lo que dejaron esto pendiente.

El general se sobó el entrecejo, pensando constantemente el cómo debería proceder con la criatura.

Con las armas de pulso debería ser más que suficiente, pero como la Sertinidus era inteligente, suponía que conocía el estado actual del exterior, y evitaría a toda costa un enfrentamiento directo...además, no estaba completamente seguro de que las armas la afectaran de una forma muy significativa.

También, él tenía la teoría personal de que esa bestia era la líder de los 'Colmillo Venenoso', justo cuando la perseguían específicamente a ella, apareció este ejército desconocido para atacar.

La primera vez que mandaron un avión de exploración para investigar una extraña estructura en una isla remota, varios kilómetros frente al alcantarillado sospechoso, el vehículo fue derribado mucho antes de llegar.

Luego, probaron a mandar múltiples aviones con apoyo terrestre, pero acabó con el mismo resultado, era obvio que ahí había algo que estaban dispuestos a proteger con todo, su 'Capital', por así decirlo.

El general se sentía algo frustrado, esto no era lo que esperaba, no creía que la última opción para ellos, se convertiría en la primera, y al parecer, la única, no parecía haber indicios de paz, y con las bajas sufridas en ambos bandos, era imposible que alguno cediera.

Obviamente, se pensó en bombardeos a gran escala, sin embargo, la idea tampoco era dejar inutilizable la ciudad, ni dejar daños económicos significativos, si bien gracias al humano el país se volvió rico, tampoco era necesario malgastar todo eso ni romper la economía global o nacional.

Al menos el ejército, quería dejar la ciudad en un estado habitable y fácil de reconstruir, había ciertas zonas que si o sí ocuparían una significativa cantidad de recursos para volver a ser lo que fueron, pero esto era inevitable.

Alguien tocó la puerta de su oficina, él se quedó callado unos segundos, luego suspiró, hablando en voz alta.

GENERAL: ¡PASA! - no desvió la mirada del holograma de la serpiente -

OPERADOR: ¡SEÑOR! - el furro que entró estaba muy agitado, respirando con dificultad, se nota que se movió bastante rápido - ¡UN AVIÓN ENEMIGO DISPARÓ UNA CÁPSULA EN NUESTRO TERRENO!

GENERAL: ¿Un bombardeo? - levantó la mirada, algo sorprendido -

Entendió bien lo de 'Cápsula', sin embargo, eso era señal de que un posible ataque aéreo ya estaba siendo planeado.

OPERADOR: ¡NEGATIVO! - tomó otra bocanada de aire - ¡EN EL INTERIOR ESTABA UNA CRÍA HUMANA, SEGÚN NUESTROS REGISTROS, DE LA HEMBRA SHADE! - dijo rápidamente, quedándose sin aire -

GENERAL: ¿¡QUÉ ACABAS DE DECIR!? - se acercó rápidamente al trabajador, bastante sorprendido -

VELVELA: ¿Y Dash? - le preguntó al agente B -

Los agentes secretos, como lo eran B, H, Zelly o Droda, se volvieron vitales, ellos se encargaban de las misiones de espionaje de alto secreto, que solamente los generales conocían.

AGENTE B: ...En la cápsula solo llegó Aarin - cruzado de brazos, al igual que la loba, miró seriamente a Shade, que lloraba fuertemente mientras abrazaba al pequeño humano -

VELVELA: ¿Nada más? - aunque estaba feliz porque la tiburón se reencontrara con su hijo, no obstante, siendo honesta, estaba más preocupada por Dash -

AGENTE B: ...Solo había un mensaje - sacó una Tablet de su traje, mostrándole una imagen -

'Este es el intercambio'

Eso fue lo que la boxeadora leyó, frunció el ceño, entendía que el raptor les dio al hijo de Dash a cambio del pelirrojo, obviamente, no iban a dejar que eso pasara.

Nadie sabía que el mensaje no era precisamente para ellos, y que el intercambio tampoco era para ellos, sino, para Dash.

Desde que llegó Aarin, este estaba inconsciente, hasta hace más o menos una hora, en la que comenzó a despertarse, casualmente, eso pasó justo cuando estaba llegando a la base, por lo que estaba despierto para cuando se reunió con su madre.

Como era de esperarse, la base fue informada de lo ocurrido, y el escuadrón que transportaba al pequeño estaba armado de pies a cabeza, con diversos francotiradores en los edificios cercanos, además de que una buena parte de las fuerzas aéreas estaba destinada a sobrevolar el área y asegurarse de que no serían atacados.

La preocupación de que, aprovechando que sus fuerzas estaban concentradas en la cría del humano, sus enemigos atacarían con más fuerza, era algo preocupante, pues en la guerra es algo obvio, ¿No? Ataca a tu enemigo cuando esté más débil y no pueda defenderse.

Sorprendentemente, esto estuvo muy lejos de la realidad, pues no fueron atacados en este periodo de tiempo de una hora, cuando Aarin llegó a la base subterránea, los ataques regresaron a la normalidad.

Eso fue algo claramente inquietante para los jefes, ¿Por qué no hicieron nada? ¿Quién ordenó que dejaran libre al pequeño? ¿Por qué el humano Dash seguía ahí afuera?

Las preguntas eran muchas, pero con los grandes expertos en sus filas, se llegó a la conclusión de que aquél mensaje hacía referencia a una 'tregua'.

"Yo me quedo al humano adulto, y ustedes se quedan con su cría"

Esta era la teoría en la que casi todos coincidían, aunque había otro par, porque, por ejemplo, no conocían a ciencia cierta si la sertinidus fuera una hembra, no había rasgos para determinarlo.

Incluso sus sensores no pudieron determinar su sexo, así que, ¿Por qué haría esto dado el caso de ser macho?

Pero dejando todo eso de lado, el mensaje era una propuesta de Cese el fuego, una en la que ellos no estuvieron en la conversación, era un trato que debían aceptar sí o sí.

No obstante, al igual que los humanos del mundo de Dash, estos furrys van por todo cuando de ellos se trata, quizá la presencia de un humano no fue algo completamente bueno, porque estaban dispuestos a matar a muchos con tal de tener a TODOS los humanos bajo su ala.

Tal vez...era mejor quedarse como estaban.

Aunque, ¿Eso realmente hubiera cambiado algo? Estos enemigos suyos estaban bajo el control de una sola criatura, la única razón por la que no hubo esta guerra antes fue porque no había motivos, pero siempre se pudo.

Quién sabe, puede ser que la culpa sea de Dash por haber llegado aquí, quizá realmente eso no importa...

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BUENO, AQUÍ TERMINO ESTE CAPÍTULO, PLANEO QUE EL SIGUIENTE SEA UN CLÍMAX A LA HISTORIA, Y A LA VEZ, UN FINAL, OJALÁ ME SALGA, ASÍ QUE, DESEENME LO MEJOR. RECUERDEN USAR CONDÓN, CEPILLARSE SUS DIENTES, OBEDECER A SU GFA Y NO ROBAR. A MI NO ME QUEDA NADA MÁS QUE DECIR MÁS QUE ADIÓS, ASÍ QUE...