Limpié mis lágrimas y me levanté silenciosamente, me vestí y tapé la marca de Alek con un abrigo. Pasé frente de la cama donde estaba él con una sábana cubriendo desde la cintura para bajo... se veía realmente tranquilo...

Cubrí mi boca y traté de aguantar los sollozos mientras salía de la habitación bastante apurada y bajé lo más rápido y silenciosamente posible. Me fijé que no haya nadie y corrí hasta la puerta del patio trasero.

- ¿Mayka... ? - ¡Mierda... ! - ¿A dónde vas? - Alek se acerca a mi - ¿Qué pasa? ¿Por qué... Por qué te vas... ? -

Yo me estaba aguantando las ganas de llorar. Tenía que irme o él moriría... no nos dejarían en paz si no hacía esto...

- Alek... tengo que irme - Dije seria.

- Pero... ¿Por qué? -

- No quiero mentirte... me voy porque no quiero estar contigo... -

Mentira...

- ¿Qué? - Su rostro se descolocó por completo - No puedo creer en lo que dices - No lo hagas... - Si ayer, tú y yo... -

- Lo de ayer solo fue por placer, tenía ganas de ti y pues me acosté contigo, solo fue eso. Sexo. No tiene significado para mí - Dije.

Mentirosa...

- Pero entonces Mayka... ¿Tú no me amas? -

Si... lo hago...

- No, no lo hago... - No me creas, por favor... - ¿Cómo piensas que yo pueda amarte a ti? ¿Cómo... como voy a amar a un monstruo como tú? Porque eso es lo que eres, un monstruo y... yo no puedo estar con un monstruo que pueda matarme tan fácil si se enoja conmigo -

Te amo... y es porque te amo que lamento tener que hacer esto... Alek... no me pidas que me quede... porque mandaré todo a la jodida mierda y lo haré... por favor...

- Mayka... Sabes que yo no sería capaz de lastimarte... yo te amo... - Sus lágrimas ya estaban bajando por sus mejillas y las mías estaban por hacerlo. Tendré que acelerar esto...

- ¡Yo no te quiero, entiende de una vez! -

Abrí la puerta y salí corriendo antes de que me viera y notara mi arrepentimiento. Mis lágrimas bajaban rápidamente por mis mejillas y no pude contener más los sollozos.

Alek... Lo siento...

***

***

- Al fin llegas - George baja de la roca donde estaba y camina hasta mi - ¿Y qué decidiste? - Suspiré.

- ¿No lo lastimarás a él ni a la manada? -

- Te doy mi palabra -

- Tu palabra vale igual o menos que la mierda - Me reí con amargura y me acerqué a él para verlo a los ojos seria - Hazle algo y con solo escuchar rumores haré hasta lo imposible para joderte la vida ¿Está bien? -

Se queda en silencio mirando atentamente mi rostro, pero sonríe de lado apartando la mirada.

- No tocaré a tu chucho, de igual forma no lo necesito, así que puedes estar tranquila, cariño -

- De la única forma en la que pudiera estar tranquila sería contigo... muerto y tu cuerpo incinerado -

- Ganaste más carácter desde la última vez que nos vimos - Dice riendo con amargura.

- Lo único que gané fue más odio hacia ti, por arruinar mi vida... y lo sigues haciendo... Así que no dudes que a la primera oportunidad que tenga, desconoceré por completo el significado de Piedad... -

- Si, claro... una niña como tú no podrá con un ejército completo - Palmea dos veces mi mejilla y yo miré su mano con asco - Mejor cierra tu maldita boca y vámonos, chicos -

Unos hombres aparecen y me sujetan de ambos brazos pero yo los miré e hice que me soltaran comenzando a caminar detrás de ese bastardo.

- Cuando lleguemos iniciará tu entrenamiento, espero que puedas aguantarlo - Me sonríe con ansias y yo lo miré con odio.

Los hombres me empujan me empujan con la punta de sus armas cuando bajé la velocidad de mi caminata pero la retomé. Seguimos a George y nos subimos en una camioneta, yo en el medio.

Alek... estoy sintiendo con claridad tu furia y eso no me ayuda... quiero correr contigo y calmarte...

Narra Alek

Gruñí a la vez que golpeaba mi escritorio partiéndolo a la mitad.

- ¡Maldita sea! - Lancé una botella y esta estalló en la puerta justo cuando esta se abre.

- ¿Alek... ? ¿Que sucede? - Pregunta Zane al entrar.

- Mayka se fue - Dije directamente y molesto, pero me senté en el suelo agarrándome la cabeza mientras sentía las lágrimas bajando por mis mejillas sin cesar.

- ¿Se fue... ? - Pregunta Amber entrando detrás de Zane - Pero... ¿Por qué? -

- ¡Porque soy un maldito monstruo! ¡Ella lo dijo! No puede amar a alguien como yo... - Respondí.

- ¿Monstruos... ? ¿Eso nos cree... ? -

- Pero ayer... nosotros pudimos escucharlos... bueno... -

- Dijo que solo fue sexo, solo porque me traía ganas y nada más - Dije más violento. No levanté la cabeza y la seguí escondiendo en mis rodillas.

¿Por qué Diosa Luna? ¿Hacia falta tanto dolor? ¿Por qué la separaste de mi... ?

Narra Omnisciente

Mientras Alek lloraba y Amber junto a Zane observaban sin poder hacer nada... Mayka fue llevada a la base de los cazadores para ser entrenada... Quién sabe para qué... solo George.

- Muevete que iniciaremos ahora - Dice George y los guardias lanzan a Mayka al suelo.

- ¿Por qué quieres entrenarme? -

- Porque serías una gran cazadora - Respondió George simple - Ahora, quítate el abrigo y ven aquí -

- ¿Una cazadora? Estás más loco que antes si crees que trabajaré en lo mismo que tú... imbécil -

- Lo harás, porque o sino me serás inservible, asi que preferir matarte y no podrás impedir que mate a tu preciado Alpha... ni a nadie más... ¿Entiendes? -

Mayka aprieta los dientes y los puños con frustración e ira.

- Ahora. Empecemos, el abrigo, quítatelo, te estorbará -

Ella tuvo miedo en ese momento y se preocupó, pero trató de disimularlo. Si George sabía que Alek la marcó no sabía de lo que él sería capaz de hacer...

Mientras que el joven Alpha sintiendo todas las emociones de Mayka, se alteró y sin saber que hacer mandó a buscarla.

- ¡Que te quites el abrigo, mierda! - George lanza una fuerte bofetada a Mayka que la dejó de nuevo en el suelo adolorida - ¿Y así crees poder detenerme? Ni siquiera soportas un golpe, débil -

Alek sentía el dolor de aquella bofetada como si se lo hubieran dado a él y comenzó a preocuparse aún más. Quería hablar con ella mentalmente pero Mayka se lo impedía.

Ella finalmente resoplé y se quitó el abrigo, todo quedó en silencio cuando George vió su marca pero entonces sonrió con sorpresa y de forma siniestra.

- Así que... te diste tu último placer con él... - Se acercó a ella - Veamos si tu Alphita siente esto... -

Dicho esto, comenzó de nuevo el infierno del que una vez quiso escapar.

Los golpes, la sangre, las heridas... el disparo...

- ¡Agh! ¡Hijo de puta! - Grita ella al sentir como su muslo quemaba. Dolía demasiado.

Y eso lo sintió Alek. Todos los golpes y el disparo... lo sintió él... por lo que gruñía y se quejaba del dolor y la tristeza.

George le dió una última patada en la cabeza causando en ella la inconsciencia.

- Mayka por favor ¿Dónde estás... ? -

Fue lo último que escuchó de Alek. Amber y Zane lo ayudaron a levantarse y a sentarse en uno de los sofás mientras él preocupado y débil ordenaba que preparen a todos los rastreadores de la manada.

Y con eso, él también cayó en la inconsciencia...