Después de lo ocurrido esa noche las cosas parecían tan normales a excepción de que algunas cosas mías desaparecían, llegué a creer que Taffy las tomaba para jugar.

La quemadura en mi brazo se tornó de un color violeta y después desapareció.

-¿Nia?

-¿Sí mamá?

-Oh disculpa no sabía que tenías visita.

-¿De qué hablas?

-¿Es tu novio?- observé a la dirección en la que ella lo hacía y había un chico muy lindo de hecho, su tez era clara, ojos azules y cabello oscuro casi negro...

-Él...

-Tranquila, hablaremos de eso cuando estés lista.

-Está bien.

Siento como un escalofrío recorre mi espina dorsal y después siento el tacto de alguien, me giro y él está ahí.

-N-no deberías estar aquí.

-Eso debería decirlo yo, mi mamá ha creído que eres mi novio ¿Quién demonios eres?

-Soy Kile, tu vecino. Tu balcón queda muy cerca del mío y quería visitarte vecina.

-Bien, ahora me das miedo.

-Tranquila, no muerdo.

-Nunca se sabe- él ríe.

-La verdad es que hace días que veo por mi ventana como una chica te observa por las noches mientras duermes,creí que era tu hermana pero a lo que sé no tienes hermanas. Así que quizá es mi imaginación o...

-Mierda.

-¿Qué pasa?

-Es ella ¡es esa cosa!

-¿Cosa?

¿Cosa? Mi nombre es Margo por si te interesa querida.

Me giro rápidamente.

-¿Qué pasa?

-¿La escuchaste?

-¿Escuchar qué?

Siento como algo me empuja haciendo que quede a milímetros de los labios de Kile.

-Primero deberías invitarme un café.

-Y-yo no fui, disculpa- trato de alejarme pero él me toma de la cintura y me besa.

-¿Felíz?

-No, me he besado con un desconocido.

-Primero, ya sabes mi nombre. Segundo, soy tu vecino. Tercero, umm no puedes negar que fue bueno.

-Fue bueno pero...

-Vale, soy Kile Maxwell

-¿Maxwell? Tenía un viejo amigo que tenía ese apellido. Su nombre era... umm creo que era Caleb.

-Caleb Maxwell, mi hermano menor.

-Sí sí, espera ¿eres tú ki?

-El mismo.

-Dios mio- salto en sus brazos.

-¿Qué pasa?

-Es bueno tenerlos como vecinos, mejor aún ki es mi vecino de balcón.

-Tengo una pregunta- asiento.

-¿Qué demonios le hiciste a la pequeña Nia? Ella era muy tierna y mirate...

-¿Tan mal estoy?

-Estás jodidamente sexy ¿Qué te pasó? Si no hubiese visto a tu madre jamás me enteraba de que tú eres la pequeña Nia, bueno ahora no tan pequeña.

-Sobre eso, tengo que hablar con mamá, ahora cree que eres mi novio. Le alegrará saber que son nuestros vecinos.

-Espera, le diré a Caleb que me cubra, mamá y papá no saben que salgo por el balcón.

-¡Caleb! ¡Despierta oso!

Comienzo a reír y él me mira.

-¿Oso?- digo entre risas.

-Cuando duerme parece un oso hibernando- ambos reímos. Escuchamos un gruñido.

*POV KILE*

-Más te vale que sea importante Kile... ¿Nueva conquista?

-¿Recuerdas a la pequeña Nia? 

-No me digas que...

-Hola Caleb

-¡Nia! Dios mío mirate ¿dónde te habías metido?

-Después de la primaria nos mudamos por 2 años a Miami, después a otras ciudades. Y bueno hemos regresado...

-¡Eres toda una mujer! Y vaya que mujer...

-¡Caleb! Cállate.

-Oh hermano, no me digas que aún te gust... ¡ouch!

-Cállate.

-No puede ser, tantos años y aún te gusta ¡Te gusta Nia!

-Cállate o te arrojo otra pelota.

-Bueno bueno, los dejo solos- él vuelve a entrar a mi habitación.

-¿Es cierto?- me giro a verla. Mierda mataré a Caleb.

-Y-yo..

-¿Lo es?

-Lo es- digo observando el piso.

-Kile yo...

-Lo sé, no sientes lo mismo. Friendzone ahí voy- ríe secamente.

-No tienes ni idea. Estoy enamorada de ti desde los 8 años.

-Mierda. Eso si que es una declaración.

-¿Está mal?

*POV NIA*

-Soy un tonto, debí buscarte antes y no dejar que pasaran tantos años.

Sí que es un tonto...

-Cállate Nate.

-¿Qué has dicho?- la miro confundido.

-Mi hermano, él ha dicho...- observa a todas direcciones.

-¿Tú hermano? ¿Nate? Él no está aq...- cubre mi boca con su mano.

-Shhh, salgamos de aquí- asiento y bajamos las escaleras.

-Mamá, iré con Kile a por un helado.

-¿Kile? Oh por dios ¿Kile Maxwell?

-Sí mamá, pero ahora debemos irnos.

-Vale, adiós chicos.

Salimos de su casa y ella me muestra las llaves de un auto.

-Iremos en mi auto.

-Está bien ¿puedo saber qué pasa?

-Algo, algo raro está pasando en casa.

-¿A que te refieres?- hace una mueca.

-Mira- saca su teléfono y me muestra una foto.

-Mierda, que te pasó?

-Algo me hizo eso, mi hermano ha visto una chica en su habitación y cosas raras pasan en casa. Tengo miedo Kile.

-Nia, y-yo soñé contigo hace unos días. Soñé que algo malo te pasaba y fue una gran coincidencia descubrir que eres mi vecina. Quiero protegerte de lo que sea que esté pasando.

-¿Qué está pasando? Todo es muy extraño...

Tú eres extraña...

-No soy extraña.

-¿Eh?

-Y-yo... nada.

-¡Nia cuidado!- un cuervo se estrella en el parabrisas y pierdo un poco el control del auto.

-¡Sujetate!- segundos después que parecieron minutos logro controlar el auto y me aparco a la orilla de la calle.

-¿Qué ha sido eso?

-Mierda perdón, no sé que pasó.

-Tranquila, estás bien?

-Eso creo...

Lamentablemente lo está.

Kile abre los ojos como platos -¿lo escuchaste?- el asiente rapidamente.

-Creí que me estaba volviendo loco.

Vuelvo a encender el auto y seguimos camino a la heladeria, compramos nuestros helados y caminamos por el parque.

*POV NATE*

-¿Mamá?

-¿Sí cariño?

-¿Dónde está Nia? La he buscado por todas partes.

-Está con un viejo amigo, fueron por helados.

Un gran estruendo suena en la parte superior de la casa.

-¿Cariño podrías ver que tiró Taffy está vez?

-S-sí mamá- subo las escaleras y entro a la habitación de Nia, nada... después entro a mi habitación y todo está oscuro. Un horrible olor inunda la habitación, algo viscoso llena mis pies descalzos y siento náuseas. La puerta se cierra de golpe.

-¡Mamá! ¡Mamá ayuda!

Mami no vendrá a ayudarte, me encargué de ella...

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Morgan, eres tú?

Gracias por leer xx.

Los quiere. NIA :3