01
Gun estaba más que preocupado podría decirse que hasta estaba histérico y en realidad no era para menos, hace treinta minutos había recibido una llamada de Jumpol en donde le comunicaba que había un problema con el transporte que llevaba a Khalan.
El doncel estaba más que preocupado por la seguridad de su pequeño hijo o de lo contrario Jumpol no se tomaría la molestia en llamarlo lo que le daba un indicio de que el incidente había sido algo serio lo que causaba que Gun tuviera más nervios porque su hijo era un secreto, el secreto más grande del país podría decir.
Cuando llego al lugar el corazón casi se le sale por la boca al doncel al notar la escena que sus ojos veían, ante él habían tres autos y alrededor de ellos estaban los hombres que Jumpol siempre enviaba a recoger a su hijo, pero aunque tuviera esas ganas inmensas de correr hacia los autos para buscar a su hijo sabía que debía de mantener el control porque aunque fuera un padre también era la cabeza de su familia.
Y en efecto eso fue lo que observaron quienes estaban ahí, incluso algunos policías impedían el paso a quienes querían observar que pasaba, pero cuando los hombres que iban con Gun abrieron paso para su jefe los policías se apartaron en señal de respeto y quienes lograron observar algo solo miraron a un hombre con vestimenta elegantemente caminar con toda la gracia y porte sin filtrar alguna emoción.
Gun sabía que su hijo siempre viajaba en el segundo auto así que cuando llego hasta él dio la señal a uno de sus hombres para que revisara sin embargo este al revisarla solo negó confirmando así el peor temor del doncel sin embargo el toque suave en su hombro causo que dejara de pensar por el momento y prestara atención.
Jumpol lucia igual de imperturbable, sin embargo Gun lo conocía lo suficiente para saber que también estaba igual de desconcertado y temeroso por la seguridad de su hijo sin embargo cuando frente a él fue puesta una nota el doncel sintió que quizás el ataque venía por sus enemigos y estaba seguro de que el maldito de Jumpol le adjudicaría culpas como siempre lo ha hecho.
Un grande presidente risorge dalle ceneri, per quanto gli augurano la fine.
Gun observo la patética nota que habían dejado junto con la fotografía de su hijo, el doncel sabía a quién se refiera la nota y seguramente el más sospechoso por lo que él no se quedaría observando, le habían declarado la guerra dando el primer ataque así que él también lo daría.
—Il bastardo morirà, andiamo —Off solo observo sabiendo que Gun solo hablaba en italiano en dos ocasiones, cuando la ocasión lo ameritaba o cuando realmente estaba enojado y a punto de perder el control y por experiencia sabía que era la última, lo que significaba que causaría un gran desastre.
Off lo observo perderse hasta llegar al auto y luego observo como el auto se alejaba en el horizonte, había sido tan imbécil de haber dejado que el doncel se le escapara hace unos años y aunque no había externalizado su deseo de recuperarlo lo quería de nuevo en sus brazos, en su cama, en su casa y en su vida.
Pero ahora debía de concentrarse en recuperar a su hijo al cual no dejaría que nada lo lastimara porque aunque estuviera preocupado tenía la certeza de que no le harían daño porque era valioso aun si no sabían completamente la verdad del origen del niño.
Gun iba en su auto con una mirada asesina que sus hombres conocían muy bien la misma que le había permitido sobrevivir no solo dentro de la familia principal sino también de aquellas que formaban el imperio que ahora maneja.
Durante su viaje tuvo que coordinar muchas cosas y entre ellas estaba que su figura pública tendría que estar en el lugar que le indicara a la hora que le dicto, Gun había decidido no mostrarse públicamente como el líder de su familia porque sería muy peligroso así que había orquestado buscar a otro doncel que apareciera ante los medios por alguna amenaza o por las autoridades.
Y en efecto recogieron al doncel que siempre hacia su papel así que cuando estuvo dentro del auto Gun lo observo de pies a cabeza observando que llevaba su vestuario todo de negro y debe de aceptar que la gabardina y los guantes que portaba le daban un toque que le agrado sin embargo lo tenía que preparar.
—Necesito que prestes atención —el contrario asintió —te presentaras ante los medios por decisión propia y quiero que todo lo que salga de tu boca sea con convincente, no debo de recordarte que siempre tienes que mantener al cabeza en alto y no dejarte intimidar por nadie —el chico solo asintió colocándose el pequeño audífono que Gun le dio —Si lo haces bien te daré la oportunidad de ver a tu familia —Gun le dio unas palmaditas en las mejías demasiado fuertes para ser amistosas.
Según el plan poco meditado e improvisado de Gun irrumpirían en un reportaje en vivo que se estaba llevando en un museo que estaba cerca donde exhibían una exposición de arte de un artista bastante famoso y aunque no era la mejor manera seguramente el mensaje llegaría más rápido a la persona que debía en lugar de cazarlo y mandar un mensaje.
El doncel solo dio órdenes para que iniciaran la irrupción del reportaje, varios autos habían llegado hasta el museo que estaba repleto de personas y con varios periodistas que esperaban para poder trasmitir la presentación de la pieza principal de la exhibición en vivo.
Cuando la directora del museo junto con el artista procedió a realizar el discurso para presentar la obra fue que se irrumpió en el lugar, hombres con exquisita vestimenta y seguridad total desfilaron protegiendo a un doncel que mantenía el mismo porte elegante, pero con una mirada sínica aunque llena de seguridad.
Cuando los hombres abrieron paso entre las personas para que el doncel llegara hasta donde se encontraban el artista y la directora del museo todos estaban en silencio estando conscientes de que seguramente eran de alguna familia criminal por lo cual debían de tener cuidado.
—Un grande presidente risorge dalle ceneri, per quanto gli augurano la fine —todos estaban expectantes y los reporteros no apagaron la transmisión en vivo siendo demasiado obvio que eso era lo que querían quienes estaba ahí —Los Phunsawat exigimos que nos devuelvan lo que han tomado o de lo contrario todo el país hundirá en caos —cuando un periodista intento preguntar algo los hombres que habían llegado con el doncel lo detuvieron.
—Siete días, durante ese periodo de tiempo no actuaremos, pero si no tenemos lo nuestro de regreso tomaremos acciones dejo declarado a toda la población que si el responsable es alguno de nuestros enemigos su familia será exterminada, pero si es un plan de cualquier entidad gubernamental quien pagara sus acciones serán personas inocentes —todos se tensaron ante la declaración, pero el doncel solo les dio una mirada burlona y procedió a retirarse.
Gun miraba la transmisión desde el dispositivo en su mano sintiéndose complacido por la actuación del doncel que ante el público se suponía que era él, se retiró el auricular y el micrófono en donde estaba dictando lo que el doncel debía de decir.
A lo lejos Gun observo como sus hombres salían junto con quien hasta el momento era su figura pública y en cuestión de minutos Guido como se llamaba quien se presentó para suplantar su identidad ingreso al auto en donde estaba.
—Hiciste un buen trabajo, te daré dos horas para que veas a tu familia —el doncel lo observo y con eso Gun estaba seguro de que no estaba en lo más mínimo feliz.
—Quiero más —el doncel no tenía paciencia para liderar con exigencias inútiles, rápidamente tomo su arma y la coloco en la cabeza del contrario quien no demostró miedo alguno.
—Se te está olvidando que tú no estás para exigir o hacer alguna demanda y si en esa cabeza hueca que tienes estás pensando que porque eres la bolsa de basura que coloco delante de mí te tendré compasión estás muy equivocado —Guido solo asintió disconforme, pero no podía hacer nada más era su castigo por haber traicionado a la familia y aunque se supone que debía de estar muerto el maldito de Gun lo había dejado vivir con la intriga de saber cuándo moriría.
Guido estaba consciente de que había cometido un error y aunque cuando el doncel lo dejo vivir creía que había tenido suerte en verdad se había equivocado, Gun era despiadado y muy cruel que lo dejaba ver a su familia solo cuando él hacía algo bien o de lo contrario siempre estaba en el agujero en donde había vivido los últimos meses.
Por eso cuando noto como las llamadas no paraban de llegarle a su captor sonrió internamente porque sabía lo que significaba, el acto que lo había hecho montar seguramente no tenía la aprobación de los demás miembros de la familia y aunque Gun era la cabeza de la familia no podía declarar una guerra contra prácticamente todo el país por lo cual dentro de poco seria libre.
A Gun no le quedaba mucho tiempo siendo el líder de los Phunsawat y Guido saboreaba ese momento porque seguramente saldría bien librado sin embargo su saboreo de felicidad y el mal humor del otro doncel no le saldría muy bien.
Cuando los autos se detuvieron estaban en la casa central de la familia y sinceramente nadie se esperaba que Gun ordenara que sacaran a Guido y prácticamente lo arrastraron detrás de su jefe quien cuando se detuvo y solo se dio media vuelta observando a Guido.
—Sé que estás muy feliz de mis actos y las consecuencias que me busque, pero no estarás aquí para verlo —el sonido de un disparo se escuchó y el cuerpo de Guido quedo inerte sobre el frente de la casa.
La sangre llegó hasta los pies de Gun quien solo hizo una mueca de desagrado e ingreso a la casa dejando huellas gracias a la sangre, pero eso no le importaba porque lo que en verdad necesitaba era llegar hasta donde estaba su el cuarto de seguridad.
El doncel caminó subiendo las escaleras hasta llegar a su habitación dirigiéndose hasta el lujoso baño que esta poseía y cuando estuvo ahí coloco la mano sobre el espejo en el lugar donde debía de ser y sus huellas fueron escaneadas para luego todo el espejo levantarse un poco, Gun levanto el espejo lo suficiente para dejar de ver las tres cajas fuertes que había en ese lugar.
En cada caja fuerte había tres tipos de contenido, pero lo que le importaba era lo que tenía la caja del medio, tecleo la contraseña que solo él conocía luego se colocó su huella y se abrió dando a conocer su contenido, en ella había una llave que solo el doncel conocía y la tomo para luego dejar todo como si nada hubiera pasado.
Con la llave en uno de sus bolsillos Gun bajo las escaleras, pero al pie de estas se encontró con Santino su mano derecha quien le observo el bolsillo y el doncel asintió, pero antes de seguir debía de prepararse para lo que venía.
—Arregla todo para que la familia se reúna y busca una manera de organizar todas nuestras actividades con un mínimo de hombres además diseña un plan con nuestras rutas hablaré con Jumpol para llegar a un acuerdo —el hombre asintió y se retiró sabiendo que su jefe se dirigía a un lugar que el aún desconocía.
Gun se dirigió hasta el jardín en donde más específico hacia la fuente que estaba en el fondo, una perdida decían todos cuando se había instalado sin embargo la fuente no tenía la función que se les suele dar.
Cuando llego al fondo del jardín se alzaba una gran fuente con una hermosa sirena en medio sin embargo rodeada de un círculo hecho de caracoles y estrellas de mar con una agua muy cristalina, a un lado había un asiento lleno de pequeñas conchas que si te sentabas quedaba perfecto para una fotografía en donde la sirena estaba a la par de quien se tomaba la foto aunque la realidad era que no estaban juntos sino que tenían separación, pero la ilusión óptica daba a entender eso.
Gun se dirigió hasta donde podía tocar la cola de la sirena en donde toco ciertas escamas específicas dejando que el agua que fluía desde la cola de la sirena dejara de hacerlo y la que estaba en la fuente se consumiera rápidamente y luego de ello se inició a abrir una puerta que estaba en el fondo de la fuente en donde el doncel ingreso rápidamente.
La puerta se había cerrado y las luces se encendieron dejando ver unos metros de bajada el cual el doncel recorrió rápidamente hasta llegar a la puerta de entrada en donde coloco otra contraseña y escaneo su retina abriendo sus puertas dejando otro pequeño pasillo que recorrer hasta que llego a una puerta más grande que la anterior en donde solo coloco su palma para escanearla y luego coloco otra contraseña.
El sonido de las puertas abriéndose alerto a las personas que estaban dentro del lugar, pero cuando visualizaron la conocida figura del doncel se calmaron porque aunque sabían que ingresar al lugar era casi imposible si no estabas autorizado, pero nunca había que descuidarse.
Gun ingreso viendo a las diez personas que estaban trabajado y otros diez guardias que se encargaban de mantener la seguridad del lugar y de las personas que estaban ahí, las construcciones estaban bajo tierra y se extendían más allá de los límites de la propiedad Phunsawat sin embargo el doncel había comprado todas las tierras que abarcaba las construcciones bajo tierra y las tenía a nombre de un tercero a modo de que si en algún momento investigaban ese detalle se retrasara lo suficiente para no dejar pistas de lo que ese hacía en ese lugar.
En esas instalaciones estaba la póliza de seguro de todos en la familia Phunsawat, ahí se llevaba el control de cada cámara de seguridad en todas las propiedades de la familia así como se monitoreaba cada cargamento que se enviaban a diferentes partes del mundo también se hacían otras actividades lucrativas.
En otro cuarto diferente había una cuantiosa cantidad de dinero en efectivo y legal que era la reserva que se mantenía en caso de que la familia cayera además este hecho solo el doncel lo conocía y su difunto padre claro.
Todos los que trabajaban bajo tierra eran desconocidos entres si hasta cierto punto porque cumplían reglas rigurosas que se les había implementado y cuando estaban fuera del lugar ellos vivían una vida normal, pero muy acomodada por las grandes cantidades de dinero que recibían como salario por sus servicios.
— ¿Podemos ayudarlo señor? —cuestiono uno de ellos a Gun quien solo se acercó a las pantallas observando tranquilo como si nada pasara.
—Hubo un rapto a un niño de seis años —el doncel solo les dio un papel con la dirección exacta —Necesito que investiguen su paradero así como quienes son los culpables, quiero todo relacionado con esto –todos asintieron sabiendo cuál sería la parte que cada uno de ellos debía de hacer.
— ¿Qué tan minucioso debemos de realizar la investigación? —cuestiono uno de ellos.
—Si una hormiga pasaba en el momento en que se llevaron al niño quiero saber, así de minucioso quiero la investigación es de mi hijo quien se ha perdido —los demás asintieron y comenzaron con su búsqueda sabiendo que llevaría un tiempo el doncel se retiró.
Gun quería en esos momentos poder llorar, derrumbarse y gritar la angustia que tenía, pero no podía en esos momentos no, sabía que si mostraba debilidad se aprovecharían de la situación para apoderarse de todo lo que tenía algo no sería tan malo para él, pero ahora tenía un hijo y mantenerse en la cabeza de su familia aseguraba la vida de su hijo además que ahora esos mismos recursos que tenían le permitían buscar a su pequeño.
Además ahora tenía que ser más fuerte porque cuando todos se enterraran que Khalan era su hijo las cosas estarían muy difíciles y quienes querían llegar hasta donde estaba ese hecho era la excusa perfecta para hacerlo así que dentro de poco tiempo no solo su hijo que ya estaba en peligro podían tener sentencia de muerte sino que él también.
Gun esperaba que si su familia lograba aniquilarlo Jumpol protegiera al niño aunque él muriera en el intento, los Phunsawat eran un nido lleno de víboras y que si él formaba parte de eso era porque en aquel entonces solo tenía dos opciones o aceptaba ser su líder algo que le pertenecía por derecho o lo rechazaba y de ser así tarde o temprano moriría por quien estuviera en la cabeza.
Era algo simple, los sucesores que cedían el puesto de liderar tarde o temprano morían por el simple hecho de que en cualquier momento podían volver para reclamar lo que les correspondía o lo hacían sus hijos todo por el motivo de que aunque no hubieran aceptado el puesto seguían uniendo derecho a tomarlo por el simple hecho de respirar y ese derecho se pasaba a sus descendientes por lo cual la mejor opción para quienes tomaran el cargo era asesinarlos.
El misterio de la vida no es un problema a resolver, sino una realidad a experimentar
-Duna, Frank Herbert
Creado: 16/10/2022
Publicado: 28/10/2022
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