—Esto no va a funcionar para mí.

Taehyung se quitó del espejo y observó a Seokjin que estaba mirando su ropa nueva como si estuviera envuelta en fuego. Y no entendía por qué no le gustaba si el mismo Seokjin la había elegido en esa tienda de ropa del centro y que su mamá Mi soo había estado encantada en regalarle.

—Te ves bien, ¿Por que no te gusta?

El castaño arrugó su ceño —el pantalón es muy ajustado, no estoy acostumbrado… Y esta camiseta es muy diferente a todo lo que he usado antes.

—Esa es la gracia de comprar ropa nueva, bobo. Yo creo que te ves bien, además que tú la elegiste.

—Si, pero…

—Bueno, está bien, ponte lo de siempre, de todas formas te verás bien —Tae se volvió a girar hacia el espejo y miró a través del reflejo a su mejor amigo. No quería decir cosas de más, ni hacerlo sentir incómodo, trataba de alabarlo lo menos posible para no cruzar la línea que Seokjin días atrás había marcado entre ellos.

El azabache volvió a mirarse en el espejo, peinó su cabello rebelde y cuando escuchó un suspiro sonrió por que sabía que su amigo se había rendido con respecto a su opinión sobre la ropa.

—Estoy listo.

Claro que lo estaba, Taehyung pensó. Seokjin no tenía que hacer mucho para verse bonito.

—Yo también.

Luego de tomar su billetera, ambos chicos bajaron la escalera de la granja de los Kim y se despidieron de los mayores que le dieron una serie de advertencias y que por supuesto ellos cumplirían al pie de la letra.

—A las dos y media pasaré por ustedes.

Taehyung asintió de inmediato hacia su hermano —gracias por traernos, Joonie.

—Ni que lo digas, prefiero pasar mi noche de viernes acarreandolos que salir con alguna chica —rió bajito el mayor.

—Sentimos eso Namjoonie —dijo Seokjin compresivo como siempre.

—Algún día me lo devolverán, ya saben... Quizás alguna vez necesite algún consejo de ustedes, quién sabe, la vida da muchas vueltas.

Tae y Jin se miraron entendiendo bien poco a Namjoon que a veces decía cosas realmente raras a oídos de los dos adolescentes.

—Creo que es esa casa —Tae se afirmó en los asientos delanteros observando la casa a la distancia.

—Ya saben las advertencias —Nam paró su vehículo —no mucho alcohol, no dejen jamás sus vasos en alguna mesa, siempre mantengan con ustedes todo lo que beban, condones siempre… Y no se separen mucho ¿Si?

Las mejillas de ambos menores se enrojecieron de inmediato.

—Ya, Joonie… No es como si viniéramos a eso.

—Solo por precaución, bebé… Están en esa edad en donde solo quieren tener sexo, pero cuídense.

—Oh por dios —Seokjin se rió bajito.

Namjoon les sonrió a través del espejo retrovisor contento de poner nerviosos a los dos chicos.

—Pásenla bien, pero cuídense, por favor, chicos. Si no lo hacen ya saben que no habrá más salida, ni más chófer para ustedes.

Finalmente los adolescentes bajaron del automóvil un tanto incómodos pero esa sensación los abandonó rápidamente cuando pusieron un pie dentro de esa casa.

La música era fuerte y habían muchos chicos del instituto, también mujeres que ninguno de los dos conocía, pero eso era lo de menos. Ellos no estaban ahí por ninguna chica.

Fueron saludados por el dueño de casa que inmediatamente les ofreció algo para beber llevándolos hasta una mesa que estaba atiborrada de botellas y vasos a medio beber. Taehyung aceptó una botella de cerveza aunque no fuera de su agrado dicho licor. Seokjin por su parte recibió un vaso de vodka que se lo tomó de inmediato haciendo una mueca de asco al terminar.

La verdad es que Seokjin quería emborracharse, a pesar de las advertencias de los Kim él quería dejar de sentirse como un miserable por hacer perdido a alguien tan valioso como Felix. Y siempre que veía a su padre me casa ebrio él parecía mucho más relajado y contento, entonces la idea de embriagarse no era tan alocada.

—¿Otro? —preguntó el dueño de casa sonriéndole a Seokjin que asintió de inmediato.

—Hey, no —Tae le quitó el vaso a su amigo —de a poco.

Seokjin rodó los ojos sintiendo su estómago caliente por lo bebido. Dejó que Taehyung sostuviera su vaso mientras él miraba por el lugar. Reconoció a unos cuantos chicos del instituto pero nada llamó realmente su atención. De pronto su mirada se fijó en el grupo de amigos de su ex novio, Seokjin buscó entre ellos al rubio bonito pero no estaba allí.

—Felix no va a venir parece —dijo bajito el castaño para que solo Tae lo escuchara.

—No te acerques a sus amigos, pudo haberle comentado algo, no sé, no quiero que te metas en problemas. No quiero llegar golpeado a la casa.

—Eso no va a pasar, de todas formas no los conozco, nunca me los presentó.

Taehyung asintió y dejó su botella de cerveza sobre la mesa decidiendo que ya no quería beber esa mierda. Tomó un vaso desocupado y se acercó hasta el dueño de casa que conversaba con otras muchachas cerca de ellos.

—Mingi —llamó —¿Tienes algo que no sea vodka y cerveza?

El chico asintió y caminó hasta el extremo de la cocina y abrió el enorme refrigerador —esto es de mis papás, puede que te guste Kim.

Seokjin arrugó su ceño mientras veía a Taehyung y a ese chico demasiado cerca. No era un sentimiento que le gustara, sentirse celoso por su mejor amigo no era la mejor sensación del mundo. Ese chico Mingi era de otro curso, pero siempre estaba cerca de Taehyung, no como si quisiera conquistarlo o algo así, pero siempre tenía sonrisas para su mejor amigo.

Seokjin miró su vaso vacío y se sirvió un poco más de vodka, lo dejó hasta la mitad. Se lo iba a llevar hasta los labios cuando alguien se paró a su lado.

—Ponle jugo de naranja, no creo que quieras vomitar en unas horas más.

El castaño miró por la mesa de nuevo y sin levantar la mirada hacia el chico al lado de él tomó la botella de jugo de naranja y vertió un poco hasta llenar el vaso.

—Gracias —murmuró Seokjin.

—No me lo agradezcas, lo hago por Felix, seguramente no querrá que su chico ande ebrio por ahí.

Seokjin alzó su cabeza y observó al chico serio a su lado. —Oh. Nosotros…

Taehyung volvió al lado de ellos y bebió desde la misma botella. Miró a quien acompañaba a su mejor amigo y lo saludo con la cabeza.

—Hola Bang.

—Kim —dijo el otro tomando un vaso a medio beber para luego irse del lugar.

Seokjin tomó un sorbo de su nueva combinación y le gustó el sabor. Era mucho más fácil de tomar.

—¿Que es eso? —Tae indicó el vaso.

—Vodka con jugo de naranja —Seokjin se encogió de hombros todavía pensando en lo que había dicho el amigo de Felix. Al parecer su ex novio no les había dicho a sus amigos que ellos ya no estaban juntos.

Taehyung se tomó toda la botella de champagne que le habían entregado y luego de un largo rato desapareció del lado de Seokjin, por lo que el castaño se quedo con un nuevo vaso de vodka con naranja mirando por el lugar, pero no conocía a muchas de las personas que estaban allí, entonces él comenzó a vagar por la casa.

Encontró a parejas besándose en los pasillos que conducían al segundo piso. Él subió sin siquiera saber a donde se dirigía. Paró fuera de una de las habitaciones y se apoyó en la pared, el ruido del primer piso había hecho que sintiera un pequeño malestar en su cabeza, por lo que la tranquilidad del segundo nivel era más que bienvenida.

Seokjin retomó sus pasos y cruzó todo el pasillo hasta llegar a la enorme ventana al final, había otro pasillo menos iluminado a un costado por lo que tuvo que entrecerrar sus ojos cuando vio a un chico arrodillado frente a otro.

Era muy claro lo que ahí iba a suceder ya que el chico que estaba de pie todavía tenía su pantalón puesto. El otro parecía un tanto ebrio ya que no lograba bajar la tela.

Seokjin iba a devolverse por el pasillo cuando escuchó una risa que él conocía muy bien, entonces todo el alcohol que había consumido lo hizo acortar la distancia y patear al chico que estaba arrodillado frente a un sorprendido Felix.

—Jin —llamó Felix.

Seokjin miró al chico ebrio bajo él y lo levantó de un movimiento botando sin querer todo el contenido de su bebida sobre el muchacho —vete.

El chico asustado miró a Felix pero este no lo estaba mirando a él, entonces simplemente se alejó temiendo que lo fueran a golpear.

—Veo que estás triste. —Dijo Seokjin más resentido de lo que hubiese querido.

—No me jodas con eso —el rubio se quitó de la pared y comenzó a caminar fuera del corredor.

—¿Ibas a tener sexo con él? —Seokjin llegó hasta su ex novio y lo tomó de la ropa para que pudieran verse a la cara.

—No… Solo iba a recibir un oral, ¿Estas contento ahora? Déjame ir.

Seokjin lamió su labio inferior con un cúmulo de emociones flotando dentro de él. No quería dejar de hablar con Felix, no quería dejarlo y después verlo con otro chico.

¿Por que mierda era tan celoso?

Observó el lugar y se movió para dejar el vaso vacío sobre una mesa de arrimo que estaba allí. Luego volvió con Felix que lo miraba sin expresión alguna en su rostro.

—Te extraño —fue lo único que Seokjin pudo decir.

—No hagas esto... Nosotros ya no estamos juntos.

—Y fue mi culpa, lo sé.

Seokjin vio exactamente el momento que Felix parecía estar teniendo un debate mental, entonces aprovechó para besarlo.

El rubio no se opuso y lo rodeó por la cintura apretándolo hacia su cuerpo. Sus lenguas chocaron y Seokjin prontamente estaba con su espalda apoyada en la pared recibiendo un beso hambriento y necesitado que hizo que sus piernas se sintieran débiles.

—Yo también te extraño Jin. —Felix susurró en los labios ajenos.

—Siento todo lo que pasó, es mi culpa y ni siquiera puedo dormir tranquilo pensando en que te hice daño, no te lo merecías.

El rubio frente a él suspiró alejándose un poco.

—No me buscaste Jin, pensé que ya estabas en brazos de ese imbécil.

El castaño abrió sus ojos grandes y negó de inmediato —eso no va a pasar... Tú dijiste que no te buscara —Seokjin se encogió de hombros —no quería que te enojaras aún más conmigo.

—No estoy enojado, ya no.

Seokjin hizo un puchero —¿Quién era ese chico?

—No lo sé —el rubio se acercó de nuevo a Seokjin y mordisqueó su labio inferior —antes de ti solía hacer este tipo de cosas todo el tiempo.

—Ya veo —Jin llevó sus manos hasta la camiseta de su ex novio y lo empujó a sus labios de nuevo —estoy seguro que podría hacerlo mejor que él.

—Lo más probable, fue tan torpe que ni siquiera me pudo sacar el pantalón —Felix se rió —no lo besé por si necesitas también esa información.

Seokjin sintió sus mejillas ponerse rojas ante el recuerdo de él besando a su mejor amigo.

Ambos se quedaron en silencio mirándose pero Felix volvió a suspirar exasperado por todo lo que Seokjin le hacía sentir.

—De verdad te amo, no juegues conmigo, Jin.

—Yo no estoy jugando contigo. Nunca lo he hecho.

Felix asintió y su mirada recorrió la ropa de su ex novio, jamás lo había visto vestir así —linda ropa —la mano del rubio se deslizó por el pecho de otro y la deslizó hasta el borde del pantalón, luego metió su mano bajo la camiseta y acarició la delicada y suave piel de Seokjin.

—Es nueva —Jin tragó saliva sintiendo la mirada de Felix sobre la parte baja de su cuerpo.

—Me gusta. Me gusta mucho.

—Si —susurró Seokjin y luego echó su cabeza para atrás cuando la mano del rubio bajó hasta su entrepierna. Un jadeo bajito salió de su boca que fue tomada por Felix nuevamente sin dejarlo hablar ni pensar claramente.

Seokjin también lo acarició y su mano rápidamente encontró la notable erección del rubio quien gimió en sus labios mientras Seokjin torpemente lo masajeaba.

—Este no es lugar para hacer esto contigo, bonito. —Felix se separó y tomó la mano de su ex novio para entrelazar sus dedos y salir de aquel oscuro pasillo. —¿Quieres tomar algo?

Seokjin tenía la sonrisa más grande mientras bajaban la escalera de la mano. Luego pasaron por el lugar donde estaban las botellas y Felix sirvió dos vasos de jugo.

Seokjin hizo un puchero —yo quería vodka.

—No más alcohol para ti, bonito.

El castaño se derritió ante el tierno beso que le dio Felix y salieron de la cocina luego de tener cada uno su vaso de jugo en las manos.

—¿Tú no bebes?

—Ya no, antes lo hacía mucho y me metía en muchos problemas. Me despertaba en lugares raros con poca ropa…

—Basta —Seokjin se rió y cuando salieron al jardín lo besó por un buen rato.

Felix se dejó besar con su corazón latiendo rápido en su pecho. Había extrañado a su chico. Demasiado.

—Dime, ¿Qué has hecho estos días?

—Uhm, jugar con los perros de Tae… Ver películas, pensar en ti —dijo bajito.

—Yo también, pero por más que quiera no dejo de pensar en qué estás todo el tiempo con él. Siento celos de solo pensarlo y no me gusta.

Seokjin se quedó en silencio. Abultó los labios por que entendía a Felix, pero él y Taehyung ya no harían nunca más algo como eso. Nada de besos, nada de abrazos raros. Solo serían los buenos amigos que habían sido antes de que a él se le ocurriera la tonta idea de dejar de ser virgen.

Desde el inicio había sido su error.

—Nosotros somos amigos… Solo eso , sé que no creerás pero es la verdad —Jin acarició las mejillas de Felix un momento, luego tomó un sorbo de jugo por que sentía su garganta seca.

—Quiero creer, en serio… ¿Estas seguro que él no te ve como algo más?

—No, eso no es así —Seokjin suspiró tratando de hacerse entender —a él le gusta otro tipo de cosas y chicos. Nosotros solo fuimos descuidados.

—Está bien, yo también me he besado con mi mejor amigo… Bueno cuando él estaba aquí en la ciudad, pero yo no tenía ninguna relación con otra persona.

Seokjin murmuró un lo siento y agachó la cabeza completamente arrepentido, sabía que era difícil que Felix quisiera retomar la relación que tuvieron pero él no perdía las esperanzas de que así fuera.

El castaño sintió las manos heladas de Felix sobre sus mejillas y levantó la cabeza para observar los lindos ojos de su ex novio.

—Mhm, me gustaría que volviéramos a salir.

—Lo sé, pero no te lo haré tan fácil.

Seokjin abrió su boca para responder pero Felix lo calló antes de que siquiera pudiera decir algo. Luego de varios segundos se separaron y el castaño se pasó una mano por el cabello. Estaba excitado y ver a su ex novio vestido completamente de negro no ayudaba en nada.

—Dame una oportunidad, déjame enmendar mi error.

—Pórtate bien y veremos.

Seokjin se rió porque eso mismo le había dicho él semanas antes y él estaba más que dispuesto a portarse bien y volver a conquistar al bonito chico que era Lee Felix.

🥃🥃🥃

Taehyung tomó un sorbo de su nueva botella de champagne sintiéndose completamente ebrio. Había perdido a Seokjin hace mucho rato y ya podía adivinar con quien estaba.

Se balanceó hacia el pasillo lleno de puertas y chocó contra la pared haciéndolo reír en su borrachera.

—Kim Taehyung —dijo una voz detrás de él.

Tae se giró y rodó los ojos al ver a ese chico frente a él.  —Hola Kino.

—¿Que haces tan solo?

—Me gusta estar solo.

—Esa es una gran mentira, ¿No crees? —Kino avanzó hasta el azabache y le quitó la botella para luego beber de ella. Cuando terminó observó la etiqueta de esta y se la devolvió a su compañero de instituto —¿Le diste una mamada a Mingi para que te diera el licor de sus padres?

Taehyung se rió —no fue necesario, solo tú haces mamadas a cambio de favores y regalos.

Kino alzó una ceja —a ti te la haría gratis, sin pedir nada a cambio. Es más, me dejaría follar por ti.

—No me interesa. No me gustan los chicos que se andan regalando.

—Osea no te gustas a ti mismo —Kino se rió. —Estás solo ahora ¿No? Yo también, ¿No te quieres divertir un poco?

—Contigo no.

—Eso dices ahora, bien que hace meses estabas detrás de mi culo, ¿Crees que no lo supe?

—Piérdete Kang.

—No lo creo.

Tae medio borracho que estaba se tambaleó hasta una pared mientras era besado. Su lengua fue succionada y su labio inferior chupado. No se resistió, también tenía ganas de divertirse con Kino pero era más interesante hacerse el difícil, aunque sea por unos minutos.

Pronto Taehyung tomó el mando y tocó al chico que gemía en sus labios tratando de averiguar si lo que habría bajo el pantalón valdría la pena.

—Vamos Kim, busquemos un cuarto desocupado.

Ambos chicos entraron a una pieza que supuestamente estaba vacía, pero ese no fue el caso.

Taehyung sintió toda su ebriedad evaporarse mientas veía a Seokjin sobre Felix besándolo y gimiendo mientras se frotaba contra el otro.

Retrocedió antes de que fueran descubiertos y salieron de la casi oscura habitación.

—Seokjin sí que sabe divertirse —bromeó Kino empujando a Taehyung a otra habitación que por suerte estaba desocupada.

Taehyung no podía quitarse el recuerdo de Seokjin sobre Felix gimiendo y besando al rubio como si su vida dependiera de ello. Y aunque en ese momento Kino estaba arrodillado entre sus piernas él no podía disfrutar sabiendo que en la otra habitación Seokjin estaba de alguna manera haciendo las pases con Felix.

Taehyung cerró sus ojos y decidió que definitivamente desde ese día trabajaría para quitarse a Kim Seokjin del corazón... Y estaba completamente seguro que lo lograría.

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¿Recuerdan lo que pasó a los 17 años de Jin y Tae? 🥺

Cuídense mucho, nos leemos pronto ❤️💜