Un laboratorio abandonado, cuerpos mutilados por todos lados.

Una criatura arrastraba a una persona hacia su nido, aún se veía movimiento en ella. Pero lejos no pudo llegar cuando un arma fue lanzada a la cabeza del Xenomorpho que murió de forma agonizante. La persona aterrada, se puso de pie y salió corriendo, sin importarle las personas que gritaban por ayuda, sólo quería ver si el paquete estaba intacto aún.

Introdujo una clave de forma rápida y la puerta del laboratorio se abrió de par en par, entró corriendo y vio una cápsula de incubación, en ella yacía el paquete que fue protegido por todo ser que vivía. Si el paquete caía en manos equivocadas, no sabían que le ocurriría a la raza humana. Miró a su alrededor cargándolo y meciendo para impedir que algún ruido saliera de este. Asomándose con sigilo comenzó a correr, donde un hombre ya la esperaba con un arma cargada vigilando a su alrededor.

El lugar donde se creaban mestizos fue destruido por los Xenomorphos, no quedaba ser vivo alguno, una señal de auxilio fue enviada a "Corporación Weyland Industres", que de forma inmediata mandaron equipos de rescate hacia el paquete, no permitirían que muriera.

Ya retirados del lugar, la pareja se encontraba acorralad por un Xenomorpho que los había seguido gracias al olor que emanaba el paquete, el olor de su cazador más despiadado; Los Yautja.

Por extraño que parezca, ese paquete tenía sangre Yautja en sus venas, muy diluida, pero notable para el olfato más fino. El paquete emitió un ruido y el Xenomorpho se disponía a empalar a esa cosa, pero dos cuerpos, uno femenino y masculino, se interpusieron en su camino. Haciendo que la sangre cayera en las mantas que cubrían al paquete, el hombre perdió el conocimiento, pero la mujer permaneció despierta un rato. La criatura se le acercaba al paquete, cuando unas garras lo tomaron violentamente, haciendo que la cola saliera de ambos cuerpo, que dieron al piso como costales. La cabeza de la criatura fue arrancada y el equipo de camuflaje dio paso a una de esas honorables criaturas; Un Yautja.

El cazador se arrodilló frente a la mujer de cabellos castaños, la cual lo miraba sonriendo y se giraba, señalando el paquete con su mano ensangrentada, un chasquido que podría traducirse de angustia provino del cazador, ella tosió sin dejar de señalar.

-Zita....-hablo, ese era el nombre del paquete-....cui....da....la....-un suspiro salió de sus labios y derrama sus ojos para descansar, el hombre se encontraba mirando en silencio todo. El cazador se acercó al paquete que era ignorante de la situación. Miró su brazalete y mandó una señal a la nave suprema, informando que cumplió la misión, llevándose consigo el paquete que los humanos habían creado. Con cierto cuidado lo tomó y este se removió algo inquieto.

Su nave aterrizó frente a él y subió, acomodando el paquete en una incubadora con cierto cuidado. La nave despego luego de algunos minutos, la zona donde se hayan el laboratorio se encontraba desértica sin un alma a su alrededor.

*-.-*

El equipo de "Weyland Industres" había llegado, aniquilando a los Xenomorphos y atrapando a la Reina Alíen. En el laboratorio abandonado vieron todo descuartizado, pero no esperaban ver algo que les helaría la sangre; El paquete no estaba por ningún lado.

- Señor, tenemos una mala noticia....-hablo el encargado a través de una video conferencia, explicando la terrible situación que vieron.

Al adentrarse al bosque, se encontraron con extrañas huellas que iban más adentro. Estas se detuvieron frente a una pareja que se mantenía aún viviendo, abrieron sus ojos adormilados.

Se arrodilló frente a la mujer que se mantenía más despierta, le tomó de la barbilla y le hizo verlo. Acercándose peligrosamente, mostrando sus dientes amarillentos y las arrugas en su piel, su aliento chocaba contra el rostro de la dama que trataba de retirarlo.

- El paquete....¿Donde está?

- Jamás....la encontrarán....-escupió sangre frente a el hombre, que mantuvo su expresión tranquila, se puso de pie y dio una orden específica; asesinar a los únicos testigos.

*-.-*

Nueve años terrestres han transcurridos, el planeta, Yautja Prime, se encontraba entrenando a sus mejores reclutas. Los cachorros observaban fascinados, esperando ser grandes y fuertes, comenzando a pelear entre ellos. Los ancianos seguían hablando al respecto de la caza de los Xenomorphos que seguían expandiéndose, esas pestes no saben más que reproducirse, cazar y seguir reproduciendo huevos que la Reina pone. Pero la única ventaja, es que podrían tener especímenes para que los jóvenes reclutas tuviesen su rito de iniciación.

Una cachorro de ooman caminaba por la metrópolis saludando a su alrededor, los Yautja le mantenían cierto respeto, ya que fue la única cachorro capaz de asesinar a un Xenomorpho que era 3 veces más grande que ella. El padre de la ooman observaba desde su recinto, mientras detrás suyo se encontraban hembras que atendían a los cachorros recién nacidos.

La cachorro ooman, de nombre So'phie, llegó al área de entrenamiento de los jóvenes y vio fascinada. No importa que edad tenga, siempre le fascinarán las peleas sangrientas que se dan los jóvenes. Su vista se fijó en uno en específico, el uno Yautja joven que se había interesado en ella por su tamaño y forma, incluso ante ella es más grande. Se detuvo frente al joven Yautja que se mantenía firme ante todo, pero le era chistoso ver las expresiones de la menor cuando se enojaba al no prestarle atención, eran divertidas.

- ¡eeeeeh~, has me caso!-siguiéndole el ritmo al más alto que no se volteaba a verla, hasta detenerse-.....luego por que no tienes pareja-había funcionando, el joven volteo y cargo a la menor hasta tenerla ante sus ojos.

- A ti que te importa, pequeña ooman-le hablo

- Jsjsjsjsjsjs debiste ver tu cara, digna para retratarse-se burló mientras la colocaba como costal y se retiraban, dejándola en casa, por que si se la llevaba, la furia de su padre se haría notar por toda la metrópolis. Al estar cerca de la zona, la bajo y ella se arregló las ropas que le habían dado los humanos cuando acompañó a su padre, miró al Yautja y formó un puño, que fue recibido de manera leve-....¿Enserio tienes que ir?

- Si, es mi iniciación para ser ya un adulto

- Regresa vivo o a quien voy a molestar....-le hablo, aunque muchos pensaran que lo estaba amenazando, se notaba la preocupación que sentía por el Yautja.

- Regresaré vivo, no voy a morir tan fácilmente.....

- Eso espero-hablo mientras entraba a sus aposentos. No sin antes girarse y hablar con un tono infantil, causando gracia en el joven Yautja-....ellos tienen miedo de lo que les ocurra, tienen miedo que una nueva Reina Alíen vaya a nacer-hablo con cierto tono mientras era recibida por su madre. Algo le dice que no se va a salvar del castigo que se le viene encima al salir sin autorización.

*-.-*

Los humanos, esos seres reptantes con poco honor, habían logrado avanzar en la tecnología como no se imaginaba nadie. La sociedad humana se había dividido en tres partes.

Sociedad Alta; gente con empresas y millonarias que podían cumplir con lo que deseaba. Pero había siempre gente con más estatus que hacían tener respeto con tan sólo su presencia. Esos eran "los Sabios" personas con gran conocimiento de todo lo que los rodea.

Sociedad Media; la gente que trabaja para ganar su alimento diario, tienen respeto hacia los de Sociedad Alta y "los Sabios" que ven muy escasamente. Cuando esta la oportunidad, trabajan en las extravagantes mansiones de los millonarios de Sociedad Alta.

Sociedad Baja; la gente más pobre de las tres, no tienen nada que comer y apenas se ven alrededor de la Sociedad Media. Son raras las ocasiones en que "los sabios" pasan por esa zona, sin ayudar a la pobre gente que sufre de hambre, al igual que los menores que morían al no tener que llevarse a la boca.

- Debemos hacer algo, el aumento de Xenomorphos es alarmante-hablo un hombre, anciano a decir verdad mirando a sus dos colegas, que mantenían expresión seria.

- Manda a más gente a exterminarlos

- Se a hecho, pero ninguno a regresado vivo o con un Rompepechos en su interior-hablo el más joven, cabellera rubia larga que salía de su capa.

- Se debe buscar una solución....

- ¿Creen que sea buena idea....?

- No, no llamaremos a "ellos " y sabes tú muy bien la razón-hablo una persona que había entrado a la sala, callando la disputa de "los Sabios" que se giraron confusos y miraban serios-....mataron a tus padres y robaron el paquete, no pueden venir simplemente y listo

- Son los únicos en quien confiar-hablo el joven mirando al asistente de Weyland.

- No, es una orden. Los llama será considerado traidor-silencio en la sala, se disponía a salir, pero unos pasos se escucharon hacia el. Una mano fue colocada en su hombro, apretándolo levemente.

- ¿Quiere que Weyland se entere de eso?

- El no debe saber....

- Entonces, deja que llame a "ellos" y se encarguen de exterminar a la plaga Xenomorphica-le murmuro apretando el hombro con mas fuerza, tronando ciertos huesos del hombre.

- Bien, lo consultaré con el señor Weyland, no haga nada aún-le hablo en cierto tono, liberándose del agarre y se retiraba.

Se vieron entre sí los hombres preocupados mientras el más joven se mantenía en pie, sin aparta su vista de la puerta ni un solo minuto.

El silencio era incomodo para los tres. Hasta que el más anciano carraspeó y miró a sus colegas, esperando que uno hablara y no siguiera esa incomodidad.

- ¿Hacemos bien en llamarlos a "ellos"?

- Son los únicos capaces de enfrentarse a ellos....-se giró a sus colegas manteniendo su expresión neutral-retiren a sus hombres, dejen que los Yautja hagan el trabajo sucio.

*-.-*

La nave madre se encontraba sobre-volando el planeta tierra, tres cápsulas salieron volando, hasta aterrizar en la zona donde ya los esperaban "los Sabios"

El más joven se acercó y saludó amablemente, sabía que un error, sería el trofeo de uno de ellos. Luego de haber explicado el problema y al notar que iban a realizar su cacería, mandaron a retirar a su gente de la zona por seguridad de todos. Los Yautja son agresivos a la hora de cazar.

- Espero y hagamos lo correcto.

- ....-silencio por parte del joven rubio que mantenía su mirada seria a todo momento, sin un brillo en sus ojos-eliminarán la plaga,terminaran su iniciación y se retirarán de forma inmediata-hablo dándoles la espalda y se retiraba.

¿Que habrá pasado con ese muchacho para comportarse como adulto a su edad?, si tiene mucho por delante.