maratón    1/7

Una vez de haber parado el llanto del menor y este haber curado la herida del contrario habían dispuesto a bajar al piso de abajo.

El peligris ahora se encontraba con un vendaje cubriendo parte de su pecho bajo su camiseta. Mientras repartía pequeños bocaditos a la boca del omega de lo que estaban desayunando, pequeñas porciones de carne envuelta en una lechuga y enrollados de huevito eran colocadas en su boca con total delicadeza.

Un paronama muy tierno que admirar,  el mayor estaba dispuesto a mimar a el omega.

Después de haber desayunado había vuelto a subir al piso de arriba, dispuestos a tomar una ducha, por separado claro esta. Luego de haber terminado, el peligris se encontraba con un buzo color gris y una camiseta sencilla blanca, mientras el omega se encontraba con de igual forma unos pantaloncillos blancos holgados y una camiseta sencilla blanca, llevando encima la polera azul que había usado el alfa la noche anterior, por petición de este había cedido a usarlos, por que verdaderamente el olor que se escontraba impregnado de este lo ayudaba a manternese en calma.

A pesar de que ese día tenían clases, la omega mayor suguirió quedarse en casa y que ella se encargaría de explicar todo el asunto con el director.

Ambos se encontraban recostados uno al otro sobre el sillón, el omega yacía recostado en el pecho de el alfa mientras este se encargaba de darle ligeros cariñitos sobre su cabello castaño.

El sonido del timbre los sacó rápidamente de su pequeña burbuja. Namjoon no esperaba a nadie, su papá estaba en el trabajo, y su mamá se encontraba en el piso de arriba trabajando en su oficina.

Así que despues de erguirse del sofá y caminar hacia la puerta con un pequeño omega pisándole sus talones se dispuso a abrir la puerta.

-Hola Namjoon oppa!- saludo la omega alegre al otro lado de la puerta.

-Hola Lía, que haces aquí?- preguntó sin llegar a ser inrrespetuoso.

-Oh pues veras, terminamos de hacer las notas, pero el profesor mencionó que tenemos que grabarlo! - aclaró - ¿Puedo pasar?- okey tenía puntos a su favor, ¿Que clase de ensayo de música se hacía sin música?

-Claro, pasa- comentó moviendo hacia atrás su mano susteniendo ligeramente al omega.

-Oh, tu.. sigues aquí- mencionó esta al fijar su vista en el omega.

Haciendo que por inercia este se escondiera detras del alfa mientras rodeaba sus manos alrededor de la cintura de este, sintiendo como al instante de igual manera las manos de el alfa se colocaban encima de las suyas. Rapídamente una expresión de confusión adorno el rostro de la pelirroja al observar la actitud del castaño.

El omega de Seokjin había tomado el mando.

Y en la mente de este solo habían 4 cositas.

Alfa, mimos, comida y pelirroja mala. Claro que si, su omega no olvidaba el como esta lo había tratado anteriormente, su pechito aún dolía al recordar las palabras que había escupido con tanto odio.

Si bien puede que no hayan sido demasiado fuertes, pero su mamá siempre decía algo; ''No es lo que dices, si no como lo dices''

Esa omega definitivamente lo dijo muy mal.

Unos pequeños gruñidos salieron de su garganta mientras se mantenían pegado fuertemente a la espalda de este, sin soltar el fuerte agarre que le tenía a su cintura, mientras meneaba lado a lado la cabecita buscando indicios de la omega queriendo tocar a Namjoon.

-Espera en la mesa, iré arriba- avisó mientras subía al piso de arriba con un Seokjin aún sin soltar de su agarre. Una vez llegando al piso de arriba rápidamente lo colocó con cuidado en la cama, haciendo que el contrario cierre los ojitos por incercia. Sentirse arrulando por el aroma de Namjoon y el era realmente delicioso, su corazón se sentía cálido y seguro. Empezó a jalonear de las cobijas para taparse con ellas mientras mantenían la cabecerita de koala ente sus manos, estiró la mano agarrando la del alfa invitandolo a tomar la siesta con el y cuando el contrario pareció apartarce de su tacto se paró rápidamente, sus cabellitos volando en el aire por el rápido movimiento que adquirió, quedado ahora desordenados sobre su cabecita.

-¿Nam?- llamó.

-Debo hacer el trabajo jinnie- aclaró sentándose al borde de la cama -Espérame, prometo que cuando termine vendré y pasaremos toda el día juntos, además ella ya no vendrá y podremos cocinar como me dijiste- comentó con una hermosa expresión feliz adornando su rostro.

-¿Lo prometes?- preguntó inclinando tiernamente su cabecita hacia un lado.

-Lo prometo- respondió, parándose sobre la cama para salir de la habitación.

-¡Abrásame!- reprochó cuando observo como el contrario se dirigía a la puerta.

-Oh, si, voy- avisó acercándose tímidamente a este, abriendo ligeramente de sus brazos sintiendo como al momento el omega se escabullía entre ellos hasta llegar a su pecho. Y dicha acción le hizo soltar una ligera risa al contrario, por que parecía un tierno pollito. No era la primera vez que se abrazaban, pero si era la primera vez que se lo pedía y eso en parte lo hacía sentir de cierta forma especial.

Trató de erguirse luego de unos minutos, pero un pequeño gruñido se lo impidió. Rápidamente sus fosas nasales se llenaron del aroma que tanto amaba, vainilla y avellana. Seokjin estaba liberando de sus feromonas.

Un fuerte rubor se apoderó de su rostro al acatar el motivo del omega, lo estaba marcando con su aroma.

Así que tomanto de todas sus fuerzas copió su acción, liberando de sus feromonas para de igual manera marcar al contrario, y un pequeño ronrodeo empezó a salir de este mientras se soltaba lentamente del agarre en el alfa.

-Un besito- pidió.

Y como si aun pudiese, su rostro pareció pintarse aun más. Colocando sus manos a los estremos de la cara de este repartiendo un besito en su frente.

-Solo ahí?- preguntó haciéndolo soltar una risita entre labios mientras repartía otros dos en sus mejillas, para finalizar dejando uno en su naricita. El omega copiando su acción, se paró de rodillas sobre la cama para tomar el rostro contrario entre sus manos repartiendo un besito en su frente seguido de dos en cada uno de sus ojitos para de igual forma repartir dos humedos en sus mejillas.

-Listo namie, apurate para que hagamos pastelitos- comentó emocionado mientras se dejaba caer en la cama. Dejando a un peligris con una expresión tonta en su rostro por el comportamiento del omega, mientras asentía innumerables veces embelesado dejando lucir una hermosa sonrisa en la que mostraba todos sus dientecitos, perdiendose una ultima vez al salir por la puerta.

En el piso de abajo yacía la omega en espera del mayor, rápidamente volteando su mirada de donde escuchaba las pisadas de Namjoon llegando finalmente a su lado para colocarse en un asiento. Rapídamente frunciendo de su nariz y entrecejo al oler el potente aroma que parecía adornar al contrario. Si la meta era marcar al alfa con su aroma definitivamente Seokjin lo había logrado, estaba segura que incluso desde afuera podría oler el potente aroma.

Primer maratón, no se cuanto acostumbran ser pero este maratón será ligeramente largo.

Estaba esperando terminar todos los capítulos para subirlo, pero tardaré más de lo que pensé 💞