Morrigan en multimedia.

Canción: Evergreen extended/ Two Steps From Hell. (Escuchar desde el inicio de la novela)

Comunicado al final del capítulo.

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☽Capítulo 9 ☾ 

  "Las historias que te contaban de pequeñas sobre monstruos, hadas, leyendas susurradas alrededor de las fogatas...todas son verdad ." –Hodge/Cazadores de Sombras (Ciudad de Hueso).

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Cuando el hielo congelé la tierra que pises y el fuego queme tu bosque. Cuando el mar se trague tu hogar y el viento agite tu alma. Cuando los días se transformen en noches y la brisa aulle tu nombre; cuándo pilas de huesos se amontonen a tus pies y tus manos sean incontrolables...

Cuando tu corazón brinque desesperado en tu pecho y de tus dedos chorree la sangre...

Comienzo escuchar a una mujer y me levanto del tirón del sillón y comienzo a caminar hacia la entrada de la tienda. No noto dolor alguno, por lo que miro hacia mis pies y lo único que soy capaz de dislumbrar es que estos, están totalmente descalzos No hay rastro alguno de la venda, ni de los moratones. ¿Cuándo se me ha curado el tobillo? Voy vestida con el vestido verde que me puso Einar en el río; por lo que él debe haber entrado mientras dormía a quitar el vendaje.

Sigo caminando y hago a un lado la hoja de tela de la entrada y me asomo al exterior. Todo está sumamente oscuro, pero no es de noche. No puedo decir que se vea perfectamente, pero tampoco quejarme de la falta de visión. Todo está entre tinieblas, cómo las películas que siempre me ha gustado de ver junto a Frederick.

No hay nadie fuera y sólo se puede apreciar la luz de las antorchas y de la luna llena.

¿Dónde está todo el mundo? ¿Cómo puede ser que haya luna llena sí ya lo fue anoche? ¿Cómo puedo ver la luna si aún no es de noche?

Miro alucinada la gran luna llena que se ha formado en el cielo. Esta, en vez de ser blanca, desprende un halo rojo e intenso, que me hace cuestionar si la luna está hecha de queso como en los cuentos que me leía mi madre de pequeña o si en realidad, siempre estuvo hecha de sangre.

Noto como algo se mueve a mi izquierda y sale corriendo frente a mí. Observo extrañada el espacio que hay frente a mí, pero solo logro ver niebla.

Cuando tus lágrimas desciendan por tus mejillas y nadie socorra tus gritos...

Vuelvo escuchar a una mujer a lo lejos y pongo un pie fuera de la tienda, sin soltar el fragmento de tela que hace de puerta. Escucho un graznido de un cuervo a mi derecha y voltea mi cabeza al ver al animal irse volando justo frente de mí y sin dejar de emitir graznidos.

Cuando el frío llegue hasta tu alma y abraces los cadáveres de tus seres queridos.

La voz de la mujer se hace cada vez más cercana y puedo ver como una pequeña luz se hace paso en las tinieblas.

Cuando escuches el cuervo graznar y al lobo aullar...

Oigo cada vez más cerca esa misteriosa voz. Y sin importar el clima, observo curiosa al frente, sin temor ninguno.

—¡¿Hola?! ¡¿Hay alguien ahí?! ¡¿Se ha perdido?! —me atrevo a preguntar, pero la única respuesta que puedo llegar a escuchar es el silbido de las ramas al chocar con el viento.

Cuando tu única compañía sea la espada que portes en tu espalda y tu único amigo sea el silencio...

Me atrevo a dar un paso más, sin soltar la tela de la tienda, cuando la sombra de una mujer se puede ya, dislumbrar entre la niebla.

La niebla se disipa frente a ella, mostrándome a una mujer de cabello negro y desordenado, de fisionomía delgada y rostro afilado y adornado con un antifaz de pintura roja que se va difuminando en sus mejillas.

Lleva puesta una falda larga, negra y dorada que cae desde sus caderas hasta sus tobillos, y llenos de finas pulseras de oro y descalzos. Su torso está completamente desnudo y sus brazos están repletos de símbolos en espirales y brazaletes de oro enredados unos con otros.

En su antebrazo derecho reposa el cuervo que había visto antes pasar por mi lado, comiendo carne cruda de su mano. Y a la izquierda reposa un lobo de pelo rojizo con los mismos adornos de ella en sus ojos, completamente amarillos.

Cuando tu corazón se oprimido por el amor y destrozado por este.

Su imagen se acerca a mí, sin dar ni un solo paso y retrocedo asustada.

Y de tu vientre brote la luz que nos alumbra en la oscuridad.

Cuando tus ojos sean empañados por la sangre y el viento aulle tu nombre...

Tú, hija de Ariadna, traerás la paz al reino de Éire.

Y yo, te bendigo para que así sea...

Sus manos alcanzan mis mejillas y las acuna, subiendo sus dedos pulgares, que se posan sobre mis cejas y trazan carriles de sangre en mis ojos con sus garras.

Porque estábamos a dos pasos del infierno y con tu llegada, estamos a dos pasos de alcanzar el Edén; yo te bendigo a ti, hija de Ariadna para que traigas a la paz al reino Éire.

Presiona sus garras con fuerza en mis ojos haciéndome chillar de dolor. El lobo que hay a su lado aulla como si fuera un alma del más allá, frío y aterrador, calando uno por uno mis huesos y el cuervo comienza graznar, al punto de querer tapar mis oídos.

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Chillo agarrada a la tela roja de la tienda, con la imagen borrosa y rojiza de Aric hablando con Keyla.

—¿Nara? ¡Nara! —escucho decir a Keyla y esta corre hasta mí, agarrándome por los hombros.

—¡Es una banshee! —grita una niña y escucho al campamento chillar de terror.

—¡Callaos! —ordena Aric y agarra mi barbilla, examinandome mientras grito de dolor —. Tiene los ojos destrozados... Morrigan ¡Buscar en el perímetro! ¡Traerme cualquier cosa sospechosa que encontréis!

—¡Nara! ¡Nara, por favor! —me traquetea Keyla para que vuelva en mí, pero no dejo de gritar.

—¡Es una banshee! ¡Sacarla de aquí! —grita incesantemente la gente.

—¡Nara! —exclama llorando Keyla —. Einar... ¡Einar! ¡Einar, ven!

—¿Qué ha pasado? —oigo su voz agitada llegar hasta nosotros.

—¡No lo sé! —dice desesperada —. ¡Ayúdame a entrarla en la tienda! —grita sobre el alboroto.

Siento como los brazos de Einar envuelven mis piernas y mi espalda y me levanta en volandas.

—Vamos Iara... —susurra en mi oreja y noto como su calidez hace que vaya volviendo poco a poco en mí. Noto el escozor de mis nuevas heridas y el dolor abrasante de las antiguas. Reposa mi cuerpo sobre el sillón con delicadeza, mientras me retuerzo por el dolor.

—La sangre... corre también por sus piernas —escucho decir a Keyla —. Voy a buscar agua fresca, no la dejes sola.

—Naiara, Naiara... —insiste Einar una vez que ya ha salido de la tienda —. Naiara... —me traquetea a pesar de mis gritos —. Naiara, ¿qué te ocurre, qué ha pasado? —percibo como un paño húmedo se arrastra por mis ojos con delicadeza y puedo enfocar su sombra débilmente.

—Una mujer... una mujer... —repito sin fuerzas; cabeceando de un lado a otro por el dolor.

—¿Qué mujer Naiara? —toma mi rostro entre sus manos para parar el bamboleo incesante de mi cabeza.

—Una mujer... —jadeo —. Morena... semidesnuda...

—Por favor... sé más específica — acaricia con sus pulgares, mi rostro, de arriba a abajo.

—Vestida de negro... con plumas en el pelo y sombras rojas bajo los ojos —toso —. Tenía un cuervo y... un lobo rojo... —consigo decir, mareada.

—Mierda... tengo que sacarte de aquí cuanto antes —aprecio la angustia en su voz —. Hey...no te duermas Iara, sigue conmigo por favor... cuéntame más sobre esa mujer... solo a mí...

—Er... —comienzo a toser con fuerza y con ruido en mis pulmones y percibo el sabor metálico de algo que fluye por mi boca.

—Mierda... ¡mierda! —posa una mano en mi boca y me reclina hacia delante como un muñeco de trapo, para evitar que me ahogue.

—¡¿Eso sangre?! —grita Keyla en la entrada de la tienda.

—¡Busca ayuda! —brama Einar y veo como la peana de agua cae a los pies de Keyla y esta sale corriendo.

—¡Socorro! ¡Ayuda, por favor! —suena desesperada —. ¡Qué alguien llame al curandero! ¡Qué alguien traiga los druidas!

—Iara, Iara..solas mo réaltaí —me traquetea consternado —. No te duermas —habla nervioso y me agarra de la nuca para erguirme, mientras mis párpados se hacen cada vez más pesados —. Gealach de mo shaol —. le escucho llorar —. Ná téigh, ná téigh —me abraza con fuerza contra su cuerpo mientras el mío decide que es hora de rendirse.

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—¿Cómo está? —escucho a lo lejos.

—Reventada... debió de ser por la caída —dice la voz extraña de una mujer —. Pero también he encontrado restos de veneno de cuervo...

—¿Del clan de los cuervos? —pregunta Keyla.

—Tal vez. O tal vez alguien que esté liado con ellos —responde la mujer.

—¿Y qué interés podría tener alguien es un ser debilucho como este? —contesta con desdén Aric.

—Alguien que supiera los planes que tenías para ella —reprocha —. Que tus hombres de mayor confianza vigilen a los demás y no se corra la voz... Si hay alguien en tu contra, no debe ser prevenido —advierte la mujer.

—Así lo haré —espeta Aric —. Le diré a Einar que mande a los muchachos a patrullar por los linderos de la manada.

—Por cierto, ¿hay alguna posibilidad de que estuviera embarazada? —cuestiona la mujer.

—No, que yo sepa —contesta Aric —. Está aquí desde esta mañana y aún no tuve tiempo de asignársela a ningún muchacho. Y tampoco encontré ningún rastro dulce en su olor... ¿Tú, Keyla?

—Yo tampoco olí nada raro Gea —responde Keyla a ambos.

¿Mi olor? ¿Qué tiene que ver eso con un embarazo? ¿Tanto se nota el cambio en las feromonas o qué?

—Lo decía porque su útero no ha parado de sangrar y no está con el periodo. Supongo que se habrá reventado algo de su aparato reproductor también... —la escucho suspirar —. Se lo pregunté a Einar cuando entré y la vi en esas condiciones y lo único que me respondió es que ni lo sabía, ni le importaba y salió de aquí antes de que pudiera acercarme a la muchacha.

—Qué raro... —dice que Keyla extrañada.

—Sí, viniendo de él, también se me hizo raro —chista Gea.

—No sé qué le veis de raro a que no tenga interés alguno en ella —protesta Aric —. Sólo es una humana debilucha y seca, qué poca seguridad tengo en que pueda dar a luz a un cachorro sano —¿y por eso me secuestras, cabrón? —. Seguro que sí la ato a la pierna de Einar este prefiere cortarlasela con la espada de Morrigan y perderla, que quedarse con este de defesio pegada a él... —sus palabras se convierten en una patada en el estómago.

¿Cómo puede dolerme tanto? Lo único que puedo sentir por esta gente ese rencor. Entonces, ¿por qué me duelen sus palabras?

—No te pases Aric... —le regaña Keyla cabreada.

—Regáñame solo cuando te mienta —gruñe Aric.

—No es así, y lo sabes —refunfuña de vuelta.

—¿Le has cogido cariño a esa humana? —ríe cínico —. Si quieres puedes tenerla de mascota de aquí a que dé a luz —vuelve a reír —. Sí es que tanto te divierte.

—¡Pero bueno! ¡Basta ya los dos! —interviene Gea —. Los prometidos deberían darse arrumacos y no tener peleas absurdas. Menos mal que os casáis por amor y no es un matrimonio arreglado, sino ahora mismo estarían rodando las cabezas de vuestros aldeanos —les regaña —. ¿Así es como pensáis darme nietos?

—Sabes muy bien que eso no pasará hasta que no la encontremos, madre —se cabrea Aric —. A menos que quieras quedarte sin nuera y sin líder en el clan...

—Lo único que sé, es que peleando no podrás encontrar nada, ni a nadie —habla Gea con seriedad.

»Dejar de discutir por una muchacha y poneros manos a la obra con los preparativos de vuestra boda —escucho unos pasos acercarse a mí —. Ni siquiera creo que haya yacido con hombre alguno. Hace unas horas palpé sus caderas y su vientre y no es uno por el que haya pasado una hombría...

—Mejor para al que le toque yacer con ella... —responde Aric divertido —. Tendrá doble diversión... —su respuesta me asquea.

—A veces me pregunto dónde se encuentra el hombre del que me enamoré —acusa Keyla con desprecio.

—Velando por los intereses de su manada y de su familia —contesta Gea con dureza.

—Pienso que hay otras formas para velar por los suyos — expone Keyla sin esconderse.

—Esta no es una manada que pueda permitirse la falta de nacimientos y lo sabes perfectamente Keyla —pronuncia su nombre con rintintín.

»De todas formas la muchacha no podrá hacer con nadie hasta que sus entrañas no sanen. Se requiere su cuerpo para traer descendencia y de nada nos servirá que muera por infección.

—¿Cuánto tardará en sanar? —comenta Aric interesado.

Maldita basura.

—Dos meses lunares, a lo mucho —responde Gea.

—Podré esperar...

—¿Einar? —suspiro, consiguiendo que la voz salga de mi cuerpo.

—¡Hey! ¡Nara! —habla feliz Keyla y se acerca a mí, mientras la observo mareada.

—¿Dónde está Einar? —digo débilmente.

—¿Quieres un poco de agua? —sonríe Keyla amablemente.

—Sí... —asiento con movimientos descoordinados.

—Poco a poco —habla Gea desde atrás junto a Aric. Bruja.

—¿Dónde está Einar? —digo tras dar un sorbo al agua especiada.

—Salió hace un rato a hablar con James, una vez vio que estabas bien —sonríe mintiéndome —. Seguro que no tarda en volver —comenta sonriendo y asiento.

Vuelve a acercarme el vaso para darme de beber y veo de reojo a madre e hijo observarme. Aric me mira impasible y curioso a la vez, como si una idea remoloneara su mente. 

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Hola, hola!!! He aquí mi regalo de año nuevo!!! Un capítulo emocionante que ya tiene ciertas pinceladas de lo que será la novela. Cada vez estamos más cerca del objetivo que marcamos para la mañana de reyes!!! Y estoy muy contenta, por lo que descifraré uno de los regalos si este objetivo se cumple : Un maratón de la novela durante todo el día! 

¿Qué quiere decir esto? Que subiré un capítulo por la mañana al levantarme, otro a medio día y otro al anochecer. Este sería mi regalo de reyes si el objetivo se cumple. ¿Qué hay que hacer para que esto se cumpla? Como dije en el anterior capítulo, solo basta con votar los capítulos y seguirme. ¡Así de sencillo! Además, este no será el único regalo! 

También quiero, pediros que comenteis todo lo que os parezca bien o mal de la novela, lo que os parezca interesante, que interactueis de alguna forma conmigo o con los personajes. Que me digais que os gustaria que pasará en los siguientes caps. En otras palabras sería escritura interactiva, para complaceros en algunas cosas y saber si os va gustando o no :).

Sin enrrollarme mucho más os dejo unas preguntas:

-¿Os ha gustado el cap?

-¿Qué es lo que más os ha llamado la atención?

-¿Quién es Morrigan?

-¿Qué es lo de hija de Ariadna?

-¿Por qué marca sus ojos?

-¿Qué le dice Einar a Naiara en irlandés?

-¿Por qué se molesta Einar al preguntar Gea si está embazada?

-¿De donde viene esa sangre?

Una vez aclarado todo, no queda más que felicitaros el año nuevo! FELIZ 2019 ♥

OS QUIERO MUCHO MIS LOBITOS ♥  Espero que todos vuestros deseos se cumplan y que termineis las fiestas de la mejor manera posible! Os adoro!!! Un beso! Nhoa ♥