—¿Eso es todo lo que tienes, gargolita? —Yahir sigue provocando a Elijah, mientras ambos se lanzan y esquivan golpes.

Debo reconocer que para el poco entrenamiento de Elijah y el hecho de que no logre transformarse aún, es rápido y fuerte. No se le ha hecho fácil a Yahir pelear con él. Por supuesto que el Ascendit ha logrado hacerle caer sobre su culo un par de veces, pero ha estado a punto de ser derribado también por la gárgola.

—No. Simplemente estoy calentando. —Ninguno de los dos se deja afectar por las palabras que se arrojan—. Deja de ver a Ageysha y pelea angelito.

—¿Celoso porque no está viéndote a ti?

—Estoy observándoles a ambos. Vamos ya, chicos. Tenemos que tomarnos en serio el entrenamiento. —Intento mediar, pero es como si yo no existiera. Ambos siguen fulminándose con la mirada. Pronto Elijah vuelve a cargar contra Yahir y los gruñidos y choques de piel y huesos se hacen eco en el lugar.

—Mi puño se ve muy bien en tu cara.

—No más que mi pie en tu trasero alitas blancas.

Yahir arroja un golpe hacia el costado derecho de Elijah haciéndole perder el equilibrio y sacando el aire de sus pulmones. Este cae hacia atrás, pero antes de que Yahir vuelva a golpearlo se recupera y patea el pecho del Ascendit arrojándolo hacia la pared contraria y sorprendiendo la mierda de todos.

—¿Qué carajos? —murmuro con mi mano en mi boca.

—Ahora sí estamos haciéndolo bien. —Sonríe Yahir, sacudiendo su cuerpo y preparándose para atacar nuevamente.

—Soy impresionante —bromea Elijah y me guiña un ojo cuando me ve observarlo y luego a la grieta en la pared.

—Necesitas más que eso para impresionarla. —Yahir envía una vibración hacia Elijah, quien se tropieza pero no cae—. Debes trabajar más tu culo amigo.

—No hay problema amigo.

—¡Ay por favor! —Me lamento cuando les veo otra vez convertirse en un enredo de manos y pies, y siento como la energía y el dominio de ambos llenan la habitación.

—¿Qué está pasando? —Ariel y Atzel vienen hacia el gimnasio, curiosos tal vez por las ondas de energía.

—Creo que Elijah prefiere a Yahir para entrenar. —Me encojo de hombros y luego me siento en el suelo observando a los dos hombres luchar.

—Es una pelea de testosterona. —Atzel se deja caer a mi lado también.

—¿Cómo está Pileith?

—¿Por qué me preguntas eso? —Le miro y sonrío.

—Porque pasas mucho tiempo con ella. —Mi sonrisa crece cuando le veo sonrojarse—. Y sé que te gusta, puedo sentirlo.

—¿Qué? ¡No! —Una sonora carcajada se me escapa cuanto más rojo se vuelve—. ¿Es tan obvio?

—Son lindos y ella es linda.

—Sí, lo es. —Sonríe y niega—. Nada se te escapa.

—No.

—¡Increíble! —La voz asombrada y la presión en la habitación hace que regrese mi atención a los dos hombres luchando. Elijah ha derrumbado a Yahir, quien a su vez al igual que Ariel, Atzel y yo contemplamos con asombro a la gárgola.

—Elijah —susurro mientras observo atentamente su piel tornándose de un tono blancuzco.

—¿Qué? —Ese segundo de desconcentración bastó para que Yahir arremetiera nuevamente. Un certero puño en la mejilla y dos más en el estómago.

—¡Auch! —Nos quejamos todos. Sin embargo, Elijah se recupera intentado derribar a Yahir con una patada.

De un momento a otro, ambos tienen en sus manos cuchillos de entrenamiento, es bueno saber que estos no hieren realmente al cuerpo, de ser el caso, ambos tendrían serias cortadas en su piel. Ninguno de los dos se deja de presionar, palabras van y vienen entre ellos, empujándose cada vez más.

Nuevamente Yahir derriba a Elijah, pero es sorprendente como este último se recupera rápidamente. He notado que cada vez que logra golpear a Yahir, me observa y eso es suficiente para que Yahir tome ventaja sobre él.

—Deja de distraerte, Elijah —reprendo.

—Creo que Ageysha tiene razón. Si dejaras de mirarla, tal vez no te dolería tanto el trasero.

—Jódete.

—Muy pronto lo haré. —Y mientras lo dice, Yahir me mira sugestivamente.

Me sonrojo ante sus insinuaciones, pero sonrío. Para nadie es un secreto aquí lo que Yahir y yo tenemos. Elijah gruñe y con un certero golpe derriba y deja a Yahir aturdido en el suelo, se vuelve hacia mí y aun con la piel blanca se aleja del lugar.

—¿Qué fue eso? —pregunto a un muy divertido Ariel.

—Pelea de gallos —bromea y lo golpeo—. Oh Ageysha, para ser tan receptiva, te pierdes algunas cosas aquí.

—¿De qué estás hablando?

—Ese chico te quiere —declara Yahir, mientras Atzel le ayuda a ponerse en sus pies.

—Sí, claro —resoplo y ruedo mis ojos. Me dispongo a salir de gimnasio, pero la mano de Yahir me retiene.

—¿Hay algo entre ustedes? —No debo preguntar a qué se refiere

—No. —Me apresuro a responder. Sus ojos me observan con atención, evaluándome. Asiente y sonríe.

—¿Más tarde?

—Sí.

—¿Lo notaste? —No me vuelvo hacia Ariel, quien me alcanza en el camino hacia mi habitación.

—¿Notar qué?

—El hecho de que, por primera vez hemos sentido el dominio de Elijah... y es fuerte.

Me detengo abruptamente porque es verdad y no había pensado en ello siquiera. Mientras luchaba con Yahir, su energía fluyó y se dejó sentir de los demás. Y no solo eso, también era fuerte, tanto que lograba erizar un poco la piel.

—Además —continua—, su piel sigue tornándose blanca y no gris. Sí es una gárgola, pero es una muy diferente a todas.

—Lo sé. He estado pensando en ello, pero los hermanos Damabiah no proporcionan mucha información que digamos.

—Sí, ellos se caracterizan por ser los sabios, pero también por confundirnos totalmente.

—Iré a buscar algo en los libros.

—Ajam. —Sonríe de lado—. Espero que el título del libro no sea Yahir.

—Tonto. —Golpeo su espalda, ya que se mueve y no logro llegar a su cabeza.

Después de refrescarme, me pongo unos jeans que resaltan mi perfecta figura y una blusa sin tiras verde esmeralda. Camino hasta la biblioteca para investigar un poco. Tengo muchas dudas en mi cabeza, preguntas e interrogantes que flotan a la deriva y no me dejan en paz. Esa sensación de que algo estoy pasando por alto no se va de mí.

—Te ves bien. —La voz de Elijah me sobresalta. Últimamente él y sus chicos logran escabullirse sin que logre verlos.

—Gracias. ¿Dónde están los niños? Esto está bastante tranquilo. —Intento no comprobar lo bien que se ve en una camisa azul celeste y unos jeans oscuros que cuelgan de sus caderas.

—Están afuera, en el jardín trasero jugando con el resto de los chicos. Los ancianos estaban un poco molestos con ellos corriendo por todo el lugar.

—Esos pomposos no se soportan ni a ellos mismos. —Contemplo sus ojos azules y a su rebelde cabello cubriendo su frente—. El entrenamiento de hoy fue interesante.

—Algo. —Se encoje de hombros, queriendo dar a entender que no es algo, pero su cuerpo está rígido—. Fue educativo.

—Elijah. Tu piel estaba blanca y... sentí tu energía y dominio.

—Impresionante, ¿verdad? —Sonríe y lo veo relajarse un poco.

—Lo fue. —Me muevo incómoda en mis pies al percibir la intensidad con la cual me contempla—. Voy a la biblioteca a mirar algunos libros. Me gustaría buscar algo sobre tu color y no sé... sobre todo lo que está sucediendo.

—¿No se supone que para eso los ancianos se van a reunir hoy?

—Ellos prefieren dejar que otros hagan su trabajo. Además, no soportaría estar encerrada con ellos hoy.

—Entiendo. Pueden ser verdaderamente irritantes y a veces quieres patearles el trasero.

—Exacto. Uhm... bueno, yo...

—Vamos. Me gustaría saber también sobre mi extraño cambio. —Sin esperar que responda, camina hacia la biblioteca.

Busco en toda la sección de gárgolas, también en la de ángeles y ascendidos para tratar de encontrar alguna pista. Dividimos los libros en partes iguales y mientras que me dejo caer en uno de los cómodos sofás, Elijah se desparrama en el suelo.

"Solo un verdadero y puro corazón está unido a un alma pura y valiosa. Estos seres son bendecidos por el creador para cuidar de su valiosa obra maestra, de sus hijos... la humanidad."

"...Cada criatura ha sido creada para un propósito en este mundo, nada es una casualidad o una coincidencia. Todo tiene su razón de ser y para el creador, quien conoce el pasado, presente o futuro; todos hemos llegado a este mundo con una misión en nuestras manos. Sin embargo, debido a nuestro derecho al libre albedrio, estamos en la condición de decidir si aceptamos o no dicha misión y si estamos dispuestos a luchar junto al redil del santo padre celestial."

"...Sus alas blancas resplandecían como la luz divina. Aquellas hermosas criaturas a la disposición de Dios son perfectas y realmente hermosas. El blanco les da esa apreciación de paz, pureza y tranquilidad. La templanza y la armonía. Es por ello que solo lo puro luce igual que la luz y las alas de aquellos que se encuentran en el círculo divino del creador..."

"... Ismael Mahasiah, el único ser de piedra que logró purificar su alma y su cuerpo. El instrumento que se le concedió para habitar la tierra y poder defender a los hijos de Dios. Blanca, su piel blanca le permitía ser reconocido por todos como el puro. Todos aquellos a quienes enfrentaban podían percibir la fuerza de su poder y la intensidad de su dominio. Bendecido directamente por la mano de Dios, luchó por las almas de sus hermanos y hermanas, entregando todo de sí, ofreciéndose como el más hermoso sacrificio por los que consideraba suyos. Solo ese amor verdadero, esa pasión y esa fe en la humanidad, le permitieron limpiar de todo pecado su propia alma... Ismael la gárgola blanca."

—Ismael Mahasiah —murmuro para mi misma. Sin embargo, Elijah me escucha y me presta su atención.

—¿Encontraste algo?

—Eso creo. —Le permito acercarse a mí y le enseño el libro que estoy leyendo.

—"Guerreros de la fe". —Lee el título y frunce el ceño—. Esto me recuerda a mis clases de religión.

Ruedo mis ojos.

—Este libro es sobre todos aquellos que hemos luchado por defender a los humanos. Se dice que somos guerreros de fe, puesto que, luchamos porque creemos en ello, en el creador y en su creación. La fe significa lealtad, creer y tener convicción en algo. Somos leales a él y leales a ellos, sin preocuparnos incluso por nosotros mismos.

—Bien. Lo que sea... ¿Qué dice entonces?

—Habla sobre una gárgola blanca del siglo XVIII. En esa época tuvimos una guerra sangrienta con los caídos. Fue cuando descubrieron que podían obtener las almas más rápido que esperando una muerte natural. Empezaron a ocurrir muchos "accidentes" y muchas plagas fueron provocadas por los oscuros.

»Durante esa época las Márgolas superaban en número a las gárgolas, habían muchos asesinatos, los demonios estaban libres al igual que los caídos y nosotros estábamos mermados y atados de manos, ya que no había un solo alas doradas. El último había fallecido años atrás. Así que nos superaban en fuerza también, por lo cual, según lo que dice este libro: fue un tiempo oscuro, sangriento y violento. "Ismael fue un rayo de luz en esa guerra —continúo leyendo el libro—. Su fe en la humanidad y en la causa. Su valentía y su disposición para servir al señor todopoderoso, lo convirtieron en el instrumento perfecto de Dios, para luchar por las almas humanas. Fue bendecido por sobre todas las demás criaturas de guerra, convirtiendo su piel gris en un puro y prístino blanco, y otorgándole un increíble poder. Su dominio y fuerza lograron combatir al enemigo de la luz; los Cecidit y demonios fueron derrotados gracias a su fuerza física, pero también al unir a los desesperanzados y alicaídos Ascendit, para volver a tomar sus armas y emprender la pelea por la salvación y redención."

»"Días de oscuridad empañaron la historia, pero fueron estos guerreros, quienes creyeron con todo su corazón en la justicia divina y quienes amaron tanto a la humanidad, que liberaron las almas de sus cadenas y derribaron a los subyugadores que atormentaban en las tinieblas. Ismael fuerte y valiente luchó hasta morir sacrificando su propia vida, su propia alma y su propia humanidad. Un bendecido y gran guerrero ejemplo para todas las siguientes generaciones de guerreros."

—Uhmm. Tres cosas. —Los ojos de Elijah siguen contemplando las imágenes de guerreros y muerte en el libro—. En primer lugar, al parecer tengo algo que ver con el tal Ismael y el ser una gárgola blanca. En segundo lugar, de alguna manera estoy bendecido por Dios o algo así. Por último, hay una gran probabilidad de que moriré joven.

Resoplo y dejo escapar una pequeña risa por sus palabras. Sus ojos dejan de observar el libro y me miran directamente. Es ahí, en ese preciso momento que me percato de lo cerca que estamos y de lo hermoso que es el color de ojos de Elijah. Son de un azul claro, diferente a cualquier otro color, pero son realmente magníficos.

—Hueles a melocotones —susurra.

—Es mi crema humectante para el cuerpo. —Realmente estamos muy cerca el uno del otro.

—El melocotón es una de mis frutas favoritas. —Él huele a menta y toronja. Y... como que creo que me gusta la menta y la toronja...

—La mía también. —Siento una corriente recorrer mi cuerpo cuando sus labios se tuercen en una sonrisa coqueta. ¿Qué carajos está sucediendo?

—Tenemos algo en común entonces. —Sus labios se acercan a los míos y puedo sentir el cálido aliento y la energía de su cuerpo atrayendo al mío—. Me gustan tus labios, tienen esta forma y color perfecto que te hace pensar en ellos todo el día. Tus ojos...

—¿Mis ojos?

—Sí. Son como tormentas y cuando estás furiosa se vuelven de ese hermoso color plata... plata fundida y no puedo dejar de mirarlos.

¿Quién podría adivinar que Elijah fuera todo un romántico?

—Y tú cabello. Es tan suave y brillante. —Pasa sus dedos por mi cabello oscuro peinando las hebras—. Incluso las partes doradas son mucho más suaves.

—Curioso, ¿no? —Observo como sus dedos se confunden con las puntas de oro.

—¿Ageysha?

—¿Uhm?

—Quiero besarte ahora mismo

—¿Qué? No... —Me corta cuando sus labios tocan sutilmente los míos.

—No era una pregunta. —Su siguiente toque es más fuerte y necesitado. Jadeo sorprendida por la energía que recorre mi cuerpo y la necesidad que surge en mi interior.

Su lengua se introduce, aprovechando que he separado mis labios. Correspondo inmediatamente a su beso con la misma intensidad y furia. Mis manos buscan su piel necesitando más contacto, me olvido de todo y de todos. Un gruñido escapa de su boca cuando muerdo su labio inferior, ambas manos presionan mi cintura intentando levantarme de mi lugar y ubicarme en su regazo. Me aferro a sus hombros y cuello mientras escalo su cuerpo. ¿Qué estás haciendo Ageysha? ¡Detente! Hmmm eso se siente bien... jamás me detendré.

—¡Tío Elijah! Mira lo que... —Salto del regazo de Elijah cuando escucho la pequeña voz de Almagor, quien se detiene frente a nosotros—. ¿Por qué te estabas comiendo la cara de Ageysha?

Oh santo señor...

—No. —Me aclaro la garganta y salto a mi defensa, ya que Elijah parece haberse congelado—. Tu tío estaba... este... —Piensa maldita sea—. Me estaba ahogando y Elijah estaba dándome aire.

—¿Con la lengua? —¿En qué condenado momento vieron la lengua?

—Uhg... —Dirijo mi perdida mirada a Elijah mientras sale de su trance y se ríe entre dientes.

—Nos estábamos dando un beso. —Sostiene mis ojos retándome a negarlo—. Cuando te gusta una chica, la besas.

—¡Ewww! —La mueca en el rostro de Almagor me hace sonreír un poco a pesar de mi bochorno—. Las niñas son feas.

—Para ti, pero para mí no pequeño. Ahora dime, ¿por qué estabas buscándome?

—Oh sí. —Sonríe nuevamente y extiende su mano—. Mira lo que encontré en el jardín. —Deja caer una horrible oruga peluda en la mano de Elijah haciéndome gritar y saltar al sofá.

—¡Aleja esa cosa horrorosa de mí! —Odio los gusanos, cualquier clase de gusano peludo. Ewwwwwwwwwwww. ¡Asco!

—¿Qué? ¿Esto? —Elijah arroja el invertebrado a mis pies y grito más fuerte. La cosa horrorosa empieza a moverse y despliego mis alas elevándome en el aire para evitar que se me suba encima.

—¡Idiota! —Chillo muy fuerte—. ¡No te atrevas! ¡Aléjate! —Toma al animal y trata de alcanzarme. Almagor divertido por la escena, intenta correr detrás de mí, saltando en vano para atraparme también—. Odio esas cosas... ¡Quítala de mi vista!

—¿Qué pasa? —Briza entra a la biblioteca al escuchar nuestro bullicio, pero al ver la cosa en las manos de Elijah grita también y corre hacia fuera.

—Ven aquí, Briza. Hay otro para ti. —Almagor sale persiguiendo a su hermana, mientras el idiota de Elijah continúa torturándome.

—¡Oh vamos, Ageysha! Mira qué bonito gusano tenemos aquí. —Bate como un muñeco de trapo al "bonito y peludo gusano"—. No puedo creer que la gran y poderosa Ageysha tenga miedo de un pequeño e indefenso gusano.

—¿Indefenso? Eso puede meterse en mi oído y comerse mi cerebro. —Eso me dijo Adira cuando teníamos ocho años.

Elijah muerde sus labios intentando no reírse de mí, pero le es difícil el no hacerlo. Así que estalla en carcajadas dejando caer el bicho al suelo. Grito nuevamente, causando que se revuelque en el suelo de la risa. Asustada y furiosa con él, envío una vibración haciéndole volar y golpearse con la lámpara del escritorio.

—¡Ouch! Eso dolió. —Continua riéndose el imbécil. Me detengo frente a él, enojada por su mala broma.

—Tú, imbécil. Casi me matas del susto. —Golpeo su pecho y ríe más fuerte.

—Oh, nena. Tenías que haber visto tu cara.

Resoplo y me cruzo de brazos. No puedo creer que me haya puesto a merced de una cosa tan horrible como esa. Estuve en peligro de que ese bicho pudiera...

—¡Ahhhhhhhhh! Esa cosa horrorosa se subió a mi pie. ¡Quítaloooo! ¡Quítalo! Elijah, por favor —chillo y me sacudo tratando de alejar el animal.

—Cálmate, Ageysha —pide, pero estoy bastante histérica en estos momentos. Pateo y pateo, y finalmente logro arrojar lejos de mí a la bestia peluda.

—¡Te odio! —Golpeo su mejilla cuando lo veo sonreír y burlarse de mí. Sus brazos me acogen y abrazan mi cuerpo impidiéndome correr fuera.

—Vamos, nena... tranquilízate. Es solo un animalito.

—Es horrible ese animal.

—No lo es.

Ariel entra corriendo a la biblioteca, se detiene y se sorprende solo un momento al encontrarnos abrazados, pero luego su rostro se torna estoico.

—Necesitamos que se presenten en la sala de reuniones.

—¿Qué sucede? —pregunto, dejando que la preocupación se esparza en mi cuerpo.

—Otro clan ha sido atacado.

—¿Qué? —gruñe Elijah a mi lado, opacando mi jadeo sorprendido.

—¿Cuál?

—Los Omael. —Su rostro cae un poco cuando continúa—. Ninguno sobrevivió.

¡Oh, Dios Mío!

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Aquí otro capitulo más, ¡Gracias por sus votos!

https://youtu.be/JRWox-i6aAk