|UNO|
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|36 Años Antes|.

❈|Sheryl Elyzzabeth
Sorrenghaille|.

Estaba aburrida. Así decidí caminar un poco por la zona... pero terminé caminando por el bosque. Estaba oscureciendo, pero eso no me preocupaba, no había peligro en los límites de las Dependencias Khovalkev así que estaba segura. Sin embargo, lo que no me imaginé jamás, sería encontrarme con un dragón... y no uno cualquiera... oh, no... era un hermoso dragón azul rey.

Mierda...

¿No podía ser un dragón de otra Casa?... no, tenía que ser un jodido dragón Khozlkov... genial.

Con cautela traté de alejarme pero me vió y se transformó en humano.

Su cabello era rubio y largo por mediación de su espalda, sus ojos eran de un hermoso azul claro, en definitiva era el hombre más hermoso que había visto en toda mi jodida existencia.

-《¿Qué hace una niña como tú a estas horas en el bosque?.》-me preguntó y yo bufé.

-《¿Qué hace un dragón Khozlkov en las Dependencias Khovalkev a esta hora?.》 -pregunté de vuelta. Él se rió por mi reacción y me miró.

-《La niña aquí eres tú, no yo, no tengo porque darte explicaciones.》-dijo y yo lo fulminé con la mirada.

-《No soy una niña.》-gruñí molesta y él me miró.

-《Ah, ¿No? Yo creo que si... ¿Qué edad tienes?.》-me preguntó.

-《Dieciséis... ¿Pero y eso qué...?》-volví a preguntar.

-《¿Solo 16?.》-sonrió. -《Yo tengo más de 1051 años.》-dijo en tono burlón y yo abrí mis ojos como platos.

-《Que viejo.》-dije y él bufo.

-《¿Viejo yo? Jajajajajaja... pero que dices, niña, si soy demasiado joven.》-me dijo y yo me crucé de brazos.

-《Pues deja de llamarme niña. No soy una jodida niña.》-dije molesta.

-《Ok, ok.》-se rió.

Nos quedamos en silencio por algunos minutos, un silencio un poco incómodo, por lo que trate de distraerme viendo las estrellas hasta que...

-《Mierda... no... no ahora.》-gruñó y yo me asusté.

-《¿Pasa algo?.》-pregunté preocupada, viendo cómo hacía sus manos puños.

-《Mi celo... se adelantó.》-gruñó. -《Deberías irte, antes de que pierda el control... argh.》-se quejó como si algo le molestara.

-《¿Seguro que estas bien?.》-le pregunté.

-《Largo de se aquí, maldita sea, es por tu bien.》-gruñó, pero yo estaba literalmente con los pies pegados al piso.

-《No... no puedo...》-susurré.

¿Porqué coño tengo tanto calor...?

-《¿Porqué no...?》-susurró y yo tragué saliva.

-《Por qué... no... no quiero.》-susurré y él me miró.

-《Si pierdo el control... no puedo decir que seré delicado contigo.》-dijo y yo me encogí de hombros.

-《No me importa...》-susurré. Lo veo morder su labio inferior y...

-《Mierda...》-gruñó y en un santiamén, estaba sobre mi.

Me besó con fuerza, con hambre, con necesidad, como nunca nadie me había besado antes... y como sabía que nunca más... nadie me besaría... Dios, voy a morir...

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❈|Dhareios Khozlkov|.

Estaba aburrido, cansado... sin nada que hacer y decidí dar un paseo, pero increíblemente terminé donde menos lo imaginaría , en las Dependencias Khovalkev... puf...

Siempre había querido tener a mi Jinete... tener su compañía, un Jinete era lo que más añoraba desde que era cachorro, pero para mi mala fortuna, nunca fue así.

Llegué al bosque y para mi sorpresa la conocí a ella, tan pequeña, linda y delicada como una flor... era hermosa, toda ella, pero era una niña, no podía lastimarla, y no lo haría.

Nos quedamos mirando las estrellas hasta que ocurrió... mierda, mi jodido celo había llegado... ¿Ahora que coño me hago?.

-《Si pierdo el control... no puedo decir que seré delicado contigo.》-dije tratando de contenerme y ella se encogió de hombros.

-《No me importa...》-susurró. Muerdo mi labio inferior y no me puedo contener más.

-《Mierda...》-gruño y en un santiamén, ya estaba sobre ella.

La besé, por supuesto que lo hice, el calor en mi cuerpo, las ansias, necesitaba tenerla. Arranqué sus ropas dejándola lentamente desnuda y... me quedé mirándola.

El cuerpo desnudo, la piel tersa, los pechos desnudos, el plano vientre, los muslos y piernas... y grandes ancestros, el rosado y limpio coño.... mierda... me voy a volver loco.

Sin apartar la mirada de la pequeña, retiré las escamas de mi cuerpo, quedándome completamente desnudo. Inclinándome sobre ella, la recosté sobre el pasto suave, dejé besos y lamidas sobre la carne expuesta de su cuello, el sabor dulce en mi lengua enviaba crudas corrientes de placer hacia mi polla, gemí con placer, mordisqueando su piel y tomé sus pechos entre mis manos, frotando los erguidos y rosados pezones, lucían deliciosos, listos para ser chupados por mi y eso hice, inclinándome hasta sus pechos, guié uno hasta mi boca, rodeando el duro pezón y chupando. El sabor y textura de la suave y tierna carne causó que gimiera con júbilo, finalmente tenía uno de sus pechos en mi boca, en mi lengua.

Ella gimió, y seguí chupando aún más su pezón, frotando la lengua, mordisqueando y volviendo a chupar con fuerza. Mi grande mano amasó el otro desatendido pecho para luego tirar con los dedos del duro pezón, ella de arqueó bajo mi lengua y toqué, gimoteó y mi polla se endureció todavía más.

Aparté la mano que tenía allí, mis dedos fueron sobre su mojado y jugoso coño el cual acuné y froté con mi palma, mojando tanto mis dedos como esta, ella estaba húmeda, como fuente, los jugos de su coño bañaban sus pliegues. Empujé un dedo entre sus paredes, estaba húmeda y fácilmente me deslicé en su interior.

Tan estrecha... joder...

Las manos de la pequeña sobre mi nuca hicieron que dejara su delicioso pecho y la mirase, sus orbes azules estaban dilatados, grandes y brillantes por la excitación, algo dijo, creo que fue un apodo, pero busqué su boca y la besé con dureza, obligándola a separar los labios para mí, para poseerla y así lo hice.

Mi lengua penetró con dureza entre sus labios, chupé la contraria, devoré su boca y con la mano en su mojado coño empecé un vaivén, enterrando mi dedo en su húmedo y delicioso coño, sintiendo como sus paredes se apretaban a mí alrededor, chupando mi dedo con hambre. Ella era adictiva, una jodida fiera que no se inmutó o se alejó mientras devoraba su boca, no, ella me correspondía con el mismo hambre, recorriendo mis músculos con las manos.

Lamí su labio inferior, su clavícula y entre medio de sus pechos mientras deslizaba los labios por su tersa y caliente piel, su dulce coño lleno de deliciosa nata me llamaba a chuparlo, a follarla con mi lengua hasta hacerla venir con fuerza.

Cuando separé los muslos femeninos y el cremoso coño de la pequeña fiera quedó ante mi azulada mirada, gemí. Su piel brillaba, tenía una corta y pequeña mata de recortados vellos al comienzo de su coño, se encontraba sonrosada e hinchada. Mis manos fueron entre el pasto y su culo, la acerqué a mi boca y lamí toda la húmeda y liza piel.

El chillido de la peque me hiso reír, bajo y oscuro, pero seguí con la punta de la lengua recorriendo los hinchados pliegues y la humedad que allí había. Dulce, picante y muy adictivo, mi polla palpitó, necesitaba liberación, frotar mi dura polla sobre sus pliegues, frotar la cabeza en su pequeño y duro clítoris, ver cómo me mojaba con sus espesos y deliciosos jugos, pero primero necesitaba comer aquel delicioso coño.

La cubrí con la boca, lamiendo largamente todo sus pliegues, tomando su sabor en mi boca, gruñendo sobre su dulce carne. Ella levantó las caderas, causando que la sostuviese del culo y mantuviese bajo mi boca, ella gimió y mi lengua separó los mojados pliegues para exponerla a mi boca y rodear el duro clítoris y chupar. La suave carne entre mis labios, ella gimiendo y mi polla dura como acero estaban llevándome al borde, quería más, mucho más.

Deslicé dos dedos entre las húmedas paredes de su coño y la follé con ellos mientras chupaba su clítoris, lamiendo y mordisqueándola, volviéndola loca como seguramente le gustaba. Ella se vino, duro y fuerte, tirando de mi cabello, haciéndome gruñir sobre su dulce carne. Froté los dedos sobre sus pliegues luego de lamerla completamente, recogí sus jugos y luego deslicé los dedos hasta la apretada entraba de su delicioso culo.

-《Relájate.》-el tono oscuro y peligroso en mi voz lejos de relajarla la asustó, ella se corrió sobre el pasto e impidió que jugara con aquella entrada.

-《No.》-quedé de rodillas en el suelo, observándola, su rostro estaba rojo pero sus ojos brillaban por la pasión y deseo.

Miré sus pechos, por su tamaño sería una copa C, sus pezones eran de color claver pálido y su respiración subía y bajaba con rapidez.

-《No será sexo anal.》-le dije. -《Ven aquí.》-fue la ronca orden cuando me senté y sostuve mi polla. Ella permanecía sentada, observándome.-《Pequeña.》-se movió como una pequeña gatita, sus grandes orbes zafiro sobre mis celestes ojos, estaba roja y quería lamer aquellas rosadas mejillas. -《¿Estás asustada?.》-mierda, nunca había visto aquella mirada en una mujer cuando estaba por follarla y la pequeña parecía asustada como la mierda.

-《Es...》-mis ojos cayeron sobre aquella jodida boca cuando chupó su labio inferior. Gruñí, ese era mi puto derecho, quería chupar cada parte de ella. -《...grande...》-mi polla se hinchó todavía más, como si fuese posible.

Deslicé un dedo por la cabeza, tomando la perlada gota de semen que allí había y luego llevé mis dedos frente a la deliciosa boca de la pequeña.

-《Abre la boca para mí.》-la duda en sus ojos hicieron gruñir a la bestia, mis ojos se oscurecieron con crudeza y apreté la mandíbula.

Observó mi dedo y luego levantó la mirada a mis ojos, y lo vi. Ella nunca había tenido el semen de un hombre en su boca y seguramente nunca una polla. PUTA MIERDA.

La rosada lengua salió por los jugosos labios, lamió la gota en mi dedo y gemí como dragón lastimado... -bueno, lo soy-... pero de puro placer al ella cerrar los ojos y saborear aquello.

-《¿Te gusta?.》-hablé con voz pesada cuando se separó de mi dedo y observó.

Esos putos ojitos lindos brillaban, ella quería que la follara, quería mi polla golpeando duro en sus entrañas. Asintió, suspiró y sus ojos dejaron los míos para caer sobre mi dura polla la cual como la mierda que en esos momentos estaba dura como nunca.

-《Inclínate en el pasto y llévame a tu boca.》-me observó, nuevamente se chupaba el labio, pero ahora supe que era saboreando los restos de la gota de semen en su lengua.

-《No creo que...que haga eso.》-oh no, ella lo haría, se inclinaría y llevaría mi polla a su boca como si fuese una puta barquilla de helado la cual se estaba derritiendo, incluso si tuviésemos que ir paso a paso.

-《Inclínate, nena. Iremos paso a paso hasta que ames mi polla en tu garganta. Será solamente lamer.》-hijo de puta, necesitaba aquella traviesa lengua recorriendo mi base y la punta de mi polla, lo estaba necesitando como el puto aire que estaba respirando en esos momentos.

Ella nuevamente dudó, pero se inclinó, su delicioso culo quedó en el aire mientras se inclinaba cerca.

-《Pequeña.》-gruñí con voz áspera cuando unos de sus traviesos dedos fue sobre la punta de mi polla, barrió sobre este y luego sus dedos se deslizaron por toda mi anchura.

-《Es suave.》-mierda, no sería nada suave cuando la follara. -《Pero caliente y dura.》-ella parecía acabar de descubrir algo, sus toques eran suaves y completamente inexpertos, no eran los toques de una mujer que amaba follar.

-《Usa la lengua, pequeña. Frótala sobre la cabeza y amasa mis pelotas.》 -hundí una mano entre sus hebras azabache, no la obligué, sentí como observaba mi erección y luego finalmente sacó la lengua y acaricio.

El primer toque fue suave, corto y causó que más líquido pre seminal se derramara de mi polla.

Esto tenía que ser el puto paraíso, ninguna puta me había lamido la polla con tanta jodida inocencia, ninguna se había tomado tanto tiempo en conocerla y atenderla como merecía, ellas solamente la deslizaban en su garganta y chupaban con glotonería hasta que mi semen se derramaba en su garganta, pero no, la pequeña lamía, deslizaba la lengua con curiosidad, se separaba y me saboreaba en su boca y luego volvía a lamer. Su pequeña mano casi no me rodeaba, y a diferencia de las putas, ella solamente me sostenía, no movía su mano, ella no tenía ni puta idea de lo que se encontraba haciendo.

Mientras ella permanecía inclinada, chupando o babeando mi polla, sea lo que sea que estaba haciendo, estiré una mano y toqué su culo, buscando su jugoso coño, jadeé con satisfacción al encontrarla tan húmeda, caliente y suave, y deseé tener aquel rebelde y dulce coño en mi boca nuevamente.

-《E-Escamoso...》-gimió sobre mi polla cuando deslicé los dedos entre los pliegues de su coño.

¿Escamoso?...

-《Sigue lamiendo, pequeña.》-su interior era apretado en mis dedos, pero con toda aquella humedad, ella me tomaría.

Ella estaba hecha para mí, para satisfacerme y tomarme en su cuerpo.

Joder, que estoy diciendo...

Los mismos dedos que antes habían estado manchados por la sangre de algún enemigo ahora se encontraban manchados por los jugos de una pequeña y como la mierda que ella lograría hacerme olvidar la sensación de la sangre entre mis dedos, con ella lo único que iba a querer era siempre tener los dedos enterrados en su cuerpo y haciéndola venir.

Ella no correspondía a mis toques, no echaba el culo hacia atrás para follarla, ella me recibía y gemía por mí, por mis caricias, ella estaba haciendo lo que nunca una puta había hecho.
Necesitaba follarla. Tiré un poco de sus cabellos, separándola y luego irguiéndola para buscar su boca, besarla y chupar su lengua. Tenía mi sabor en su boca y me importó una mierda, la quería no solamente con mi semen en su interior, sino que también en su boca, con mi olor, que me pudiesen oler en ella.

-《¿Eres virgen?.》-la pregunta salió ronca y forzada, no deseaba escuchar que ya había sido follada por otro hijo de puta, no quería imaginarla montando otra polla, pero necesitaba saber porqué esas reacciones, ella no actuaba como una mujer que había sido follada.

Ella me observó, su piel incluso más rosada y no atreviéndose a mirarme, asintió con la cabeza.

Mi boca cayó sobre su cuello y mordí, demasiado fuerte, ella protestó pero mis brazos eran fuertes brazas a su alrededor. Iba a follarla, la follaría tan duro y fuerte para que no recordara la sensación de otra polla en su cuerpo.

Sus dedos se clavaron en mis costillas, ella jadeaba por la boca y sus ojos estaban empañados por las lágrimas. La acababa de lastimar, justo como ella lo acababa de hacer conmigo al aceptar que no había sigo de nadie más.

Es... difícil de explicar, teniendo en cuenta que yo soy un dragón en celo... y ella una jinete joven...

-《¡¿Estás loco?!.》-gritó. Quería jodidamente saltar sobre ella y tomar duramente su coño. -《Eres un animal.》-y ella una pequeña fiera que incluso estando desnuda y expuesta me enfrentaba.

-《¿Un animal? Nena, no tienes ni puta idea.》-gruñí.

-《Tienes que estar loco.》-deslicé la mirada por su cuerpo, sus pechos llenos, firmes adornados por apretados botones rosas y su coño lleno de crema.

Fui sobre ella y la besé, ella se resistió, pero cuando finalmente se rindió me mordió, fuerte y duro con sus pequeños dientes.

-《¿Qué diablos?.》-me separé y observe. Me iba a poner como un puto y pendejo romántico de mierda pero tenía los jodidos ojos más bonitos que había visto jamás. -《Te follaré duro por esto.》-prometí, separándole las piernas y dejando expuesto su húmedo coño.

-《Eres muy posesivo, ¿No crees?.》-fue la puta pregunta en un jadeo cuando busqué su clítoris con mis dedos y tiré para luego retorcerlo entre dos dedos.

-《Lo soy, como la mierda que lo soy, pequeña.》-no iba con jodidos rodeos.

-《E-Escamoso...》-gimió bajo mi toque, mi boca fue a su garganta, lamí y luego fui al lugar donde la había mordido, besando la marca que había dejado en su rosada piel.

-《Mi coño, pequeña. Desde hoy la única polla que podrá estar en el es la mía. ¿Entiendes?.》-le costaba mantener los ojos abiertos por las caricias. -《Solamente mi polla, nena.》-aparté la mano de su sexo, tomé mi polla y froté los mojados pliegues, la pequeña se retorció bajo mi cuerpo, tomó el pasto entre sus manos gimiendo y negando con la cabeza.

Carajo, era la mierda más bonita, negando pero deseando ser duramente follada. Tomé uno de sus pechos, apreté y tiré del pezón y me conduje dentro de su coño. Caliente, apretado y jodidamente húmedo. Un dulce guante a mi alrededor.

-《¡No!.》-ella chilló cuando empujé duro, y mierda su grito solamente me volvió loco, la tomé del culo y follé duro.

Mi polla entraba y salía de su cuerpo con frenesí, estaba loco, sentirla a mi alrededor era más de lo que imaginaba. Era apretada, apretada como una puta virgen.

Imbécil.... ¡te dijo que era virgen!...

La pequeña boqueó por aire, gimió fuerte, jadeó pero la mantuve bajo mis embistes. Ver como mi grande polla desaparecía por su apretado sexo, como mi polla brillaba por sus jugos y sentir como su coño se contraía a mi alrededor me empujaban más y más a aquel lugar oscuro.

Los pechos de mi pequeña se sacudían con cada embestida, ella era muy inocente para devolverme la follada como alguna puta, y supe que podía enamorarme de ella si no me alejaba cuanto antes.

Ella cantó mi apodo en pequeños y sexys gemidos, nunca pidiendo más, pero nunca dejando de querer más. Salí de su interior, solamente dejándola separada por la punta de mi polla y luego la penetré hasta la empuñadura y se sacudió con fuerza bajo mi cuerpo. Mi pequeña estaba teniendo su segundo orgasmo de la noche, el primer orgasmo con mi polla profundamente en su interior.

Su orgasmo me envió al borde cuando sus paredes me apretaron y su interior se hacía más estrecho, salí de ella y froté mi polla hasta que el primer chorro de semen golpeó el plano vientre de mi pequeña, manchándola, otros chorro siguieron y luego dos más. Puta mierda, aquello era caliente como el infierno. Ella, acostada en el pasto, follada, saciada y con mi semen en su estómago.

-《Pequeña.》-oh mierda, mi voz era un ronco y peligroso susurro, como si hubiese estado largos días sin agua y sin hablar. -《Pequeña.》-deslicé una mano sobre su vientre y lo hice, claro que lo haría, esparcí mi semen sobre su vientre, sus pechos, duros pezones, sobre su muy bien follado coño y luego con mi manchado dedo pulgar, froté su labio inferior.

La pequeña separó los párpados, me observó, tenía aquel somnoliento brillo en sus pupilas, aquel brillo de satisfacción.

-《E-Escamoso...》-su sexy voz era baja y llena de vergüenza. Sonreí al escucharla, me incliné y besé.

-《Mía, pequeña. Eres Mi pequeña fiera. Mi coño para follar.》-la besé duro, llenándola de mi sabor y saliva, pero ella lo aceptó gustosa. -《Dilo.》 -demandé. Ella necesitaba saber a quién pertenecía.

-《Tuya, tu pequeña...》-susurró y sonreí.

-《Vamos, pequeña. Dormirás cuando tomemos un baño en el lago y luego de algunos orgasmos.》-deslicé los brazos bajo su cuerpo, la tomé y salimos de allí con ella rodeándome el cuello.

Cuando mañana despertara solamente recordaría mi polla dentro de ella y estaría adolorida en los lugares correctos y seguramente, incorrectos...

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❈|Sheryl Elyzzabeth
Sorrenghaille|.

Desperté a la mañana siguiente con dolores en todo el jodido cuerpo... pero grande fue mi decepción cuando me di cuenta de qué Escamoso se había ido, que ya no estaba conmigo... sólo unas ropas que dejó para que pudiera cubrirme ya que había destrozado las mías anoche.

Jodida mierda...

Algo en mi pecho dolió, dolió como nunca.

Me abandonó...

Quería llorar... me sentía como una estúpida... ¿Llorar por un hombre? Por Dios, no... yo no podía hacer eso... pero si, dolía como la mierda y era algo que nunca iba a olvidar...

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|En la Actualidad|.

Abro los ojos, despertando de mi ensañamiento o... del pasado, da igual, en cuanto Andrea y Jessie me llaman y entonces les miro.

-《¿Sé puede saber en que pensabas? Sonreías como tonta, te enojabas e incluso me atrevería a decir que vi un par de lágrimas.》-dijo Andrea y yo le miré.

-《No es nada. Solo recordaba mi pasado, aquel momento en el que perdí la virginidad y todas esas mierdas.》-gruño y ellas me miran.

-《Pero Sheryl, no hables así, no todo pudo ser tan malo.》-dijo Jessie y yo le miré.

-《Como la mierda, Jess... ¿Sabes que cosa es que te traicionen dos veces, dos rubios de ojos azules? Dos malditos Khozlkov.》 -gruño presa de la ira, y ellas me miran asustadas.

Ya no creo en nadie, nunca más...

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❈༻༼✎NOTA DE AUTORA༽༺❈

¡Hola!, ¿Como están?.

Les traigo el primer capítulo de AHRCALIS, espero y les haya gustado.

Bueno, aclaremos lo ocurrido aquí. Decidí x razones solo mías, que no repetiré lo mismo que en ALTHAIR, ya que al final, lo ocurrido con Sheryl y Dhareios lo ven en esa historia, o casi todo. Comenzaré AHRCALIS a partir del capítulo 35, del 1er Libro y así todos estarán libre de enredos. Obviamente, las dudas que dejo ALTHAIR se irán aclarando aquí, ya verán como, tranquilas/os.

¿Qué les ha parecido el capítulo?.

¿Qué opinan de lo ocurrido?.

¿Qué creen que pueda pasar ahora?.

¡GRACIAS POR LEER!.

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Breysis.P©️