Comenzaba la cuenta regresiva para el fin de la jornada escolar, todos estaban felices pues empezaba oficialmente el fin de semana donde aprovechaban para salir al Stacey's club, una especie de local juvenil donde se reunían para divertirse, alcoholizarse y hasta emborracharse, sin embargo, para seis chicos este viernes sería totalmente diferente, pues tenían que cumplir con su detención y como el timbre lo indicó la hora había llegado.

—Bien, comenzaremos con una breve presentación—habló el profesor.

—Yo comienzo—gritó un chico de rulos— Me llamo Ramiro Ponce y soy de tercero—dijo volviendo a sentarse.

—Muy bien alguien más quiere presentarse—preguntó el hombre.

—Soy Emilia Mansfield, y no debería estar acá—se alteró un poco.

—Los que están aquí es por algo dudo que la hayan enviado por equivocación—explicó amable.

—Ella tiene razón, yo tampoco debería estar aquí—gritó un chico castaño—Me llamo Simón Álvarez—se presentó.

—Que me envíen por decir que la clase estaba aburrida es totalmente injusto—explicó una rubia.

—Smith, aquí dice que la enviaron por estar viendo el celular en muchas ocasiones—dijo leyendo los reportes de los chicos.

—Delfina Alzamendi—nombró a la chica quien había permanecido callada.

—Yo, soy de tercero de Literatura—se presentó y volvió a sentarse.

—Bien sólo falta Balsano—dijo el profesor.

*****

—Hey pelirroja cuidado no te vayas a caer—gritó un chico.

— ¿Qué?—gritó Jim no pudiendo reaccionar y cayendo de bruces al suelo provocando que su ropa se rasgara.

—Te dije que tuvieses cuidado tontita—se burló el chico.

—Pero que te pasa a ti, yo no te he hecho nada—trató de levantarse.

—Tu presencia me molesta—la empujó haciendo que volviera a caer.

—Oye por qué no la dejas tranquila—un chico castaño apareció.

— ¿Vienes a salvar a tu Novia?—decía burlesco.

—Es una chica que no te ha hecho nada déjala en paz—levantó a la chica.

—Balsano, hazte un lado y déjame a la pelirroja—lo agarró de la camisa.

—No, y escúchame bien la vuelves a tocar y te mato—le dio un puñetazo en señal de advertencia.

—Te la dejo pasar sólo por hoy—amenazó el rubio.

— ¿Estás bien?—le preguntó Matteo a la chica que ya estaba llorando.

—Tengo miedo, no me dejes sola ¿qué tal si vuelve?—decía entre lágrimas aferrándose a su cuerpo.

—No lo hará... Yo debo irme estoy atrasado, pero no te dejaré sola... a ver oye tú el de sonrisa linda ven—le habló a un chico de ojos verdes.

— ¿Necesitas algo?—dijo el ojiverde amable.

—Necesito que te quedes con esta chica y la acompañes hasta su casa—explicó.

— ¿Por qué llora tanto, que le hiciste?—preguntó con clara preocupación.

—Yo nada mira, David la estaba agrediendo yo sólo la defendí—la chica asintió— Ella no quiere quedarse sola por miedo, yo no la puedo acompañar tengo que irme—explicó rápido.

—Está bien puedo acompañarla, soy Pedro—le tendió la mano y la acercó a él.

—Bueno me voy, adiós—dijo Matteo y se fue hasta la sala de detención.

*****

—Eres una víbora, Johanna—Luna la encaró.

— ¿Y a ti que te pasa chiquita?—preguntó haciéndose la desentendida.

—Me refiero a Emilia ¿por qué la tratas tan mal? No te ha hecho nada—le gritó.

—A ver te calmas zancudito no la escuchaste que me lanzó un hechizo—quiso darle una cachetada.

—A mí no me vas a golpear descerebrada—Luna le tomó la mano— Y te advierto deja a Emilia en paz—le dijo indicándola y se fue.

— ¿Qué le pasa a esa?—le preguntó Johanna a sus amigas, ellas negaron con la cabeza en señal de no saber porque Luna defendía tanto a Emilia si esa chica no podía tener amigas.

Luna que iba muy enojada por lo que Johanna le había hecho a Emilia, si bien era cierto que desde hace 2 años ella y Emilia ya no se hablaban para la castaña, la rubia siempre sería su mejor amiga y haría todo por protegerla, aunque Emilia se negara, Luna estaría ahí y ya no dejaría que la siguieran molestando y mucho menos agrediendo.

*****

La revolución Francesa fue un conflicto social y político, con diversos periodos de violencia, que convulsionó Francia y, por extensión, a otras naciones de Europa que enfrentaban a partidarios y opositores del sistema conocido como el Antiguo Régimen. Relataba el profesor cuando fue interrumpido por un chico.

—Balsano al fin llegó—se dirigió al chico.

—Agradezca que vine—dijo desafiante.

—Parece que ser el ahijado del rector le ha dado muchas ventajas—se molestó el profesor.

—Ventajas que cualquier profesor quisiera—dijo dejando sin palabras al profesor.

—Pase a sentarse—le ubicó el asiento y Matteo prosiguió a sentarse.

Según la historiografía clásica, la Revolución francesa marca el inicio de la Edad Contemporánea al sentar las bases de la democracia moderna, lo que la sitúa en el corazón del siglo XIX... —Balsano otra vez interrumpiendo—regañó al chico.

—Lo siento esta de las revoluciones es demasiado aburrido—dijo fingiendo un bostezo.

—Matteo cállate tu voz me irrita—le dijo la rubia—

—Princesa Smith, ¿Qué haces aquí? No deberías estar comprando ropa para tus muñecas—dijo burlesco.

—Al menos no ando emborrachándome y drogándome todos los fines de semana—le grito fastidiada.

—Se te olvidó lo de prostituirme—respondió Matteo.

—Basta los dos—habló el profesor.

— ¿Alguien trajo comida?—Ramiro se tocaba el estómago.

—Iré a comprar algo—Simón se levantó de su asiento.

— ¿Dónde cree que va? Nadie puede salir yo iré a comprarles algo—dijo el profesor tomando sus cosas y recolectando el dinero.

— ¿Y bien que hacemos ahora?—preguntó el ruloso.

—Una dinámica para conocernos—sugirió Delfi.

— ¿Pero qué les pasa a ustedes dos? Estamos en detención por si no lo han notado—dijo Ámbar confundida por la actitud de los chicos.

—Ya lo sabemos, pero algo tenemos que hacer para matar el tiempo—explicó Delfi entusiasmada.

—Tienes razón—Ramiro se levantó de su asiento.

—Parece que alguien tiene complejo de Obama—murmuró Simón.

—Para tu información soy el presidente de la clase y miembro del consejo escolar—dijo orgulloso.

—Traigan la alfombra roja entonces—dijo Emilia.

—Vaya, pensé que las brujas no hablaban—bromeó Simón.

—Y yo pensé que los animales tampoco—respondió rápido haciendo que todos se rieran incluido Simón.

—Buena jugada rubia—Matteo la hizo chocar los cinco.

— ¿Y por qué los enviaron a detención?—preguntó Ámbar.

—Rayé la foto del rector—dijo Ramiro riendo.

—No entiendo a este chico... En fin yo estoy aquí porque encontraron drogas en mi mochila—decía Simón con tristeza.

—Podrías haber traído un poco—intervino Matteo— Era una broma solamentedijo al ver la cara de preocupación de Simón  bueno yo estoy acá por hacer cosas malas ya saben—lanzó una mirada de odio.

—Bueno yo era la 10 vez que llegaba atrasada a la clase—dijo Delfi.

—Yo supuestamente hechicé a una compañera—dijo Emilia con la voz algo quebrada.

—Yo estaba con el celular—finalizó Ámbar.

Después de un rato dejaron de hablar y cada uno volvió a lo suyo estaban metidos en su mundo cuando Ramiro empezó a tararear una canción bastante conocida la cual después decidió cantar.

...Cause when it's going good it's going great

I'm superman with the wind at his back, she's Lois Lane

But when it's bad it's awful I feel so ashamed, I snapped

Who's that dude I don't even know his name

I laid hands on her, I'll never stoop so low again

I guess I don't know my own strength...

Los demás se empezaron a mirar entre ellos, pues de todos los que estaban allí Ramiro era el más entusiasmado y que parecía estar hasta feliz de haber sido castigado, Delfi que seguía el ritmo también se animó a cantar.

...Just gonna stand there and watch me burn

Well that's alright because I like the way it hurts

Just gonna stand there and hear me cry

Well that's alright because I love the way you lie

I love the way you lie, I love the way you lie...

Ambos chicos se pararon y siguieron cantando no lo hacían nada mal, reconociendo que es una canción complicada se miraron unos segundos y decidieron invitar a sus compañeros de castigo Simón y Ámbar se unieron inmediato, Emilia un poco tímida también logró unirse a cantar, Matteo los miraba divertido, pero Ámbar lo agarró de la mano y lo llevó a cantar con ellos.

Así estuvieron cantando un rato divertidos olvidándose de los problemas que cada uno tenía, se sentían libres aun cuando eran unos simples desconocidos que sólo se habían encontrado en algunas clases, en el pasillo o en algún otro lugar del Instituto, por un instante fueron simplemente adolescentes como cualquier otro de sus compañeros que tenían una vida normal sin presiones, abusos, intentos suicidas ni leyendas falsas y ninguno de ellos quería que eso acabara.

—Vaya veo que se están llevando bien—dijo el profesor mientras entraba a la sala—

—Si ya somos amigos—dijo Ramiro mientras abrazo a los chicos.

—Oye que te pasa apenas nos conocemos—decía Matteo soltándose del abrazo.

—Pero que pesado, Matteíto—Ámbar le golpeó el hombro.

—Bien chicos en vista y considerando que aún les quedan 2 horas pueden seguir cantando—propuso el hombre.

Siguieron cantando varios estilos musicales por mucho tiempo que no se dieron cuenta que la hora ya había pasado y ya era momento de irse.

—Juntémonos mañana a cantar después de clases—sugirió Delfi.

—No, yo tengo cosas que hacer—saltó Matteo—

—Vamos amigo te necesitamos—lo abrazó Simón.

—Primero no soy tu amigo, segundo no quiero cantar y menos con ustedes—dijo Matteo y salió lo más rápido que pudo del lugar.

—Bien nosotros nos veremos mañana a las 15:30—dijo Ramiro.

—La verdad es que me parece buena idea—intervino Ámbar.

—Cuenten conmigo—dijo Emilia mientras tomaba sus cosas para irse.

—Adiós brujita—bromeó Simón.

— búcsú aranyos állat—rio Emilia y se fue.

—Ella me acaba de lanzar un hechizo—preguntó serio Simón.

—Estás loco, ella no es una bruja—rio Ámbar y salió junto a Delfi y Ramiro.

—La verdad me tengo que ir rápido—habló Delfi.

—Te puedo acompañar—pidió Ramiro.

—No es necesario adiós—Delfi se fue.

—Que chica tan rara—murmuró Ámbar—Bien creo que tendrás que caminar solo—propuso a Ramiro el chico asintió.

Ninguno de los chicos se imaginaba que después de ese día todo cambiaría en sus vidas

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* Es húngaro: búcsú aranyos állat: adiós lindo animal

Hasta aquí el capítulo de hoy 

David molestando a Jim por qué será?

Les gusta que Luna defienda a Emilia?

desde el próximo capítulo se empezaran a conocer las verdaderas historias de los chicos y obviamente saldrán los demás que faltan.

Besos de estrella para ustedes

Cami!