-POV Izuku Midoriya-

—¿Creen que Tn___ de verdad esté bien? —pregunté, mi voz traicionando la preocupación que llevaba dentro. Caminaba hacia la sala donde algunos de mis amigos estaban viendo la televisión, pero mi mente seguía atrapada en los eventos recientes. Habían pasado dos días desde lo que ocurrió con Tn___, y el silencio en torno a ella me estaba volviendo loco. Nadie había ido a visitarla ni mencionado el incidente, lo cual me resultaba extraño, demasiado extraño.

—Recuerda que Aizawa dijo que estaba bien y que Recovery Girl pudo curarla a la perfección —respondió Ida, girando su atención hacia mí, junto con los demás. —Pronto estará de vuelta con nosotros. Solo tenemos que esperar —añadió, tomando el control remoto, aunque Bakugo se lo arrebató antes de que pudiera cambiar de canal.

—Sí, pero... ¿no les pareció extraño cómo reaccionó? —insistí, sentándome al lado de Todoroki. —Parecía que estaba pasando por algo más allá del dolor físico.

—¿Serás idiota? Kirishima le rompió las costillas, Deku —espetó Bakugo, su tono malhumorado como siempre.

—Lo sé, pero no me refiero solo al dolor. Hubo algo más, como si... como si estuviera reviviendo un trauma, o viendo algo que la perturbó profundamente —expliqué, cruzando los brazos con seriedad.

—En ese aspecto, Deku tiene razón —opinó Todoroki, sorprendiéndome al estar de mi lado. —Tn___ siempre ha sido tranquila y pacífica. Si alguien la viera por primera vez en ese estado, podría pensar que era la villana.

Sus palabras cayeron sobre la sala como una pesada nube. Incluso Ida, siempre racional, pareció dudar.

—Sí, si lo piensas así, tiene sentido. Aunque... nunca le di tanta importancia —admitió Ida, ajustándose las gafas mientras reflexionaba.

—Les seré honesto —Bakugo apagó el televisor de un golpe, capturando toda nuestra atención. —Para mí, Tn___ no es de confiar. Llegó de la nada con poderes mediocres, y de la noche a la mañana tiene habilidades nuevas y poderosas. Algo no cuadra.

Sentí un nudo en el estómago. Sabía hacia dónde iba con esto, y la mirada de Bakugo me hizo sentir incómodo, como si ya supiera demasiado sobre mis propios secretos.

—Ella nunca me ha dado razones para desconfiar —respondí rápidamente, defendiendo a Tn___ con todo lo que tenía. Era una buena persona, lo sabía. Tenía que serlo.

—¿Estás seguro? Ustedes dos están juntos casi todo el tiempo. ¿No te ha mencionado nada sobre su vida antes de la MUA? —Bakugo insistió, sus palabras llenas de sospecha.

—No, nada fuera de lo normal —admití, aunque su tono me hizo dudar por un instante.

—Ahora que lo mencionas, Deku, recuerdo algo que dijo hace unas semanas —intervino Ida, y los otros dos lo miraron con interés. —Tn___ no parecía entender lo que significaba ser un héroe. Dijo que nunca había sido rescatada por uno, ni tenía un héroe a quien seguir. Es como si todo esto fuera nuevo para ella.

Las palabras de Ida me golpearon con fuerza. Sí, era extraño, pero... ¿era suficiente para sospechar de ella? Me negaba a creerlo.

—Eso no tiene nada de malo —repliqué, sintiéndome cada vez más aislado en mi defensa de Tn___.

—Lo que preocupa es por qué vino a esta escuela —dijo Todoroki, su voz tranquila pero firme. —Todos aquí tienen un motivo, un héroe que los inspira. Pero si no es así, ¿por qué estar en la MUA?

—Hace poco hablé con ella sobre el secuestro que sufrió —confesó Bakugo, cruzando los brazos y frunciendo el ceño. —Sus respuestas fueron raras, como si estuviera ocultando algo. No me importa lo que digan, para mí, esa chica no es de confiar.

Sus palabras se clavaron en mi pecho como espinas. ¿Era posible que...? No, no podía ser. Tn___ no era así. Pero incluso Ida, que solía ser tan lógico y recto, pareció estar de acuerdo.

—Deku, te recomiendo que te alejes de ella si no quieres salir lastimado. ¿Oíste bien? —Bakugo me señaló, su advertencia clara y sin rodeos antes de alejarse.

—Lo siento, Deku, pero Bakugo tiene razón esta vez —dijo Ida, sorprendiéndome aún más. —No sabemos nada de ella. Así que, por favor, ten cuidado cuando estés con ella, ya sea en público o en privado.

Miré a Todoroki, esperando que alguien me defendiera, pero él solo suspiró.

—Qué tal si yo la busco cuando salga del hospital y hablo con ella a solas —propuso Todoroki. —Le haré algunas preguntas. Si no noto nada raro, estaré de tu lado, Deku.

No me gustaba esa idea, pero no tenía otra opción.

—Está bien —acepté, aunque mi voz revelaba mi inquietud.

—Todoroki tiene un buen punto. Si encontramos algo sospechoso, haremos un plan para descubrir qué está ocultando —dijo Ida. —Debemos estar conscientes de que la Liga de Villanos y otros están detrás de nosotros. No podemos permitirnos otro caso como el de Overhaul.

Asentí lentamente, aunque la idea me carcomía por dentro. No quería creer que Tn___ estuviera involucrada en algo oscuro. La veía como una buena persona, alguien con quien podía confiar.

—Buenas tardes —la voz de Aizawa me sacó de mis pensamientos.

—¿Buenas tardes? —respondí, confundido al notar que ya no era por la mañana.

—Quería avisarte que Todoroki irá mañana a buscar a Tn___. Pensé que querrías acompañarlo, ya que ustedes dos son muy cercanos —dijo Aizawa, pero rápidamente negué con la cabeza.

—No, está bien. Además, tengo entrenamiento mañana —dije, rascándome la nuca.

—La chica está bien, por si acaso es algo que te preocupa —añadió mi profesor, poniendo una mano en mi hombro. —Así que no te preocupes, mañana estará de vuelta con nosotros.

—Gracias —le sonreí débilmente mientras él me daba unas palmadas en el hombro antes de marcharse.

El vacío que sentí después de esa conversación era abrumador. ¿Qué haría si Tn___ resultaba ser alguien completamente diferente a lo que pensaba? No quería imaginarlo. Lo único que deseaba era que, al final, ella tuviera una buena razón para todo esto. Porque si no la tenía... no sabía cómo iba a enfrentarlo.