Que sería de mí si fuera una planta

Una cebolla, un frondoso árbol,

Una hoja de pasto quizás

Me mecería con el viento

Y daría mi rostro al cielo

Día y noche, noche y día sin parar.

Y si de un animal se tratase

Estaría volando sobre el mar

Nadando contracorriente

Sobre azúcar o sal,

Tal vez reptando o corriendo

Buscando a quien amar.

No me imaginaría siendo una roca

Rodando en una carretera

O debajo de la tierra

Mutando bajo las calderas

O siendo la causa de disputa

De los animales que andan a dos patas.

Pero he me aquí,

Soy uno de esos ejemplares

Que crece, se multiplica y muere

Pero no sirve, ni alimenta, ni hereda

Que se ha estancado y ha dejado de moverse

Para permanecer como muertos en vida.