Lloraba. Él estaba llorando. 'El gran' Osamu Dazai estaba llorando. Y es que no podía evitarlo; se sentía como una mismísima mierda.

Pero bueno, siempre se sentía así, no era raro que se encontrara "desahogándose" un poco. Aunque, a él, no le servía de nada llorar, solo le hacía sentir un poco mejor, pero nada más.

Obviamente, nadie en la Agencia sabía de aquella rutina suya tan deprimente. Primero, despertarse, mientras en su mente sonaban las palabras 'hoy será mejor que ayer' ーnecesitaba pensar así, por lo menosー. Después, desayunaba un simple café y a continuación, iba a trabajar.

Trabajar, trabajar y trabajar, ¿de qué servía?¿para conseguir dinero y poder vivir bien?¿para qué? Él quería morir, no vivir bien.

Espera, ¿realmente quería morir? Si quisiera, ya se habría tirado por un edificio de más de veinte plantas, entonces, ¿por qué?

Ah, sí, sus amigos, todo era por ellos. Por mucho que Kunikida le insultara, Chuuya le golpeara y Akutagawa quisiera matarlo, les consideraba sus amigos, aunque ni sabía por qué, en el caso de estos dos últimos.

¿Y qué hacía luego de trabajar? Ir a llorar a su casa durante horas, deseando no despertar nunca más. Pero, para su desgracia, esto nunca pasaba.

Limpió sus sonrojadas y húmedas mejillas con sus manos al oír su móvil sonar. 'Atsushi-kun' podía leerse en la pantalla. Aceptó la llamada y posó el teléfono cerca de su oreja, intentando camuflar la tristeza de su voz.

ーAtsushi-kun, ¿qué ocurre?

ーDazai-san, dentro de poco es Navidad, como ya sabe, y, me preguntaba... ーEl peliblanco hizo una ligera pausaー¿qué quiere para Navidad, Dazai-san?

¿Navidad? Oh, así que va a pasar otro año sin cumplir su deseo de morir...

ー¿Dazai-san?

ーAh, ¡una soga va bien, Atsushi-kun!

ー¿De verdad? Bueno, si es lo que quiere... en fin, ¡buenas noches, Dazai-san!

ーBuenas noches, Atsushi-kun.

Y colgó.

Y pensó. Estaba claro, necesitaba a alguien a quien querer, ¿o no? Y a alguien que le amara. Era obvio, pero no se le ocurrió antes.

Si Dazai encontrara a alguien que le amara, quizá ese deseo de terminar con su vida de una vez desapareciera.

Eran simples suposiciones, pero podría funcionar. Dazai Osamu iba a encontrar a alguien que le amara de manera incondicional.

En la salud y en la enfermedad; en la vida, y en la muerte.