Su hermano iba a matarlo. Lo iba a masacrar con lo que quedaba de la silla mientras lo violaba con una de sus patas de madera como si fuera una pésima película porno... o eso le estaba dando a entender Yuya por el modo en que le veía al mismo tiempo que limaba sus uñas, esas cosas que parecían garras pintadas de un rojo carmesí que o competía con sus ojos o lo hacía con la sangre, sólo sabía que tenía miedo.

— No vinimos a arrestarte, sólo queremos hacerte unas pregun-.

— ¡Yo lo hice! ¡Lo aceptó, llevenme ya! —Todos los presentes vieron al alfa menor volverse a tirar al piso, lloraba y gritaba desesperado su culpa sobre algún crimen.

Tanto Aqua como Earth veían confundidos al chico aferrarse desesperado a las piernas de la mujer solicitando ser arrestado, en especial la de cabellos celestes que estaba más acostumbrada a que ese chico de ojos amarillo y mechones verdes se resistiera a un arresto e incluso recordaba cuando este la atacó en un intento de huida... así que no se explicaba el porqué de su comportamiento...

O eso hacía hasta que vio de reojo al omega de ojos rubí afilando sus uñas mientras veía al menor con una mirada tan amenazante y aterradora que hasta ella llegó a intimidarse por eso.

— Ni modo, el chico ya confesó, debemos llevarnos-.

— Un momento, un momento... —Zarc observó aterrado como Yuya se interponía entre él y los policías— Pero... ¿Exactamente por cual crimen se supone que se llevaran a mi querido hermanito menor?

— Eso no es de su incumbencia, Sakaki-san.

— Me temo que sí lo es, Ignis-san, porque se trata de mi dulce y querido hermanito —Yuya agarró al menor de ojos amarillos, obligándolo a pararse, para abrazarlo con una mano mientras sonreía de un modo tan tétrico que todos los presentes sentían pena por Zarc—. Yo me preocupo por todo lo que él hace... en especial cuando pueden arrestarlo si tiene una coartada.

— ¿Ah?

— ¿Cómo?

— Sí... —El omega de ojos rojos hizo un adorable puchero sin dejar de acariciar el brazo de su hermano menor— Zarc ha estado jugando a las cartas conmigo cartas toda la tarde, después de que me fue a buscar a mi trabajo...

— ¿Desde cuando ser puta es un trabajo? —Earth lanzó el comentario como una broma pesada y como respuesta el omega solo mostró una juguetona sonrisa.

— Desde que uno de mis clientes, es el sargento de policía Homura Flame.

— ¿Ah?

— ¿Cómo?

— ¿¡Qué!? —Los dos hermanos biológicos del omega estaban igual de sorprendidos que el otro par de hermanos policías; en especial Zarc que ahora en serio no sabía cómo miraría a su mejor amigo a la cara— ¿¡Te acuestas con el tío de Yusaku!?

— ¿¡Te acuestas con un sargento de policía!? —Yuri, que había optado por mantenerse ajeno a la conversación, se acercó al grupo para encarar a su hermano— Por un demonio, ¿¡que no tienes límites!?

— Intentó ayudar a mi hermanito, del modo que sea —Yuya continuó acariciando el brazo de su hermano menor con un cariño que solo aterraba aún más al menor—. Y así tenga que llamar a la casa de mi cliente y mostrarle a su bella esposa las fotos de su marido teniendo sexo conmigo, lo haré.

— Aqua, ¿Este omega nos está extorsionando?

— ¿Quieren arruinar el matrimonio de su hermano mayor?

— ... —Aqua suspiró antes de sonreír con cierto cinismo— Nos iremos, solo queremos saber dónde está Yusaku, es que se escapó del hospital y sus padres están preocupados.

— ¿Yusaku qué?

— ¿No lo sabías? —El menor de todos en la sala negó confundido— Perfecto, nos vamos, lamentamos las molestias... y Sakaki-san, espero no tengamos que volvernos a ver. Vamos Earth, sigamos buscando.

El alfa de cabello castaño y ojos azules fue arrastrado por la mujer de mechones celestes y ojos rosados hacía la salida, ni siquiera le dio tiempo de opinar cuando ya habían salido de la vivienda dejando a los tres hermanos solos.

En cuanto el mayor de los tres ya no sintió la presencia de los oficiales en su casa, golpeó a su hermano menor con fuerza en el estómago reiteradas veces hasta dejarlo en el piso suplicando por aire mientras daba bocanadas del mismo tratando de recuperarse, el de cabello verde y rojo pasó por encima de Zarc mientras tomaba su celular.

— Me debes una enorme virgen imbécil, tu pagaras mi maquillaje y la pizza de esta semana.

— Mamá dijo que llegaría a cocinar.

— Mamá no cocina Yuri, jamás lo ha hecho —Yuya habló sin dejar de textear mientras caminaba en dirección al segundo piso— y Yoko solo es su esposa, no es nada nuestro, no entiendo tu insistencia de llamarla "mamá". Así que dile al imbécil virgen que pague las pizzas cuando lleguen.

El de cabello púrpura y rosa observó a su mellizo mayor subir al segundo piso al mismo tiempo que escribía mensajes con gran rapidez en su celular antes de chasquear la lengua molesto, volteo a ver a su hermano alfa que seguía retorciéndose adolorido en el piso, aunque ahora parecía respirar mejor.

— ¿Lo escuchaste Zarc? Porque yo ahora no traigo dinero para cubrirte.

— Sí... solo déjame... recuperar el aliento... demonios Yuya en serio tiene fuerza en los brazos...

— De seguro de tantos penes que ha masturbado —Zarc eligió ignorar el extraño y cizañoso comentario de su hermano para después verlo irse también al piso de arriba, a diferencia de Yuya, lo más probable es que Yuri fuera a ver como estaba o cuanto había escuchado Aki—. Llama a tu amigo y dile que lo buscan; después tu eres el que se mete en problemas y eso afecta indirectamente a Aki.

— ¿Y Yuya?

— Se está resolviendo; mientras tanto, tu solo coopera y no te metas en más problemas.

El adolescente de ojos amarillos asintió un poco confundido al mismo tiempo que se enderezaba para sentarse en el piso, suspiró rendido antes de escuchar el tono de su celular que estaba tirado junto a los restos de silla y cuerdas; casi le daba gracia que apenas lo tomó y vio que era su prófugo mejor amigo el que lo llamaba, de seguro era para pedirle asilo, así que no dudo mucho en contestarle.

— Hola, Yusa-

— ¡Zarc no vas a poder creer lo que me acaba de pasar! —El mencionado alejo un poco su celular de su oreja al escuchar el grito tan eufórico de su amigo de apellido venenoso.

— Puedes decirme luego, lo que te tengo que decir es-.

— ¡Acabo de conseguir una cita con Ryoken! Me llamo para que fuera a cuidar a mi futura hija, que por cierto es igual que yo a su edad, en lo que él resolvía unos asuntos. Por lo que me escape del hospital, pero ese es tema aparte —Por alguna razón el alfa de cabello gris con verde no se sorprendió de que esa fuera la "importante" razón de su amigo para escapar. El amor en serio tenía mal a Yusaku—; el punto es que cuando volvió comenzamos a hablar, te juro que hice todo a mi alcance para no desmayarme mientras hablábamos y entonces-.

— Yusaku...

— Un momento Zarc, deja término y después me dices; en fin, entonces mientras hablábamos le confesé lo pésimo estudiante que soy en literatura, así que me dio prestada una de sus libretas para que usara como guía de estudio, aún así fingí ser tan idiota en otras materias ¡Que logré que aceptara enseñarme! Claro, a cambio le ofrecí ser su niñera gratuita, porque como bono extra quedó encantado del modo en que cuide de mi futura hija.

— Yusaku...

— ¡Que te esperes, maldita sea! —Yusaku, al otro lado de la línea, bufo molesto mientras reclamaba lo mal amigo que era Zarc por interrumpirlo— En fin, conseguí que mi amado omega aceptara ser mi profesor particular los fines de semana, según él también le serviria de repaso para sus estudios, aunque aún debo organizarme con Ryoken para que nos juntemos en su casa o en algún otro lugar donde él se sienta cómodo, siento que avance bastante... ¡creo que pronto podré pedirle matrimonio! Y entonces-.

— Yusaku, tu familia te está buscando.

— ... ¿Qué?

— Vinieron a mi casa, preguntándome por ti... Yuya hizo que se fuera y ahora dice que debo pagar la cena y... para resumir, tus tíos te buscan como si fueras un prófugo y Yuri no me dejara darte asilo ahora...

— ... Mierda... —Zarc pudo escuchar como su mejor amigo suspiraba al otro lado de la línea— Bueno... Nos vemos en dos semanas, dale mis saludos a Aki y dile que le diga a mi adorado Ryoken de mi parte que estoy agonizando en el hospital por haber evitado que atropellaran un cachorro.

— ¿Ah?

— Prefiero que crea que me mandaron al hospital siendo un "héroe" que porque mi "prostituta dominatrix" primo omega me volvió a masacrar por escaparme del mismo.

— ... Le diré que le diga que te dieron una paliza por evitar que asaltaran y violaran a un omega con su hijo, eso tal vez lo impresione más.

— Es cierto, eres un gran amigo y un genio Zarc. Gracias, en serio; te amo no homo —El alfa de ojos verdes se largo a reír en conjunto con su amigo—. Bueno, adiós, visitame en el hospital, tal vez vuelva a urgencias, no lo se.

— Lo haré, si sales vivo, adiós...

En cuanto ambos alfas dieron por concluida su conversación, el de ojos amarillos supo que esa sería la última conversación que tendría con el de cabello azul con mechones rosas... porque tal y como lo dijo, su primo con lentes y siempre armado con una fausta, lo iba a masacrar a golpes.