(Las chicas en multimedia🙃)

Narra James:

Mi corazón late golpea con intensidad mi caja torácica. Yo solo puedo pensar en las tremendas ganas que tengo de besarla porque sí, porque aunque nos llevemos mal la mayoría del tiempo no puedo negar esa atracción que siento cuando la tengo cerca. ¿La sentirá ella también? Me acerqué un poco más temiendo que se alejara. Para mi sorpresa, ningún músculo se movió así que lo hice.

La besé.

Al principio comenzó siendo tímido y tierno al mismo tiempo. La besé con cuidado y tratando de demostrarle que en el fondo me importaba. Íbamos a un mismo compás y se sentía muy bien. Sus piernas rodearon mi cintura y yo me aferré más a su cintura. Cuando nuestras lenguas hicieron contacto, la pasión nació entre nosotros. Nos besamos con frenesí y necesidad el uno del otro, sus manos pasaron a mi cuello para profundizar más el beso. Aquello prendió algo en mi interior y sentí mis piernas temblar. Cuando el aire comenzó a faltar, nos separamos. Entre la agitación de los besos, una sonrisa se escapó de mis labios, pero se convirtió en una mueca en cuanto ella se alejó de mí.

- Mm, Eli...- atiné a decir pero ella no me miró.

Caminó en dirección a la orilla y se encaminó a la casa, la cual quedaba bastante lejos de donde estábamos. Me quedé ahí plantado durante unos segundos sin ni siquiera importarme lo fría que se había vuelto el agua otra vez. Eli McMahon me había dejado en las gélidas aguas inglesas en pleno calentón.

Me quedé con ganas. No lo voy a negar.

- ¡No pretendas que lo vaya a olvidar tan rápido!- le grité cuando estaba lo suficientemente lejos.

Ese gesto había sido extraño. Nunca me había sucedido algo tan bochornoso como esto y sinceramente, no sé cómo reaccionar. ¿No le había gustado el beso? ¿Me habré precipitado demasiado? Eli desapareció de mi vista y yo seguí sus pasos hacia la casa. Me rodeé con mi toalla y entré en la casa con los labios morados del frío.

Nada más entrar, las miradas de mi hermana, Kathia, Sam y Dylan se clavaron en mí. Ellos ya están duchados y arreglados, así que yo seré todo un cuadro.

-Oye, ¿qué tal fue ese?- se burló Kevin apareciendo de la cocina poniéndome morritos.

Lucy golpeó su brazo y le miró mal.

-¿Lo vieron?-pregunté atónito. Los cuellos de los que estaban en el sofá, incluido el de Cloe, casi se parten al escuchar mis palabras.

Kathia y Cloe se miraron con sorpresa. Como si todos estuvieran compenetrados, asintieron a la vez.

- Qué asco, ¿acaso se quedaron viéndolo?- quise saber algo molesto pasando la toalla por mi cuerpo mojado.

Estoy congelado. Además, estábamos lo suficientemente lejos como para que no nos viera nadie así que es bastante sospechoso. Lo siguiente que hicieron me dejó mudo, comenzaron a carcajearse en mi cara.

-¡Te pillamos!- exclamó Kevin entre risas.

Los miré sin entender.

-No vimos, ni sabíamos nada. Pero lo supusimos y, no es por nada, pero nos lo acabas de confirmar tú- me cuenta Kathia encogiéndose de hombros.

Genial, otra razón más para que Eli me odie.

Les saqué mi dedo medio y me encaminé a las escaleras para ir a darme una larga ducha. Ellos volvieron a reírse, incluido Dylan y su amigo Sam.

- Qué les den- mascullé.

Narra Cloe:

Una vez que James subió, Eli bajó las escaleras de dos en dos llamando nuestra atención. Antes entró bastante enfurecida y ni siquiera respondió a nuestras preguntas. Así que, ahora que sabemos lo de James, me gustaría saber a qué viene tanto enfado.

Con la mirada de Dylan clavada en mí, me puse en pie y salí corriendo tras ella en busca de respuestas. Me aproximé a la playa y ahí la encontré. Sentada en la arena con la mirada perdida en el horizonte.

-¿Eli?

Sé que es muy impulsiva y parece enfadada así que rezo para que no la tome conmigo.

-Supongo que ya te lo habrá contado- dice sin girarse.

Asiento sentándome a su lado. Creo que su beso no estuvo tan bien como imaginé.

-Nos lo contó sin querer- dije con sinceridad.

Sea lo sea que haya pasado entre ellos, creo que saber James lo contó sin más empeoraría las cosas porque Eli es muy reservada para este tipo de temas.

-¿Qué hay de malo en todo esto? Fue solo un beso.

Ella se encoge de hombros indiferente sin mirarme.

-Me gustaría decir que fue solo un beso, pero no es así y no quiero que sea así.

Sus palabras me confunden a más no poder. ¿A qué se refiere con que no fue así? No me hizo falta decirle nada, ella misma se aclaró.

- Solo estoy confundida, ¿vale?

Asiento.

- Entonces déjalo estar y ya está. Con el tiempo te irás aclarando- le digo.

Ella suspira.

-¿En serio crees que tu hermano lo va a dejar estar? Tiene pinta de ser muy testarudo.

En eso tiene mucha razón, James le dará el espacio que cree necesitar. Luego, volverá a acercarse y le pedirá explicaciones. Cuando a él le atrae una chica es muy predecible.

- Puedo hablar con él, si quieres.

- No hace falta. Aunque me duela decirlo, es cosa de los dos.

Interiormente me siento aliviada de escuchar eso. Tener una conversación sobre Eli con James es imposible porque siempre termina enfadándose. Él detesta que la nombre o le recuerde su intento fallido de llevarla al baile. Así que, me acabo de ahorrar una discusión.

- ¿Podemos sentarnos?- las voces de Kathia y Lucy llamaron nuestra atención.

- Menuda pregunta tan estúpida, pues claro que sí.

Ellas se sentaron a cada lado nuestro y lo primero que hicieron fue mirar a Eli. Supongo que para intentar descifrar que le sucede. Ambas son amigas de ella desde que empezaron el instituto, así que la conocen tres veces mejor que yo.

- No me digas que te liaste con James y ahora tienes dudas- yo abro mis ojos con sorpresa al escuchar las palabras de Kathia.

No podría haber acertado más.

- ¿Por qué siempre te pasan estas cosas cada vez que te lías con alguien?- se preguntó a sí misma Lucy.

Yo sonreí. En realidad, me recuerdan un poco a mis amigas de España. Son expertas en recordarte cosas del pasado o en quedarse siempre con las cagadas monumentales que has cometido.

- Esta vez es diferente. Se supone que odio a James, ¿sabes? No puedes odiar a alguien y luego besarlo- masculla intentando explicarse.

- No me vengas con esas ahora. Lo detestas porque sabes que en el fondo es tu tipo y de algún modo te atrae- le dice Kathia.

El efecto que causa en Eli me hace gracia. Ella se gira dramáticamente hacia nuestra amiga y la mira estupefacta.

- Como sigas hablando vas a estar cagando arena un mes.

Esa es suficiente respuesta como para hacernos reír a las tres. Le molesta que le hablen de James tanto como a él que le hablen de ella.

- ¡La realidad duele, amiga!- le dijo Lucy a mi lado entre risas.

Yo asentí. Eli soltó un grito de frustración y se puso en pie.

- Se acabó. No nos vamos a besar más así que lo mejor será que lo olvide.

En el momento que iba a decirle que eso iba a ser una misión imposible, la voz de Hayley interrumpió nuestra conversación.

-¡Aquí llega la reina de los unicornios!- la escuchamos decir justo antes de que se lanzara sobre nosotras y se llevara a Eli con ella en mitad de la acción.

En cuestión de segundos, Lucy, Kathia, Eli y yo estábamos tumbadas sobre la arena con Hayley sobre nosotras moviéndose como pez fuera del agua. No pude evitar reírme como una loca por la situación. Aunque ya estoy empezando a asfixiarme.

-No quiero morir tan joven- murmuró Kathia a mi lado. Sus mejillas están sonrosadas y luce tan asfixiada como yo.

Me reí.

- Pues ya somos dos.

Hayley es el prototipo de chica delgada que no pesa absolutamente nada, así que no es ella la que nos está asfixiando sino Eli.

-¡Quítense de encima pedazo de gordas!- chilló, de repente, moviéndose para todos lados.

Nosotras nos reímos y finalmente, Hayley se quitó de encima. A diferencia de antes, ahora estamos tumbadas sobre la arena. El cielo está completamente despejado y posee los típicos colores de un atardecer perfecto. Como si alguien le hubiese pasado un pincel con pintura rosada mezclada con celeste.

- Creo que no puede ser una situación más surrealista. Jamás pensé que pasaría un fin de semana con mi amor platónico- nos dice Hayley rompiendo el silencio.

- ¿Lo dices por Lennon? ¿O por Chad?

Ella bufó y eso me hizo todavía más gracia. Eli dio en el clavo.

- Lo digo por Lennon.

- Deberías dejarlo a un lado y centrarte en Chad, él sí que está pendiente a ti- le aconseja Kathia.

Ella asiente siendo consciente de ello. La verdad es que, nunca imaginé que Chad podría llegar a ser todo un amor con las chicas. Es un chico muy simpático y no olvidemos que fue la primera persona que James y yo conocimos el primer día de clase. Todavía recuerdo su entusiasmo y su amabilidad.

- Déjame soñar, Lennon siempre será inalcanzable. Es como fantasear con Harry Styles- masculla ella.

Es gracioso porque siempre tendemos a perseguir cosas que en el fondo sabemos que nos harán sufrir. Somos inconformistas hasta para decidir con quien estar y no digo que a Hayley no le guste Chad, me refiero a que ella siempre tendrá presente a Lennon aunque él no le preste atención.

- Apoyo a Hayley con lo de que esto es surrealista. Cuando me dijeron lo de la mudanza lo vi como una pesadilla hecha realidad. Lo último que imaginé era que haría amigas. Pensé que sería mucho más difícil que esto y he de admitir que estoy tremendamente agradecida por haberme aceptado tan bien.

Las palabras salen solas de mi boca. Por un momento siento vergüenza por lo que he dicho, pero ellas lo contrarrestan soltando un sonoro:

"Awwwwwwww"

- Sabía que nos traerías cosas buenas, Cloe- me aseguró Hayley y yo sonreí.

Eso me da las fuerzas suficientes como para ponerme de pie. Ellas me miran extrañadas, pero cuando ven que comienzo a correr hacia la orilla entre gritos se ríen como locas.

- ¡Por las mudanzas!- chillé llegando a la orilla.

Ellas me siguieron y ahí comenzamos a bailar sin ni siquiera tener música.

Narra Kathia:

Volvimos a la casa en cuanto se nos bajó aquel subidón de adrenalina. Lo cierto es que echamos en falta a Angy. Ella lleva todo este tiempo perdida por ahí con Adam y justo cuando llegamos nosotras a la casa, ellos aparecieron.

- ¿Dónde estuvieron?- les pregunto sentandome junto a ellos en el sofá.

Los chicos fueron a comprar bebidas y el plan es pasar una noche "divertida" entre todos. Sin embargo, esto es lo más parecido a una fiesta del instituto pues casi ni nos conocemos.

- Dando un paseo- me responden los dos a la vez.

Están compenetrados hasta para hablar. La verdad es que echaba de menos verlos juntos. Angy solía pasar mucho tiempo con él y a Adam le agradaba muchísimo estar con ella. No obstante, las circunstancias los dividieron y quien iba a decir que Liam Dawson los volvería a juntar. Ahora que menciono al mellizo, este está en el sofá de en frente con Sam y Dylan fingiendo que no nos está escuchando.

Para mi gran satisfacción, su labio está enrojecido e hinchado por el puñetazo que le dio Adam y ahora que me fijo bien, la nariz de Adam no parece haber sufrido mucho.

- Bien, ahora que tenemos toda la munición juguemos a algún juego para conocernos mejor- propuso Logan aplaudiendo emocionado. Seguidamente, le dio un trago a su cerveza.

Rodé mis ojos.

¿Conocernos mejor? Yo no quiero conocer mejor a Liam o a Sam. Eso sí, he de admitir que los amigos de James sí me llaman la atención. Siempre los había visto en el instituto y solamente conocía a Lennon por Hayley. Además, parecen buenos chicos.

- ¿Y qué propones? ¿Hacer un corito y contarnos nuestros problemas sentimentales?- bromeó Sam, aunque este al ver la gran mueca que se me escapó, se puso serio.

Eso no fue gracioso.

- No sería una mala opción y si no quieres escuchar, te callas o te piras- le respondió Connor en defensa de Logan.

Aquello fue suficiente respuesta para Sam, pues no volvió a abrir la boca para decir estupideces.

- ¿Qué tal si damos un trago por una confesión?- propuso Lucy sorprendiéndome a más no poder.

Eso les gustó pues comenzaron a murmurar por lo bajo y a prepararse para dar sus respuestas.

- Empieza tú- le pidió Kevin.

Ella asintió y por un momento, se quedó pensativa.

- No me gusta la comida china- soltó sin más y seguidamente, dio un trago a su cerveza.

Yo me reí junto a las chicas. Los demás se quedaron con ganas de más pues soltaron varios quejidos.

- Oh venga ya, vamos a empezar con fuerza, ¿no? Cuenta algo intenso- la animó Logan de lo más emocionado.

Sonreí. Ahora sí que está en un aprieto.

- Tengo un amor secreto- dicho eso, dio un enorme trago a su bebida.

Vaya, esto era lo último que imaginé que diría. Sé lo de su relación con Jake, lo vi en su teléfono la noche previa al baile. Pero no dije nada porque no me correspondía decirlo. Aquella confesión dejó a las chicas sorprendidas. Acaban de darse cuenta de que no lo saben todo de Lucy.

Los chicos se miraron entre ellos con curiosidad y las chicas intentaron fingir sabían a qué se refería Lucy. Ahora es el turno de Logan.

- Me gustan los penes- dijo y después, bebió de su botellín.

Nosotros no pudimos evitar reír. Definitivamente, me gusta este chico. La ronda de confesiones siguió y a medida que avanzaba iba siendo más divertida. Liam admitió que había perdido su virginidad con una chica que tampoco tenía ni idea del tema y por lo tanto, fue un desastre. James confesó que Connor le había hecho un tatuaje y Kevin que había vomitado de la emoción al saber la nota de un examen de física.

Después de ese juego para romper el hielo, jugamos a la botella por petición general. Al principio, no me hizo gracia porque estos juegos siempre terminan mal. Así que, he de culpar al alcohol por, finalmente, haber aceptado jugar.

- Bien, beso o trago, ¿queda claro?- dijo Chad trayendo una botella de ron vacía.

Nosotros asentimos. Puso la botella sobre la mesa central del salón y todos nos acercamos para ver a quién le tocaba.

Estoy nerviosa.

La botella vino a parar en Lennon y acabó en James. Estos dos sonrieron y sin más, se dieron un pico entre carcajadas. Luego le tocó a Kevin y terminó en Eli, así que no le quedó otra que beber porque no quería besarla.

Código de colegas, supongo.

Para mi desgracia, Hayley dio a girar la botella y me apuntó a mí. Tragué en seco. Todos soltaron una ovación y cuando vi que cayó sobre Lucy, así que nos dimos un pequeño beso. Ella me guiñó un ojo con complicidad.

Solamente yo sé su secreto.

- Uhhhhhhhhh - exclamó todo el mundo al unísono.

Chad y Hayley.

Ella abrió sus ojos con sorpresa y a él se le escapó una sonrisa tonta. Ambos se miraron y como si se hubiesen puesto de acuerdo, se dieron un casto beso. Me fijé en el rostro de él y tuve que morderme la lengua para no gritar pues está sonrojado.

- Me gusta esa valentía- comentó Connor con una sonrisa pícara.

Son los únicos que hasta ahora se han atrevido a dar el paso.

La ronda continuó y por primera vez, la botella apuntó a Cloe. Ella instantáneamente se puso roja y todavía más cuando el otro lado señalaba a Carter, es decir, a Dylan. Las chicas y yo intercambiamos miradas cómplices. Todos sabemos el extraño odio que le tiene Cloe a Dylan, aunque dudo que sea mutuo.

Lo siguiente que hizo Cloe, dejó a Dylan completamente enojado. Alzó su bebida y dio un gran trago, algo que causó tremenda gracia a Liam y Sam , los amigos cercanos del chico. Este se removió molesto en su asiento y rodó los ojos.

Está cabreado.

- Esto ya está perdiendo su gracia- comentó Sam ahora que vio a su amigo enfadado.

- Tiene razón, el juego va de besos y de aquí a que acabe la noche terminaremos todos en el piso- añadió Liam apoyando su amigo- Propongo que en la próxima, los jugadores se vayan sí o sí al baño.

Lo miramos horrorizados.

Ni de broma.

Ellos se rieron como locos y para mi sorpresa, a los demás no les hizo gracia.

- Venga ya no me miren así, lo que pase en el baño es cosa de los que les toque, ¿no? Nadie tiene por qué saber si sucedió algo ahí dentro o no- aclaró Dawson.

- Está bien- dijo James convencido.

Yo rodé mis ojos y disimuladamente, recé para que no me tocara. Liam giró la botella y todos nos quedamos expectantes a la espera de que se parara.

Logan y Cloe.

- ¡Esto tiene que ser una broma! - exclamó ella rompiendo el incómodo silencio que se formó.

Por lo menos le tocó con su nuevo amigo, ¿no?

- Esa botella está rota- se quejó con la mejillas aún sonrosadas.

Yo sonreí. Me gusta verla así de molesta, es gracioso. La cara de Logan es difícil de explicar, se le ve muy satisfecho con el resultado.

- Yo creo que la tiene cogida contigo- dije y aunque la mayoría se rió, a ella no le hizo ni pizca de gracia.

En silencio, ambos se pusieron de pie. Cloe se bajó la gigantesca sudadera que lleva puesta para que le cubriera de algún modo las piernas al descubierto.

- Si no quiere hacerlo, que no lo haga- las desesperadas palabras de Dylan me sorprendieron.

No me lo creo.

Sus amigos le dieron ligeros codazos para que se callara, pues todos lo mirábamos extrañados. Él miró a James en busca de ayuda. Este parece tranquilo con el hecho de que su hermana se vaya con Logan al baño y creo que es por lo que sucedió antes con Eli. Tiene la mente en otro planeta.

- Cierra el pico, Carter- le dijo Liam de lo más divertido con la situación.

Cuando Logan y Cloe se metieron en el baño, la imaginación de más de uno voló.

Narra Cloe:

Me senté sobre el lavamanos intentando parecer tranquila. Agradezco que sea Logan y no otra persona, pero sigue poniéndome nerviosa la situación. Las noches de alcohol siempre me conducen al mismo recuerdo del pasado.

La fiesta con Izan.

Lo bueno de todo esto es que nadie tiene por qué enterarse de que tuvimos una conversación en vez de una sesión de besos. Logan atinó, a duras penas, a cerrar la puerta, lo que me confirma que está ebrio. Él se giró hacia mí y con la cerveza en una mano, me sonrió tan exageradamente que sus ojos se achinaron.

- No vamos a hacer nada, ¿no?

Abrí mis ojos sorprendida.

- Pues claro que no.

Él se encogió de hombros y se acercó de una forma violenta hacia mí. Yo retrocedí hasta tocar el espejo a mis espaldas. Eso le hizo sonreír aún más. Su aliento apesta a alcohol y eso me da asco.

- Puedo hacer una excepción, ¿sabes? Además, ¿nunca has tenido la fantasía de besar a tu amigo gay? - dijo guiñándome un ojo e intentando ser gracioso.

Fruncí el ceño, la verdad es que no entra dentro de mis fantasías. Él da un paso más y cuando su aliento choca contra mi rostro, me tenso. Esto ya no me gusta. Puse una mano en su pecho para alejarlo, él sin ni siquiera quitarse, dio un último trago a su cerveza y cuando vi que iba a acercarse más, lo empujé.

La botella cayó al suelo y se rompió en mil pedazos.

- Aléjate Logan, ¿qué estás haciendo?

Él se quedó embobado viendo lo que había hecho y después, sonrió. Ni siquiera es consciente de lo que hace.

- Joder, lo siento.

Se giró hacia mí y una vez más intentó acercarse y otra vez, volví a poner la distancia con mi mano. Nunca pensé que alguien ebrio podría llegar a ser tan pesado.

- Mañana ni te acordarás de esto- dije y eso le hizo reír. Sonreí. Bajo toda esa ebriedad, sigue siendo Logan.

- Por eso mismo estoy siendo tan atrevido.

Su respuesta me puso seria al instante. ¿Qué significa eso? Claro como mañana no me voy a acordar de esto, voy a sobrepasarme con mi amiga.

- Tranquila Cloe, no voy a hacer nada que tu no quieras. Lo último que quiero es hacerte daño- dijo al darse cuenta de que no me había hecho gracia.

Varios recuerdos llegaron a mi mente, la voz de Izan retumbó en mi cabeza y me sentí mareada. Las ganas de vomitar me invadieron cuando recordé aquella asquerosa sensación de tener su cuerpo y sus manos sobre mí.

"No haré nada que tu no quieras", me dijo justo antes de que yo volviera a desvanecerme.

Logan no sería capaz de hacerme daño. Él no es Izan, trato rato de repetirlo en mi mente para no perder los nervios. Además, los demás están pendientes de nosotros. Aunque quizás están tan borrachos que no se acuerdan de que estamos aquí.

- ¿Me estás escuchando?- la voz de Logan me devolvió al presente.

Su mano se posó sobre mi muslo. Mis ojos se posaron sobre aquel gesto y volví a sentirme mareada. El pulso se me aceleró acompañado de mi respiración y una claustrofóbica sensación me envolvió.

- Digo que estaría dispuesto a tener algo contigo, ya sabes...- ni siquiera soy capaz de escucharlo.

Los latidos de mi corazón son todavía más fuertes. Su mano subió un poco más, hasta casi tocar mi pantalón corto.

- ¡No me toques!- chillé haciéndome para atrás.

Logan se sobresaltó y cuando quiso alejarse, tropezó con la alfombra del baño y se cayó sobre mí. Un grito salió de mi interior mientras lo apartaba una vez más de mí.

- No te asustes así, no te voy a hacer daño- repitió al darse cuenta de que yo no estaba bien.

Quiero salir de aquí.

Lo hice a un lado, pasé el fechillo y abrí la puerta de golpe en busca de oxígeno. Todos los presentes en el salón están pendientes en nosotros. La gran mayoría está sorprendida y exaltada. James me examinó y no tardó ni diez segundos en darse cuenta de qué me estaba pasando.

- ¡Maldita sea!- exclamó.

Saltó sobre los sillones y corrió hacia mí. Mis amigas se dieron cuenta de que algo sucedía. James me agarró de las mejillas y me obligó a mirarlo.

- Respira hondo conmigo, ¿vale?

No quiero respirar hondo, solamente quiero respirar aire puro y olvidarme de una vez por todas de esos recuerdos que me atormentan. Empujé a James lejos de mí y visualicé la puerta, es decir, mi vía de escape. Así que con todas las miradas clavadas en mí, salí corriendo de la casa.

Narra James:

- Q-que alguien la acompañe por favor- pedí señalando la puerta entreabierta.

Sé que necesita estar sola, pero no permitiré que le pase algo ahí fuera.

Sus amigas se pusieron rápidamente en pie y caminaron hacia la salida en su busca. En ese momento, Logan asomó su cabeza por la puerta del baño y las ganas de golpearlo me invadieron.

Él puso nerviosa a Cloe.

- ¡Te voy a partir el cuello!

Que le den al autocontrol. Logan se sorprendió con mi grito y admito que no va a ser una pelea justa porque él está ebrio, pero me da igual. No pienso permitir que nadie le haga daño a Cloe. Todo sucedió muy rápido. Ni siquiera me dio tiempo a tocar a Logan, pues todos se me echaron encima.

- ¡James tienes que relajarte!- me pidió Lennon metiendo a su hermano en el baño.

- ¡Más te vale no haberle puesto un dedo encima!- dije viendo a la rata de Logan esconderse.

Connor me puso contra la pared junto a Dylan y Adam. Las chicas todavía no se han ido y puedo ver la preocupación reflejada en los ojos de Eli. Primero escuchamos algo romperse y eso nos sobresaltó. Después se oyeron risas y nos calmamos. Pero cuando Cloe gritó, supe que algo no iba bien.

- Y-yo no le hice nada, ella solo se asustó- intentó explicarse Logan, aunque no pude verle la cara.

No le creeré hasta oír la versión de Cloe.

- ¿Sé puede saber por qué te pones así? O mejor dicho, ¿por qué ella reaccionó así?- me preguntó Connor.

Yo me zafé de su agarre y me acomodé la ropa.

- Cloe no está bien, ¿vale? No puede con los chicos y-y encima voy y la meto en una casa llena de ellos y-y...

Ni siquiera sé lo que digo. Ella es fría con los chicos, se crea una muralla cuando alguno se le acerca y por un momento pensé que al venir aquí se le quitaría. Los días anteriores se le veía cómoda estando con mis amigos y quizás haya sido mi error adelantarme tanto. Debería haberle dado tiempo aunque como mismo dice ella, por mucho que lo desees, los demonios del pasado siempre volverán en los momentos más indeseados.

- Vale eso explicaría muchas cosas, ¿pero por qué? - la voz de Connor me devolvió a la tierra.

Lo miré. No sé si merece saberlo, además ella debería contar esa historia.

-Venga ya James, al menos danos una razón para dejar que le patees el culo a Logan- pidió Chad, quien cubre la puerta en la que está el imbécil.

Suspiré.

- Hace un tiempo, el antiguo novio de Cloe intentó abusar de ella en una fiesta. Así que discúlpenme si después de esta le parto la cara a este tío cuando me cuente qué pasó ahí dentro.

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¿Qué opinan de Logan? ¿Fue Cloe muy dramática? ¿Merecerá Logan el perdón? ¿Será suficiente justificación su ebriedad? ¿Qué opinan del beso entre Eli y James?

Nos leemos pronto.

~Les quiero, mil~

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