Sonamy Week 2015

By: Sonye-San

Day 1: Umbrella

Day 2: Blanket

Day 3: Chao

Day: Family

Day 5: Custome (Halloween Special)

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Es difícil de creer tan rápido que pasaba el tiempo, lo que antes era un lugar tan peligroso por así decirlo, debido a los ataques del doctor Eggman, era una sombra de lo que era. Después de aun tiempo, él se había retirado tras su último plan fallido, la edad estaba cobrando cuentas y la verdad no quería tener que enfrentarse no solo al Sonic Team sino también a sus hijos.

En una hermosa casita, en los alrededores de Green Hill Zone, vivía la familia de lo que fue el Héroe de la Tierra; Sonic The Hedgehog.

— ¡Slash The Hedgehog! —Gritó un muy enojado erizo azulado— ¡No te escaparas de mi, te toca bañarte!

— ¡No quiero! —Vociferó a lo lejos, un pequeño erizo color morado, de ojos color verde jade y tres púas en su frente, cabe destacara que estaba sin guantes ni zapatos deportivos.

— ¡Si no sales de tu escondite, no te daré ración extra de Chilidogs antes de que llegue tu madre!—Ahora cambio su técnica, hacia un buen chantaje.

— ¿Ración extra? —Indagó el pequeño, la oferta estaba siendo muy tentadora para su joven mente de dos años.

—Así es—Sonrió triunfante, viendo como su único hijo caía fácilmente en su trampa.

—Está bien, papi— Slash salió gateando con toda su inocencia de su preciado escondite, Sonic aprovechó y con su súper velocidad cargó al niño en sus brazos.

—Ahora no te me escaparas, pequeño mocoso malcriado

— ¡No! ¡Me engañaste, no es justo! —Lloriqueó el infante tratando de soltarse del agarre de su padre.

—Ni hablar, no quiero que tu madre me mate si no te encuentra limpio. —El joven adulto de púas azuladas, admitió con cierto temor en sus palabras. Ahí mismo, el erizo morado se le ocurrió una gran idea.

—Papi, eres un miedoso—Dijo con burla, antes de Sonic poder replicar, un martillo de tamaño promedio, de colores rojo con azul, impacto fuertemente en su cabeza, lo suficiente para que Slash lograra escaparse de su captor en un viento morado.

— ¡Demonios!—No pudo evitar maldecir, el golpe le había dolido— ¡¿Por qué tenía que heredar las dos habilidades?! —Se cuestionó enojado, mientras daba un largo suspiro—Ya que—Se encogió de hombros, sonriendo un poco, mientras se preparaba para perseguir a su primogénito por toda la casa, como casi todos los días que tenía que cuidarlo.

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Duró aproximadamente dos horas en poder atrapar a su escurridizo hijo, puesto que no sabía como hizo para escaparse de la casa e irse a la ciudad.

¡Mierda y más mierda!

No se quería ni imaginar lo que le haría su adorada esposa si tan solo se enterara que su pequeño y consentido hijo de dos años, había salido de la casa y solo a una ciudad tan grande como Station Square.

Ese niño lo iba a matar un día de estos, pero, gracias al buen y bondadoso Chaos, encontró a Slash en Mystic Ruins jugando con su tío favorito, Miles Tail Prower.

— ¡Slash! —Llamó al niño con desesperación, éste solo lo miró con burla sacándole una lengua.

—Tómalo con calma hermano, Slash es muy adorable—Dijo Tails, mientras abrazaba a su sobrino con ternura, le era casi imposible contenerse.

—Oh Tails, ¿También tú? —Cuestionó en un suspiro, Tails no entendió lo que le quiso decir—Ese niño controla a las personas a su alrededor, tú no quieres saber cuántos martillazos es recibido por su culpa—Acusó, nervioso con recodar todas esas veces que vio a Amy enojada.

—Papi, eres un miedoso—volvió a burlarse de él, sacándole la lengua nuevamente.

—Ya verás pequeño monstruo—Amenazó con un aura amenazante de color oscuro, Slash por miedo, comenzó a llorar en los brazos de su tío.

— ¡Mira lo que hiciste Sonic! —Regañó con el ceño fruncido—Hermano, es solo un pequeño niño, estoy decepcionado de ti.

Sonic se calmó, volviendo a su color característico. Luego suspiró, preguntándose ¿de niño también fue así? —Perdona, Slash—Se disculpó avergonzado, extendiendo sus brazos para que su hijo se viniera con él, Slash sollozando un poco pidió ir con Sonic—Vamos a casa, si nos damos tiempo, tal vez tu madre no nos regañe a ambos, solo si prometes guardar el secreto ¿sí?

—De acuerdo, papi—Asintió con una sonrisa, recostando su cabecita en su pecho, dando una imagen bastante tierna a la vista de Tails.

—Bueno hermanito, nos vemos en otra ocasión—Se despidió de él con un pulgar en alto, y salió corriendo a la velocidad del sonido, dejando a un muy orgulloso joven Zorro de dos colas.

—Quien lo diría, como pasa el tiempo... —Susurró con nostalgia viendo el atardecer en las nubes.

—Ni que lo digas Tails—Contestó una voz femenina muy conocida para él.

— ¿Cream? —Inquirió.

—Lamento llegar tarde, a nuestra cita—Se disculpó con una pequeña reverencia.

—Descuida, no te perdiste de mucho—Sonrió y la sostuvo de la mano con amor, ella se sonrojó un poco y también le sonrió por igual. Unos minutos después, ambos se subieron a el Tornado X a su próximo destino; Spagonia...

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No tardó ni 3 minutos en llegar a su preciado hogar, Slash estaba muy agotado por utilizar sus poderes, Sonic aprovechó para darle un baño con agua tibia, puesto que estaba todo sucio de lodo. Lo secó con su toalla de su mismo color, y le puso su piyama —azul—favorita para dormir. Le dijo que esperara unos segundos para él poder prepararle su leche con chocolate que tanto le gusta. Así como lo dijo, le trajo su vasito con el líquido a temperatura ambiente. Slash lo tomó gustoso agradeciéndole a su genial papá.

—Que duermas bien hijo—Le dio un tierno beso en la frente, y le despeinó las 3 púas del mismo lugar con cariño

—...Buenas noches daddy... —El pequeño erizo morado, cerró los ojos hasta quedar profundamente dormido.

—Ya era hora—Dio un bostezo y se talló el ojo derecho con pesar.

— ¿Sonikku? —Oyó la voz de la mujer que mas amaba en el mundo.

— ¿Ames?, llegaste más temprano.

—Hoy fue un día tranquilo en la pastelería de Vanilla—Explicó, relajada—Además, quería ver cómo estaban mis chicos favoritos.

—Estamos bien, Slash se portó de maravilla—Sonrió forzadamente, tratando de mantener su mentira.

— ¿En serio? —Inquirió curiosa e incrédula—Entonces, no fue mi pequeño hijo el que vi correr a toda velocidad al lado de la pastelería ¿no? —Alzó una de sus cejas y se cruzó de brazos.

« ¡Mierda!»Pensó alarmado. —N-No sé de que hablas.

—Si me dices la verdad, tal vez no te castigue—Esperó pacientemente la verdad.

—Está bien—Suspiró derrotado—Slash se me escapo de la casa mientras lo intentaba bañar—Admitió con temor a una represaría.

—Lo sé, fue al local y le di un poco de pastel, luego le dije que se fuera para donde Tails a esperarte.

— ¡¿Qué?!

—Slash es un niño muy listo Sonic, deberías de saberlo, después de todo es tu hijo, cariño—Le guiñó un ojo divertida y le dio un beso en la mejilla.

—Tienes razón Ames, no sé porque me preocupé tanto por él.

—Eres su padre después de todo—Se acercó a la camita y le dio un beso en la frente—Buenas noches mi niño.

— I'm as faster as a flash...—Murmuró Slash entre sueños, sacándole una sonrisa de orgullo tanto a Sonic como a Amy.

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Luego de unos minutos contemplando el angelical rostro de su adorado primogénito, decidieron salir de la habitación y tomar una larga y pasional ducha en conjunto. Para luego acostarse con cansancio en su cama matrimonial. Sonic rodeaba en sus brazos a Amy con amor y ella se recostaba en su pecho, oyendo sus suaves latidos de su corazón, trataba de conseguir fuerzas para algo que la aquejaba desde hace días.

— ¿Ames, estas bien?

— ¿Por qué lo preguntas?

—Cuando nos bañamos juntos, te noté pálida.

—Bueno... —Cerró los ojos, para conseguir calma— ¿Recuerdas que te dije que no había mucho trabajo?

—Sí, lo recuerdo.

—Mentí... —Admitió nerviosa, tratando de desviar la mirada.

— ¿Por qué lo hiciste?

—Sonic, tengo que decirte algo importante.

— ¿Qué? —Él se estaba impacientando.

—Yo... —Respiró profundo y lo miró directo a los ojos—...E-Estoy embarazada... —Soltó al fin.

— ¿E-En serio Ames?

— ¡Realmente lo siento! —Se disculpó, cubriendo su rostro en su pecho, ella sabía que Sonic apenas podía con Slash, sería muy difícil con otro bebé y tan pronto, ella debió ser más precavida cuando intimaban.

— ¿Por qué? —Le acaricio dulcemente su cabeza e hizo que la mirara a sus ojos Esmeralda con confianza—La culpa no es sola tuya.

— ¿N-No estás molesto? —Preguntó, en lo que Sonic limpio esas saladas e innecesarias lagrimas en los ojos de ella, sin dejar de sonreírle con seguridad.

—Admito que no esperaba ser padre nuevamente, Slash es mi mayor reto—besó su coronilla—Sin embargo, las aventuras me gustan difíciles ¿recuerdas? —Le guiñó un ojo.

— ¡Oh Sonikku, eres el mejor! —Lo abrazó con fuerza del cuello, pero sin asfixiarlo como era de costumbre, con el tiempo aprendió a controlar esa temible fuerza de su parte.

—Lo sé, Ames—Correspondió el abrazo—Durmamos, mañana será un día largo para ambos ¿no?

—De acuerdo, buenas noches Sonic—Lo besó en los labios con pasión y amor, el también correspondió el beso con la misma intensidad.

Poco después, ambos se quedaron dormidos abrazados. Sonic sabía que una nueva vida es una gran responsabilidad, pero como dijo, las aventuras le gustan difíciles, además, estaba con Amy Rose con ella a su lado no había nada que temer porque juntos podían con todo. Él a veces pensaba que no era digno de tanta felicidad, porque aunque el tiempo desde que era un adolecente de 15 años había pasado hace más de 10 años, le era casi imposible de creer. Si tuviera la oportunidad de viajar en el tiempo como su amigo Silver—quien también estaba casado con Blaze y era Rey de su dimensión junto a ella—le diría a su yo pasado, que fue un tonto, por haber hecho llorar tantas veces a su Ames. Le pediría una buena golpiza a su rival Shadow—que, para su sorpresa estaba casado con una rubia eriza y con una hija de una edad cercana a Slash—para que dejara de ser tan tonto como Knuckles—que se dio cuenta a tiempo de su Tsunderismo con Rouge, aceptando sus sentimientos y casándose con ella, con la cual tienen una hija un poco mayor que Slash—Y tan cobarde como Vector—que, tuvo el valor suficiente para enfrentarse a Vanilla y decirle sus sentimientos, conquistarla fue un reto pero para el verde cocodrilo no dudó en cumplir, y convertirse en un buen padre para Cream—o al menos un poco de inteligente como su hermano Tails—quien hace unos 3 años formalizó su relación con Cream, dándose una nueva oportunidad de amar—Porque a sinceridad, Sonic The Hedgehog, el erizo mas rápido del mundo, irónicamente no se sentaba a pensar en sus propios sentimientos.

Sin embargo, nueve meses después, la aventura continúa...

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— ¡Samy Rose! —Vociferó un adulto erizo, a su pequeña hija de dos años, de púas rosas con mechones violetas en las puntas y ojos esmeraldas, quien corría por la casa junto a su hermano mayor, quienes no querían bañarse.

Amy solo podía reírse observando tal divertida escena de su marido y sus hijos, amaba tanto a su hermosa y unida familia, que siempre deseaba poder estar así, para siempre juntos.

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