-¿Qué mierda estás haciendo vos aquí?

Daniel sonríe dejándome ver sus blanquecinos dientes, aquella es la sonrisa que recuerdo perfectamente. Solamente existe una diferencia entre mi vida pasada y la actualidad: antes hubiera sentido el corazón latir a mil por segundo. En cambio, ahora lo observo indiferente, él se sorprende así que intenta acercarse a mí. Yo me alejo, no quiero tenerlo cerca ni en frente mío.

¿Por qué está acá? ¿Acaso es un mork? Esa es la única explicación lógica que encuentro. Y de ser cierta, no tengo duda alguna de que se encuentre en el bando enemigo.

-Sabía que te encontraría por aquí-intentó tomar mi mano, sin embargo, se la quité inmediatamente-. ¿Cuánto ha pasado desde que no nos veíamos?

-No me cambies el tema, idiota-negué cruzada de brazos. Su actitud evasiva sólo causa un acercamiento a mi teoría-. Estás muerto, es imposible que estés vivo, y no sos un ser de luz.

-Hasta que por fin abriste los ojos, ¿acabás de pensar por primera vez?-cuestionó Daniel. Evité aparentar estar recordando algo, no obstante, sí me acordé del pasado. Así era: ingenua, tonta y ciega metafóricamente. Lo creía el chico ideal, ¿tan drogada estaba?-. ¿Cómo es eso de que te suicidaste por no obtener mi amor?

-Nunca me amaste, ¿verdad?-le interrogué, Daniel ensanchó su burlona sonrisa y asintió despacio.

-Efectivamente, estás en lo cierto-afirmó. ¿Pueden existir hombres que sean de esta forma? Sigo considerándolo irreal, pero ahora porque no me creo que puedan haber chicos tan patanes-. Al parecer vos sí, por eso te tiraste del edificio.

-Te amaba, ya no-aclaré, aunque Daniel rodó las pupilas sin convencerse. Rápidamente toma mi mano, estuve demasiado distraída como para darme cuenta y fue muy tarde cuando quise soltarla-. ¿Podés dejame en paz o acaso no tenés nada mejor que hacer?

-En realidad sí...-se acercó a mis labios con la mirada fija en ellos.

Por alguna razón desconocida, me quedé inmóvil. No puse resistencia ni le correspondí. ¿Qué tengo en el cerebro para caer rendida ante él? ¿Otra vez se repetirá la historia? Mis lágrimas, los cortes, sangre derramada en vano... sí, inútilmente. Daniel no se merece eso de mí.

Necesito ayuda, porque siendo realista, sola soy incapaz de apartarlo. ¿Ven? Ese es el motivo por el cual no quería que me tocara en un primer lugar.

-¡Imbécil, dejala en paz!-alguien lo empuja violentamente, está muy molesto, ¿por qué? Tardo un poco en reaccionar y procesar la situación, es Milo.

¿Él que hace aquí? Si ha escuchado nuestra conversación, estoy perdida. Iris y Ada confiaron muchísimo en mí, las estaría decepcionando.

-¿¡Querés controlarlo!?-gritó Daniel, furioso por recibir tantos golpes. No soy tonta, sé a quien le está hablando. El padre destructor, posee a Milo e intenta tener el control mientras permanezco quieta sin decir nada.

"Reacciona" me ordeno a mí misma.

"¡No te quedes ahí parada, Valentina!" exclamé generando el temor antiguo, aquel miedo a mí misma. Entonces hago voltear a Milo y verme a los ojos.

-¡Ya basta, calmate!-soy testigo de sus pupilas dilatadas, me mira inhalando y exhalando con rapidez. Intenta mantenerse tranquilo, pero le es difícil-. Milo, ¿estás consumiendo drogas?

-¿Qué? ¡No! El tabaco no es una droga...-suspiré rendida. Caso perdido, ¿cómo puedo trabajar así? Volteo a ver al sitio donde se supone que debería estar Daniel, pese a haber pasado apenas unos segundos, él se ha ido.

-¿Qué escuchaste?-le pregunté a Milo, quien no quiso responder en un principio. Sus ojos fueron volviendo a la normalidad y con esto, regresó mi tranquilidad. Más bien, agradezco que haya llegado en el momento justo.

-Todo, ¿vos sos un ser de luz?-bajé la cabeza y asentí. Sí, acabo de arruinarlo, soy de lo peor. ¿Cómo pude caer ante los encantos de Daniel otra vez? Quizás no soy tan fuerte como me creí-. Él...-hizo referencia a la energía que poseía su cuerpo-. Siempre actuó extraño, podemos intercambiar algunas palabras pero sólo uno puede tener el control y utilizar mi boca para hablar. A pesar de esto, sabía que había algo más, está tramando...

-¿Sabés su plan?-indagué esperanzada. No obstante, choqué contra el muro de nuevo.

-Tampoco puedo leer sus pensamientos ni él los míos, aunque estoy consciente de lo que hace cuando actúa en mi cuerpo-me informó Milo, no dije nada para que continuara hablando-. Daniel está de su lado, ellos hablaron y planearon esto. En la conversación no dijo que eras un...

-¿Ser de luz?-Milo asintió de nuevo. Ahora sé que se le dificulta aprenderse nombres de energías.

-Seguro no quería que lo supiera... y debe estar escuchando está plática-suspiré sin saber qué hacer. Mantuve la mirada en el suelo, levanté mi vista segundos más tarde y decidí ponerle fin.

-Gracias, ¿sabés? Ya te has dado cuenta de que me suicidé, no puedo hacer nada con eso... pero estoy agradecida por tu sinceridad-di media vuelta, quería irme. Milo tomó mi brazo, él deseaba otra cosa y estaba dispuesto a luchar.

-¿A dónde vas? Quedate, por favor, no quiero...

-Perdón, ya me voy-le pedí disculpas para terminar bien la conversación. La única amena que tuvimos.

Ahora sólo quiero llegar y decirle a Ada que renuncio, no pudo ni quiero seguir así. Sigo siendo una estúpida ingenua e inmadura. Pensé en tenerlo superado, la caída a la realidad sí que duele bastante.

***
Estoy sola en casa, mi hermana no está conmigo y es por eso que me siento así. Porque no quiero ser millonaria, ni pertenezco a este mundo repleto de lujos. Al menos sin el alma gemela que me dio la vida, yo sólo soy Vilu, la chica peruana que se siente nada. Acá nadie conoce mi historia, parezco una extraña, la cual quiere alejarse de personas que le hacen daño. Los señores a quienes todavía no llamo padres, me han lastimado, abandonaron a su hija recién nacida y cada vez que veo a mi mejor amiga, es inevitable preguntarme: ¿Qué tiene ella que no tenga yo? Somos iguales.

-Vilu, ¿estás bien?-negué en respuesta sin hablar. Ahora ganas me faltan, quiero estar sola. Requiero espacio, tiempo para mí-. ¿Por qué estás triste?

-¿Por qué te interesa? No me conoces, soy una desconocida-retruqué mirando a la ventana que muestra el patio. Hay una piscina, árboles y césped. Repito: Es demasiado.

-Soy tu hermano mayor-alegó él. Ni si quiera es un argumento aceptable, sin embargo, lo dijo-. Podés confiar en mí también.

-Yo quiero a mi hermana-aclaré rechazándolo. Asintió cabizbajo cuando recién me volteé a mirarlo, después me volví hacia el ventanal que me separa del patio. Quisiera salir a tomar algo de aire fresco, pese a mi deseo, no tengo la confianza para hacerlo-. Ella me entiende como nadie en esta casa.

-Puedo yo también si decidís darme la oportunidad-cerré los ojos con fuerza. ¿Confiar es buena idea? No quiero salir herida, he pasado mucho-. Por lo menos pensalo, ¿si?

Elegí ignorarlo, así evito soltar el rotundo no. Quiero llorar de nuevo, sin mi gemela siento un vacío enorme.

-Oye, Vilu... por favor-insistió él. ¿Está fingiendo o dice la verdad? A lo largo de mi vida, mucha gente ha terminado engañándome. Ya no sé, sólo confío en Celes-. Dejame ser tu hermano...

-Lo eres, biológicamente, claro-hice énfasis en la penúltima palabra. Nos unen los papeles, eso y nada más, aquellos que afirman nuestra hermandad. Además de los genes, supongo.

-¿Y emocionalmente? Prometo que no te fallaré-observé sus ojos intentando descifrar su veracidad o falsedad. Me detuve al no poder, ¿por qué es tan difícil con él? Cierto, Celes es mi gemela.

-Es diferente decirlo y hacerlo-le recordé. Aunque finalmente me rendí, escogí mentirle. Quizás, él lo sepa, porque mi actitud no demuestra perdón-. ¿Sabes? Para que por fin me dejes en paz, te doy una oportunidad.

Abandoné la sala y dirigí mis pasos hacia mi habitación. Cerré con llave la puerta, necesito privacidad para desahogarme un poco. De la buena manera, estoy empezando a soltar los malos hábitos.

Según tenía entendido, Noah realizaría una fiesta hoy. Temprano por la mañana, envié a Fermín para traer aquí a Daimon y en esta ocasión, también a Gala, porque nos ayudará con la misión hasta el final. Estamos cerca de un lago, a las afueras de Buenos Aires. No sabemos absolutamente nada a cerca de cierta rubia llamada Valentina pero estoy tranquila, ella sabe cuidarse y confío en los que hace.

Aquel la charla comenzó sin ella, aunque al principio quise esperarla, me di cuenta de que ni si quiera sabía sobre la existencia del encuentro y desistí. Quizás nos encontramos luego, sin embargo, esto ya me está pareciendo extraño.

"Confía, Valentina es inteligente, un ser evolucionado" repetí dentro de mi mente. Callar mis pensamientos se ha vuelto difícil, tanto que no presto atención al testimonio de Daimon y Gala. Estoy desconcertada, sólo Fermín los atiende, yo mantengo la mirada en el sol que recién se asoma y deja ver. Entre sus finos rayos, la veo caminar cabizbaja, como nunca antes. Viene con alguien más, es Iris, ella abraza a Valen.

Supe instantáneamente que algo no salió bien ayer.

-¿Ada? ¿Estás escuchándonos?-cuestiona Daimon, niego arrepentida y le señalo aquello que observo.

-Mirá, es Valentina-todos voltean sorprendidos. Excepto Gala, ella mejor dicho, luce desentendida. Comprendo, pues todavía no conoce el tema como nosotros sí.

Iris me ve a lo lejos, coloca dedo índice sobre sus labios indicando que hagamos silencio. Poco a poco van aproximándose a nosotros, prefiero no preguntar y obedecerla ya que ella conoce a Valen más que yo. La observo llegar sin mirarnos, frustrada y con lágrimas en los ojos; las veo recién cuando se levanta a hacer contacto visual. Está vulnerable, jamás pude verla así pero parece que Iris sí.

-Deciles lo que pasó-le ordena ella. No hay rastro de enojo en su voz. Lo único que sé es que Valentina está así porque se ha fallado y defraudado. Nosotros nunca nos enojaríamos con ella después de todo, eso lo sabe.

-Milo sabe que quién soy-confesó sin preámbulos. Fermín se sorprendió, Daimon intentó ocultar el sentimiento de asombro y mi intriga creció: ¿cómo ocurrió?-. Fue por culpa de Daniel, el chico por quien me suicidé en mi vida pasada, es un mork ahora.

Casi ni pude reconocerla, se notaba que sus lágrimas querían caer pero ella las contraía. ¿Piensa que es signo de debilidad? No, es fortaleza.

-¿Crees habernos fallado?-le preguntó Fermín, Valentina negó completamente segura sí.

-No lo creo, lo hice-confirmó errada. Ya he dicho, eso nunca pasará, pero en este corto tiempo me he dado cuenta de sus obstinación-. Esto no compensa nada, pero descubrí un par de cosas.

-Decinos, cualquier dato sirve-garantizó la amiga de Daimon, Gala sonrió aunque como nosotros, tenía el sabor agrio en la boca a causa de la derrota.

Valentina nos contó del inicio al final, sin omitir detalles y cuando acabó, no dudamos en preguntarle por ciertas parte que quedaron no tan aclaradas. Sentí pesar, sus palabras le pesaban y era obvio el porqué. Iris me contó su historia un día, se suicidó por aquel chico echando a perder su prometedor futuro musical. Los sueños que tenía esa chica alegre y sonriente se opacaron demasiado, después la luz apagada reinó. Ella jamás podrá perdonarse aquel fallo, ese sentimiento de haberlo dado todo y quedar así. Le avergüenza su pasado debido a que fue una chica "cobarde" por haberse suicidado víctima del desamor de un hombre.

Yo creo que sólo entregó mucho y amó con el corazón.

-Sus pupilas se dilataron cuando me vio, ¿no es extraño? Tal vez sea parte de la posesión... aunque las ve es que hemos hablado siempre está Milo al mando, no tu opuesto-le comentó a Iris, quien sonrió y observó hacia nosotros.

Creo que pensamos lo mismo, al menos puedo deducirlo por el intercambio de vistazos pausados. Este fue su plan desde el comienzo, Iris siempre tuvo las mejores ideas y Valentina, será una herramienta perfecta. Piensa que lo arruinó, pero esto apenas comienza.

-La fiesta de Noah tendrá que ser postergada-anunció Daimon, pensando en ese designio surgido hace escasos segundos-. Debemos coordinar bien, y vos-apuntó a Valentina-, mantené distancia de Milo hasta que te digamos.

-¿Hablás en serio? ¡Sí!-celebró Gala, feliz y sonriente.

-Verás a Joaquín igual porque con mayor razón aún, nos vas a ayudar-afirmó él, Gala bufó pero asintió después. Tratándose de asuntos laborales, tiene el mismo interés y dedicación que Daimon.

-Gracias por existir, Valen, nos hemos ahorrado mucho-habló Iris palmeando su hombro. Valentina todavía seguía sin entender, su rostro decía mucho. Dudas le surcaban la mente, eran demasiadas y ella odia confundirse.

-Vamos a liberar a Milo-comuniqué sintiéndome con mejor ánimo que antes al verla llegar casi llorando. Valentina no tardó en comprender, procesó la información muy rápido, lo cual admiro y me gusta de ella. Es inteligente, hábil, sensata, discreta, arriesgada y valiente; Iris eligió bien.

-Y esta vez Daniel no arruinará nada-aseguró Fermín. Valen sonrió apretando los puños, quiso sentir cólera; sin embargo, optó por dejarla a un lado. No, ahora no es momento.

Acaricio mi vientre mientras Franco prepara algo de comer en la cocina. Parece mentira, casi no me lo creo... ¡Estoy embarzada! ¿Será niño o niña? Pequeño ser que creces adentro, ya te amo, aunque no pueda verte ni sepa lo que eres. Serán ocho largos meses, porque sin saberlo ha pasado uno y se vendrán muchos más. Hasta llegar al día en el cual pueda verte, abrazarte y decirte que te amo. Muero por escuchar tu voz, ¿te gustará la música o la fotografía? Camimo que elijas, vamos a apoyarte.

***
¡Hola!

Ante todo... ¡Feliz Navidad! 🎅🎄🎁🎀🎇🎆

¿Cómo la pasaron? ¿Qué recibieron de regalo? 😱 Aunque el mejor ya es vivir, pasar y conpartir con las personas que más amas. Espero realmente, haya sido así en su caso. Ojalá hayan sonreído y disfrutado mucho su cena de Navidad. Lo mejor de todo, pasarla con su familia y decirles cuánto los aman. Es lo principal, mis mejores deseos para ustedes, la próxima semana se acaba el año y a empezar con el pie izquierdo. Por ahora espero que hayan sentido, dado, recibido, amado y demostrado este 25 de diciembre. Para esto son las fiestas 💗 más allá de los obsequios materiales.

Volviendo al capítulo... ¿Se esperaban lo que termina de pasar con Milo y Valen? ¿Qué hará Daniel? ¿Por qué las pupilas de Milo se dilatan? ¿Violeta (la del Flashforward) podrá confiar en su hermano? Ahora, con esta vista al futuro, vuelvo a hacer la pregunta: ¿Será niño o niña el bebé de Franzul? (Sí, Franzul, suena hermoso 😍)

El multimedia está vacío aún, porque luego pondré a allí al Daniel pa' que lo vean junto con los separadores ya que hay fallos técnicos ;-; ... ¿Qué tal les cae? ¿Valen siente algo por él?

Muchas gracias a todos por votar y comentar 💖 Espero les guste este capítulo.

¡Hasta el jueves (o viernes) para el próximo capítulo! 👋