Capítulo 1: “El adiós”

Subtitulo: “La Única Oportunidad”

Narra Autora

- ¡Los voy a extrañar! - Quackity de forma dramática abrazaba con fuerza a cada uno de sus amigos

- ya, ya, ya Quackity, nosotros también, pero deja el drama - Alexby sonrió de forma cansada al volver a abrazar a su amigo por décima vez

Ciertamente Quackity llevaba cerca de veinte minutos diciendo lo mucho que extrañaría a cada uno de sus compañeros mientras los abrazaba y lloraba falsamente

- venga Quacks, que nos volveremos a ver hombre - Luzu le aseguro - además, tenemos nuestros comunicadores para charlar o hablar - lo tranquilizó

- tienes razón Lusu, les voy a hablar todos los días - con excesiva energía prometió dando pequeños saltito

- Ja, ja nos vas a dar lata por mucho tiempo - Vegetta se rió nervioso pero acaricio con cariño la cabeza de aquel "niño"

- ehhh!? Pero si yo los quiero mucho! - se quejo, pero acepto con gusto la caricia dada

- y nosotros a ti, pero ya deja el drama niño vato - Willy miro a su "hijo" con reproche

- si mijo, ya deja de estar chingando - Staxx golpeó suavemente la frente de su hijo con su dedo corazón

- yaaa maaa - se quejo frotando su frente con un puchero

Los demás miembros Karmaladiences solo se rieron por las payasadas de aquel híbrido pato. Todos extrañarían a Quackity tanto como el los extrañaría a ellos, pero ya debían de irse y despidiéndose por última vez cada uno fue por un portal diferente así, dejando completamente solo al amante de los patos

- realmente los voy a extrañar - Quackity sonrió con tristeza y caminando se fue a su casa a recoger algunas cosas que le faltaban para así irse al fin de Karmaland

Quackity aseguro su mochila para así evitar que sus cosas se perdieran y dando un último vistazo a su antigua casa diviso un marco con una foto

- chingada madre, casi me lo olvido - se reprendió a si mismo antes de agarrar aquella foto

Aquella foto no era otra que una foto grupal que todos se habían sacado juntos un recuerdo muy precioso para Quackity cómo para dejarlo abandonado.

Quackity saco la foto del marco y guardando la en un bolsillo interno de su chaqueta azul abrió la puerta de su ya antiguo hogar

- Héroe Quackity, espere un momento - la voz de Merlon se escucho al lado de Quackity

- ¡Ah! Puta madre Merlon! No me asustes así viejo pendejo

- le pido disculpas joven héroe, pero quería hablar por un momento con usted antes de que partiera de Karmaland

- a ver este, de que quiere hablar

- vera, a cada integrante de Karmaland una vez que ya a terminado su trabajo de protejer nuestro amado pueblo se le concede su deseo más anhelado, un deseo que siempre a estado en su corazón, pero que nunca a podido expresar o dejar atrás

- quiere decir.. ¿Quiere decir que me concederán mi mayor deseo? - pregunto incrédulo y con el corazón latiendo le a mil

- por supuesto - aquel viejo anciano le sonrió con dulzura y amabilidad

- entonces.. ¡Por favor Merlon! Quiero ir allí, quiero volver a verlos a todos, quiero.. quiero cambiar el destino del servidor del Dsmp.. reescribir la historia - Quackity sintió sus propias lágrimas bajar por su mejilla derecha

- Claro que sí, lo enviaremos a los inicios del Dsmp - así Merlon empezó a explicar el proceso que harían al cumplir el deseo de Quackity.

Básicamente gracias a los dioses y a la ayuda de DreamXD el servidor del Dsmp retocederia en el tiempo junto con sus demás integrantes en el momento exacto a cuando Quackity entro por primera vez al servidor, claramente solo el servidor y sus integrantes olvidarían todo, Quackity conservaría sus recuerdos y lastimosamente sus cicatrices también, tanto las que obtuvo en aquel servidor como en este, un pequeño precio que tuvo que pagar el híbrido pato

- ¿entendió Joven héroe? - pregunto Merlon - esta es su única oportunidad de poder cambiar los desafortunados acontecimiento de su antiguo mundo

- simon, si entendí - respondió determinado a cambiar los trágicos sucesos

- bien, entonces, le deseamos mucha suerte - Merlon aplaudió y una pequeña luz de diferentes colores rodearon a Quackity haciendo que este perdiera la conciencia

- ay, ay, puta madre creo que dormí chueco - se quejaba mientras sobaba su adolorido cuello y mirando con más detenimiento el cuarto en el que se encontraba pudo reconocerlo muy fácilmente

Era su antigua habitación aquella que uso cuando aún vivía en el servidor madre, antes de entrar al DSMP, emocionado giro su cabeza para encontrar una máscara con una peculiar carita esculpida (:])  junto con una nota

“Joven héroe Quackity.

Está máscara un un pequeño regalo de nosotros espero le guste, la hicimos de mármol, pero no se preocupe le pusimos magia de protección, haciendo así que no se pueda romper y también imposible de quitar, una vez que se la ponga solo usted podrá quitársela o alguien a quien usted le haya dado su permiso

Merlon.”

- no pos, gracias Dioses - agradeció, sintiéndose algo incómodo, ya que aquella máscara le recordaba un poco a Dream, pero dejando de lado aquel sentimiento tomo la máscara y llendo a su baño se miro al espejo

- bueno, creo que al final si me va a servir la chingadera está - murmuró mirando aquella espantosa cicatriz que muy amablemente Technoblade le había dejado en uno de sus ojos.

Suspirando también miro las demás cicatrices que tenía en su cara, la mayoría siendo de explosiones por minas, aunque la más grande que tiene era en el cuello y en su ojo izquierdo (irónicamente justo en el mismo lugar que tenía la cicatriz dejada por Techno), dicha cicatriz se la había echo al tratar de salvar a Titanicus.

Suspirando más fuerte se despojo de toda su ropa y metiéndose a la ducha se dió un relajante baño de agua caliente, sintiendo como sus músculos se relajaban.

Cuando ya estuvo seco y cambiado miro el viejo comunicador que antes usaba antes de romperlo cuando abandonó el Dsmp, al lado de este también se encontraba su nuevo comunicador, con nostalgia agarro su viejo comunicador y al prenderlo vio como tenía doscientas llamadas perdidas y casi mil mensajes sin leer de Sapnap y Karl.

- que..? ¡Pendejo! Recuerda que en este tiempo hablabas todos los días con ellos! - se reprendió, aunque estaba muy confundido, los mensajes y llamadas tenían como casi dos semanas sin leer o ver, raro, la situación en si era muy rara.

Quackity tragó saliva y preparándose mentalmente marco el número de Karl, esperando no desplomarse ahí mismo por todos los sentimientos encontrados que tenía

- ..por favor no respondas.. - pidió en voz baja sintiéndose muy nervioso y con ganas de llorar

- ¡Quackity! - gritaron del otro lado de la línea

- ¡Ah! Ka..Karl - Quackity se sobó su oído derecho adolorido por el grito de su amigo

- ¿Dónde has estado? ¿Estás bien? ¿Porque no respondías nuestras llamadas? - múltiples preguntas atacaron al pobre híbrido pato quien no sabía cuál responder primero - ¡SAPNAP VEN RÁPIDO! - Quackity se estaba planteando muy seriamente el tirarse por la ventana de su cuarto.. seguramente moriría.. estaba en un séptimo piso.. si, la idea no le parecía muy mala a Quackity, de todas formas se había vuelto casi inmune al dolor, tantas veces que había muerto en Karmaland lo habían vuelto, en su mayoría, insensible al dolor.

Por ahora, Quackity se obligó a dirigir su atención a sus antiguos prometidos para así tratar de tranquilizar los y poder entender que era lo que pasaba.

:)