Para Kurona e Hiori el no ver que Isagi regresará a la habitación luego de haberse ido por la noche, no les fue tan sorprendente y menos difícil llegar a la conclusión de en donde pasó la noche.

Ambos jóvenes están molestos, indignados e incómodos por como sus demás compañeros japoneses tratan a Isagi solo por estar saliendo con un Alpha, varón y además extranjero.

En más de una ocasión no les dirigen la palabra a ese grupito que hacen comentarios despectivos hacia Isagi y hasta muecas feas. Lo único bueno en todo esto, es que al menos no han llegado demasiado lejos como hacerle bromas a Isagi, eso sería suficiente para reportarlos.

A pesar de que Gagamaru no habla mal de Isagi ni les sigue el rollo al resto como es el caso de Raichi, Yukimiya, Igarashi, Jin y Neru, tampoco hacen nada para defenderlo o regañarles para que dejen de hablar mal del Beta. Solo se queda en silencio, casi inexpresivo y despreocupado de la vida.

Una vez la preguntaron al portero de que lado está, y esté solo les respondió sobre mantenerse neutral. Diciendo que no está de lado de nadie, no le molesta ni le interesa con quién ande Isagi, pero tampoco ve la necesidad de salir a defenderlo cuando al final, todos ellos son compañeros, quizás algunos entre si se llamen amigos, pero nada más cercano. Agregando que no quiere meterse en conflictos de ese estilo y solo quiere seguir mejorando su estilo de juego en la cancha, especialmente ahora que se está yendo por el camino de ser portero.

Al final, Isagi Yoichi solo puede contar con dos personas que no le dan la espalda; Kurona e Hiori. Sus únicos verdaderos amigos, quienes esperan que al menos el azabache se sienta seguro en los brazos del Alpha alemán quién siempre alardea de ser el mejor novio.

✹｡☆✼★━━━━━━⚘━━━━━━★✼☆｡✹

El aire en la habitación se volvió tenso, mientras el Beta se encuentra acorralado contra la cama, mirando a Kaiser con una mezcla de sorpresa y cierto temor en sus ojos. El Alpha, visiblemente molesto, lo mira fijamente mientras habla con un tono cargado de malas intenciones y una sutil excitación.

Isagi trata de ver a otro lado que no sea aquella extensión larga y gruesa que le cuelga al alemán, ya que siente su punta pinchar en dirección a su estómago, cubierto solo por la pijama para dormir.

—Debería morderte otra vez, ¿no crees?— cuestiona retórico, sin esperar respuesta del contrario quién se nota atónito por sus palabras y acciones. Siente escalofríos por tan solo imaginar volver a sentir los dientes del Alpha sobre su piel. Aquello es realmente doloroso.— Quizás así entiendas que eres mío.

El Beta traga duro, confundido y asustado, busca desesperadamente una salida, pero su cuerpo tiembla ligeramente ante la superioridad física del Alpha. Por más que lo odie, puede que le gane a Kaiser en su capacidad mental a pesar de que aún necesite mejorar su meta visión, pero en el físico es un tema totalmente aparte. El rubio es más alto, grande de cuerpo y musculoso. No será tan fácil deshacerse de él en esos momentos, pero conseguirá una manera, solo necesita tiempo para pensar.

Kaiser realmente se vuelve loco por tener al nipón bajo suyo, con esa expresión de no saber que hacer.

Reuniendo valentía, pero con voz algo temblorosa, el japonés decide enfrentarlo y hablarle fuerte.

—¿Por qué quieres marcarme? ¿Qué ganarás con eso?— cuestiona con reproche. No puede entender en qué piensa Kaiser, pero si está seguro de ciertas cosas desde aquella vez que lo hizo con él.— No soy un Omega, no puedes cambiar mi naturaleza. No importa cuántas veces me muerdas, jamás crearás un lazo entre nosotros.

Yoichi fue sincero y directo. Sosteniendo la fija mirada de Kaiser sobre él.

Puede notar sus intenciones, como en un partido de fútbol. Esa tensión sexual entre ellos dos, Kaiser quiere devorarlo y tal vez ahorcarlo.

El Alpha, con una mirada intensa, respondió de manera seria y directa, revelando su posesividad como una perspectiva romántica poco saludable.

Escuchando se arrogante y molesto.

—No entiendes, ¿verdad? Quiero que te conviertas en mi Omega, solo mío.— le habla con una voz ligeramente ronca, mientras que con una mano suya, su pulgar acaricia sus labios, sacando un suspiro de Isagi, quién se nota nervioso y con un nudo en la garganta, aparte de confundido por las palabras del rubio, quién sigue insistiendo con ese tema.— Quiero que seas parte de mí, de mi mundo. Juntos seríamos la perfección. Nuestra unión sería eterna.— añade con una sonrisa perturbadora, acercándose a Yoichi para empezar a repartirle besos en su cuello.

El Beta, luchando contra el miedo pero con determinación, intentó alejarlo, buscando una forma de liberarse de aquel acorralamiento. Su mente trabajando rápidamente en busca de una solución.

—No puedes forzar a alguien a cambiar su naturaleza.— repitió, hundiéndose más en el colchón debido a la cercanía del Alpha con su cuerpo, además que el rubio sigue besándolo.— No puedes poseerme de esa manera. Estoy aterrado de lo que podrías hacerme si no cumplo tus deseos. No quiero vivir bajo tu control.— agregó bastante serio.

Él no quiere estar con alguien que quiere tenerlo bajo su dominio total, como si fuese un objeto. Él es una persona real, no un trofeo que debe ser exclusivo para alguien.

—¿¡Qué acaso no entiendes lo que siento por ti!?— expresa furioso y confundido de que Isagi no corresponda sus sentimientos.

El azabache suspira resignado pero harto de la situación. Kaiser le parece un malcriado. Alguien que no quiere razonar y se niega a ver la verdad frente a él.

—Tu estás obsesionado, no enamorado.— le recalca, la diferencia para él ya está siendo bastante obvia.— Si realmente me amarás, no te importaría estar conmigo independientemente de mi casta.

Aquellas palabras dejaron pensando al alemán, como en un trance y sintiéndose en el fondo culpable ya que cree que Yoichi no se ha sentido lo suficientemente amado debido a la conclusión a la que llegó.

Kaiser desde que se enteró que Isagi realmente es un Beta, nunca bajó o disminuyó su deseo de poseerlo. Todo lo contrario, supo que debía manejar un nuevo reto ya que el nipón no caería fácilmente ante sus encantos al tratarse de alguien que no siente ni tiene agudizado el sentido del olfato como un Omega u otro Alpha.

En ese momento de trance en el alemán, el Beta encontró una oportunidad y se aprovechó de ella. De manera rápida y astuta, logró esquivar al Alpha y escapar de su agarre, saliendo del cuarto con determinación y a toda velocidad. El Alpha, sorprendido por su audacia, no lo persiguió. Prefirió dejar eso para después y seguir pensando en aquello último que Isagi le dijo cara a cara. Además de pensar en trabajar en un plan para traerlo de vuelta.

Aquella agria e incómoda discusión dejó una sensación de tensión en el aire, y ambos personajes quedaron impactados por la situación.
El Beta jamás lo sintió pero aquella habitación estuvo inundada de feromonas picantes debido al enojo e intensidad en la que el Alpha se encontraba en medio de dicho intercambio fuerte de palabras.

Si se hubiese quedado tan solo un minuto más, Kaiser ya lo habría hecho suyo.

El Beta, aún asustado pero sintiéndose valiente por haberse enfrentado al Alpha y decirle sus verdades, buscó apoyo en sus compañeros, los únicos amigos en los que puede contar que son Hiori y Kurona, contándoles al fin sobre que en realidad terminó con Kaiser desde hace tres días, que la noche de ayer y la mañana de hoy hablaron sobre sus sentimientos, terminando ciertamente mal.

Tomó medidas para protegerse de cualquier amenaza futura, sobre todo considerando que realmente quiere ir a Alemania y cumplir sus sueños.

Y no permitirá que nadie se interponga en su camino para convertirse en el mejor delantero del mundo, ni siquiera un Alpha obsesionado con hacerlo su Omega.

No sabe que mala suerte tuvo que tener para que un sujeto como él se obsesionara terriblemente con su persona.

La suerte en aquel partido contra la sub-20 de Japón, aquella donde anotó el gol ganador y se convirtió en el ace de Blue Lock. Ese momento, fue donde le robó la atención a Michael Kaiser.

✹｡☆✼★━━━━━━⚘━━━━━━★✼☆｡✹

El Beta con la mente despejada, menos molesto pero precavido al caminar solo por los pasillos por si se encuentra a Kaiser, decidido a aprovechar la oportunidad de jugar en la selección alemana, se dirigió hacia la habitación de Noel Noa después de un entrenamiento. Nervioso pero determinado, esperó su turno ya que no era el único jugador japonés que se encomenda al mayor para hablar con él.

Finalmente tuvo la oportunidad de hablar con su ídolo.

—Entrenador, necesito hablar contigo sobre la oferta de jugar en la selección alemana. Aprecio mucho la oportunidad, pero hay algo que me gustaría discutir con usted.— habló con respeto y seriedad.

El entrenador, con interés, intriga y amabilidad, invitó al Beta a continuar.

—Por supuesto, Isagi. Estoy aquí para escucharte. ¿Qué es lo que quieres discutir?— pregunta, ligeramente sospechando de que se trata el asunto.

Después de todo, estos días ha notado a Kaiser bastante serio y callado, no parece él mismo. Sobre todo, no ha estado con Isagi quién se supone es su pareja, andaban casi todo el tiempo de empalagosos. Por lo que si, puede imaginar o darse una idea del asunto.

El rubio no le quiere contar nada, él chico nunca ha confiado en él para decirle las cosas y mucho menos personales, por lo que tampoco insistió en el tema y solo esperó a que alguno de los dos hiciera el primer movimiento.

El Beta inhaló profundamente y buscó las palabras adecuadas mientras trata de no revelar demasiado.

—Quiero agradecerle por esta increíble oportunidad, maestro. Es un sueño hecho realidad.— confiesa con emoción en sus ojos.— Sin embargo, recientemente terminé mi relación con Michael Kaiser y, debido a las diferencias que tuvimos, sería bastante incómodo para ambos vivir juntos en la misma casa en Alemania.— añade tenso de hombros pero mirando fijo al francés en busca de su comprensión y respuestas. Obviamente omitiendo que, no solo sería incómodo y una terrible idea, sino que teme por su seguridad con el Alpha.

Ya no puede ver al rubio de la misma forma que antes, realmente tiene miedo de que esté lo ataque apenas estén solos. Ya sea que lo muerda o lo golpeé.

El entrenador asiente, respetando la privacidad del Beta.

—Entiendo, Isagi. No necesitas entrar en detalles si no te sientes cómodo haciéndolo. Aprecio tu sinceridad y entiendo que la convivencia podría resultar complicada en estas circunstancias.—hace una breve pausa, pensando. Recuerda que Kaiser fue quien se ofreció en qué Isagi viviera con él cuando se mudará a Alemania. Lucía bastante emocionado por la idea, sin embargo, ahora las cosas parecen realmente rotas.—No te preocupes, encontraremos una solución adecuada para tu alojamiento.— explicó Noel comprensivo, puede que Isagi tenga mucho que decir pero algo se lo esté impidiendo. No se siente confiado en abrirse a él a pesar de la gran admiración que le tiene.

El nipón sintió un gran alivio al ver la comprensión en los ojos de su ídolo y agradeció por dicha comprensión, sonriendo levemente.

—Gracias, maestro.— suspira más relajado.— Significa mucho para mí que me entiendas. Estoy emocionado por esta oportunidad y haré todo lo posible para representar al equipo de la mejor manera posible.— añade para proseguir a inclinarse como manera de agradecimiento y mucho respeto.

El entrenador solo se quedó observando expectante aquel acto tan tradicional en oriente, aún así mostró su apoyo al joven jugador.

—Estoy seguro de que lo harás muy bien. Eres un talento excepcional y estoy emocionado de tenerte en el equipo. No te preocupes por el alojamiento, encontraremos una solución adecuada para ti. Ahora, sigue concentrándote en tu entrenamiento y prepárate para dar lo mejor de ti en Alemania.— le elogia y alienta para que el contrario se enfoque en lo importante y no se sienta tenso en problemas de pareja.

El Beta, agradecido y con un poco de emoción, se despidió del entrenador, sabiendo que había tomado la decisión correcta al expresar sus preocupaciones y que esté lo apoyaría y ayudaría en lo que pudiese.

Yoichi necesitará mejorar mucho su inglés y aprender alemán ahora que viajará a Europa. Los idiomas en sí no se le da, pero está confiado en que dará lo mejor de sí. Realmente está tan emocionado que casi olvida por completo el mal sabor que le dejó aquel último encuentro con Kaiser.

—Gracias, maestro. No te defraudaré. Haré todo lo posible para demostrar mi valía en el campo.— le aseguró con una gran sonrisa que se le hizo difícil ocultar.

El mayor le dio una suave palmada en el hombro en señal de apoyo y le deseó éxito en su nueva aventura, y qué no olvide los valores y consejos que le ha estado proporcionando en este tiempo para seguir mejorando para sí mismo.

Con su mente un poco más tranquila y una sensación de confort como de confianza, el Beta se alejó del francés, sintiéndose aliviado de haber compartido sus preocupaciones y emocionado por la nueva oportunidad que se presentaba ante él. Ahora, con el alojamiento separado del Alpha, esperará con muchas ansias su nuevo comienzo en el fútbol europeo.

Y nadie lo detendrá en cumplir sus metas ni deseos más egoístas, convertirse en el mejor delantero del mundo como ganar un copa del mundo para su país.

Π Ω μ

Palabras: 2,267
Escritor: JaquiiAleWorld
Fecha de publicación: Viernes 26 de mayo del 2023.
Au: Omegaverse
Nota del escritor:
No iba actualizar hoy a pesar de que el capítulo ya lo tenía terminado pero, well, leí el capítulo del manga y ufffff.
Dije uffffff.
El siguiente capítulo va hacer un salto de tiempo y va estar bastante movido.
Recuerden este fic es cortito.
Hasta la próxima!