𝗖𝗵𝗮𝘂𝗳𝗮

Su alegría desbordaba y su causa no era otra que el delicioso festín que llevaba en sus manos. Hace mucho que no almorzaba como es debido y todo ¿por qué? Por un trabajo que albergaba demasiado tiempo de su día a día. Pero él no iba a divagar en ello, mejor se concentraba en la perfecta creación de Don Manolo, "el mejor chef del mundo", así lo de condecoro él, ese exquisito aroma que emanaba, atravesaba su envase de tecnopor e iba a sus fosas nasales. Su mente, corazón, y estómago lo sabían; un festín digno de emperadores, lo esperaba. Sólo debía encontrar ¿dónde? ¿Dónde disfrutaría tal manjar?

A pesar de saber que podía comerlo en el precioso y rústico restaurante de Don Manolo, prefirió ir a un parque. Ya había pasado mucho tiempo en un espacio cerrado, que mejor que un parque. Allí había bancos a base de troncos, un lugar cómodo. Fue a una de estas y tomó asiento, colocando su mochila en el otro lado.

Con su "manjar" en la mesa, sacó de su mochila un utensilio, un tenedor; y también una bebida que era infaltable, su preciada Inca Kola. Feliz, abrió el envase y probó su primer bocado.

ㅡMmm~

Era sublime, el sabor, la textura y la cocción.

ㅡEs perfecto.

Perú casi lloraba, extraño demasiado ese platillo. No, lo que extraño fue poder disfrutar de un buen almuerzo, no importaba la comida, lo que extraño más es poder disfrutar una comida sin miedo a que interrumpan. Dejó de pensar y probó otro bocado, no iba dejar que los recuerdos y miedos, quiebren su momento de paz y placer.

Pasemos a otra parte, en las afueras del parque se hallaba una hermosa chica de cabellera rubia con unos característicos lentes de sol sostenidos en su cabello. Con su respiración agitada y apoyada en las rejas que limitaban el parque, descansaba un momento después de haber corrido bastante.

ㅡ¡USA!

Alguien gritó su nombre y ella supo inmediatamente quién era, sin siquiera voltear fue corriendo dentro del parque buscando perder a su perseguidor. Fue al baño de mujeres y se oculto, pero sabiendo que él podría estar esperando afuera, le compró una gorra y una casaca a una de las chicas de ahí a un precio algo elevado, se trenzo el cabello y salió sin ser reconocida. Fue caminando a prisa cuidando de no parecer sospechosa, pensando en otro plan pues sabía que él se daría cuenta en poco tiempo. Caminando y observando a su alrededor detuvo su vista en la espalda amplia de un hombre, además que la camiseta blanca que llevaba lo hacía resaltar más.

《 Parece fuerte...》Pensó ella inspeccionando también los brazos descubiertos del chico. 《 No está mal.》Dijo viendo el grosor de ese brazo y lo ancho de sus hombros.

Miró a su atrás y noto a lo lejos a aquel al que evitaba, agradecía su asombrosa vista. Apurada fue donde, "El joven de hombros anchos", así lo llamó ella, se sentó a su lado y se apegó lo suficiente para que parecieran una pareja.

ㅡ¿Quién eres?

Apenas el joven notó la cercanía de la chica quiso alejarse, más la estadounidense tomó el rostro del chico y susurro en su oído.

ㅡSomos novios, ¿de acuerdo? Un chico me está siguiendo, solo aparenta que somos una pareja. Por favor...

Tranquila, soltó al chico y le sonrío, lo cual dejó más confundido al pobre hombre. Una mujer ordinaria estaría aterrada, pero ella estaba relajada, tal vez le sucedía mucho ya que era bonita. Confundido, lo dejo pasar... prefirió estar en calma. No creía que quien sea que esté siguiendo a esa chica se tomará el tiempo para esperar que esté sola o que interrumpa mientras esté con ella. Intentando ignorar las acciones de la chica, ella se había apoyado en él casi por completo y tomando su brazo, la que sostenía su comida, para abrazarlo lo suficiente para que sienta sus pechos.

《 Relájate.》Se dijo a sí mismo.

Se llevó otro bocado a la boca y comió algo nervioso. La chica en cambio reposo su mejilla sobre él, y fue en ese momento donde cierta fuerza desconocida empujó ese brazo provocando que se cayera su chaufa, aún humeante.

ㅡ¡Me terminas sin razón y días después empiezas con otro hombre, eso es imperdonable, USA!

El grito fue potente, mas nuestro joven hambriento solo miraba estupefacto su preciado chaufa restregado en el piso, manchado de tierra y liberando sus pocos aires de calor. Ese chaufa, ya no se podía comer. O al menos ya no él, tal vez algún perro u otro animal, ya no él.

Volteo ante los gritos de la chica y los del desgraciado que se atrevió a desperdiciar su almuerzo, ambos discutían, pero hubo el momento en que el hombre quiso usar la fuerza, ahí intervino Perú.

Tomó con fuerza aquella mano que iba a la chica y rápidamente lo mantuvo en la espalda del hombre, lo obligó a caer de rodillas al piso, en frente de su plato caido, y chocó el rostro del tipo contra el arroz manchado,

ㅡQuien mierda te crees para tirar mi almuerzo. Ahora lo comes de ahí.

Aún insatisfecho movió la cabeza del tipo con su mano libre contra el suelo luego lo sentó en la silla, ahí el hombre aprovechó y escupió la comida, pero solo bastó unos segundos para que Perú le golpeara la mandíbula y el cayo de la silla desmayado.

Perú lo dejó, tomó su mochila y se fue, antes tomó la mano de la chica. Si bien actuó más por su almuerzo caído, sabía que dejar con ese tipo de hombre a una mujer, era mala idea.


ㅡ ㅡ ㅡ ㅡ ㅡ ㅡ ㅡ o ㅡ ㅡ ㅡ ㅡ ㅡ ㅡ ㅡ  


ㅡUy, esa estuvo potente. Pensé que eras más prudente Rusky.

Hubo cierta mujer quien observó todo y prefirió no intervenir, ella solo venía por su chaqueta que vendió, pues en el bolsillo dejó una sortija, importante para ella.

ㅡCreo que Pure se pasó esta vez. Aunque,,, será por eso que muchos decían que cuando él come no hay que molestarlo...ㅡ Pregunto al aire.

ㅡBueno, no importa. Tendré que ayudarte esta vez...

Agarró como pudo el cuerpo grande del chico y lo sentó en la banca.

ㅡSolo es limpiarte, y colocarte hielo.

Ella sacó una bolsa, papel y agua de su mochila, con delicadeza pasó el papel semi-mojado por el rostro del chico, lo limpiaba lento y con calma.

ㅡ...Creciste mucho...ambos crecimos.

La chica terminó de limpiarlo, y de una conservadora que llevaba, sacó algunos hielos, los puso en una bolsa y los colocó en la mandíbula del chico. Eso lo despertó.

ㅡ¡Ah! ¿Quién eres?

ㅡNo me gusta presentarme, solo llamame Mex.ㅡ Le sonrió. ㅡNo debiste meterte con Pure...ㅡ Parecía mirarlo con pena.

Esa mirada avergonzó al ruso, parecía que se preocupaba y a la vez se burlaba, Algo que normalmente lo haría enojar. De alguna manera a Rusia le resultaba familiar esa mirada.

ㅡUsted no será...ㅡ Descarto de inmediato esa idea.

ㅡSostenlo.ㅡ Dijo ella refiriéndose a la bolsa de hielo.

El obedeció y con calma pensó en lo que le sucedió. Si bien estaba enojado, sabía que si ese hombre no lo hubiera detenido, él hubiera incumplido con su promesa.

ㅡ¿Porque me ayuda?ㅡ Preguntó él.

ㅡPorqué das pena y porque quien te golpeo es un amigo mío. Ten bebe el agua te limpiara un poco la boca de la tierra que había en el piso.

Ella rió y él frunció el ceño recordando ese amargo momento, pero igual aceptó el agua, se enjuago y escupió al suelo. Volvió a preguntar.

ㅡ¿Él quien es?

ㅡSi te refieres al que te dio un madrazo, se llama Perú, solo eso te puedo decir.

Ella se agacho y recogió el utensilio de cocina que seguía en el piso, una cuchara, lo colocó en una bolsa.

ㅡ Cuál es tu nombre?

Dijo ella mientras guardaba la bolsa en su mochila.

ㅡRusia.

ㅡBueno, hasta la próxima, Rusia.

Ella cargó su conservadora y mochila, y se fue caminando a la misma dirección de donde se fue Perú, mientras era observada por Rusia.

《 Es algo rara, pero agradable.》

Pensó él y sonrío, mas el dolor al hacer eso le recordó el golpe que le dieron, su hermana siempre le mencionaba que algún día le darían su merecido, supongo que ahora ella le diría "Te lo dije". Se quedó sentado con la bolsa de hielo en su barbilla mirando el cielo y pensando de donde se le hacía familiar esa mujer.

ㅡ...Mex...


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Por otra parte, en un restaurante. Estaba la falsa pareja comiendo tranquilamente, ella solo observaba sus reacciones mientras comía lentamente.

ㅡ¿Estás más calmado?

ㅡSi, no se si escuche mal. Pero ese tipo ¿fue tu novio?

Pregunto Perú, pues antes de golpear al tipo oyó claramente cómo él le reclamaba la razón de porque terminaron,

ㅡEs una larga historia...

ㅡSi no quieres contar solo dilo.

Como dije antes, Perú apreciaba mucho la calma y prefería no meterse en asuntos que no lo involucren, él no era como su hermana.

ㅡTal vez en una próxima...

De manera indirecta ella lo invitó a salir nuevamente. Claro que Perú, es muy inexperto en ese campo.

ㅡDa igual, gracias por la comida USA, pero ya me tengo que ir, pagaré la mitad antes de irme.

Se levantó dispuesto a irse.

ㅡ¡Espera! Puedes darme tu número... para seguir hablando y poder contarte...

Ella agarró su ropa reteniéndolo, no iba a perder esa oportunidad. Él, en cambio, estaba apurado, tenía que regresar a su trabajo, así que aceptó.

ㅡEsta bien, me prestas tu celular.

Ella le pasó su celular, él colocó su número y nombre. Luego se lo devolvió.

ㅡHablamos luego, USA.ㅡ Se despidió, dejando un billete para pagar su parte de la comida.

ㅡ Te veo luego, Perú.ㅡ Estiró su mano para despedirse, observando cómo se iba.



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Dije que lo modificaría, espero se entienda mejor. Y una cosa mas, sigo viva. 

Gracias por leer, den su estrellita y comenten, bye.


29_08_23, 1644 palabras, antes era mas corto...

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