1-Te dejas llevar por la emoción de tan repentina sorpresa y empiezas por saludarle y decirle que te sientes mejor.  El visto permanece por un rato, hasta que recibes una nueva respuesta. 
#Menos mal :)
La verdad es que imaginar la cara de Crush aliviad@ te produce una sensación inimaginable.  Es como si todo mal abandonara tu cuerpo de un solo suspiro.
Estabas por darle las gracias, cuando el celular comienza a vibrar en armonía con el politono del messenger.
Te está llamando... Solo puede tratarse de una broma. La verdad es que no sabes si contestar la llamada. Todo está siendo demasiado bonito como para ser real.
Dudas muchísimo, pero finalmente dejas que el dedo índice caiga sobre el botón. Tus párpados se aprietan por un instante, hasta que ves lo que sucede a través de la pantalla.
Ves a Crush. ¡es Crush! Allí está presente su perfil. Parece estarle prestando atención a algo o a alguien más. 
-Hola.
Te sorprendes al ver aparecer repentinamente el rostro de un niño muy pequeño que no rondara siquiera los tres años. Su sonrisa es un encanto, pero la verdad es que la imagen de Crush es prioridad. 
-Ismael, ¿con quién...? Ay no.
La imagen se trasloca hasta que el rostro de Crush se aparece de lleno en la pantalla.  Se le nota apenad@.
-Lo siento, Ismael te ha llamado... De verdad lamento que te molestara. 
-No, no importa -Te apresuras a decir - Me gustan mucho los niños.
Pronto eres tú el que pasa por la pena al imaginar las pintas que tienes en ese preciso instante. 
Ay dios mío.
A través del aparato escuchas diversas voces de niños. Algo parecido a un parvulario o colegio.
-Para Noelia no molestes a Rodrigo.
La mirada de Crush va de un lado a otro, parece un tanto agobiad@ con la confusión que allí se encuentra. 
-Mejor cuelga, no quiero molestarte.
-No, no, espera que huyo de estas sabandijas - Dice con una sonrisa.
La imagen cambia tras Crush. Las paredes de aquel lugar son blancas y logras divisar algún que otro cuadro que solo vejestorios tendrían. 
Finalmente ingresa en lo que parece una habitación y le escuchas cerrar la puerta. 
Allí no existe ruido alguno.
-Me alegra verte.
Esa confesión de toma por sorpresa. Obvio jamás esperarías nada semejante.
-Ah... Muchas gracias. 
Sonríes.  Ya no te importa mucho tu aspecto. Hablar con Crush es muy agradable. 
Platican sobre la escuela, los profesores, pero nada en especial, Crush evita hacerlo. No, de hecho no parece tener ningún tipo de interés en hablar sobre su vida. Ni siquiera menciona a Nini.
-Me ha gustado mucho hablar contigo. 
Dice al final, agregando una dulce sonrisa. 
Qué hermos@ es, piensas después de colgar, teniendo aún su imagen viva en su cabeza.

2-#¿Quién eres?
Le cuestionas sin demora.  Quisieras creer que sí es Crush, pero temes ilusionarte en vano.
#Soy Crush.
Una respuesta demasiado obvia...
Te quedas meditando, con la mirada perdida en la imagen de su perfil, una que cualquier otra persona puede haber tomado.
#¿Puedes probarlo?
#Lol.
Su respuesta es instantánea. 
A continuación una foto suya enseñándote la lengua surge en la pantalla. Las personas tienen por norma quedar como perros en ese tipo de fotos, pero Crush ha quedado hermos@.
#¿Pensabas que era tu novi@ el/la acosador@? XD
Crush tiene otra faceta en ese mundo virtual, así supones al leer esa frase nada impropia de su personalidad seca que acostumbras a ver a diario.
Charlan sobre trivialidades, hasta una nueva foto te llueve.  Una en la que está junto a un niño muy mono, pero no más que Crush.

3-Eres demasiado desconfiad@ como para pensar que realmente es Crush, así que decides ignorar el mensaje.
Tras un rato apenas un signo interrogativo surge en la burbuja del messenger, pero lo vuelves a ignorar.
A la mañana siguiente descubres un Crush más distante.

4-#Nini, deja de hacerte el/la gracios@.
Envías el mensaje totalmente convecid@ de que es Nini en realidad. 
#Soy Crush.
Blanqueas los ojos al recibir semejante tonta respuesta.
#Y yo Enrique Iglesias.
#...
Esos puntos son lo último que recibes de Crush.
A la mañana siguiente estabas distraíd@ con tu nuevo celular cuando Crush se para junto a ti.
-Buenos días, soy el Enrique Iglesias de ayer.
Tu cara gana un color tremendo.
Sí era Crush...
-Lo siento, pensé que...
No sabes de cómo disculparte.  Qué vergüenza...
-No importa, no sabes lo que me reí después...
Crush está sonriendo como un niñ@ travies@. Es demasiado bella la imagen.

Con la primera opción obtienes un jugoso 90%, no solo has chateado con Crush sino que también has tenido la oportunidad de ver un poco del lugar donde vive y te has ganado varias de sus sonrisas. 
Con la segunda obtienes un 85%, le encantan tu sentido del humor. 
Con la tercera pierdes un 95%. Ignorarle es lo peor que podías hacer.
Y con la cuarta obtienes un 75%. Para ella/él fue un rato divertido lo de ayer.