Aclaración: Algo dramático y corto, nunca he manejado historias de Vampiros o Licántropos pero vamos a intentar a ver que sale.

Historia para la tercera etapa del concurso #YoEscriboenCasa

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Habían noches en que Liara se quedaba hasta muy tarde esperando, habían noches que pasaba frío con la ventana abierta esperando que Nathan llegara, pidiera permiso para entrar y ella diría que si.

Pero nunca sucedía, Liara llevaba años siendo la "ama" por pacto de sangre de un vampiro tan servicial y educado como lo era Nathan, llevaba 10 años esperando que él le pidiera permiso y finalmente se hicieran uno, quizás la mordiera y la convirtiera en algo como él, pero no sucedía.

Ya no eran jóvenes, con 30 años humanos todo entre ellos era una relación "Ama-Sirviente", las únicas veces en que Nathan dejaba de actuar como tal era cuando iban a visitar a la pequeña humana que habían rescatado una vez durante la caza.

Cecyl le habia puesto ella, era una señorita con una presencia tan pura y dulce que Nathan la trataba como su hermana, y Liara lo permitió pensando que de alguna manera eso ayudaría a que su relación se profundizara.

En algún momento, en un descuido, Beth, un licántropo, empezó a cortejar a la joven y Liara lo permitió pero Ethan estaba en desacuerdo.

"Ella nunca sera tu esposa y menos tu mujer"

Liara quiso pensar que Ethan le temía a la soledad, pues tanto ella como Cecyl eran humanas, y si el licántropo se llevaba a Cecyl, estaría a un mas solo, esa era su pensar, y todo lo que deseaba era que Ethan se diera cuenta que ella estaba dispuesta a convertirse para estar con él.

Días pasaron y una noche nublada y oscura en especial se despertó a media noche, se sentía sola y abrió la ventana sentándose a orilla de la cama,  nuevamente dejo la ventana abierta todo lo que quedaba de la noche, espero y espero, mirando con anhelo la ventana sin que nada pasara.

Así llego el último día que recordaba a haber visto a Cecyl, habían ido a verla y Nathan parecía mas relajado que de costumbre y solo sonreía cuando Beth le mencionaba algo de Cecyl.

Liara había notado extraña a la chica, no era su dulce pequeña de 17 años de ojos zafiro, era gentil y tierna, pero sonreía como una mujer, no como una niña, y sus ojos mas oscuros le miraban con algo de frialdad.

— Esta sera la última vez que nos veamos señora Liara —

Fue lo que dijo a la hora de despedirse, sorprendiéndola.

— ¿Porque? —

— Porque los licántropos y los humanos no viven mucho — Contestó para después sonreír y despedirse de Nathan, nunca olvidaría lo que alcanzo a escuchar.

"Nos vemos en la eternidad, te estaré esperando"

Y cuando Nathan tomo su mano y empezó a caminar lejos de Cecyl, esta dio la vuela tomando la mano de Beth y fueron en la dirección contraria, pero Liara no pudo mirar al frente, se quedo viendo a Cecyl por la espalda y podía jurar que cuando el viento soplo entre los cabellos oscuros de la chica, en su cuello asomó una delicada y profunda mordida de algo que no era un licántropo.

Paso el tiempo al lado de Nathan, como "ama-sirviente" hasta después de un poco de tiempo, una noche antes de irse le pregunto.

— ¿Estarás solo cuando yo me vaya?

Nathan suspiro y le dedico la única sonrisa que había visto en él.

— No, hay alguien esperándome —

Y fue cuando Liara cerro sus ojos, y al ver que Nathan se fue, comprendió que él había entrado por otra ventana, había elegido a otra para ser su mujer y finalmente respiro derrotada y tranquila.

Y la ventana finalmente fue cerrada.

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[600 palabras]

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