Narra Erick:

Caminé en silencio pensando pausadamente en _________. Saqué de mi bolsillo mi celular y pude ver el número de mi primo. Suspiré recordando el problema que causé con __________. Lo miré dudando si en contestar; pero quería él saber si mi problema con _________ se había resuelto.

—¿Qué pasa Diego? —al otro lado del teléfono escuché unas carcajadas y pensé que estaría en una de sus reuniones. —. ¡Diego qué necesitas!

—Ah, Erick, ¿ya resolviste lo de la chica esta... _________? —contesté y él volvió a reír dejándome más curioso al saber que estaba sucediendo. Rodeé los ojos con una sonrisa de lado un tanto burlona. —Erick, oye por favor ya no me involucres en tus problemas de celos; resuelve el asunto cómo lo haría un hombre.

—Si claro, gracias de todas maneras. —recordé un poco lo que antes sucedió. Cerré mis ojos mientras suspiraba, a __________ la quería desde secundaria, pero desde ahí ella dejó de quererme. Parpadeé varias veces tratando de olvidar aquel día. Luego me di cuenta que Diego había colgado la llamada, volví a la realidad y seguí caminando en silencio.

Unos horas después empezó a llover, miré el cielo y al sentir una gota caer en mi mejilla recordé a __________ llorando entre mis brazos, suspiré pesado al saber que no tengo oportunidad con Link aquí en carne y hueso. Nunca imaginé que un elfo personaje ficticio me podría quitar al amor de mi vida. Gruñí molesto volviendo a recordar la lluvia al sentirla caer más fuerte y varias gotas frías de agua impactar en mi rostro. Corrí para ya no provocar que ellas siguieran cayendo encima mío.

• • •

Llegué a casa y lo primero que pensé fue en como poder conquistar a ___________. Pensé en mostrarle mi abdomen cuando Link no estuviera, pero es completamente imposible; ya que Link no se separa y no lo hará de ella.

—Buscaré una forma de hacerte mía __________. —con un puño en alto, dije confiado de poder conseguir tener de vuelta a ___________. —. No le haré daño a Link, ya que la perderé esta vez...

Entré a mi habitación para poder planear algo para tenerla de vuelta. Ya no cometeré ningún error, todo lo haré bien y si debo, mejor que Link.

Llegó la tarde y pude planearlo más tranquilo sin problema e interrupciones. ___________ será mía dentro de diez días mínimo.

Narra ____________:

Me sorprendí al escuchar a Andrea mencionar que se casaría dentro de tres años, sé que es mucho tiempo, pero el tiempo pasa deprisa en situaciones de este tipo. Miré de reojo a Link y él se encontraba mirando tras la ventana como las gotas de lluvia salpicaban el cristal, volteé con Andrea y ella estaba caminando por el salón inquietándome un poco. Suspiré y dije: — ¿Y, quién es el afortunado? —traté de no verme muy asombrada y a la vez preocupada por saber que estaría sola en casa tres años o, sola.

—Papá lo conoció en Argentina y creo que... —

—¿¡Argentina!? —esta vez sí me asombré quedando boquiabierta. Reaccioné muy raro lo cual causó que Link caminara a mi dirección al escuchar mi voz de preocupación. —. No me puedes dejar aquí sola, apenas cumpliré dieciocho, y Link... quién sabe si siga aquí. No Andrea...

—Perdóname __________, pero no puedo hacer nada... —se alejó dejándome callada e inmóvil junto a Link, él no sabía lo que estaba ocurriendo. Suspiré rendida. Caminé de nuevo despacio rumbo a mi habitación con Link atrás de mí, tarareando una suave canción que perfectamente conocía.

—Link... —él se detuvo al igual que su cantar. Sonreí una leve mueca dejándolo confundido con su silencio de confusión; pronuncié despacio en un susurro con mi mirada entrecerrada: —¿Song Of Healing?

Chasqueó sus dedos con una sonrisa de lado, dedicándome uno de sus mejores guiños que me causó gracia. Tarareé la canción junto con él mientras caminábamos a paso suave rumbo a mi habitación. Al llegar a mi habitación me senté en el borde de mi cama y Link al lado mío. Él en unos segundos colocó su mano en mi pierna dejándome roja y atónita.

—¿Qué haces Link? —se mordió el labio inferior mientras se acercaba a mi rostro, lo pude notar sacar la lengua con mirada traviesa; con su mano comenzó a sobar mi mejilla para acercar mis labios a los suyos, al sentir sus labios rozar los míos, cerré fuertemente mis ojos para no apreciar la extraña escena.

Link capturó mis labios bruscamente acomodándome en la cama quedando él encima mío. Sus labios no se separaron de los míos, luego de un beso más apasionado pude sentir como bajaba despaciosamente hasta poder besar y lamer mi cuello. —Link... para. —gemí un poco al sentir su mano deslizarse por mi abdomen al mismo ritmo como su lengua, y sentir la otra rozar mi pierna con sus dedos. —. Link... ba-basta por favor...

—Tranquila _________, no es na--, ¡¿Qué estoy haciendo?! —se separó rápidamente sin dejar de mirarme, mis ojos estaban entrecerrados y mis mejillas ardían a mil grados. —. __________ perdóname por favor, no lo hice... ¡No de nuevo!

—Calma Link... yo tampoco comprendo lo que está sucediendo entre los dos... —dije cerrando mis piernas y puse mis manos en piedra de confusión e ira a la vez. Él me miró confundido a lo que comenté, suspiré aflojando mis manos como cuerpo.

— ¿Qué dices ___________? —me preguntó turbado.

—Es que... fue muy deprisa lo que sentiste por mí... sigo sin comprender porqué me amas... —su mirada me dejó nerviosa y preocupada como su silencio lo hizo anteriormente. Suspiré y retiré mi mirada que chocaba con la de él, luego de unos minutos de silencio, Link habló dejándome turbada de su comentario.

— ¿No te has dado cuenta aún __________?—arqueé una ceja al inicio de su hablar, esperando detalles que me hicieran cambiar de parecer. Él suspiró con la misma fuerza y con pesar dijo mirándome a los ojos: —. Hemos hecho un gran lazo en tan poco tiempo, tuvimos una aventura que casi acaba con tu vida por culpa mía... y ahora...

—No fue tu culpa Link, perdona la interrupción, pero admito y reconozco que fue mi error, el no estar alertada y precavida de lo que podía suceder. —dije sentándome en la cama de nuevo, dejándolo frente a mi rostro. Tomé sus manos para calmarlo y él volvió a suspirar.

—Por favor _________, yo te amo y... —negué con los ojos cerrados, sabiendo que diría. Volvió a suspirar y entreabrí mis ojos para verle, dejando ese aire de incomodidad hacerse presente, provocando que con dificultad confiese: —. No estoy lista para e-eso Link...

Al mirarlo por completo con mis ojos abiertos, lo noté con las mejillas arder y sus azules cerrados. De reojo miré sus manos y estaban temblorosas y sudando; me causaba lástima verlo, pero no lo haré con nadie ni con él.

—Link... ¿Link qué, qué haces... Link?... ¡Link no, qué haces! —

Narra Link:

Ahí estaba, encima de _________ a punto de retirarme la camisa para besarle, y comenzar con lo que he querido hacer estos pocos días. Me la retiré sin pensarlo y la besé capturando bruscamente sus labios, sintiendo sus manos tocar mi abdomen para separarme; me alejé y con mis azules entrecerrados la pude ver enrojecida de sus mejillas.

—Link detente, por favor no sigas... —sus manos estaban temblando y supe que tenía que parar, me alejé de ella y se quedó acostada suspirando aceleradamente con los ojos cerrados, y sus mejillas ardiendo. ¿Qué me sucede? —. Link, aunque Andrea haya salido, no quiere decir que esté lista para... —interrumpí cerrando mis ojos al sentir una lágrima caer por mi mejilla velozmente, aterrizando en la suya, haciendo que guardara silencio. Me volví a aventar a sus labios está vez introduje mi lengua a ella, provocando de nuevo que __________ soltara una cachetada en mi mejilla. Me separé de sus labios haciéndose ver un leve hilo de saliva, que conectaba mi lengua con la suya mis ojos estaban rojos al igual que mis mejillas, varias grandes gotas de lágrimas caían por estos mismos.

—¡Dentro de poco me iré ___________! —se quedó quieta. Sus manos se sintieron sueltas y pude pensar que estaba confusa y preocupada de saber si mi comentario era verdadero. —. Me iré de regreso a Hyrule en pocos días, si no resuelvo tu problema... Dark, tomará mi lugar y él será quien nuevamente te ayudará. No quiero irme sin ti y no quiero dejar de verte solo por un error que cometí... por favor...

—Link... lo siento pero... no puedo. —solté las lágrimas que no podía conservar por culpa del dolor que me causaba. Me recosté encima del pecho de _________ escuchando su corazón palpitar rápidamente, apreté con fuerza la sábana con mis manos. Sentí los brazos de __________ rodear mi espalda mientras sus lágrimas caían junto las mías encima de su almohada. —. ¡Link no es mi intención lastimarte, por favor no llores!

—No me lástimas __________, sólo... ¡No quiero que te olvides de mí! —ambos estábamos llorando abrazados del otro. El pecho de _________ se seguía sacudiendo muy deprisa, al igual que mi respiración acelerada y descontrolada. Cerré mis ojos al recordar lo que las Diosas me habían dicho. Abrí mis ojos y vi a _________ llorando con su rostro escondido en mi pecho.

*FlashBack*

Abrazaba fuertemente la imagen que las Diosas me habían dado de __________. Me sentía feliz al saber que pronto podría conocer a __________, y poder saber más acerca de ella. Una de las Diosas se encontraba charlando con Dark Link; tristemente él había renunciado al Circo para seguir ayudando gente. La razón de su renuncio fue muy simple, le enfadaba ser enviado con hombres que tenían el mismo problema, la homosexualidad. Nunca fue enviado con una sola chica, la verdad es incómodo ser enviado con un homosexual sabiendo sus gustos. Admito que hubiera hecho lo mismo.

—Dark Link por favor vuelve, necesitamos tu ayuda con una chica. Te prometemos que si él falla, tú seguirás ayudando a la chica; Dark, tienes mi palabra. Regresa lo antes posible, y antes. Gracias. —se me acercó al colgar la llamada y suspiró algo molesta y decepcionada.

Guardé la imagen en mi bolsillo y abrió sus ojos diciendo ahogado: —Link tú tienes que resolver el problema de __________, ya que Dark regresará, así que tú deberás resolverlo antes ya que regresaras aquí al Circo en Hyrule en un variado periodo de tiempo, cuando estés con ella. —guardé silencio con confusión abundar mi mente, me notó distraído y aturdido, provocando que dijera con más detalle: —. Dark Link tomará tu lugar si fracasas, y tristemente no volverás a ver a ___________ de nuevo...

Abrí mis ojos asombrado al escucharla. Miré la foto por unos segundos sacándola de mi bolsillo, sintiendo una ola de decepción chocar contra mi corazón. Todo dependía de mí, todo debería de cambiar lo antes posible, y preferible antes de la llegada de Dark. El problema de ___________ deberá ser eliminado lo antes posible.

—Descuida, lo resolveré antes. Lo prometo. —

*Fin FlashBack*

Ella seguía con su cabeza metida en mi pecho, con las lágrimas aterrizando nuevamente en su almohada. Me alejé un poco para verla y pude ver esas lágrimas que caían frecuentemente en la almohada, ahora deslizarse por sus lindos pómulos enrojecidos. Las acaricié para que pudiera verme a los ojos, y poder admirarlos una vez más, antes de mi partida.

—Ya no llores __________, falta mucho para eso; pero hay que cuidarnos mutuamente para que nada malo nos suceda. —asintió secándose el rastro de lágrimas mostrando una leve mueca de calma. —. Tranquila _________ yo te recordaré siempre.

—Igual yo Link... —sonreí con dificultad tratando de mostrar una sonrisa, pero no podía contener el dolor y cerré de nuevo mis ojos cayendo en un doloroso e inevitable llanto. —. Link... no por favor. —con mis brazos me sequé el rastro de lágrimas que iban cayendo lentamente por mis mejillas colorándose de rojo. Entreabrí mis ojos y sentí sus cálidas manos acariciar mis enrojecidos pómulos, obligándome a mirarle.

—No vas a poder recordarme ___________... yo ya sé lo que las Diosas te harán, y no sabrás cuando o como sucedió... sólo voy a estar un par de días más contigo... —pensé un momento en que tuve que haber confesado antes de encontrarme en una situación como ésta.

Cerró sus ojos y se cubrió los ojos con sus manos. —Ya no puedo hacer nada. Me rindo. —suspiró y mantuvo sus manos encima de sus bellos ojos, dejándolos ocultos de mi visibilidad. —. Aparte de que Andrea se va a casar, tú te vas... ya da lo mismo.

Se intentó sentar pero el peso de mi cuerpo le impedía moverse. Ambos suspiramos con pesadez y me separé de ella para darle libertad. __________ se levantó de la cama en silencio y salió por la puerta dejándome solo y callado de incomodidad. Una extraña sensación me hizo mirar hacia la ventana donde la lluvia seguía dejando sus gotas deslizarse por éste mismo. Una luz que ya reconocía apareció dejándome atónito, una Diosa estaba frente a mí. Me arrodillé para verla y al sacar sus manos, mostró un bello collar con la trifuerza como decoración.

—Joven Link, héroe y protector de __________, sabemos cuanto amas a la chica, aun sabiendo que la tercera regla fue desobedecida. Queremos entregarte éste collar el cual _________ deberá portar toda la eternidad. —guardé silencio y una lágrima cayó de nuevo por mi ojos resbalándose por mi mejilla, la miré de nuevo y volvió a decir: —. Toma el collar y entrégalo al amor de tu vida, recuerda que nunca deberá de quitárselo, ya que con ese collar forjado por nosotras, puedes verla sin necesidad de estar presente en el Circo; incluso saber sus problemas como saber su estado. Su problema está a la mitad de ser resuelto, falta poco para que regreses a Hyrule Link. Cuida a _________ como merece, y no te rindas.

Sonreí al tomar el collar y ver la trifuerza con la letra L y la inicial de __________. Otra lágrima traidora salió corriendo de mi ojo y cayó por mi mejilla, mientras sonreía y miraba cómo la Diosa desaparecía lentamente susurrando: —Gracias... —

Me puse de pie y salí por donde _________ había salido anteriormente. La alcancé a ver parada recargada en la puerta. Caminé lentamente bajando las escaleras para poder llegar con ella.

— ¿__________?—

Narra __________:

Estaba callada recargada contra la puerta mirando la lluvia. Sujeté con mi mano algo que Andrea me había obsequiado cuando éramos niñas. Un brazalete con esmeralda de pedrería en el centro, aunque recordaba peleas que pasábamos, no quería dejar ir a Andrea; pero supe que éste desgraciado día llegaría, tarde o temprano debía de llegar.

Escuché la voz de Link sacarme de mis pensamientos. Lo miré y estaba sin camisa y en sus manos sujetaba un lindo collar dorado con su trifuerza y las iniciales: L y __. Se acercó despacio a mi dirección y dijo: —__________, quiero que conserves este collar que es muy importante. Con él, puedo estar al pendiente de ti, sin necesidad de ir a las juntas del Circo; en cambio si te lo quitas... no podré verte ni saber tu estado. Por favor ________ acepta este regalo de parte de las Diosas como mío. —me inmovilicé al ver el collar brillar tan preciosa luz verde. Me di vuelta y retiré mi cabello para permitirle a Link colocar el collar.

—Link... que lindo pero ¿por qué o qué? —lo aprecié tomándolo con una de mis manos mostrando una falsa sonrisa de preocupación.

—Una de las Diosas me lo entregó para dártelo, sé que es tonto pero... hay poca probabilidad de que con él, te acuerdes de mí. Estoy seguro que no te acordarás de mi __________. —negué sin separar mi mirada de sus azules que me inquietaban. —. __________ las Diosas le borran la memoria a cada uno de los que ayudamos, como tú por ejemplo; te borrarán la memoria antes de que me vaya, pero no sé cuando lo harán...

• • •

Narra Erick:

Estaba charlando con mi primo acerca de cómo conquistar a una chica sin necesidad de problemas con otros hombres. Me comentó que fuera el hombre que ella desea, y pude pensar: —___________ quiere a Link, debo ser como él o hasta mejor. —

Estaba entrenando para marcar mas mi cuerpo como abdomen, brazos y piernas. Sé perfectamente que _________ no es de esas obsesionadas por un físico con mucha musculatura, pero a la hora de convencer, puede ser sencillo al hacerse.

—Erick, ya es todo por hoy, mañana regresas a la misma hora para marcar abdomen. —dijo mi primo y asentí tomando una toalla para secar el sudor que corría por mi frente y mejillas.

Salí del gimnasio de mi hermano y caminé mientras tomaba agua a casa. Tomé mi celular por última vez y decidir marcarle a __________. Tardó un poco en contestar, pero terminó por calmar mi preocupación contestando mi llamada.

—Hola ________, mañana por la tarde, ¿puedes venir al parque cerca de casa de mi hermano? —

—Claro pero, dime para qué. — contestó dejándome pensativo de encontrar una respuesta para eso. Suspiré y dije entrando en mas calma y confianza.

—Quisiera que vinieras al parque cerca de casa de mi hermano para de ahí, irnos al cine, claro, después de comer una nieve o algo. —me mordí el labio al no escuchar nada al fondo del teléfono, _________ se había quedado muda.

—Erick... idea mía o... ¿me estás invitando a una cita? —asentí sin mas. Está vez ella suspiró y pude escuchar la voz de Link resonar al fondo de la llamada. —. Y... ¿no puede ser cita doble?

Mi tranquilidad había desaparecido al pensar su idea de invitar a Link. Cerré mis ojos para pensar en una respuesta breve e indirecta para no sonar grosero. Me senté en una banca techada, escucahando como los truenos de la lluvia sonaban fuertemente, quitándome la claridad de escuchar a __________.

—__________... me gustaría ir a solas contigo. Sé que temes dejar a Link solo pero, debo decirte algo. —la escuché suspirar mas pesado, luego de unos segundos pude escuchar la voz de Link sonar tras el teléfono. —. No irás a ningún lado con __________ entiende Erick, ella es mía. —no dije nada.

—¡Link basta! Aparte de que deseo invitarte, ¿así es cómo reaccionas?—___________ habló causándome sonreír maliciosamente al saber su molestia dirigida a los celos de Link. —. No soy tuya ni de nadie. De acuerdo Erick... iré.

—¿Link irá?—intenté fingir escucharme confundido o hasta preocupado. Ella negó y no pude evitar sonreír como anteriormente hice. —. De acuerdo _________, te veré mañana, cuídate... hermosa.

Colgué la llamada y me fui corriendo a casa para preparar el resto. ___________ caerá enamorada de mi en tan poco tiempo. Mi meta era conquistarla, y lo lograré.