10| adaptación breve.
Corría el tiempo para el final del eclipse. Se le otorgó una habitación propia en la misma planta que la biblioteca, de hecho, estaba al lado de la misma y desde la recámara, tenía acceso a ese sitio.
Era de ensueño, completamente diferente a las cuatro paredes que encerraban su vida en su humilde morada en Pumpkin Hills. La habitación de tonos de amarillo pastel llenaban el ambiente de claridad y tenía unas cortinas blancas, largas y labradas con distintos motivos y tramas. Detrás de ellas, se encontraba un ventanal que al abrirse dejaban entrever la salida a un mediano balcón con una pequeña mesa de vidrio y una silla ornamentada con el emblema de la familia Astonville.
Su noche transcurrió tranquila. Aunque fue invitada a cenar con la familia para así, presentarla al resto, su agotamiento mental y físico no se lo permitió. A ese punto, lo único que deseaba era bañarse y acostarse a dormir pacíficamente.
Y así fue. Tan pronto recorrió toda su habitación, buscó su camisón y se metió al baño que le pertenecía a su habitación y cuyo ostentosos muebles la dejaron cegada.
Le dolía el bolsillo, la bañera que se encontraba en dicho lugar era lo más sofisticado que podría haber visto. Y más, para alguien que se solía bañar de pie en un barril que poseía una cortina alrededor. Cómo es un sitio rural, los sistemas de canales que desagotan el agua de las cocinas o bañeras se "reutilizan" para poder hacer riego de los cultivos, por lo que toda el agua que cayera por rebalse iba por canales a un filtro y luego, hacia los puntos de siembra.
Era precario pero a fines de mantener el pueblo sin problemas de inundaciones o encharcamientos, ya que, estaba construidos sus cimientos sobre un pantano.
Luego de su relajante baño y de mirarse en el espejo por casi quince minutos simulando ser una sirena que cantaba una canción mientras se peinaba su cabello medio-largo, se colocó su camisón y al salir del baño, se dirigió a ver el espejo de pie que estaba en su habitación.
Ahí, simuló ser una princesa. Dió vueltas en círculos, se puso en puntas de pies, como si tuviera tacones y dió pequeños bailecitos alrededor de un pequeño sillón frente a su cama. Detuvo en seco al verse en el espejo nuevamente y alzó sus manos al aire imaginando a alguien que se quedó trabado en su mente y que poseía una altura mayor a la suya.
La oscura figura de Aidan Astonville se le dibujó frente a sus ojos. La imagen de esos atractivos orbes verdes, observándola sin reparo.
Le hirvió la sangre.
—¡Ese malnacido, idiota, imbécil, estúpido! ¡¿Cómo se atrevió a llamarme ridícula cuando el cobarde en no querer enseñarme fue él?! ¡¿Pero quién se cree que es?! Seguro que ni magia debe tener —apretó sus puños con rabia— Además, de darme esta tarea y terminarla pasado mañana. ¡Es muy poco tiempo!
Acto seguido, tomó el cojín del sillón y hundió su centro del puñetazo que le propinó. Hana sabe de la palabra autocontrol, sin embargo, la situación la superaba. Por lo tanto, descargó su ira contenida contra el suave objeto. Lanzándolo lejos, luego, se tiró sobre la cama y ahogó un grito entre los almohadones. Al lanzarse, creyó que sería como la que se encuentra en su casa. Una cama rústica hecha de eucalipto y cuyo colchón era de plumas de pavo. En comparación, esta era bastante grande también y la suavidad la distrajo rápidamente, por lo que tan pronto se acomodó entre las sábanas, se revolvió en risitas bastante sosas que la llenaron de calor, que pronto logró conciliar el sueño.
Por otro lado, detrás de las puertas a la izquierda de la cama de la joven, se hallaba una conexión particular que del otro lado se disimulaba tras una estantería. En efecto, se conectaba con la biblioteca, y quién estaba allí dentro, logró oír todo lo ocurrido en la habitación de Hana
Ahora, Aidan estaba inerte como una roca. Había oído desde el desván de la biblioteca todo lo que la chica dijo sobre él en estos últimos momentos. Estas no eran simples voces en su cabeza, le asignaron la habitación vacía de al lado. Tenía algo de sentido, la de Aidan estaba del otro lado. En resumen, al salir del pasillo primero se encuentra la habitación de la chica, la biblioteca y, pasando las puertas de la misma, las del joven mago. Esta, también se conecta por una puerta disimulada.
La biblioteca, antiguamente, era una habitación común y corriente, el área compartida de la antigua nobleza existente en Aston, y a los lados, las habitaciones personales del príncipe y la princesa del desaparecido reino.
Aidan se sentía intimidado. La joven se había guardado muchas cosas para su intimidad que por descuido involuntario, le llegaron sus quejas al mago, claro y fuerte. El susodicho, agradeció que Ringo ya se había ido a dormir, siendo él quién debió de escuchar cada palabra. La pregunta era, ¿Qué hacía Aidan aún despierto? La respuesta era clara pero no evidente a priori, Aidan no puede dormir en el sentido literal.
No concilia el sueño desde hace tiempo ya y es poco probable que recuerde cuándo fue la última vez que ha ocurrido. Se mantiene en un estado de vigilia constante, lo que le ocasiona dolores de cabeza intermitentes y agotamiento físico. Asimismo, no puede viajar al país de los sueños.
Todas las noches hace lo mismo. Se "prepara" para dormir con ropa bastante simple, una camiseta negra y unos pantalones holgados. Se sienta en el mullido colchón de la cama, levanta el edredón verde y sábanas grises y se acuesta del lado derecho de la cama. Aidan cada que hace esto, le da la espalda a la mesa de noche, de esa manera, puede estar alerta de lo que pueda ingresar desde el balcón o incluida, la biblioteca.
Está por horas de esa manera. A veces se queda hasta el amanecer y otros días, entra a la biblioteca a leer libros de su interés personal. Hasta el más erudito se cansa de leer todos los días el mismo contenido de información. Y así llegó a este momento, dónde accidentalmente oyó algo que no esperaba. Pero lo intuía.
Se levantó del sillón y caminó hacia uno de los cajones de una cómoda en la planta baja de la biblioteca. Luego de revolver en este, halló lo que buscaba, una varita mágica de abeto tallado, perfecto para un mago de invierno y en concordancia con su nacimiento.
—Qué pereza... —hizo una mueca tratando de recordar el hechizo a intentar— Eso era... ¿Magia arcaica verdad? Ah, no lo recuerdo —se giró y echó un vistazo a los estantes que estaban a sus espaldas y su expresión se deformó en una muy perezosa—. No tengo ganas de buscarlo, lo haré mañana.
Tiró la varita sobre la mesa con desdén y el resonar del objeto lo distrajo. Sabía que la habitación de Hana estaría conectada directamente al ambiente de la biblioteca sino hacía algo al respecto como hizo con la suya. Sería una privacidad a medias, entonces consideró que no sería lo correcto dejarlo así. Miró el objeto y nuevamente lo tomó entre sus manos.
—Supongo que con una barrera mágica sobre su cuarto bastará momentáneamente —movió su varita mientras recitaba en voz baja el conjuro.
En la soledad de su hábitat, Aidan es un completo vago, siendo su único defecto —para darle sentido a la palabra— es que no puede dormir como cualquiera. Es perezoso para sus investigaciones, se frustra rápidamente cuando no encuentra la respuesta a sus incógnitas y le da pereza investigar fuera de la mansión. Dejar Aston le da desconfianza y en parte, ello representa caer en los laureles durante las noches.
Es el desasosiego que lo atormenta todos los días.
[...]
—¿Sabes? No quisiera que te hagas una idea mala de Aidan —dijo Ringo mientras sostenía la escalera donde Hana se sentó a buscar -entre los estantes más altos- libros relacionados a la alquimia.
Cabe destacar, los jóvenes se encontraban en la biblioteca mayor y general de la Casa Astonville. Con obvia razón lo era, era mucho más grande que la covacha de Aidan y por ende, más concurrida en toda su extensión. Los pisos eran de un mármol blanco y reluciente. El mantenimiento que tenían tanto muebles, paredes y pisos era impecable. Asimismo, la extensa búsqueda no era fructífera, puesto que Hana solo se encontraba tomos, tomos y tomos completos sobre la historia de Aston-Evalix, el antiguo reino.
—¿Cómo quieres que me haga buenas ideas de él si basta observar cómo me trató? —contestó mientras seguía en su labor— Mi juicio sobre ello tomará mayor tiempo que la charla de ayer.
—Lo sé, pero quisiera que lo consideres. Él es como mi hermano y le debo gran parte de mi vida.
—Esa es tu mirada, yo no le debo nada y tampoco lo conozco mucho —le dió una sonrisa complaciente y Ringo se rindió—. Sostén la escalera, voy a bajar.
—La tarea que te dio debería ser sencilla, incluso para alguien con nulo conocimiento de magia ya que solo requiere de práctica alquimista —retomó la palabra, Hana no dijo nada, solo se concentró en bajar cuidadosamente—. Por el eclipse, la magia solar y la lunar puras se ven interferidas, dicen que es porque Selene protege la espalda de Aiden y por eso lo oscurece momentáneamente.
—¿De verdad? —la joven contestó muy asombrada.
—¿No lo sabías? Por eso es que se venera a los elementales, cuya magia está en alza.
Hana sabía del motivo del festival a Gardenia, más nunca pensó que sería por dichas razones intrincadas, a su entender. Sin mucho éxito, se rinden en la búsqueda dentro de la biblioteca y salen de la misma.
Ringo la convence de tomarse un descansito. De esta manera los jóvenes comienzan a alejarse de su locación al caminar por los largos pasillos del del ala oeste. Dicha fracción de la mansión era desconocida por Hana y por lo tanto, sus ojos se dedicaron a observar cada rincón de aquel nuevo lugar.
Al bajar unas escaleras adornadas de una alfombra azul, con el mismo emblema en toda la mansión, se hallaba un camino abierto hacia un patio interno. Este poseía un piso de mármol y servía como una especie de entrada a la pérgola de magnolias que visitó el día anterior. Ringo se adelantó apresurado y Hana imitó su acción. Al adentrarse más en el pasillo, vio las paredes adornadas con unos retratos de gran tamaño y con su cuadro en referencia debajo.
—Estos son los cuadros de los líderes y magos más significativos de Astonville. Ese de allá es el fundador de la familia luego de la disolución del reino, ay, no me acuerdo su nombre —comentó y se acercaron a ver la pintura.
"su excelencia, Tidian Thomas Astonville, Príncipe de Aston-Evalix" leyó debajo de la pintura. Encontraba curioso que después de su pintura, las siguientes fueran de otros hombres de características idénticas a las de Arsene Astonville. Hombres de semblante serio, frío, ojos verdes y un cabello rojizo.
Pasando entre los mismos, miró y pensó en cuántos años debe llevar existiendo la Casa en la que ha sido acogida de momento. Esos tantísimos tomos de historia que halló en la biblioteca, debieran de significar muchos años.
Y se detuvo en uno particular. Una mujer de cabellos negros que caía sobre sus hombros, ojos rasgados y de un color idéntico al de su padre, ojos como el ópalo. Se acercó a la pintura a verla con más precisión. La mujer retratada vestía una camisa con varios volados en su cuello y mangas, sus piernas cruzadas vestían un pantalón negro y por encima, bucaneras del mismo color. Sobre su espalda se ancla y cae una capa color beige y con adornos en verde.
Ella voltea hacia Ringo quien ve la pintura con una expresión de ternura. Se fija en la inscripción debajo de la misma y observa el nombre de la persona, quien se ha identificado como "excelentísima, Naomi Astreldom de Astonville"
—¿Ella es? —preguntó sacando a Ringo de sus pensamientos.
—Ah, ella, eh —el muchacho se puso nervioso por un instante—. Es la madre de Aidan y el joven Aaron, fue la mago de la torre durante algunos años antes de... Unas cosas que pasaron —soltó una risita y siguió caminando.
Hana bufó. Entendía que ella era una extraña, pero tampoco era para dejar en suspenso toda esa situación. Sin mucho más dilación se dispuso a seguir al rubio. Paró en seco y se volteó hacia la pintura de la mujer. Observó dos particulares cosas, su cabello negro y sus ojos. El color de sus ojos.
—¿Pueden dos personas parecerse tanto? —murmuró.
[...]
¡Buenaaas! Se que este quizás haya quedado de un poco de relleno, pero bueno, es necesario a los fines prácticos kjjj
El próximo capítulo, de entre mis notas, dibujos y todo lo hecho hasta ahora en planeación es mi favorito de momento, espero les agrade cuando lo publique <3
✧˖°. Déjenme saber que les pareció, nos vemos prontito ✧˖°.
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