Día 30: Ola de calor

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Dio la vuelta con los helados en mano y dirigiéndose hacia la banca cercana del rio que atravesaba la aldea. Una castaña lo recibió con una amplia sonrisa.

Una vez llegó se sentó a su lado y le entregó uno de los conos de helado que había comprado. Su compañera lo aceptó entusiasmada mientras comenzaba a devorarlo. Su primer bocado la hizo suspirar satisfecha.

El sabor del helado de vainilla y la onda refrescante que arrojó a todo su cuerpo fue increíble. Había una ola de calor insoportable en todo Konoha y aún asi habían ido a entrenar, bajo el demoledor sol. Pero luego de aquel duro entrenamiento Neji prometió ir por un helado, algo que de forma normal no haría.

De forma normal si aún siguieran siendo solo compañeros de equipo, sin embargo, llevaban un par de meses "saliendo" no era nada oficial o como si el genio se lo hubiera pedido. Pero él la había besado una vez y cuando estaban solos buscaba acercarse a ella lo más posible. Siempre besándola cuando parecía nacerle y Tenten no podía oponerse a algo así. Y mas cuando Neji era bastante intenso haciéndolo.

Despertaba sus instintos más carnales, pero parecía que no se daba cuenta como despertaba a la bestia de la kunoichi. Era tan recatado, correcto y respetuoso que a veces le enfermaba.

Terminó el helado que el genio le había comprado y lo observó a el mismo comienzo el suyo con tranquilidad mientras el cono parecía derretirse. El calor abrazador era horrible, pero él no parecía tan afectado. Tal vez era por las hormonas que él despertaba en ella sin notarlo.

Tal vez si Tenten sabía actuar podría despertar las hormonas del Hyuga, sonrió para si misma ante ese reto interesante que le gustaría averiguar. Se acercó más a Neji, quien no pareció incomodarse al respecto, no había nadie cerca.

Sin preguntarle sacó la lengua y lamió lentamente el helado del genio, desde el lado donde se derretía. Lo observó mientras hacía dicha acción. Neji levantó su ceja al verla, con un gesto un poco confundido. Tenten repitió la acción con una sonrisa coqueta en el rostro. Lo hizo una y otra vez, en un intento de que tal genio que parecía tan indiferente a tales actos carnales reaccionara mínimamente.

Él debía tener alguna reacción a algo como eso, debía sentir placer por algo o excitación ¿no? Todos los hombres en algún grado lo tenían y tenía la teoría de que eran aún más intensos que las mujeres o bueno, que algunas mujeres. Ella quería despertar esa chispa apagada del genio.

Se metió el helado a la boca y mordió con los labios, quitándole un poco del helado al masculino. Un poco del mantecado derretido escurrió por la comisura de sus labios y esa gota transitando por su rostro pareció ser aquella chispa.

La chispa que encendió el fuego prohibido.

Neji Hyuga desvió la mirada avergonzado y sus pómulos tan blancos como el marfil siempre, se tiñeron de un color adorable y candente, aquel que Tenten tanto había deseado ver.

Pronto ella podría probar ese fuego que se había encargado de encender.

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Algo corto con un poco de picardia y necesario, ya que es la primera y única historia que escribí en el nejiten month sobre el mundo canon. Espero lo disfrutaran.