"¿ La J era de June o de joderle la paciencia ?"

Mi cuerpo sudaba y se arqueaba sobre la cama en respuesta; a Kaegan le gustaba lo que veía, la excitación que bailaba en sus ojos me lo inducía.

No supe en que momento habíamos terminado allí, entre sábanas, sudados, y la ropa a medio poner. Supongo que en el momento en que ya ninguno de los dos pudo resistirse más y Kaegan haya irrumpido en mi habitación a mitad de la noche a medio vestir.

—Eres toda una mujer debajo de esa ropa, June. —Sonrió, apartando un mechón de cabello de mi cara y escondiéndolo detrás de mi oreja—. Siempre supe que había una mujer allí.

Su voz áspera no hizo más que intensificar mi deseo por él, mis manos temblaban y sudaban, tanto como mi cuerpo, pero eso no fue impedimento para tomar su rostro y acercarlo a mi boca, dejando besitos cortos sobre la suya.

—Tócame. —Le supliqué en un susurro, sabiendo que, aunque nadie me había tocado antes, aquello sería bueno y placentero.

Sus ojos verdes brillaron de golpe ante mi petición, una sonrisa se ensanchó en la comisura de sus labios y se acercó a mi cuello, respirando muy calmadamente y trazando líneas con la punta de su nariz.

—¿Dónde quieres que te toque, June? —Preguntó sofocado, sus manos estaban posicionadas a ambos lados de mi cabeza—. Indícame.

—Aquí. —Señalé la sombra de mis pechos con la yema de mis dedos, dibujando pequeños círculos que hicieron que sus pupilas se dilataran.

—¿Así? —Peguntó pasando su lengua, como si ambos de ellos fuesen una paleta de helado que se derretía en plena tarde de verano.

—Hmm, sí. —Intenté responder en un jadeo lleno de placer.

—¿Te gusta así? —Volvió a preguntar, succionando la piel y dejando marcas visibles por mis pechos—. Dímelo, June. ¿Te gusta esto?

—Kaegan...

—Era lo que querías, ¿verdad? —Volvió a preguntar, inclinándose hacia mis caderas y rozando mi vientre con el busto dentro de sus pantaloncillos de dormir.

—Si... —Musité muy bajito, con los ojos casi cerrados y la boca seca por los jadeos que me provocaba.

—Eres una chica muy mala, June. —Esta vez capturó la piel expuesta de mis pechos, y mordisqueó—. Voy a castigarte, voy a castigarte muy duro. Quieres que lo haga, ¿verdad? ¿Quieres que te castigue?

—Hmm, Kaegan, si...

Una de sus manos acarició mi cuello y lo rodeó con sus dedos, apretando levemente y empujándolo hacia arriba. Besándolo y aspirando su aroma.

Luego, buscó desesperadamente mis labios, ansioso y con ganas de devorarlo todo, yo se los ofrecí. Hundió su lengua dentro de mi cavidad y yo me arqueé contra su pecho y caderas, aquella acción me volvió un poco loca, deseando más, pidiéndole más.

Kaegan, en un movimiento salvaje pero cauteloso, cambió mi posición, colocándome boca abajo y apretando las muñecas de mis manos sobre mi espalda baja comenzó a llenarla de besos, hasta llegar a la curva donde terminaba.

Todo mi cuerpo se relajó, dejando que él lo adornara con besos y caricias, que poco a poco, se fueron volviendo fascinantes e intensas.

—Voy a quitarte las bragas muy lentamente, June. Quieres eso, ¿verdad?

—Yo... hmmm

—Dímelo, dime que quieres que te las quite muy despacio. —Dejó un besó y una mordida brusca sobre la tela de mis bragas, arrancando un gemido fuerte.

—Quiero que me quites las bragas muy despacio, Kaegan, por favor. —Mi petición murió en una súplica cuando comenzó a hacerlo.

Y en efecto, muy lentamente comenzó a deslizarlas, dejándola a la altura de mis rodillas y con las suyas, me abrió las piernas.

Tuvo que haber tenido una muy buena de vista de mis partes íntimas, porque fue inevitable que un jadeo ronco se escapara de su boca.

—¿Quieres sentirme, June? —Sus preguntas cada vez me enloquecían más y yo lo quería todo, absolutamente todo de él.

—Si. —Respondí muy segura de lo que quería y hambrienta de ello separé un poco más mis piernas, dejándole completo acceso dentro de ellas.

Primero sentí sus dedos enredarse entre mi pelo, enroscándolo alrededor de su mano y tirando de el hacia atrás, pero muy despacio, con cuidado de no lastimarme. Luego, su mano libre comenzó a masajear mi culo, de forma lenta y suavecita, hasta sentir una palmada que no venía venir, luego una más y luego otra.

—Kaegan...

—Te prometí que iba a castigarte, June. ¿Lo recuerdas? —Preguntó ofuscado y yo asentí como una niña que si merecía ser castigada—. Voy a hacerlo, voy a castigarte tan bien que vas a querer portarte muy mal siempre.

Entonces, sentí uno de sus dedos introducirse dentro de mí, arrancándome gemidos que llenaron toda la habitación, grito tras grito, deseo tras deseo.

—Se siente bien, June, ¿verdad?

—Si... si... muy bien...

Me estaba volviendo loca de sentirlo de esa manera.

Estaba perdiendo mi voluntad propia.

Su dedo dentro de mi marcaba un mismo ritmo, luego introdujo otro con más fuerza, con más precisión, sacudiendo mis paredes vaginales y todo mi cuerpo arqueándose en respuesta. Me giró, pero sin dejar de marcar el ritmo dentro de mí, pude tener una espectacular vista de su pecho. Sudaba y las gotas comenzaban a caer sobre mi vientre.

Entraba y salía con tanta facilidad que pude imaginar cuan mojada estaba en ese instante.

—Siempre quisiste sentir esto. —Esta vez no hubo pregunta en sus palabras, seguía marcando un ritmo, cada vez más duro, más intenso, más placentero—. Querías sentir esto dentro de ti, siempre lo supe.

Sus dedos entraban y salían como perro por su casa, sin dejar de observarme, introduciéndolos cada vez más duro, con más violencia, con más rapidez.

—Te gusta. —Confirmó con una sonrisa de placer que se dibujaba en su rostro agitado.

—Kaegan...

—Dilo,June. Di que te gusta.

Todo comenzó a intensificarse dentro de mí, la sensación era tan deleitable que comencé a empujar mis caderas con su misma fuerza, no quería que se detuviera. Se sentía bien, se sentía muy bien.

—Ahhh... —Sentía como mi cuerpo estaba a punto de explotar.

—Dime que te gusta o voy a detenerme. —Jadeó mientras su ritmo disminuía.

—No, por favor, no pares.

—Voy a detenerme June, mírame, voy a detenerme. —Comenzó a sacar los dedos muy despacito y yo no se lo permití, me volvería loca si lo hacía, entonces empujé mi mano, colocando sus dedos en su lugar, de donde no quería que saliesen jamás,

—Me gusta... me gusta...

—Eso es, June, vente. —Me pidió, haciendo movimientos circulares y muy rápidos dentro de mí, provocando que mis paredes estuviesen a punto de estallar en un millón de fragmentos. Su mano libre tomó la mía y la colocó sobre la suya, acompañándola.

—Tócate para mí. —Me pidió en una súplica enloquecedora y yo comencé a hacerlo, trazando círculos sobre mi parte más sensible, sintiendo espasmos por todas las articulaciones—. Eso es, June. Sigue tocándote así.

Y se acercó a mi boca, tomándola como suya por completo.

Saboreándome

Deleitándose.

Sintiéndome.

Yo cerré los ojos.

—Voy a venirme... voy a... ¡ahhhhh!

El grito fue arrancado de mi garganta cuando sentí que todos mis músculos se contraian y abrí los ojos.

Encontrándome con un techo blanco sobre mi cabeza.

Sin un Kaegan encima de mí.

Sin un Kaegan bajándome las braguitas

Sin un Kaegan tocándome.

—¿Qué sucede, June? ¿Tuviste sueños mojados? —La voz de lo imperturbable lo sacudió todo dentro mi cabeza.

Me removí como si tuviese un cohete en el culo, con tanta fuerza y rapidez que lancé patadas por todos lados, sacudiendo sabanas y almohadas, eso solo provocó que me diese cuenta de la mano dentro de mis pantaloncitos de pijama; la saqué de inmediato, como si allí dentro quemara, con una velocidad impresionante que flash se quedó pendejo.

Y tú fuiste el protagonista de ellos, me tenté a decir.

Sentí la mirada divertida de Kaegan sobre mí, casi abrasándome, a punto de estallar en risas sobre mis narices.

A ver universo, ¿Qué tenías en contra de mí? ¿ya no te habías llevado suficientes bragas? ¿ahora querías mojarlas? ¡¡¡Respóndeme perra estúpida!!!

—¿Qué haces, idiota? —Le pegunté irritada—. ¿Si sabes que las puertas son para tocarse?

—Y para entrar por ellas también. —Respondió encogiéndose de hombros, como si ya tuviese esa respuesta planeada en su boca.

—Después de tocar, fenómeno —Me alteré lanzándole a lotzo en su dirección.

Él arrugó la nariz y volteó los ojos, haciendo muecas y burlas de mis palabras. Si Dios no me daba paciencia, al menos que me diese un bate y una pala, porque con el primero lo mataba y con el segundo lo entierraba.

—En mi defensa, toqué dos veces. —Alzó la sarten y el cubierto que tenía en manos, aquello me exasperó más. —. Pero gemías como gata en celos, ¿qué esperabas?

Bufé y apreté los dientes.

—¿Qué quieres? ¡Es sábado, coño!

—Vamos a ir desayunar juntos afuera —Se recargó sobre el marco de la puerta, riéndose de la situación—. Ya sabes, pasar tiempo de calidad en familia.

Me reí fuerte, hasta ver que su expresión no cambiaba y que estaba hablando muy en serio.

—Estas jodiendome, ¿cierto?

—¿Te parece que tengo cara de estar jodiendote? —Inquirió sarcástico.

—Sí y no puedo. —Me negué volviendo a la cama.

—¿También te parece que te pregunté si podías o no? —Se acercó, conocí la intención de sacarme de la cama de inmediato y la caballerosidad no era su segundo nombre.

—No me da la gana de ir y punto —Le señalé para que se alejara.

—¿Y quién te dijo que tú te mandas sola para preguntarle?

Me mordí la lengua para no soltarle una ráfaga de groserías que se me atravesó en la garganta y salí de la cama dando pataletas, con mi cara de culo incluida por supuesto.

—¿Será que puedo bañarme? —Pregunté irónica.

—Seguro que sí, tus bragas deben estar sosteniendo un rio allí dentro. —asomó una sonrisita picara que me sacudió el vientre

—Cállate.

—Oh, sí, Kaegan. —Emitió un gemido de burla y soltó una carcajada después de eso.

—Tienes el ego demasiado hinchado. —Le grité antes de que pudiese cerrar la puerta.

—Y otra cosa también, June. Pero eso lo discutimos esta noche si gustas —Me devolvió el grito cuando finalmente salió por ella.

Bufé y me metí al cuarto de baño.

Hoy sería un día muy divertido, como para cavar un hueco, y enterrar un muerto. 

Alto ahiiiii locas, si se van sin dejar un voto y un comentario, les saco chuch*

mentiraaaa,

jajajaja

¿o no? 

¡Espero les  haya gustado muuuuucho! 

¿Son team Ben o team Kaegan? leo sus apuestas señorasss