Capítulo dedicado para:
AKIRABLUE128

Fresh iba emocionado al parque como era su costumbre.

Realmente estaba alegre como cada día por ver a Ink y continuar sus clases mutuas.

Pero al llegar, se llevó la sorpresa de que no estaba.

Miraba alrededor, buscando algún rastro de El.

Quizás se había colocado en otra parte o quizás llegó muy temprano...

O quizás el de bufanda ni siquiera había llegado aún.

Guardó la calma y tomó asiento en el pasto, Específicamente donde siempre estaba Ink.

Decidió sacar su libreta y ponerse a dibujar en lo que esperaba al chico albino.

-¿Fresh?...-Aquella voz sacó de sus pensamientos al llamado.

Una voz tranquila y serena, una que Fresh reconoció al instante.

-¡Brah Tinta! Has llegado, me habías preocupado.-  dijo el de mayor altura mientras se levantaba del pasto a saludar al recién llegado.

Habían pasado dos horas desde que Fresh había llegado.

-¿Estuviste... Esperando desde hace mucho?-preguntó Ink viéndole apenado.

-No te preocupes sobre eso, it's ok. Lo importante es que has llegado, y estás bien- dijo sonriendo Fresh.

Ink no levantaba la mirada, Al parecer aún se sentía algo culpable por dejarle allí esperando.

-Perdona, enserio... yo... No sabía como avisarte que llegaría tarde y...-

-¿Y por qué no me das tu número?-

-¿Uh?-

-You know. Para que no pase de nuevo. Sí me das tu número podrás llamarme para avisarme cuando llegues tarde o algo. Puedes contar conmigo para lo que sea también.-

Ink sonrió y asintió. Fresh sonrió de igual manera y sacó su celular para anotar el número del albino.

Ink se lo dictó número tras número, y seguido Fresh le dictó el suyo para que Ink lo guardara también.

-¡Good! Escríbeme o llámame cuando necesites algo.-

-Sí, Lo haré.-

-Por cierto, en lo que no estabas, me puse a dibujar. ¿Qué opinas?- preguntó Fresh mientras le enseñaba su libreta de dibujos, mostrándole un dibujo recién de la Luna.

-Mm... Parece más un queso que una Luna.-

-¡Hey!-

Ink simplemente rio. Ante eso, Fresh sonreía viéndole.

Realmente se veía hermoso cuando reía.

Al parecer se había enamorado perdidamente.

Pero no podía precipitarse, no era su estilo.

Sin embargo, tampoco podía evitarlo, se había enamorado.